Ben Jonson, Volpone or the fox

Volpone o el zorro





Texto utilizado para esta edición digital:
Jonson, Ben. Volpone. Versión española de Manuel Bosch Barrett. Barcelona: Montaner y Simón, [1946].
Adaptación digital para EMOTHE:
  • Huertas Martín, Víctor

Nota a esta edición digital

Esta publicación es parte del proyecto I+D+i «Teatro español y europeo de los siglos XVI y XVII: patrimonio y bases de datos», referencia PID2019-104045GB-C54 (acrónimo EMOTHE), financiado por MICIN/AEI/10.13039/501100011033.

Esta edición digital para EMOTHE reproduce la “versión española” de Manuel Bosch Barrett (publicada en Barcelona por la editorial Simón y Muntaner) asumiendo que se trata de una “obra huérfana”, tras haber realizado una búsqueda diligente de los poseedores de los derechos.


DRAMATIS PERSONAE

CORVINO, Un Mercader
BONARIO, Hijo de Corbaccio
SIR POLITCK WOULD-BE, Caballero
PEREGRINO, Un Viajero
Bufones
NANO, Un Enano
CASTRONE, Un Eunuco
ANDRÓGINO, Hermafrodita
La Muchedumbre
Comendadores
Jueces
Mercaderes
Abogados
Magistrados
Un Notario
Un Registrador
LADY POLITICK WOULD-BE
CELIA, Esposa de Corvino
Dos Doncellas de Lady Would-Be

ACTO PRIMERO

ESCENA I

EL DORMITORIO DE VOLPONE
Entran Volpone y Mosca; éste, cuando Volpone se lo ordena, abre las cortinas y aparece la habitación llena de montones de platos, copas, joyas, etc.

VOLPONE
2¡Salve al día y a mi oro! Abre las cortinas, Mosca, que pueda contemplar mi ídolo. ¡Bendita el alma del mundo y bendita sea la mía! ¡Más feliz que la ubérrima tierra al ver aparecer el sol por entre los cuernos del cordero celestial, lo soy yo obscureciendo su brillo con mis riquezas, yaciendo entre mis tesoros, como antorcha en la noche, o como sale el día al desaparecer las tinieblas en el centro de la tierra! ¡Hijos sois del sol y brillantes como vuestro padre; dejadme besaros con adoración, reliquias y tesoros amontonado en esta bendita estancia! Bien dieron, los sabios poetas, vuestro nombre a nuestro siglo. Vosotros sois la más trascendental de las cosas, y mejor que hijos, parientes y amigos; vosotros sois el más feliz de los sueños despiertos de la tierra. ¡Las miradas que entronizaron a Venus debieron darle veinte mil Cupidos! ¡Así son tus bellezas y nuestros amores! ¡Riquezas! ¡Sois el Dios mudo que da lengua a todos los hombres; nada podéis hacer, pero permitís hacerlo todo! ¡Sois el precio de las almas; el infierno mismo con sus valores da mayor valor al cielo! ¡En vosotras hay fama, virtud, honores! ¡Quien puede teneros tendrá valor, nobleza, honradez, cordura!

MOSCA
16¡Y cuanto se quiera, señor! La fortuna es para los ricos, más que la sabiduría en la naturaleza.

VOLPONE
21Cierto, mi querido Mosca. Y más gozo en mi astuto sistema de procurarme las riquezas que en su posesión. Ningún mercado, ningún riesgo; no tengo que hendir la tierra con arados, ni engordar ganado para los mercados; no necesito molinos para el trigo o el aceite; ni hombres para las cosechas; no elaboro cristales ni expongo mis barcos por los caminos procelosos de los mares. No tengo que hacer usura en el Rialto ni arriesgo mi dinero en los Bancos.

MOSCA
26No, señor. Os basta devorar ajenas prodigalidades. Como el holandés acumula la manteca, así vos reunís imaginarios herederos de vuestros tesoros. Las lágrimas arrojan al pobre de su lecho y lo recluyen en lóbrega prisión donde yacerán sus huesos cuando se pudra su carne; pero vuestra dulce naturaleza aborrece estas cosas; os molestan las lágrimas de las viudas y los huérfanos, aun cuando sus gritos de venganza resonasen en vuestra estancia.

VOLPONE
31Es cierto, Mosca. Aborrezco la miseria.

MOSCA
36Y no es eso sólo. No sois como el segador que usa su enorme sayal y contempla su trigo, pero hambriento no toca un solo grano y se alimenta de hierbas y malvas amargas; ni como el mercader que, llenas sus barricas de vino de Romania y de Candia, sólo bebe las heces avinagradas de la Lombardía; vos no queréis dormir sobre la paja, entre polillas y gusanos, sino reposar en mullidos lechos; sabéis usar vuestras riquezas y sabéis disponer de mí, vuestro servidor, de vuestros bufones o de otro necio cualquiera de la casa.

VOLPONE
41Buen servidor, Mosca. Toma esta bolsa. (Dándole una bolsa.) Ve y esparce por las calles la noticia de que me estoy muriendo. (Sale Mosca.) ¿Hay acaso mejor vida que la de vivir libre y de mi fortuna? No tengo esposa, hijos, parientes ni allegados a quienes legar mis tesoros; quien yo quiera será mi heredero y así todos me agasajan; cada día llegan nuevos amigos a casa; hombres y mujeres de todas las edades me traen joyas, dinero y regalos con la esperanza de mi muerte cercana, que harto tarda para ellos. Creen recobrar con mi herencia lo avanzado y uno con otro rivalizan en dinero y en amor. ¡Qué gran goce el mío, jugar con sus esperanzas, llevándolos por donde quiero y deleitándome con sus hipócritas sonrisas!

(Entra nuevamente Mosca.)

MOSCA
62¡El señor Voltore, el Abogado, señor! Lo he encontrado en la puerta.

VOLPONE
67¡Dame mi bata, mis pieles, mi bonete! Dile que estoy muy mal y que aguarde en la galería. (Sale Mosca.) ¡Aquí, aquí, clientes míos! ¡Buitre, milano, cuervo! ¡Todas mis aves de rapiña que queréis hacer de mí un esqueleto! ¡No es tiempo todavía!

(Entra Mosca con pieles, etc.)

MOSCA
83¡Un plato maravilloso, señor!

VOLPONE
88¿De qué tamaño?

MOSCA
93Enorme, macizo y cincelado. Y con vuestras armas grabadas.

VOLPONE
97¡Bien, bien! ¡Otro cuervo que cayó en el ardid de la zorra! Otro que mordió en el cebo.

MOSCA
101¡Muy agudo, señor!

VOLPONE
105Dame mis pieles. (Se cubre con su traje de enfermo.) ¿Por qué te ríes así?

MOSCA
111No puedo evitarlo, señor; cuando pienso en sus ilusiones. Su último regalo cree que será el de hoy y piensa en su vida de mañana, si hoy morís. Sueña en la gran compensación que tendrá a sus larguezas; ve cuándo adulado será y reverenciado, aguardado por multitud de clientes; cree ver su camino abierto al paso de su mula, cabalgando con pieles y gualdrapas y ser tenido por el más docto y célebre abogado. ¡Nada le es ya inaccesible!

VOLPONE
116Sí, Mosca. Ser un hombre culto.

MOSCA
120Oh, no, señor. Ser rico implica sabiduría. Ponedle a un asno una caperuza de púrpura y al ocultar sus orejas ambiciosas podrá pasar por un sabio doctor.

VOLPONE
124Mi bonete, Mosca; mi bonete. Ve a buscarlo.

MOSCA
129Esperad, señor. El ungüento de los ojos.

VOLPONE
134Es cierto. Date prisa; tengo ansia de ver mi regalo.

MOSCA
138Este y mil más espero veros recibir. ¡Viviréis hasta decepcionar estas harpías!

VOLPONE
143¡Buen Mosca! Mi almohadón. Y ahora, déjalo entrar. (Sale Mosca.) Y ahora mi tos, mi tisis y mi gota. Mi apoplejía; mi parálisis y mis catarros, y con ellos mi postura con la que endulzo sus esperanzas hace tres años. Ahí viene... (Tosiendo.) ¡Oh... oh! ¡oh!

(Entran Mosca y Voltore con gran placer cincelado.)

MOSCA
158Despacio, señor, no hagáis ruido. Sólo vos mandáis en él y hacéis bien en darle pruebas de vuestro afecto; sé que nada le será más grato. Señor, señor, aquí está el señor Voltore...

VOLPONE
163¿Qué dices? Estoy muy malo...

MOSCA
168El señor Voltore ha venido a veros, a visitaros.

VOLPONE
173Le doy las gracias.

MOSCA
176Y os ha traído un plato de plata antigua, comprado en San Marcos. Aquí los tenéis, señor.

VOLPONE
180Que sea bienvenido. Ruégale que venga más a menudo. ¿Qué dice?

MOSCA
185Que os da las gracias y que os complacerá.

VOLPONE
189¡Mosca!

MOSCA
192¡Señor!

VOLPONE
196¿Dónde está? Tráelo aquí. Deseo tocar su mano.

MOSCA
200Aquí está el plato, señor.

VOLTORE
204¿Cómo os sentís, señor Volpone?

VOLPONE
208Gracias, gracias, señor Voltore. ¿Dónde está el plato? Ya no veo.

VOLTORE
212 (Poniéndole el plato en las manos.) ¡Cuánto siento, señor Volpone, veros cada día más débil!

MOSCA
216[Aparte.] ¡Pues no está tan débil!

VOLPONE
220¡Sois demasiado espléndido!

VOLTORE
224No, señor Volpone. ¡Pluguiese al cielo que os pudiese dar salud como os doy este plato!

VOLPONE
229Dais, señor Voltore, lo que podéis; os agradezco mucho vuestro afecto. Creed que no olvidaré lo que hacéis; venid a verme más a menudo...

VOLTORE
232Sí, señor. Vendré por complaceros.

VOLPONE
237No estéis tan lejos de mí.

MOSCA
242 (En voz baja.) ¿Qué os parece?

VOLPONE
246Escuchad. Tengo algo que deciros que os concierne.

MOSCA
250¡Sois un hombre de suerte!

VOLPONE
255Ya no puedo vivir mucho tiempo...

MOSCA
260Sois su heredero...

VOLTORE
265¿Creéis?

VOLPONE
268Siento que me voy... Uh, uh, uh. Ya navego hacia mi último puerto. ¡Oh! ¡uh! ¡uh! Soy feliz de sentirme ya cercano al cielo.

MOSCA
273Desgraciadamente, señor. Todos debemos morir tarde o temprano.

VOLTORE
278Pero, Mosca...

MOSCA
283La edad tiene sus límites...

VOLTORE
288Pregúntale si es cierto que me ha nombrado su heredero.

MOSCA
292¡Lo sois! Y os quedaría eternamente agradecido si os dignabais considerarme como de vuestra familia, señor. Todas mis esperanzas dependen hoy de vuestra señoría. ¡Sólo vos podéis ser el sol que me caliente!

VOLTORE
297¡Te calentará y te alumbrará, Mosca!

MOSCA
302Señor; soy un hombre que no se avergüenza de los más bajos oficios. He velado aquí por vuestras llaves, he vigilado vuestros cofres y he conservado las arquillas bien cerradas. Aquí os guardo vuestros platos y vuestras monedas. Soy vuestro servidor, señor, cerbero de vuestros bienes.

VOLTORE
306¿Pero soy su único heredero?

MOSCA
311El solo y único, señor; esta misma mañana me lo ha confirmado. La cera está todavía caliente, y la tinta húmeda sobre el pergamino.

VOLTORE
315¡Soy feliz, Mosca! ¡Soy feliz! Pero, ¿a qué debo tanto bien?

MOSCA
319A vuestros méritos, señor. No conozco otra causa.

VOLTORE
324Tu modestia te impide verla... Lo tendré en cuenta, Mosca.

MOSCA
329Siempre le gustó vuestra manera de ser. Muchas veces le oí decir cuánto admiraba a los hombres de vuestra profesión, que pueden hablar en cualquier causa y enronquecer hasta poner de acuerdo a los adversarios; sabéis con rápida agilidad torcer y enderezar argumentos, hacer nudos y deshacerlos, dar consejos opuestos y tomar el oro de la provisión de los dos bandos. Estos hombres -solía decir- saben medrar con su humildad; admiraba vuestro gran espíritu y se consideraba feliz de poderos nombrar su heredero. Un hombre tan cuerdo, tan grave -decía-, con una palabra tan elocuente que aun no escaseando las mentiras ¡cada palabra le vale un cequí! (Llaman a la puerta.) ¿Eh? ¿Quién va? ¿Quién llama? No conviene que os vean aquí, señor. Decid que habéis venido sólo un instante, ya encontraré yo alguna excusa. Y cuando penséis en vuestro oro y en la miel de vuestras armas y levantéis vuestra barbilla enfatuada por vuestros vasallos, no olvidéis, señor Voltore, que no he sido el peor de vuestros clientes.

VOLTORE
337¡Mosca...!

MOSCA
342¿Cuándo queréis la copia del inventario? ¿Y la del testamento? Ya os las traeré. Ahora id a vuestros asuntos y al salir poned cara de negocios.

(Sale Voltore.)

VOLPONE
351 (Incorporándose.) ¡Excelente Mosca! ¡Déjame que te bese!

MOSCA
356¡Esperad, señor! No hemos terminado. Aquí está Corbaccio.

VOLPONE
361Esconde el plato. El buitre se fué; aquí viene el viejo cuervo.

MOSCA
366Recobrad vuestro silencio y vuestro sueño. Descansad y pensad en vuestros tesoros. ¡Aquí está la ruina impotente! ¡Más impotente que estos platos! ¡Esperemos el día en que gozaremos de nuestras esperanzas sobre su tumba! (Entra Corbaccio.) ¡Señor Corbaccio! ¡Sed bienvenido, señor!

CORBACCIO
378¿Cómo está tu amo?

MOSCA
383Mal, señor, empeorando. No hay mejoría.

CORBACCIO
387¿Cómo? ¿Que hay mejoría?

MOSCA
391No, señor. ¡Que está peor!

CORBACCIO
395¡Ah! Bien, bien, bien está así. ¿Dónde está?

MOSCA
399En su lecho... aletargado.

CORBACCIO
403¿Duerme bien?

MOSCA
407Ni un instante ha dormido esta noche, pero está sin pestañear, aletargado en un sopor.

CORBACCIO
411Bien, bien... Acaso convendría el consejo de un médico... aquí le he traído una posición que me recetaron... yo mismo he presenciado como la hacían... he examinado sus ingredientes... no puede hacerse con más celo. Seguro estoy de que con ella dormirá.

VOLPONE
416[Aparte.] ¡Mi último sueño será si la tomo!

MOSCA
421No tiene fe en los médicos, ni quiere oír hablar de drogas. Cree que ellos son el más grave peligro y la peor enfermedad. Cien veces le oí decir que jamás un médico sería su heredero.

CORBACCIO
426¿No podría yo tener alguna esperanza...?

MOSCA
430En todo caso, jamás un médico. Dice que desuellan al paciente antes de matarlo.

CORBACCIO
435Bien, bien, como te parezca...

MOSCA
439¿Y sus experimentos? ¡Cuán injusta es la ley que al absolverlos les da el valor de continuarlos! ¡Es repugnante pagar la muerte!

CORBACCIO
442Es cierto, matan con tanta impunidad como un juez.

MOSCA
445¡Mucha más! Que ése sólo mata cuando la ley condena y ellos pueden mataros a vos también.

CORBACCIO
448¡Es cierto! A mí y a cualquiera. Y... decidme; ¿cómo va esta apoplejía? ¿Tiene todavía fuerzas?

MOSCA
451Peor; ha perdido el habla; su mirada está fija y su respiración es cada vez más jadeante.

CORBACCIO
456¿Eh? ¿Más fuerte a cada instante?

MOSCA
460No, señor. Su respiración es más fuerte cada momento. Su rostro se altera...

CORBACCIO
464Bien... bien...

MOSCA
469Su boca se tuerce y sus párpados caen. El frío endurece ya sus articulaciones y su cara tiene ya el color plomizo. Su pulso se debilita, su cerebro ya no rige, un sudor frío lo inunda y sus ojos destilan lágrimas.

CORBACCIO
474¡Buenos síntomas...! ¡Buenos síntomas...! ¿Y cómo va de sus vértigos?

MOSCA
479Sigue con ellos...

CORBACCIO
484¡Excelente, excelente...! Ahora estoy seguro de vivir más que él. Esto me rejuvenece muchos años... ¿Ha hecho testamento? ¿Qué me lega?

MOSCA
487No, señor.

CORBACCIO
492¿No me lega nada?

MOSCA
497No ha hecho testamento todavía.

CORBACCIO
502¡Ah! ¿Y qué hacía aquí el señor Voltore el abogado?

MOSCA
506Olió a carroña y vino cuando supo que mi amo pensaba en hacer testamento y yo lo inclinaba en vuestro favor.

CORBACCIO
510Vino a eso, ¿verdad? Lo imaginaba.

MOSCA
514Sí, y le trajo esta pieza de plata.

CORBACCIO
519Para ser su heredero, ¿verdad?

MOSCA
524No lo sé, señor.

CORBACCIO
529¡Seguro! ¡Lo conozco muy bien!

MOSCA
533¿Lo pesasteis en vuestras propias balanzas?

CORBACCIO
537Lo había previsto y aquí he traído una bolsa de áureos cequíes que pesará más que su plato.

MOSCA
540 (Tomando la bolsa.) ¡Este es el verdadero médico! ¡La sagrada medicina! ¿Cómo habláis de opios y elixires ante esta maravilla?

CORBACCIO
543¡Este aurem palpabile no es potabile!

MOSCA
546Este será el mejor cordial. Sólo tocarlo y volverá en sí.

CORBACCIO
548¡Sí, sí, hacedlo!

MOSCA
552No sé si es muy prudente...

CORBACCIO
555¿Qué?

MOSCA
559Que recobre los sentidos...

CORBACCIO
563¡Tenéis razón, tenéis razón, devolvedme la bolsa!

MOSCA
566¡Ah, no! ¡Perdonad! Haríais mal en volvérosla a llevar. ¿Para qué, puesto que podéis tenerlo todo?

CORBACCIO
571¿Cómo?

MOSCA
575¡Todo puede ser vuestro, es vuestro derecho, nadie puede reclamar nada, no tenéis rival posible! ¡Decretado por el Destino!

CORBACCIO
579¿Cómo, cómo? ¿Qué dices, Mosca?

MOSCA
583Os lo voy a decir. Esto le hará recobrar los sentidos...

CORBACCIO
585Ya te comprendo...

MOSCA
590 (Enseñándole la bolsa.) Y a la primera oportunidad, insistiré en que haga testamento; y esto le convencerá.

CORBACCIO
594Bien, bien.

MOSCA
598Y ahora, escuchad un consejo. Regresad en seguida a casa donde redactaréis un testamento instituyendo a mi amo único heredero.

CORBACCIO
602¡Desheredando a mi hijo!

MOSCA
605¡Pero, no sabéis la sensación que esto hará! Es un pretexto; pero será el más eficaz.

CORBACCIO
608¿Crees...?

MOSCA
612Este testamento, señor, me lo mandáis. Y cuando yo insista de nuevo sobre vuestras inquietudes, vuestros cuidados, vuestros regalos y vuestra solicitud, y al final le enseñe vuestro testamento, en el que, sin reparos, desheredáis a vuestro hijo en su favor, debe forzosamente decidirse. En cuanto a vuestro hijo, ¿cómo queréis que un hombre de sus méritos, de su valor, no comprenda en seguida que lo que hacéis es en su propio interés?

CORBACCIO
615Crees que me nombraría su...

MOSCA
619¡Evidente!

CORBACCIO
622Este plan... ¿sabes? Ya había pensado antes en él.

MOSCA
626Os creo.

CORBACCIO
631¿No me crees?

MOSCA
636Sí, señor. Os creo.

CORBACCIO
640El proyecto era mío. ¿Crees verdaderamente que me nombrará su heredero?

MOSCA
645Y como estáis seguro de sobrevivirle...

CORBACCIO
649¡Ay...!

MOSCA
653¿No sois todavía un hombre fuerte, robusto?

CORBACCIO
657Es cierto... En todo esto había yo pensado. ¡Cómo interpretas mis pensamientos!

MOSCA
661No solamente hacéis un buen [...]

CORBACCIO
666Sino que aumento los bienes de mi hijo.

MOSCA
669¡Exactamente!

CORBACCIO
674¡Y todo de mi invención!

MOSCA
679El cielo sabe, señor, que todo mi cuidado, todo mi celo ha sido elaborar el plan para...

CORBACCIO
684Te creo, Mosca, te creo.

MOSCA
689Es para vos para quien he trabajado...

CORBACCIO
694 (Dirigiéndose hacia la puerta.) Lo sé, lo sé, ya pensaré en ello...

MOSCA
698[Aparte.] ¡Que el buitre te devore, cuervo!

CORBACCIO
703Sé que eres honrado...

MOSCA
708Mientes, canalla.

CORBACCIO
712Y...

MOSCA
717Tu inteligencia es tan obtusa como tus oídos.

CORBACCIO
722Ten la seguridad de que seré un padre para ti.

MOSCA
727Y la de que quieres engañarme con tus bendiciones.

CORBACCIO
731Todavía puedo recobrar mi juventud, ¿por qué no?

MOSCA
736¡Vuestra excelencia es un perfecto asno!

CORBACCIO
741¿Qué dices?

MOSCA
746Que deseo que vuestra excelencia se dé prisa.

CORBACCIO
750Ya me voy, ya me voy...

(Sale.)

VOLPONE
758 (Incorporándose en su asiento.) ¡Oh, creí reventar de risa! ¡Magnífico, Mosca, magnífico!

MOSCA
762Contened vuestra risa, señor. Su esperanza es como el cebo que oculta el anzuelo.

VOLPONE
767¡Ah, pícaro bribón! ¡Déjame que te bese! ¡Jamás te vi de humor tan excelente!

MOSCA
771Señor, no he hecho sino seguir vuestras instrucciones; endulzarlo con palabras, verter bálsamo en sus oídos.

VOLPONE
775Es cierto, es cierto. ¡Qué gran castigo tiene la avaricia!

MOSCA
779¡Especialmente con vuestra ayuda, señor!

VOLPONE
783Tantas preocupaciones, tantas enfermedades, tantos temores para llegar a avanzada edad. Ver la muerte pasar cerca de nosotros, los miembros se entumecen, los sentidos se pierden, la vista y el oído disminuyen, todo muere antes que nosotros; los dientes, estos instrumentos de vida, se caen; ¡esta es la vida tan ansiada! ¡Y aquí había ahora un hombre que quiere vivir todavía! No tiene ya sabor, no tiene oído; no siente sus enfermedades y espera como un nuevo Jasón recuperar su juventud gracias a una nueva Medea! ¡Y con todas sus ambiciones obra como si el destino fuese tan fácil de engañar como él! (Llaman a la puerta.) ¿Quién va? ¿Un tercero?

MOSCA
793¡Pronto, a la cama, señor! Oigo su voz. Es Corvino, nuestro elegante mercachifle.

VOLPONE
797 (De nuevo en la cama.) ¡Otra vez agonizando!

MOSCA
800¡Otra vez, señor! Pero, cuidad vuestros ojos. (Untándoselos). ¿Quién va?

(Entra Corvino.)

809¡Señor Corvino! ¡El deseado! ¡Cuán contento estaréis al saber la noticia!

CORVINO
813¿Qué noticia? ¿Qué ocurre? ¿Cuándo?

MOSCA
816La hora fatal ha llegado, señor.

CORVINO
819¿Pero no ha muerto?

MOSCA
822Todavía no, señor; pero como si lo fuese. No conoce a nadie.

CORVINO
825¿Cómo voy a hacer entonces...?

MOSCA
829¿Cómo?

CORVINO
833Le había traído una perla...

MOSCA
836Acaso tenga todavía bastante sentido para reconoceros, señor. No tiene en sus labios sino vuestro nombre. ¿Es una perla de oriente, señor?

CORVINO
840¡Jamás Venecia vio una igual

VOLPONE
844 (Débilmente.) Señor Corvino...

MOSCA
848Os llama; acercaos y dádsela. (A Volpone.) Aquí está, señor, os ha traído una perla.

CORVINO
854¿Cómo estáis, amigo? (A Mosca.) Dile que pesa más de veinte quilates.

MOSCA
859No oye, señor, ha perdido el oído, pero vuestra vista lo reconforta.

CORVINO
862Decidle que he traído también un diamante para él.

MOSCA
864Es mejor mostrárselo, señor. Ponédselo en la mano, sólo así puede darse cuenta. ¡Ved cómo lo agarra!

CORVINO
868¡Pobre amigo! ¡Qué pena veros así!

MOSCA
871Olvidadlo, señor. Los sollozos de un heredero dan risa aun bajo la máscara.

CORVINO
874¿Cómo? Pero, ¿soy acaso su heredero?

MOSCA
877Señor, he jurado no mostraros el testamento hasta después de su muerte, pero aquí estuvo el señor Corbaccio y el señor Voltore; aquí vinieron otros más, no sé cuántos, todos al acecho de legados. Pero él repetía vuestro nombre sin cesar... Señor Corvino... Señor Corvino... Entonces tomé pluma y papel y le pregunté a quién quería instituir por heredero. Corvino, repitió. ¿Quién debe ser el ejecutor? Corvino. Y cuando a una pregunta contestaba silenciosamente asintiendo con la cabeza, interpreté su gesto a vuestro favor. Los otros se marcharon no llevándose de la herencia más que lágrimas y maldiciones.

CORVINO
881¡Querido Mosca! (Abrazándolo.) ¿Crees que nos ve?

MOSCA
888No más que un arpista ciego. No conoce a nadie, ni los rostros de sus amigos, ni aun los de sus servidores. Ni aun a quienes engendró ni a quien le trae de beber o la comida.

CORVINO
892¿Tiene hijos?

MOSCA
895Bastardos. Más de una docena tuvo con gitanas, pordioseras, moras y judías desarrapadas cuando estaba borracho. ¿No lo sabíais? Pues es de público dominio. El enano, el eunuco, el hermafrodita, son sus hijos, pero no les lega nada.

CORVINO
898Está bien, está bien. Pero, ¿estáis seguro de que no nos oye?

MOSCA
901Seguro, seguro. Juzgad vos mismo. (Gritando al oído de Volpone.) Aquí está la peste que viene a aumentar vuestras enfermedades, señor. Si os pudiese mandar al otro mundo más aprisa ya lo hubiera hecho. ¿Veis? Acercaos más. Ved estos asquerosos ojos muertos, estas orejas descarnadas, esas mejillas colgantes, cubiertas de cuero en lugar de piel; parece ya un montón de estropajos arrojados a un rincón.

CORVINO
906 (Gritando.) ¡Eh, vieja ruina podrida! ¡Parecéis un muro enmohecido por la lluvia!

MOSCA
908¡Excelente, señor! ¡Podéis gritar cuanto queráis! Ni una culebrina descargada a su oído le haría estremecerse.

CORVINO
910Su nariz parece un albañil que corre.

MOSCA
912¡Ved su boca!

CORVINO
914¡Parece la de un ahogado!

MOSCA
917¡Acabemos con él!

CORVINO
920¡Oh, no!

MOSCA
924¡Ahora dejadme! ¡Si pudiese ahogarlo bajo una almohada!

CORVINO
927Hazlo si quieres... pero yo me voy.

MOSCA
931Como queráis. Es vuestra presencia lo que le alarga la vida.

CORVINO
934No uses de la violencia.

MOSCA
936¿De veras? ¿Ahora os vienen los escrúpulos?

CORVINO
939Bien, bien... me fío de tu discreción...

MOSCA
943Está bien. Podéis marcharos.

CORVINO
947No te importará que me lleve la perla...

MOSCA
951Ni la perla ni el diamante. ¿Qué inquietud queréis tener? ¿No es aquí todo vuestro? ¿No estoy yo aquí para velar por vos? ¿No soy yo lealmente vuestro? Tened confianza en lo que yo haga y...

CORVINO
955¡Excelente Mosca! Eres mi amigo, mi compañero y participarás de toda mi fortuna.

MOSCA
959Excepto de una... desgraciadamente.

CORVINO
963¿Cuál?

MOSCA
967De vuestra bella esposa, señor Corvino... (Sale Corvino.) ¡Ya se fué el cuervo! No hay mejor modo de echarlo.

VOLPONE
976¡Divino Mosca! ¡Te has sobrepasado hoy! (Llaman a la puerta.) ¿Quién más viene hoy? ¡No quiero que me molesten más! Prepárame música, danzas, banquetes, todas las delicias; el turco no es más sensual en sus placeres de lo que será Volpone. (Sale Mosca.) ¡Veamos; una perla! ¡Un diamante! ¡Un plato repujado! ¡Dinero! ¡Buenas adquisiciones esta mañana! ¡Esto es mejor que robar al Estado o hacer una víctima humana al mes! (Regresa Mosca.) ¿Quién es?

MOSCA
997La bella Lady Would-Be, señor; esposa del caballero sir Politick Would-Be, manda a preguntar cómo habéis dormido esta noche y si se os puede visitar.

VOLPONE
999Ahora, no; dile que dentro de tres horas.

MOSCA
1002Bien, señor.

VOLPONE
1005¡En medio del vino y la alegría! ¡Entonces! ¡Entonces! ¡Por Dios, que me admira el valor de estos ingleses y su amplio concepto de la vida, dejando sus mujeres ir al encuentro de extranjeros!

MOSCA
1009Señor; este caballero por algo lleva su nombre. Es “político” y sabe cuán honesto aire afecta su mujer. No tiene semblante de ser deshonesta, pero aun cuando tuviese el rostro de la esposa del señor Corvino...

VOLPONE
1012¿Tan bella es?

MOSCA
1016¡Oh, señor! ¡Una maravilla! ¡Una estrella radiante del cielo de Italia! ¡Una moza lozana, una belleza en plena sazón, pronta para la cosecha! ¡Su piel es blanca como el cisne, como la plata, como un lirio y como la nieve! ¡Un labio suave por el que os condenaríais por besar! Una carne brillante como vuestro oro y adorable como él!

VOLPONE
1020¿Cómo no lo he sabido antes?

MOSCA
1024¡Ah, señor! Yo mismo no la he descubierto hasta ayer.

VOLPONE
1027¿Cómo puedo verla?

MOSCA
1030¡Imposible, señor! Está más guardada que vuestro oro, jamás sale a la calle ni toma más aire que desde una ventana. Sus miradas son tan dulces como las cerezas tempranas, pero están tan vigiladas como ellas.

VOLPONE
1033¡Tengo que verla!

MOSCA
1035Hay una guardia de espías a su alrededor y está tan rodeada de servidumbre que aun ésta es examinada cada vez que entra o sale.

VOLPONE
1038¡La veré aun cuando sea en su ventana!

MOSCA
1040Entonces, bajo un disfraz.

VOLPONE
1042¡Es cierto! Debo conservar mi incógnito...; pensaremos en ello.

(Salen ambos.)
FIN DEL PRIMER ACTO

ACTO SEGUNDO

ESCENA I

EN LA PLAZA SAN MARCOS, UN RINCON DEBAJO DE LA CASA DE CORVINO
(Entran Sir Politick Would-Be y Peregrino)

SIR POLITICK
3Decís bien, para el hombre sensato toda la tierra es patria. No sólo Italia, ni Francia, ni Europa deben limitarme si mi destino me llama lejos. No considero ofensa a la tierra que me nutrió, el deseo de ver nuevos países y estudiar nuevas religiones, ni olvido del país en el que acaricié adorables proyectos, desear holgazanear por entre estatuas y grandezas como Ulises. Pero, mi mujer adora Venecia y le gusta observar, aprender la lengua, conocer las costumbres... ¿Cuándo tiempo hace que dejasteis Londres?

PEREGRINO
6Siete semanas.

SIR POLITICK
9¿Tantas? ¿Visteis ya a mi lord Embajador?

PEREGRINO
12Todavía no, señor.

SIR POLITICK
17Y, decidme, ¿qué noticias tenéis de mi tierra? En mi séquito se susurran las más raras historias. Quisiera que me las confirmaseis.

PEREGRINO
22¿Qué historias?

SIR POLITICK
27Lo más extravagante, señor. ¡La de un cuervo que anidaba en los barcos de Su Majestad!

PEREGRINO
32¿Se burla de mí o se han burlado de él? ¿Cómo os llamáis?

SIR POLITICK
37Mi nombre es Politick Would-Be.

PEREGRINO
42[Aparte.] El nombre le describe. ¿Caballero, sin duda?

SIR POLITICK
46Un humilde caballero, señor.

PEREGRINO
50Vuestra esposa pasa en Venecia por la más bella y elegante y tienen fama su cortesanía y su intachable conducta. La bella Lady Would-Be.

SIR POLITICK
54Sí, señor. La araña y la abeja liban algunas veces en el mismo cáliz.

PEREGRINO
58Sir Politick, mucho había oído hablar de vos. Oídme, ¡es cierto lo del cuervo!

SIR POLITICK
63¿Lo sabíais?

PEREGRINO
68Sí. ¡Y que una leona ha parido en la Torre de Londres!

SIR POLITICK
71¿Otro parto?

PEREGRINO
75¡Otro, señor!

SIR POLITICK
79¡Oh, cielo! ¿Qué prodigios serán estos? ¡Una nueva estrella aparece! ¡Todas estas coincidencias extrañas, llenas de presagios! ¿No veis estos meteoros?

PEREGRINO
84Sí, señor.

SIR POLITICK
89¡Espantoso! Y, decidme, ¿es cierto que se vieron tres delfines bajo el Puente de Londres?

PEREGRINO
94Seis, y un esturión.

SIR POLITICK
98¡Es asombroso!

PEREGRINO
102No seáis así, caballero. Más grande prodigio os contaré yo.

SIR POLITICK
106¿Qué pronosticarán estos prodigios?

PEREGRINO
109El mismo día que dejé Londres se acababa de descubrir una ballena en el Támesis, a la altura de Woolwich, que parece esperaba allí desde hacía muchos meses la sublevación de la flota de Stode.

SIR POLITICK
112¿Es posible? ¡Entonces fué mandada o por España o por el Archiduque! ¡La ballena de Spínola, por mi salud! ¿Cuándo abandonarán estas maquinaciones? ¿Alguna otra noticia, señor?

PEREGRINO
117Stone el loco ha muerto y en la taberna se le echa de menos.

SIR POLITICK
121¿Ha muerto Mass Stone?

PEREGRINO
125¡Ha muerto! ¿No le creeríais inmortal? [Aparte.] ¡Si este hombre fuese conocido sería capaz de revolucionar la escena inglesa! ¡Jamás vi semejante imaginación!

SIR POLITICK
130¡Muerto Stone!

PEREGRINO
135Muerto. ¡Cuán profundamente lo lamentáis! ¿Era acaso pariente vuestro?

SIR POLITICK
139No. ¡Pero era un loco desconocido!

PEREGRINO
144Pero, ¿le conocisteis?

SIR POLITICK
147Mucho. Era una de las mentalidades más peligrosas de nuestro país y por esto le ayudé. Durante su vida recibió mucha protección a causa precisamente de su mentalidad tan ajena a lo vulgar. Cuando vivía en Low Countries recibía continuamente remesas de coles, naranjas, melones, albaricoques y otras frutas. Otras veces llegaban a él banastas de ostras de Colchester o de almejas de Selsey.

PEREGRINO
150¡Me dejáis admirado! (Entran Mosca y Nano disfrazados de saltimbanquis con gente trayendo material para levantar un estrado.) ¿Quiénes son esos?

SIR POLITICK
159¡Saltimbanquis! ¿Vuestros profesores de lenguas no os hablaron jamás de los saltimbanquis italianos?

MOSCA
164 (A sus ayudantes.) Allí debe ser. Debajo de aquella ventana.

PEREGRINO
169Sí, ciertamente.

SIR POLITICK
174Pues aquí podéis ver uno.

PEREGRINO
177Son unos charlatanes que se pasan la vida vendiendo ungüentos y pomadas.

SIR POLITICK
181¿Es esta la impresión que os dieron de ellos?

PEREGRINO
186Si mal no recuerdo...

SIR POLITICK
190¡Mal los conocéis! ¡Son los únicos hombres que conocen la humanidad! ¡Mejor que los grandes doctores, los célebres sabios, los mejores hombres de Estado, las favoritas profesionales y los Consejeros de los grandes Príncipes, saben el verdadero lenguaje de la humanidad!

PEREGRINO
193¡Pero son también los más depravados impostores, los más embusteros! Tienen tan poca fe en el favor de los grandes como en sus medicinas. Su lenguaje es soez y os darán una dosis de pomada por dos peniques después de haberos pedido por ella doce coronas.

SIR POLITICK
197¡Señor mío! ¡Las calumnias se contestan con el silencio! ¡Juzgaréis por vos mismo! (Dirigiéndose a Mosca.) ¡Mis buenos amigos! ¿Quién levanta este estrado?

MOSCA
205Scoto de Mantua.

SIR POLITICK
209¡Scoto! Ahora veréis, como os he prometido, si no os han fantaseado sobre esta clase de hombres. ¿Pero por qué levantarán el estrado en este rincón y no en el centro de la plaza? ¡Ahí viene!

(Entra Volpone vestido de doctor de pantomima. Viene seguido de la muchedumbre.)

VOLPONE
217¡A montar, Nano!

(La muchedumbre se agita alrededor suyo comentando.)

SIR POLITICK
225¡Ved como le sigue el pueblo! Es un hombre conocido en todo Italia y dejará aquí en el Banco diez mil coronas. Fijaos en sus gestos, en todo cuanto pone atención.

(Volpone ha subido al estrado.)

VOLPONE
233¡Nobles y poderosos señores! Os podrá parecer extraño que yo, vuestro servidor Scoto Mantuano, que siempre levantó su estrado en el centro de la plaza, cerca del Pórtico de las Procuradurías, deba hoy, después de ocho meses de ausencia de esta ilustre ciudad de Venecia, retirarme humildemente a este obscuro rincón de la plaza.

SIR POLITICK
238¿No os hice la misma observación?

PEREGRINO
243Paciencia, señor.

VOLPONE
247Dejadme que os diga la razón. No tengo, como dice vuestro proverbio lombardo, los pies fríos, ni me gusta privarme de las comodidades a que estoy acostumbrado, por razón de economía. No es este mi deseo. ¡No creáis tampoco las calumniosas acusaciones de mi impudente detractor y colega Alessandro Bussoni, que afirma en público que he sido condenado a galeras por haber envenenado al cocinero del Cardenal Bembo! ¡No, mis poderosos señores! ¡Pero es que no puedo soportar ver las multitudes extasiarse ante los charlatanes que extienden sus harapientos capotes para hacer sobre ellos acrobacias y destrezas, más viejas que los cuentos de Bocaccio y el viejo Tabarín! Algunos de ellos cuentan sus viajes y su cautiverio en galeras turcas, aun cuando en verdad se trataba de galeras cristianas, en las que durante algún tiempo comieron pan y bebieron agua, a cuyo régimen fueron condenados por sus confesores, como sana penitencia por algún pecadillo.

SIR POLITICK
251¡Fijaos en su porte de gran señor!

VOLPONE
256Estos zafios-obscenos-descarados-piojosos bribones de menos valor que un penique de antimonio, son capaces, sí, señores, de trabajar pese a sus cuerpos demacrados y a su agotamiento alcohólico; pero sólo ante los temblorosos comedores de ensaladas que son capaces de deleitarse con sus espectáculos, con lo cual pagan sus errores en este mundo en lugar del otro, lo cual no importa.

SIR POLITICK
261¡Excelente! ¿Habéis oído jamás mejor lenguaje?

VOLPONE
266¡Bien! ¡Dejémosles a su suerte! Y ahora ya sabéis por qué, para no tener contacto con estos seres despreciables, hemos erigido aquí, lejos de los aplausos de la canalla, nuestro estrado y nuestra escena de placeres y delicias... ya que nada, o muy poco tengo que venderos.

SIR POLITICK
269¡Ya os dije que sería este su final!

PEREGRINO
274¡En efecto, señor; lo dijisteis!

VOLPONE
279Os afirmo, señores, que ni mis servidores ni yo somos capaces de producir este precioso licor en la medida que nos lo piden en nuestro domicilio, los extranjeros de tierra firme, los poderosos mercaderes, los senadores y nobles venecianos, que desde mi llegada a vuestra ciudad no han cesado de colmarme de liberalidades. ¡Pero hay más aún! Porque, ¿qué permite a los ricos tener sus alacenas llenas de ricos moscateles de la más pura cepa, cuando los médicos, en momentos de dolor o muerte sólo podrían prescribirles agua anisada? ¡La salud, señores, la salud! ¡La bendición de los ricos! ¡La riqueza de los pobres! La salud, que no hay precio caro para ella, puesto que sin ella no puede haber felicidad. ¡No seáis, pues, avaros de vuestras bolsas, honorables señores, si no queréis abreviar la duración normal de vuestra vida!

PEREGRINO
284Ya veis su final.

SIR POLITICK
289¿Y no lo encontráis magnífico?

VOLPONE
293Y si tenéis un catarro, o la humedad del aire cae sobre vuestra cabeza, vuestras espaldas o vuestros brazos, como sobre cualquier otra parte de vuestro cuerpo, ¡probad de aplicar a la parte dolorida una moneda o un cequí de oro, y ved qué efecto hace! ¡Ninguno! No. Sólo este bendito ungüento, este raro descubrimiento, tiene el poder de ahuyentar los humores malignos, procedan del calor, del frío, del viento o de la humedad.

PEREGRINO
298¡Ha olvidado la sequía!

SIR POLITICK
303¡Observad! ¡Observad!

VOLPONE
307Para fortalecer los más rebeldes estómagos indigestos, la extrema debilidad, los vómitos de sangre, bastará aplicar sobre el sitio afectado una servilleta empapada en agua, después de haber frotado la piel con este bálsamo; para los vértigos de cabeza, poneos la pomada en las ventanillas de la nariz; es el más maravilloso remedio para el mal caduco, los calambres, convulsión, parálisis, epilepsias, tremocordia, decaimiento nervioso, vapores, parálisis del hígado, mal de piedra, hernia estrangulada, hernia ventosa e iliaca pasto; para casos de disentería, deshace la torsión de las tripas y cura radicalmente la melancolía hipocóndrica. (Señala el cartel mostrando sus redomas.) Para esto son los doctores, las medicinas y las curas. Este cartel os dará las instrucciones, y la redoma el remedio; en los dos hay compensada en abstracto toda la teoría y la práctica del arte de Esculapio. Las dos cosas, señores, no os costarán más que ocho coronas.

SIR POLITICK
316¿Qué os parece?

PEREGRINO
320¡Un tipo raro!

SIR POLITICK
325¿No es docto su lenguaje?

PEREGRINO
330Sólo lo hallé en libros de alquimia; o en los de Broughton. ¡Pero ocho coronas son muchas!

VOLPONE
333Nada más, señores. Si tuviese tiempo para discursear sobre el maravilloso efecto de mi aceite, llamado aceite de Scoto, y sobre el incontable número de casos que éste ha curado, os podría explicar la cantidad de testimonios y privilegios de todos los Príncipes y Repúblicas de la cristiandad, así como las declaraciones de mis agradecidos clientes ante el Colegio de Doctores; si yo estuviese autorizado a divulgar las admirables virtudes de mi medicamento y mi propia excelencia en materia de raros y desconocidos secretos, el júbilo sería inmenso, no sólo en esta famosa ciudad, sino en las más pías ciudades de Italia, por parte del Gobierno, y en el orbe cristiano entero. Otros han dicho ya, pensaréis, disponer también de productos tan buenos como el mío, y haber obtenido resultados semejantes; no, señores, lo que han hecho en realidad ha sido parodiar, como monos, algo que está en mi propia esencia, y que es la fabricación de este aceite. Han derrochado en hornos, probetas, retortas y alambiques; han preparado los ingredientes (no debéis olvidar que entran más de seiscientos de ellos a más de grasa humana para aglutinar), pero cuando estos vulgares imitadores llegaron a la última decocción... puf, puf..., blow, blow..., todo se fue en humo. ¡Pobres gentes! ¡Pobres despojos! En verdad, me dan más lástima su locura y su obcecación, que su pérdida de tiempo y de dinero, porque éstos son recuperables y ser loco nato es enfermedad incurable.

338En cuanto a mí, desde mi juventud me consagré a descubrir los más raros secretos y a usar de ellos. No ahorré tiempo ni trabajo y fui siempre donde había algo que descubrir o aprovechar. Y ahora, señores, en virtud de mi arte de la química, soy capaz de extraer de los honorables sombreros que cubren vuestras cabezas, los cuatro elementos; es decir, fuego, aire, agua y tierra y devolvéroslo sin una mancha ni una quemadura. Porque mientras otros jugaron al balón yo me sumergí en mis libros; y he abandonado ya el sendero del estudio para seguir el de la fama y la reputación.

SIR POLITICK
343Es su ambición, os lo aseguro.

PEREGRINO
347¿No creéis que también lo es nuestro dinero?

VOLPONE
352En cuanto al precio... ya sabéis, honorables señores, que jamás valoré esta redoma en menos de ocho coronas, pero esta vez soy feliz al podérosla ofrecer por seis. Seis coronas es el precio de esta redoma y sé que vuestra cortesía os impediría ofrecerme menos; la toméis o la dejéis, sabed que estoy siempre a vuestro servicio. No os pido el valor de la cosa en sí, porque entonces debería pediros mil coronas, como me dieron los Cardenales Montalto y Farnese y el Gran Duque de Toscana, a cuyos oídos llegó mi reputación; pero yo desprecio el dinero. Sólo para mostraros mi afecto hacia vosotros, honorables señores, y hacia vuestro ilustre Estado, he descuidado hoy los mensajes de estos Príncipes, y mis propias ocupaciones; os he consagrado todo mi día y no he venido sino a ofreceros el fruto de mis viajes y mi experiencia.

SIR POLITICK
357¡Magnífico!

PEREGRINO
362¿Cómo puede un hombre disparatar de tal suerte?

VOLPONE
367Y ahora, señores, sabed que estoy hoy dispuesto a haceros el magnífico presente de una pequeña cantidad de lo que mis cofres contienen; a los ricos, por cortesía; a los pobres, por el amor de Dios. Oídme: Os he pedido seis coronas, y seis coronas me habéis pagado otras veces, pero esta vez no me vais a dar seis coronas, ni cinco, ni cuatro, ni tres, ni dos, ni una, ni medio ducado, ni aun un moccinigo. Seis peniques os costará, señores, seis peniques solamente, pero no esperéis de mí que os rebaje un solo maravedí de esta mínima suma, y con ella me llevaré de vosotros la prueba de vuestro afecto y de que no me menospreciáis. ¡Adelante, pues! ¡Agite el pañuelo quien quiera ser el primero! Sabed que el heroico espíritu que me haga esta gracia, recibirá de mí un pequeño recuerdo que apreciará más que si le hiciese presente de una doble pistola.

PEREGRINO
371¿Queréis ser vos este héroe?

(Celia, desde su ventana, deja caer el pañuelo.)

VOLPONE
379¡Señora, mil gracias! Mil gracias por vuestra bondad y por esta oportuna gracia que concedéis al pobre Scoto de Mantua. Os devolveré el pañuelo con mi aceite y un secreto de tan alto valor que hará que se enamore de vos, quien creáis digno de tal gracia. Aquí van unos polvos envueltos en este papel, y si sobre ellos tuviera que escribir la verdad, lo mismo necesitaría una página que nueve mil volúmenes, una página como una línea y una línea como una palabra; tan corta es la peregrinación del hombre en pos de la verdad. ¿Debo hablaros del precio? El mundo entero es como un imperio, el imperio como una provincia, la provincia como un banco y el banco como una bolsa particular. Sólo quiero deciros eso; estos polvos fueron los que hicieron de Venus una diosa cuando le fueron dados por Apolo; ellos le dieron su eterna juventud, evitaron sus arrugas, robustecieron sus encías, suavizaron su piel y colorearon su cabello; de ella fueron a Helena y se perdieron en el sitio de Troya; hasta que, afortunadamente, en nuestros días fueron hallados por un docto anticuario cerca de unas ruinas de Asia, quien mandó la mitad a la corte de Francia, si bien sofisticados, con los cuales las damas coloran sus cabellos. El resto, señores, está en mi poder; extractado hasta la quintaesencia; de manera que cuanto toca se rejuvenece inmarcesible; ellos restaurarán vuestras fuerzas, fijarán vuestros dientes, aun cuando bailasen como boliches y los volverán blancos como el marfil, aun cuando fuesen negros como...

(Entra Corvino.)

CORVINO
388¡Fuera de aquí, granuja! ¿Qué vergüenza es esa? ¿No hay más casa aquí que la mía? ¿No hay más ventanas en la plaza que las de mi mujer para hacer vuestras imbecilidades? ¿Eh? ¿Eh? (Pegando a Volpone, a Nano y a todos.) ¡Largo de aquí, bribón, granja! ¿Queréis que me llamen Pantalón en toda la ciudad?

PEREGRINO
396¿Qué significa todo esto, Sir Pol?

SIR POLITICK
400Alguna conspiración contra el Estado, creedme. Me voy a casa.

PEREGRINO
404¿No tramarán algo contra vos?

SIR POLITICK
408No sé. Pero estaré en guardia.

PEREGRINO
412Es lo más prudente.

SIR POLITICK
417Durante estas últimas tres semanas mis cartas y papeles han sido interceptados.

PEREGRINO
422¿De veras, señor? Es mejor ser prudente.

SIR POLITICK
427Lo seré, lo seré; descuidad...

PEREGRINO
431¡A este caballero no lo abandono yo en toda la noche!

(Salen.)

ESCENA II

UNA HABITACIÓN EN CASA DE VOLPONE
Entran Volpone y Mosca.

VOLPONE
449¡Estoy herido, Mosca!

MOSCA
452¿Dónde, señor?

VOLPONE
457En ninguna parte. Aquellos golpes no fueron nada, podía soportarlos. Pero el travieso Cupido con sus ojos ciegos me ha inflamado el corazón como una antorcha; sus saetas me hirieron y me siento ardiente como horno abrasado. Tengo una lucha interna, Mosca, y sin tu ayuda no puedo vivir. Me siento morir, y sin la esperanza de una brisa que venga a refrescar mi aliento, pronto no seré sino un montón de escorias.

MOSCA
461¡Lástima, señor! ¡Ojalá no la hubieseis visto nunca!

VOLPONE
465¡No, Mosca; ojalá no me hubiese hablado nunca tú de ella!

MOSCA
470Es cierto, señor. ¡No anduve acertado y os he hecho desgraciado; pero, por mi conciencia, como por deber, os prometo, señor, hacer cuanto pueda por aliviar vuestros males!

VOLPONE
475¡Querido Mosca! ¿Crees que puedo tener esperanzas?

MOSCA
480¿Por qué no? ¡Siempre se puede esperar en aquello que está dentro de las fuerzas humanas!

VOLPONE
485¡Oh, entonces habla! ¡Toma mis llaves, mi oro, mis platos y mis joyas, todo cuanto te plazca; pon en juego tu ingenio, pero corona mis deseos, Mosca!

MOSCA
488¡Tened paciencia!

VOLPONE
493¡La tendré!

MOSCA
498¡No dudo de tener éxito y colmar vuestros deseos!

VOLPONE
503Entonces no me arrepiento de mi disfraz.

MOSCA
507¡Si le ponéis cuernos a Corvino, lo comprendo!

VOLPONE
511¡Y, no obstante, no será él mi heredero! ¿No me habrán reconocido por el color de mis cejas y mi barba?

MOSCA
515Ni por asomo.

VOLPONE
520¿Estuve bien?

MOSCA
525¡Tan bien que ojalá pudiese yo gozar de la mitad de vuestra suerte! [Aparte.] ¡Pero salvarme de vuestro epílogo!

VOLPONE
530¿Pero creyeron en verdad que era Scoto?

MOSCA
534¡Ni aun el mismo Scoto hubiera dudado de vos! No tengo tiempo ahora de adularos, me voy; y si prospero, aplaudid mi arte.

(Sale.)

ESCENA III

UNA HABITACIÓN EN CASA DE CORVINO
Entra Corvino, espada en mano, arrastrando a Celia.

CORVINO
549 (Yendo a la ventana.) ¡Mi honor mancillado! ¡Con un loco juglar, un sacamuelas, un saltimbanqui! ¡Y en una ventana de la calle! ¿Cómo pudisteis sonreír a aquel monstruo delante de todo el mundo? ¿Cómo pudieron interesaros sus carteles, y sus discursos divertir vuestros oídos? ¡Y mientras aquella multitud le escuchaba, os miraba al mismo tiempo como manada de sátiros; y vos sonreíais graciosamente, y prodigabais vuestros favores para darles satisfacción! ¿Era acaso aquel saltimbanqui su reclamo, su silbato? ¿O estabais enamorada de sus sortijas de cobre, de sus joyas de azafrán o de su piedra de sapo? ¿O de sus andrajos y su pluma inclinada? ¿O de su barba mugrienta? ¿Queréis verle? ¿Queréis que suba? (A Celia.) ¡Sí, sí, subid, que os veamos de cerca! ¡He aquí a Lady Vanity que os espera! ¿Pero qué creéis? ¿Que vais a hacer de mí un cornudo? ¿Pero no sabéis acaso quién soy?¡No, señora, no! ¡Os condenáis, si me hacéis cornudo, ramera! ¡Ay de los vuestros si me engañáis! ¡Vuestra madre, vuestro padre, vuestro hermano serán víctimas de mi justicia!

CELIA
556¡Señor, calma, por favor!

CORVINO
560¿Os proponéis provocar mi cólera y jugar con mi deshonor? Por mi fe que soy capaz de atravesaros con este acero y daros de puñaladas hasta apagar el brillo de vuestros ojos caprinos.

CELIA
564Calmaos, señor. No comprendo que mi presencia en la ventana os irrite más hoy que los demás días...

CORVINO
567¿Cómo? ¡Mantener una conversación con un redomado pícaro delante de todo Venecia! ¡Bien hicisteis vuestra comedia con vuestro pañuelo, que besó dulcemente al recoger, y que os devolvió, sin duda, con una carta! ¿Os fijaba en ella el lugar de la cita? ¡Vuestras hermanas, vuestra madre y vuestra tía, pueden ayudaros!

CELIA
572¿Por qué decís esto, señor? ¿No sabéis que sólo voy con ellas a la iglesia, y aun raramente?

CORVINO
576Menos va a ser ahora, y vuestras restricciones de antes eran libertad. He aquí lo que decreto; primero, esta impúdica ventana será condenada, y entretanto se hace, señalo una línea a dos o tres yardas de ella, que si jamás osareis traspasar, haría caer sobre vuestra cabeza mayor castigo, mayor horror y mayor rabia, que sobre la del conjurado que imprudentemente abandona su refugio. Viviréis en la parte de atrás, y por ella pasaréis; allí será vuestra vida; he aquí a lo que forzáis mi honrada naturaleza por vuestra conducta, puesto que no os basta respirar el aire perfumado de vuestra cámara y queréis husmear el olor a sudor de los transeúntes. (Llaman a la puerta.) Llaman. ¡Fuera de aquí! ¡Que no os vean, oh dolor de mi vida! Apartaos de la ventana, si osáis acercaros a ella, oídme, ramera; os aseguro que os hago una anatomía, que os diseco, y leo ante toda la ciudad un libro sobre vuestra vida. ¡Salid!

(Sale Celia y entra un Criado.)

CORVINO
586¿Quién es?

CRIADO
591El señor Mosca.

(Sale el Criado.)

CORVINO
601Hacedlo entrar. (Entra Mosca.) ¡Su amo ha muerto! ¡He aquí algo bueno que compensa lo malo! ¡Sed bienvenido, querido Mosca! ¡Adivino la noticia!

MOSCA
609¡Temo que no, señor!

CORVINO
613¿No ha muerto?

MOSCA
616¡Todo lo contrario!

CORVINO
620¿No hay mejoría?

MOSCA
623Sí, señor.

CORVINO
627¡Estoy maldito! ¡Estoy embrujado! ¡Todas las cruces caen sobre mí! ¿Pero cómo, cómo? ¡Explica, explica!

MOSCA
632Pues con el aceite de Scoto, señor. Corbaccio y Voltore se lo trajeron mientras yo estaba ocupado en otra habitación.

CORVINO
637¡Scoto! ¡Maldito saltimbanqui! ¡Pero ahora puedo perseguirle por la ley! Su aceite no puede tener tal virtud. Yo he conocido este bribón tocando el violín por las hosterías. ¿No le he visto acaso andar con rameras, hacer sus juegos y aceptar como precio una pobre cucharada de sopa y los restos de los vasos de vino con alguna que otra mosca? ¡Es imposible! Sus ingredientes sólo son hiel de cordero, tuétano de cabrón asado, unos manojos de sarmientos, orugas machacadas y saliva en ayunas. ¡Los conozco por dracmas!

MOSCA
641No sé, señor; pero uno le vertió el aceite en los oídos, el otro en las narices y recobró el conocimiento dando gritos de lujuria.

CORVINO
646¡De lujuria! ¡Ah, el condenado! ¡La peste se lo lleve!

MOSCA
650Y ahora para mostrarse solícitos con él le han mandado todos los médicos de la Facultad a fin de sanarlo. Uno aconseja una cataplasma con especias, otro una piel de mono desollado, puesta sobre su pecho, el tercero la recomienda de perro y el cuarto de gato salvaje empapada en aceite; ¡pero todos están de acuerdo que debe serle rápidamente enviada una mujer joven para yacer con él, y a este desagradable menester he sido enviado! He creído conveniente hablar con vos puesto que sois el más interesado; porque no quiero cumplir esta misión que puede estorbar vuestros planes, y los míos, puesto que sólo de vos dependo. ¡Pero, si no la cumplo, mi negligencia me delatará a mi patrón y seré despedido, y adiós todas vuestras esperanzas y venturas! Os diré, señor. Allí están todos, ahora, tratando de quien debe ser el que primero le facilite... por eso he venido a deciros que deberíais adelantaros a ellos.

CORVINO
654¡Adiós esperanzas mías! ¡Oh triste fortuna la mía! Hay que alquilar alguna cortesana...

MOSCA
658He pensado en ello... pero... son tan hábiles, tan astutas, tan poseídas de su arte y a veces tan apasionadas y flexibles que pueden jugarnos una mala pasada.

CORVINO
662Es cierto...

MOSCA
667No, no. Tiene que ser una mujer ingenua, sin astucia... un alma sencilla sobre la que tengáis ascendente... ¿No tendrías acaso alguna parienta?... Uno de los doctores le ofreció su hija.

CORVINO
670¿Su hija?

MOSCA
675Sí, el señor Lupo, el cirujano.

CORVINO
680¡Su hija!

MOSCA
685¡Su hija virgen! ¡Oh! ¿Qué arriesga? ¡Sabe muy bien del estado del enfermo! Nada puede calentar su sangre si no es la fiebre. Nada le hará reaccionar. Su sensualidad murió hace ya tiempo. Además, ¿quién va a saberlo? Una persona o dos...

CORVINO
690¡Déjame pensar! (Paseándose y hablando para sí.) Si otro que yo tuviera esta suerte... La cosa en sí no es nada, ¡ya lo sé! ¿Y por qué tengo que sacrificarme yo en lugar de este idiota doctor? ¡En casos de honor una hija vale una esposa!

MOSCA
699[Aparte.] Le veo venir... ¡picó en el anzuelo!

CORVINO
704Sí..., aceptará. ¡Ya está decidido! ¿Si este doctor que no es sino su consejero ofrece su hija, qué no debo hacer yo? ¡Hay que adelantarse a él! ¡Malvado! ¡Ambicioso!

709 (A Mosca.) ¡Mosca! ¡Ya está decidido!

MOSCA
713¿Qué, señor?

CORVINO
718Hay que andar sobre seguro. El papel que buscas lo desempeñará mi propia mujer.

MOSCA
723Señor Corvino, no quisiera haberos inducido a tomar esta determinación, pero os la hubiera aconsejado. Los habéis vencido a todos y habéis tomado posesión de lo vuestro. ¿Qué peligro corréis? ¡Ninguno! Con quitarle la almohada de debajo la cabeza se ahoga... ¡ya hubiéramos debido hacerlo sin vuestros ridículos escrúpulos!

CORVINO
728¡Tienes razón! Mi conciencia es un obstáculo a mi ingenio. Y ahora, vete a casa; ¡prepáralo! Dile con cuanto celo y voluntad lo hago y júrale que de mi propio impulso lo ofrecí en el acto.

MOSCA
732Os garantizo que sabrá tan exactamente la verdad que vuestros enemigos serán expulsados y sólo vos recibido. Pero, no vengáis hasta que os mande a buscar; tengo todavía que madurar algo más en provecho vuestro, que de momento debéis ignorar. Os dejo.

CORVINO
737¡No te olvides de mandarme a buscar!

MOSCA
742¡No temáis!

(Sale Mosca.)

CORVINO
751¿Dónde está mi mujercita?... ¡Celia! ¡Celia mía! (Entra Celia.) ¿Qué es eso? ¿Llorando? Ven aquí; seca estas lágrimas. Créeme sinceramente... pero si sólo lo hice para probarte... si siempre he creído en ti... ¡ya sabes que no soy celoso!

CELIA
763¿De veras?

CORVINO
768¡Mi palabra! ¿Nunca lo fui? ¿Por qué razón las mujeres irán siempre contra las leyes del mundo? Tengo confianza en ti y tendrás de ello las pruebas. Ven y bésame. Y ahora, ve y vístete con las mejores ropas, tus joyas más escogidas... ¡póntelas todas! Y embellécete también con tu más bella sonrisa, estamos invitados a una fiesta en casa del viejo Volpone... ¡Allí verás cuán libre estoy de celos y si tengo temor alguno...!

FIN DEL SEGUNDO ACTO

ACTO TERCERO

ESCENA 1

UNA CALLE DE VENECIA
(Entra Mosca hablando solo.)

MOSCA
4¡Temo que empiezo a enamorarme de mi astucia! Mis planes florecen tan fecundos que mi sangre hierve de orgullo. Mi triunfo es casi un goce libertino. Ágil y escurridizo como la serpiente, cambio de piel a cada astucia. ¡Qué gran cosa es el parásito! Meditar es una ciencia, como lo es el misterio. ¡Cuándo diversa es la humanidad y en el fondo no hay sino parásitos y sub-parásitos! Y no sólo quienes poseen el real e innato arte ciudadano de saber quien debe alimentarlos y cebarlos; quienes no tienen ni familia ni hogar y adulan los oídos de los grandes para sacar de ellos provecho. Vivir de engaños, engañar a quienes a su vez engañan poniendo sus rentas fuera del alcance de las garras del Gobierno. ¡Ecco! Explotar a quienes saben moverse por el mundo como una golondrina en el espacio. ¡Comer de quienes dan en el blanco y ser nosotros la saeta que da en ellos! ¡Y estar aquí y allí y acullá al mismo tiempo! ¡Este es el parásito nato, el que lleva su arte en el alma! ¡El que acude a todas partes y está presente en todas las ocasiones! El que cambia de cara tan veloz como de pensamiento. Es ciencia que no se aprende y las chispas brotan de su instinto. (Entra Bonario.) ¿Pero qué veo? ¡Si es Bonario! ¡El hijo del viejo Corbaccio! ¡La persona que buscaba! ¡Os doy la bienvenida, señor!

BONARIO
13¡De ti no quiero ni la bienvenida!

MOSCA
18¿Por qué, señor?

BONARIO
23Sigue tu camino y déjame; no quiero conversación con un individuo de tu calaña.

MOSCA
28Sed cortés, señor. No humilléis mi pobreza.

BONARIO
33No es ella la que desprecio, sino tu villanía.

MOSCA
38¿Mi villanía, señor? ¿Por qué me acusáis así?

BONARIO
43¿Por qué? ¿No es tu holgazanería suficiente razón? ¿Y tus adulaciones? ¿Y tu manera rastrera de mendigar un mendrugo?

MOSCA
47 (Sollozando.) ¡Dios me ampare! ¡Estas imputaciones son vulgares, señor! Sois injusto conmigo. No me conocéis y me censuráis. ¿Creéis acaso que es fácil ser virtuoso siendo pobre? ¡Sois inhumano y San Marcos mismo os lo reprocharía!

BONARIO
51[Aparte.] ¿Llora? Acaso sea más sensible de lo que creí y he sido demasiado duro.

MOSCA
55Es cierto, señor, que empujado a veces por la necesidad tengo que mojar a menudo mi pan con halagos; es cierto que, privado de fortuna, tengo que tejer mis ropas fuera de mis propios telares; pero jamás cometí bajas acciones separando amigos, indisponiendo parientes, propalando calumnias, abusando de credulidades con perjurios o corrompiendo castidades, y creo tener derecho a conservar mi propia estimación, aun cuando debiesen perecer mis esperanzas.

BONARIO
59Es posible, Mosca. Quizás desconozca tu verdadero fondo. Te ruego me perdones y me digas lo que te trae.

MOSCA
64Algo que os concierne; os parecerá quizás que obro mal y que es una ingratitud hacia mi amo; pero por amor a la verdad y odio a la intriga tengo que deciros que en este mismo momento vuestro padre os está desheredando.

BONARIO
69¿Cómo?

MOSCA
72Y os despoja como si fueseis ajeno a su sangre; es la pura verdad. Todo esto en nada me concierne, pero mi inclinación a la defensa de la virtud y las bondades que de vos he oído referir, me ha impulsado, sin más objeto, a poneros al corriente.

BONARIO
76¿Qué patraña es esta? ¡Me has hecho perder la confianza que en ti había puesto! ¡Es imposible! ¿Cómo voy a creer a mi padre tan desnaturalizado?

MOSCA
80Vuestra confianza demuestra vuestra bondad y vuestra inocencia, lo cual hace todavía más abominable el perjuicio que quieren causaros; pero creed, señor, que en este mismo momento está ocurriendo lo que os digo y si queréis seguirme os llevaré donde podréis, si no ver, por lo menos oír cuanto ocurra y vuestros oídos serán testigos de la infamia. ¡Venid y juzgaréis de la ignominia!

BONARIO
85¡Mosca! ¡No puedo creerte!

MOSCA
90¡Señor! Sacad vuestra espada y descargad vuestra ira sobre mi cabeza si os engaño. ¡Marcadme como un villano! Bastante daño os hacen y comparto vuestro dolor. Mi corazón sangra de angustia...

BONARIO
95¡Ve delante! Te sigo.

(Salen.)

ESCENA II

LA HABITACIÓN DE VOLPONE
Entra Volpone

VOLPONE
113¡Mucho tarda Mosca! ¿Cómo matar el tedio de mis horas? ¡Hola! ¡Nano! ¡Castrone! ¡Andrógino! ¡Venid a distraerme con vuestras bufonadas!

(Entran Nano, Castrone y Andrógino.)

NANO
122¡Enano, loco y eunuco, aquí nos tienes! ¿Quién de nosotros empieza?

CASTRONE
126¡Yo!

ANDROGINO
131¡Yo!

(Llaman a la puerta.)

VOLPONE
140¿Quién va? ¿Quién es? ¡Salid, idos, idos todos! ¡Nano, ve quién és! (Salen Castrone y Andrógino.) Dame mi bonete y entérate. (Sale Nano.) ¡Y ahora, a ti, Cupido! Ojalá regrese Mosca con buenas noticias.

NANO
155 (Sacando la cabeza.) Es la bella Lady...

VOLPONE
160¿Would-Be?

NANO
165La misma.

VOLPONE
170¡Oh tormento mío! ¡Acompáñala, Nano, pero no te muevas de aquí; (Acostándose.) … de lo contrario, aquí se queda! ¡Oh cielo! ¿Por qué me atormentas hoy, cuando Mosca debe hablarme de la otra? ¡Cuánto me espera sufrir, Señor!

(Entra Nano acompañando a Lady Politick Would-Be.)

LADY
182 (A Nano.) Os doy las gracias, señor. Os ruego que anunciéis a vuestro patrón que estoy aquí. (Mirándose en un espejo.) Esta cinta oculta demasiado mi cuello. (A Nano.) Perdonadme, señor, ¿queréis tener la bondad de pedir a una de mis doncellas que entre? En verdad que no acerté en el vestido hoy. No importa. Ya está bien así. (Entra Nano precediendo una doncella.) ¡Mirad! Ved con qué petulancia me habéis vestido. ¿Cómo habéis podido hacerlo?

VOLPONE
201Siento la fiebre que me invade. ¿Cómo echar a esta mujer?

LADY
206 (Llamando a su doncella.) Ven aquí, acércate; ¿crees que este rizo está en su sitio? ¿O este? ¿No está esta parte del peinado más alto que esta otra? ¿Dónde tenéis los ojos? ¿O habéis perdido la cabeza? ¿Dónde está tu compañera? Llámala.

(Sale la doncella.)

NANO
213¡Que San Marcos nos proteja! Es capaz de pegar a sus doncellas porque su nariz ha enrojecido.

(Entran las dos Doncellas.)

LADY
221Miradme, por favor. ¿Creéis que todo está en su sitio?

DONCELLA 1.º
226Hay un mechón que cae un poco, es verdad.

LADY
231¿Con que es verdad? ¿Y dónde teníais los ojos? ¡Cómo queréis que vea con esta luz! ¡Por favor, arregladme! ¡Os lo he dicho tantas veces! Os he explicado los principios, predicado las reglas, discutido las gracias y la destreza. Os he enseñado como disponerlo todo y como vestirme.

NANO
234[Aparte.] Más que a guardar el honor.

LADY
239¿No os he dicho lo importante que es todo esto para vosotras? Conocer este arte puede ayudaros a encontrar noble marido a vuestro regreso y, no obstante, lo desdeñáis. Además, sabiendo lo raros que son los italianos ¿queréis que digan que “Una dama inglesa no sabe vestirse”? ¡Qué calumnia para nuestro país! Bien, dejadme ahora. Id a la antesala. ¡Señor! (A Nano) ¿Me haréis el honor de entretenerlas?

(Salen Nano y las Doncellas.)

VOLPONE
252¡La tempestad se avecina!

LADY
257 (Acercándose a la cama.) ¿Cómo va mi buen amigo Volpone?

VOLPONE
262Me molesta el ruido, no me deja dormir; soñaba que una furia había entrado en mi casa y con la tempestad de su aliento partió mi techo en dos pedazos.

LADY
267También yo tuve el más terrible sueño. Si pudiese recordarlo...

VOLPONE
270[Aparte.] ¡Oh triste sino! ¡Le he dado el arma con que atormentarme! Tendré que escuchar sus sueños.

VOLPONE
275¡La tempestad se avecina!

LADY
280 (Acercándose a la cama.) ¿Cómo va mi buen amigo Volpone?

VOLPONE
285Me molesta el ruido, no me deja dormir; soñaba que una furia había entrado en mi casa y con la tempestad de su aliento partió mi techo en dos pedazos.

LADY
290También yo tuve el más terrible sueño. Si pudiese recordarlo...

VOLPONE
294[Aparte.] ¡Oh triste sino! ¡Le ha dado el arma con que atormentarme! Tendré que escuchar sus sueños.

LADY
299Yo creo que una dorada mediocridad, cortés y delicada...

VOLPONE
304Si me amáis, señora, cesad. ¡Sudo y sufro a la mención del menor sueño! Ved como tiemblo.

LADY
308¡Dios mío! ¡Es una afección del corazón! Necesitaríais aljófar hervido en jarabe de manzanas. O tintura de oro, con coral y pepitas de limón. O mejor aun, raíces de heliotropo hervidas en agua regia.

VOLPONE
312¡Esta mujer es una cigarra con cien élitros!

LADY
317También es buena la seda fundida en ámbar. ¿Tenéis buen moscatel en casa?

VOLPONE
321¿Queréis beber y marcharos?

LADY
326No, no temáis. ¿No encontraríamos un poco de azafrán inglés? ¡Con medio dracma bastaría! y un poco de nuez moscada, dieciséis clavos, menta seca y unos granos de cebada.

VOLPONE
331[Aparte.] ¡Señor! ¡Fingí enfermedades y ahora las tengo realmente!

LADY
334Y todo esto aplicado con una franela escarlata.

VOLPONE
339[Aparte.] Qué chorro de palabras. ¡Es un torrente!

LADY
344¿Queréis que os ponga una cataplasma?

VOLPONE
348No, no, estoy perfectamente. No necesito que me recetéis nada más.

LADY
353He estudiado un poco de medicina. Pero ahora me dedico a la música, salvo dos o tres horas por la tarde que dedico a la pintura. Una dama tiene naturalmente que saber de letras y de artes, para poder discutir, escribir y pintar; pero lo principal, como dice Platón, ¡es la música! Y así lo hizo el sabio Pitágoras. ¡Es verdaderamente arrebatador! Cuando hay armonía en el alma, la voz y el rostro, no hay adorno mejor para nuestro sexo.

VOLPONE
358Un poeta tan sabio como vuestro Platón dijo que la mayor gracia de la mujer era el silencio.

LADY
363¿Quién era este poeta? ¿Petrarca? ¿Tasso? ¿Dante? ¿Guarini? ¿Ariosto? ¿Aretino? ¿Ciego di Hadria? Los he leído todos.

VOLPONE
368[Aparte.] ¿Y qué culpa tendré yo, señor?

LADY
372Creo que he traído dos o tres de ellos.

VOLPONE
375El sol, el mar y la tierra entera se detendrán antes que ella. ¡Nada puede escaparle!

LADY
380Aquí tenéis a Pastor Fido.

VOLPONE
384[Aparte.] Mi única salvación es el silencio.

LADY
389Todos nuestros poetas ingleses han aprendido de los italianos. ¡Qué vena más fácil y cuánto modernismo en la rima y en el metro! Vuestro Petrarca es más apasionado, por esto se especializó en los sonetos. Dante es muy difícil y pocos son los que pueden entenderlo. Pero el maestro de los ingenios es Aretino; quizá sus detalles sean un poco obscenos, pero a mí no me importa.

VOLPONE
392¡Mi cabeza no rige!

LADY
397Pues, en estos casos, hay que curarse solo. Usad de vuestra filosofía...

VOLPONE
401¡Ay de mí!

LADY
405¡Y si encontramos nuestras pasiones rebeldes, traicionémoslas! O tratemos de distraer nuestra imaginación con algo que la divierta sin peligro; en el entendimiento humano nada abruma más el juicio y nubla la comprensión que fijarla obstinadamente sobre un objeto. Porque este exceso de atención de la parte que llamamos mental, hiere una faz de nuestros órganos, y como dice Platón, asesina nuestro conocimiento.

VOLPONE
409[Aparte.] ¡Ahora el espíritu! ¡Oh paciencia, ayúdame!

LADY
413Tendré que visitaros a menudo, daros confianza en vos mismo y curaros. Debéis reír y estar alegre.

VOLPONE
418¡Ángel de mi guarda, sálvame!

LADY
423He conocido un solo hombre en la tierra con quien yo pudiese simpatizar, y le gustaba pasar conmigo cuatro o cinco horas diarias oyéndome hablar; estaba entusiasmado y a menudo quería él también poder hablar. Os parecéis mucho a él. Os daré un poco de conversación para haceros dormir. Así lo hicimos y pasamos los seis años de nuestro amor.

VOLPONE
428¡Oh, oh, oh, oh, oh!

LADY
432Éramos de la misma edad...

VOLPONE
436¡Un demonio, una bruja, algo que me salve de esta mujer!

(Entra Mosca.)

MOSCA
443Dios os salve, señora.

LADY
446Dios os salve, señor.

VOLPONE
450¡Mosca! ¡Bienvenido! ¡Bienvenido a mi salvación!

MOSCA
453¿Por qué, señor?

VOLPONE
458¡Oh! ¡Líbrame de esta tortura, aprisa! ¡Las campanas en tiempo de peste meten menos ruido que su voz y su ir y venir! Mi casa y mi habitación están profanadas por su aliento. ¡Ni aun un abogado hubiera logrado hacerse oír! No puede haber en el mundo otra mujer capaz de soltar aquel chorro de palabras. ¡Por la salud de tu alma, Mosca, échala de aquí!

MOSCA
462¿Os ha traído algo?

VOLPONE
466¡Oh, no me importa! ¡Bastante precio es su ausencia!

MOSCA
471Señora...

LADY
476He hecho de vuestro amo otro hombre. Es un juguete en mis manos.

MOSCA
481Gracias, señora. ¿sabéis que acabo de ver a vuestro marido... donde jamás pensaríais?

LADY
486¿Dónde...?

MOSCA
489Divirtiéndose. Donde ahora, si os dais prisa, podréis todavía verle. Remando en góndola con la más bella cortesana de Venecia.

LADY
494¿Es cierto esto?

MOSCA
499Perseguidlos y los veréis. Como lo vi os lo cuento. (Sale Lady Politick, iracunda.) Ya sabía yo que daría resultado. Las mujeres licenciosas son las que más sufren de celos.

(Entra precipitadamente Lady Politick.)

LADY
516Pero, decidme...

VOLPONE
521¡Otra vez! ¡Esto es el paroxismo de la desesperación!

LADY
526¿Hacia dónde decís que remaban?

MOSCA
531Hacia el Rialto.

LADY
535 (A Volpone.) ¿Podríais prestarme vuestro enano?

MOSCA
538Os ruego que lo toméis. (Sale Lady Politick.) Vuestras esperanzas, señor, son como flores y frutos prometedores, pero todavía no en sazón. Seguid en cama, Corbaccio viene con el testamento; cuando se haya marchado os diré algo más.

(Sale Mosca.)

VOLPONE
550Mi sangre y mi espíritu están transtornados. Esta mujer me ha vuelto loco, pero tengo el corazón henchido de esperanzas.

(El telón cae delante de Volpone.)

ESCENA III

UN CORREDOR QUE LLEVA A LA HABITACIÓN DE VOLPONE. EN EL HAY UNA PUERTECILLA QUE DA ACCESO A UN GABINETE.
Entran Bonario y Mosca

MOSCA
568Venid, señor, aquí escondido… (Señalando el gabinete.) …podréis oírlo todo. Pero os ruego que tengáis paciencia. (Se oye llamar.) He aquí a vuestro padre. Debo dejaros.

BONARIO
580 (Entra en el gabinete.) Ve, ve, en nombre de Dios. No puedo creer que esto sea verdad.

(Aparece Mosca precediendo a Corvino y Celia.)

MOSCA
587¡Dios nos ampare! ¡Habéis venido demasiado pronto! ¿No os dije que os mandaría a buscar?

CORVINO
592Sí, pero temí que lo hubieseis olvidado y pasasen antes que nosotros.

MOSCA
595[Aparte.] ¡Prisa lleva en ser cornudo! Bien; puesto que estáis aquí, quedaos. Yo tengo que dejaros.

(Sale Mosca.)

CORVINO
603Oídme, Celia, ¿sabéis a qué hemos venido aquí?

CELIA
606Sólo sé que me habéis dicho.

CORVINO
610Pues oídme...

(Baja el telón.)

ESCENA IV

EL GABINETE DONDE ESTÁ BONARIO
Entra Mosca

MOSCA
628Señor, vuestro padre tardará todavía una hora, de modo que si queréis pasar a la biblioteca, podréis entreteneros. Vigilaré que nadie entre antes que él.

BONARIO
633Bien, esperaré allí. [Aparte.] Creo que hay que vigilar; desconfío de este hombre.

(Sale Bonario.)

MOSCA
642Allí no hay peligro de que oiga nada. Y de su padre me ocupo yo.

(Baja el telón.)

ESCENA V

LA HABITACIÓN DE VOLPONE

(Volpone está en cama, Mosca sentado a su lado. Entra Corvino casi arrastrando a Celia.)

CORVINO
663Nada, Nada, no se puede volver atrás y así lo he decretado y debe ser hecho.

CELIA
668Señor, dejadme suplicaros. Si dudáis de si castidad, encerradme para siempre, pero no empleéis estos procedimientos. Dejadme vivir temiéndoos, puesto que no puedo merecer vuestra confianza.

CORVINO
671No estoy de humor de discusiones. ¿Creéis acaso que consentiría en ser cornudo? No estoy loco. Sed obediente como buena esposa.

CELIA
676¡Oh, cielo! Ayúdame.

CORVINO
681Ya os he dado las razones. Sabéis cual es su estado y lo que los médicos han prescrito; se trata de un simulacro y me he comprometido a él; ya sabéis cuánto este asunto me afecta; si queréis ser leal conmigo, ayudadme y respetad mis compromisos.

CELIA
686¿Antes que respetar vuestro honor?

CORVINO
691¡Honor! ¡Bah! ¡Esto son palabras que inventaron los locos! ¿Es mi oro menos bueno porque lo toque otro que yo? ¿Mis trajes menos lujosos porque otros los miraron? ¿Qué queréis temer de una ruina decrépita sin nervios y sin sentidos? Hay que darle la comida y no puede ni bostezar si no le escaldan las encías; no tiene ya voz; es una sombra. ¿Cómo queréis que este hombre me ofenda?

CELIA
695¡Dios mío! ¿Qué mal espíritu le domina?

CORVINO
700Nada tenéis que temer por vuestra reputación. ¿Creéis acaso que va a proclamarlo por la Plaza? ¿Quién puede hacerlo si él no puede hablar y tengo en mi bolsillo la lengua de este muchacho? Nadie en el mundo puede enterarse.

CELIA
705¿No hay Santos en el Cielo? ¿Son acaso ciegos?

CORVINO
710¡Vamos!

CELIA
714Sed bueno, señor. Imitadlos y pensad cuánto arderéis en el infierno por cada uno de vuestros odiosos pecados.

CORVINO
719Os juro que, si creyese pecado lo que os pido, no os induciría a ello. Si ofreciese vuestro papel a una extranjera, a una cortesana de ardiente sangre toscana que hubiese leído Aretino, o a quien hubiese hecho profesión de su libertinaje y quisiera sacar provecho de ello, cometería un horrible pecado; pero haciendo obra pía de caridad y prestándole mi propio bien, ¿cómo puede haber culpa?

CELIA
724¡Oh, cielo! ¿Cómo escuchar tal infamia?

VOLPONE
729 (En voz baja a Mosca.) Tú eres mi honor y mi orgullo, Mosca. Eres mi alegría y mi delicia. Haz que se acerquen.

MOSCA
733 (Yendo a ellos.) Acercaos, señor...

CORVINO
738 (Acercándose.) Venid, venid, basta de rebeldías...

MOSCA
743Señor, el señor Corvino ha venido a veros...

VOLPONE
747¡Oh...!

MOSCA
752Y habiéndose enterado de la prescripción de los médicos, os ha traído para curaros y cuidaros gratis, sin retorno alguno, al amor de sus amores, a su propia y auténtica esposa, ¡a la primera belleza de Venecia!

VOLPONE
755Gracias..., gracias...

MOSCA
759Para reconfortaros, para animaros.

VOLPONE
764Bien, bien..., pero yo estoy casi en el otro mundo. Dales las gracias por sus cuidados, pero diles que es inútil luchar contra la voluntad del cielo; de nada sirve aplicar fuego a una piedra. ¡Oh, oh, oh! (Tosiendo.) Una hoja no puede florecer dos veces... Agradezco sus deseos y diles lo que he dispuesto en su favor; no hay esperanzas para mí... ruégales que usen cuerdamente de mi fortuna cuando la hereden...

MOSCA
772 (A Corvino.) ¿Oís, señor? Acercaos con vuestra mujer.

CORVINO
776¡Por el alma de mi padre, Celia! ¿Persistís todavía en vuestra resistencia después de haberle oído? ¿Me vais a obligar a usar de la violencia?

CELIA
780¡Matadme, por favor! Dejadme tomar un veneno o tragar carbones ardiendo, hacer cualquier cosa...

CORVINO
784¡Maldita seáis! ¿Queréis que os arrastre por los cabellos? ¿O que desgarre vuestra boca hasta las orejas y os ponga la nariz como un salmonete? Juro que tengo que ataros viva y desnuda al cuerpo de un esclavo muerto. ¡Os expondré en vuestra ventana para ignominia con la acusación de vuestro crimen grabado con aguafuerte sobre vuestro pecho! ¡Por la sangre que corre por mis venas, tengo que hacerlo!

CELIA
787Podéis hacer de mí lo que queráis, soy vuestra mártir.

CORVINO
790No seáis tan obstinada, no lo merezco. ¡Venid, querida! Tendréis joyas, trajes, aderezos; cuanto queráis y ansiéis, pero id a él y besadlo. O tocadlo... ¡que os sienta a su lado! ¿Queréis acaso mi desgracia y la vuestra? ¿No querréis privarme de su herencia...?

MOSCA
794Vamos, señora, sed razonable...

CORVINO
798Secad vuestras lágrimas de cocodrilo...

CELIA
801Pueda mi vida seros útil y mi sacrificio salvar mi alma...

CORVINO
804Habladle, habladle... toda mi reputación está en vuestras manos.

MOSCA
807Y ahora, debemos dejarla. ¿Qué hacéis aquí? ¿No comprendéis que vuestra presencia es un obstáculo? ¿Qué mujer osaría delante de su marido...? Venid, salgamos.

CORVINO
810Mi dulce Celia, aquí os dejo. Sabéis cual es vuestro deber. ¡Hay de vos si faltáis a él! ¡Estáis perdida!

(Salen Corvino y Mosca.)

CELIA
817¡Oh, Dios mío y ángeles del cielo! ¡Cuánta villanía se alberga en el pecho humano! ¡Cuánta infamia! ¿Cómo puede un hombre pisotear su honor y su propio bien por amor del dinero?

VOLPONE
820Tenéis razón, señora; en el pecho de Corvino hay estas bajas pasiones... (Saltando violentamente de la cama.) ...que jamás probaron el cielo del amor! Sabed, bella Celia, que por dinero vendería vuestro honor y su puesto en el paraíso a un buhonero. ¿Os asombráis de verme revivir? ¡Aplaudid el milagro de la belleza! ¡Esta es vuestra gran obra! ¡Cuántas veces mi amor os ha adorado bajo mis disfraces y mis afeites! ¿No visteis esta mañana bajo vuestra ventana a un charlatán? ¡Bajo su cara pintada mi corazón latía por vos! Cual nuevo Proteo azul, mi cara y mi cuerpo tomaron todos los aspectos para adoraros.

CELIA
826¡Señor! ¡Piedad!

VOLPONE
830No, no os escapéis. ¿Me creéis todavía decrépito y enfermo? ¡No lo creáis! ¡Estoy fuerte, sano y dispuesto a amaros! ¿Recordáis aquella comedia en que para diversión del gran Valois hice de Antinous? ¡Hoy me siento tan fuerte como entonces! ¡Venid, Celia, mientras es tiempo todavía! La vida no es eterna. El sol que hoy ha salido se pondrá para volver a nacer mañana, pero nuestra vida llegará a la noche eterna. Fama y honor son dos juguetes. ¿Por qué no satisfacer nuestros deseos?

CELIA
834Un rayo de horror ilumina mi faz llena de oprobio.

VOLPONE
837¿Por qué desfallecéis, Celia? En lugar de vuestro repugnante marido halláis un fervoroso amante; usad vuestra ventura con discreción y placer. Ved este hilo de perlas, cada una de ellas es más bella que las que disolvió en vinagre la inmortal reina de Egipto; ved este carbunclo, dos de ellos podrían servir de ojos a San Marcos. Mirad este diamante, pudo haberlo usado Lollia Paulina cuando se presentó ante su pueblo cubierta por las joyas que había robado en la provincia. Tomad todo esto y usadlo, ¡vuestro es! ¡Ved estos zarcillos! ¡admirad esta piedra que por sí sola vale un patrimonio! En vuestra mesa habrá los más raros manjares, os ofreceré sesos de loro y lenguas de ruiseñores, cabezas de pavo real; si el ave fénix pudiese obtenerse, ella figuraría en vuestra mesa como plato favorito.

CELIA
841Señor, sólo una mente dada a los placeres puede impresionarse por estas delicias; pero quien como yo no posee sino su inocencia y perdida ésta nada le restaría, no puede dejarse tentar por vuestras ofertas.

VOLPONE
845Esta es la virtud de los pobres, Celia, pero si sois prudente, oídme. Vuestro baño será de jugo de nardos, de rosas y violetas y de leche de unicornio; vuestra bebida, vinos de Creta mezclados con oro y ámbar; mi enano bailará para vos y mi eunuco cantará. Representaremos los cuentos de Ovidio, vos seréis Europa y yo Júpiter; yo seré Marte y vos Erycine y agotaremos las fábulas de los Dioses. Nuestra vida se inspirará en las de los héroes famosos; en la de la cortesana francesa; en la nobleza de la toscana; en la orgullosa beldad española; en la persa esclavizada, barragana del Gran Señor; en la del ardiente negro y el ruso helado. Dejad que os ame, Celia, bajo todos estos aspectos; yo os adoraré y nuestras almas vagabundas agotadas por todos los placeres saldrán de nuestros labios entre palabras de amor.

CELIA
849Si tenéis oídos para oír; si tenéis ojos para ver; si vuestro corazón puede impresionarse o hay todavía algo en vos que no haya perdido el sentido humano; si todavía podéis ser tocado por la gracia celeste de los santos; ¡dejadme salir! si no, ¡tened piedad de mí y matadme! No soy sino una pobre criatura traicionada por alguien cuya villanía jamás olvidaré. Y si aun esta gracia queréis negarme, señor, saciad vuestra cólera antes que vuestra lujuria y destruid este desgraciado error de la naturaleza que llamáis mi belleza. Desollad mi cara o arrancadme los ojos para calmar vuestro furor. Pensad que mis manos pueden ser pasto de la lepra, reflexionad sobre cuanto pueda afearme, pero respetad mi honor, y el resto de mi vida rogaré por vos de rodillas y mil veces por hora haré votos por la salvación de vuestra alma.

VOLPONE
851¿Me creéis acaso frío e impotente? ¿No sabéis que puedo forzaros? Si no bastan las súplicas y las promesas usaré de la fuerza, puesto que me obligáis a ello...

(Se arroja sobre ella.)

CELIA
857¡Oh, justo cielo! ¡Auxilio!

BONARIO
860 (Sale de su escondite, espada en mano.) ¡Basta ya, viejo libidinoso! Respetad esta dama o morís por mi mano, viejo impostor. En este mismo antro de vuestra maldad y de vuestra idolatría he de castigaros. Salid, señora, dejad esta caverna de villanía; nada tenéis que temer; seguidme y dejemos aquí este hombre esperando la hora de su castigo.

(Salen Celia y Bonario.)

VOLPONE
865¡Cae sobre mí, techo de mi casa, y sepúltame en ruinas! ¡Que sea mi tumba lo que fué mi guarida! ¡Estoy desenmascarado, destruido, condenado a la miseria y a la infamia! (Entra Mosca herido, sangrando.) ¿Qué te pasa, Mosca, estás herido?

MOSCA
875¿Qué será de mí, oh cielos, el más desgraciado de los hombres? ¿Por qué no me ensartó su espada por el ombligo? ¿Cómo ver a mi amo, mis esperanzas y mi espíritu destrozados por mi error?

VOLPONE
878¡Desgraciado sino, Mosca!

MOSCA
882¡Calamidad de mis locuras, señor!

VOLPONE
885¡Heme en la miseria por tu culpa, Mosca!

MOSCA
889¿Hay mayor miseria que la mía? ¿Quién pudo pensar que oiría lo que oyó?

VOLPONE
893¿Qué podemos hacer, Mosca?

MOSCA
896No lo sé, señor. Si mi corazón pudiese expiar mi desgracia me lo arrancaría del pecho. ¿Queréis ahorcarme, o cortarme el pescuezo? ¡Hacedlo, señor! Muramos como romanos, ya que vivimos como griegos.

VOLPONE
899 (Llaman a la puerta.) ¿Quién va? ¿Quién es? Oigo los pasos de los esbirros. ¡Vienen a apresarme! La espada se cierne sobre mi cabeza...

MOSCA
902A vuestro lecho, señor. ¡Acaso no esté todo perdido! (Volpone se acuesta.) ¿Qué nos reserva el destino? (Entra Corbaccio.) ¡Señor Corbaccio!

CORBACCIO
913¿Qué ha pasado, Mosca? ¿Qué ocurre?

MOSCA
915¡Vuestro hijo, señor! ¡Se enteró de vuestro testamento nombrando heredero al señor Volpone, entró aquí espada en mano, buscando por todas partes, llamándoos padre desnaturalizado y jurando vuestra muerte!

CORBACCIO
918¡A mí!

MOSCA
921¡Y a mí, señor!

CORBACCIO
925¡Esto lo deshereda definitivamente! He aquí mi testamento.

MOSCA
928Bien merecido lo tiene, señor.

CORBACCIO
932Todo está en regla. Y, ahora, no olvidéis vuestras promesas...

(Entra Voltore sin ser visto.)

MOSCA
937¿Cómo puedo olvidarlas? No tengo sino a vos... Mi vida os pertenece.

CORBACCIO
940¿Y cómo está vuestro amo? ¿Creéis que morirá pronto?

MOSCA
944No llegará a fin de mayo.

CORBACCIO
948Y no creéis que un dracma...

MOSCA
952¡Oh, no! ¿Para qué...?

CORBACCIO
956Sí, claro, tenéis razón. No es que os lo pida...

VOLTORE
960 (Adelantando.) ¡Sois un granuja, según veo!

MOSCA
964 (Al ver a Voltore, alarmado y para sí.) ¡Oh! ¡El señor Voltore! ¿Me habrá oído?

VOLTORE
968¡Parásito! ¡Señor Voltore! ¡Sed bienvenido!

VOLTORE
973¡Ah, granuja! ¡He descubierto tus tretas! ¿Conque eres suyo, verdad? ¿Y mío también, no?

MOSCA
977¿Cómo? ¿Yo?

VOLTORE
980¡Tú, granuja! ¿Qué canallada es esta del testamento?

MOSCA
983Callaos, una conspiración a favor vuestro...

VOLTORE
986¡Granuja! ¡No quieras engañarme, te conozco!

MOSCA
989¿No oísteis vos mismo...?

VOLTORE
992Sí. ¡Oí decir a Corbaccio que había hecho a tu amo su heredero!

MOSCA
994Lo hice en vuestro interés. Con la esperanza...

VOLTORE
998Y, naturalmente, tu amo debía pagarle con la recíproca...

MOSCA
1000Por vuestro bien, señor. Empecé por decírselo a su hijo, lo traje aquí, donde pudiese oír y ver el documento, con la esperanza de que al ver lo desnaturalizado del acto y saberse desheredado por su padre se lanzaría a alguna violencia cayendo sobre él todo el peso de la ley, encontrándoos vos entonces con la doble esperanza; ya sabéis que la verdad ha sido siempre mi esencia. Mi única ambición era procuraros la fortuna de estas dos ruinas sepulcrales.

VOLTORE
1003Ya comprendo, Mosca. Gracias.

MOSCA
1006Tened paciencia, señor, y escuchad lo ocurrido.

VOLTORE
1010¿Cómo? ¿Qué ocurrió?

MOSCA
1013Lo más desgraciado. Mientras esperábamos al viejo cuervo, vino aquí la esposa de Corvino, mandada por su marido...

VOLTORE
1017¿Con un regalo...?

MOSCA
1021No, señor. A visitarlo. Y habiendo permanecido largo rato, el joven Bonario se impacientó, salió de su escondite, cogió la dama, me hirió a mí y le hizo jurar, bajo amenaza de muerte, que declararía que mi amo había querido violentarla. ¡Ya veis cuán absurdo! Y con este pretexto ha ido a acusar a su padre, a difamar a mi patrón, a difamaros a vos...

VOLTORE
1025¿Dónde está Corvino? Mandadlo a buscar en seguida.

MOSCA
1028Voy en busca de él.

VOLTORE
1031Llevadlo al Escrutinio.

MOSCA
1034Bien, señor.

VOLTORE
1036¡Hay que parar todo esto!

MOSCA
1039¡Cuán noble sois, señor! ¡Ya veis que trabajaba por vuestro bien, pero el destino puede a veces cien veces más que el saber de cien doctores!

CORBACCIO
1041 (Que ha tratado de oír.) ¿Qué estáis hablando?

VOLTORE
1043¿Queréis hacer el favor de venir conmigo, señor?

(Sale Corbaccio, seguido de Voltore.)

MOSCA
1045¡Señor! ¡Todavía hay esperanzas!

VOLPONE
1047 (Saltando del lecho.) ¡Hay que andar con tiento, Mosca! ¡El cielo bendiga tus proyectos!

(Salen.)
FIN DEL TERCER ACTO

ACTO CUARTO

ESCENA I

UNA CALLE DE VENECIA
Entran Sir Politick Would-Be y Peregrino

SIR POLITICK
5¡Ya os he dicho, señor, que había una manera de juzgar el valor de la observación! Os diré, ahora, puesto que nos hemos reunido en esta alta ciudad de Venecia, el resultado de mis observaciones sobre vos, como eterno viajero. Naturalmente, no hablaré de vuestras frases ni de vuestras ropas, porque son muy viejas.

PEREGRINO
7Las tengo mejores...

SIR POLITICK
10Perdonad, me refiero como tema...

PEREGRINO
14Seguid, os lo ruego. ¡Jamás dudé de vuestro ingenio!

SIR POLITICK
19Por vuestro aspecto os creo capaz de guardar un secreto, aun de vuestro padre y no divulgarlo; sabéis escoger vuestras amistades y vuestras palabras, aun cuando no digáis nunca una palabra de verdad...

PEREGRINO
24¿Cómo?

SIR POLITICK
29A los forasteros, que son la mayoría con quien habláis, aun cuando también tenéis para ellos trucos y engaños incesantes. Tenéis poca religión, pero os admiráis de la abundancia de ellas; por lo demás, protestáis de todas las leyes de la tierra, cuando os son adversas. Nicolás Maquiavelo tenía una mentalidad semejante. Pero deberíais aprender el uso de vuestro tenedor de plata y de vuestro vaso de metal, cosas muy importantes para un italiano; y saber a la hora en que podéis comer vuestros higos y melones.

PEREGRINO
34¿Creéis esto importante?

SIR POLITICK
39Aquí sí. ¡De una importancia absurda! En las catorce semanas que llevo en esta ciudad he profundizado las costumbres. Hoy me creen ciudadano de Venecia. Conozco tan bien las formas de la vida...

PEREGRINO
44[Aparte.] ¡Será lo único que conoce!

SIR POLITICK
48He encargado a los judíos que me amueblen una casa. Si pudiese encontrar un hombre digno de mi confianza... un solo hombre... lo haría en poco tiempo...

PEREGRINO
52¿Qué? ¿Qué, señor?

SIR POLITICK
56Rico. ¡Inmensamente rico! ¡No tendría que preocuparse nunca más de nada!

PEREGRINO
60¿Y cómo lo haríais?

SIR POLITICK
65Con algunos proyectos que tengo y que me está vedado revelar.

PEREGRINO
70[Aparte.] Si tuviera que apostar, apostaría a que me los dice.

SIR POLITICK
73Uno de ellos, y éste no me importa divulgarlo, es suministrar durante tres años arenques ahumados al gobierno veneciano, procedentes de Rotterdam, donde tengo un corresponsal. Aquí tengo una carta de otro corresponsal sobre este mismo asunto. No pudo firmarla, pero aquí está su sello.

PEREGRINO
77¿Es almacenista?

SIR POLITICK
81No. Es fabricante de quesos. Aquí hay dos más con quienes trato el mismo asunto. Vienen en un barco en el que van tres hombres y un muchacho. Puede hacer tres viajes al año. Con uno salvo el negocio, con dos me enriquezco, pero esto es sólo en el caso de que falle mi principal negocio.

PEREGRINO
86¿Tenéis, pues, otros?

SIR POLITICK
91Me daría vergüenza de respirar el aire sutil de esta ciudad si no tuviese mil aspiraciones. Donde voy me gusta ser considerado, y mis horas libres las dedico a madurar nuevos proyectos. Es lo que yo llamo “mis precauciones”. Y cuento con la última para pedir una pensión al Gran Consejo. Aquí tengo mis notas... (Buscando en sus bolsillos.) pero antes debéis jurarme por vuestro honor no revelar ni una palabra... ¿Pero, dónde tengo los papeles?

PEREGRINO
99Pero, os acordaréis...

SIR POLITICK
103El primero, es referente a los estuches para la yesca. Ya sabéis que no hay ciudadano que no lo tenga en casa. ¡Pero, suponed que vos, o yo, u otro cualquiera, poco adicto al Estado, penetra en el Arsenal con este peligroso objeto de espionaje! Pues bien, ¡yo propongo al Estado que sólo verdaderos patriotas puedan disponer de este adminículo!

PEREGRINO
107¡Admirable!

SIR POLITICK
110El segundo es más ingenioso todavía. Consiste en averiguar si un barco que llega de Siria o de otro puerto sospechoso de Levante, está o no contaminado de epidemia. Ya sabéis que a menudo se pasan cuarenta o cincuenta días en el Lazareto para averiguarlo; yo con mi sistema aclaro la duda en una hora y evito la pérdida de tiempo y de dinero al comerciante.

PEREGRINO
114¿De veras?

SIR POLITICK
118O de lo contrario, pierdo mi trabajo.

PEREGRINO
123¡Sensible pérdida!

SIR POLITICK
127¿Imagináis? Además, me costaría en cebollas... ¡pues unas treinta libras!

PEREGRINO
132¡Lo cual representa una libra esterlina! ¿Y cómo operáis?

SIR POLITICK
136Coloco en primer lugar mi barco entre dos muros de ladrillo provistos por el Estado. Sobre uno extiendo un encerado, sobre el que fijo mis cebollas partidas por la mitad. El otro está lleno de agujeros, por cada uno de los cuales asoma las narices un fuelle. La fuerza del agua mueve los fuelles, cosa fácil de conseguir y sólo hay que esperar el resultado. Las cebollas atraen naturalmente la infección y los fuelles al mandar su soplo sobre ellas muestran el contagio si se ennegrecen, o permanecen del mismo color si no hay infección. ¡Ahora que os lo he explicado ya veis que no es nada!

PEREGRINO
141¡Tenéis razón!

SIR POLITICK
145¡Lástima que no tenga mis papeles!

PEREGRINO
148¡Más lo lamento yo! ¡Sois muy ingenioso!

SIR POLITICK
151 (Saca unos papeles del bolsillo.) Si yo fuese falso, o quisiese obrar como tal, os podría demostrar como podría vender ese Estado al turco, pese a sus galeones y a sus...

PEREGRINO
153Por favor, sir...

SIR POLITICK
156No los encuentro.

PEREGRINO
161Temí que fuesen estos...

SIR POLITICK
166No. Este es mi diario, en el que apunto mis acciones del día.

PEREGRINO
171¿Me permitís leerlo? (Leyéndolo.) Pero ¿qué es esto? “Una rata ha roído mi portaespuelas, pero he puesto uno nuevo y he salido después de haber arrojado tres habichuelas por el umbral como conjuro. He comprado dos mondadientes, uno de los cuales se ha roto durante una discusión con un holandés, sobre raggion di stato. Después he gastado un moccinigo en remendar mis medias de seda. En el camino he regateado una sardina y he orinado en la Plaza San Marcos.” ¡Pero esto son notas políticas!

SIR POLITICK
178No desprecio ningún acto de mi vida, especialmente los que anoto.

PEREGRINO
183¡Creed que hacéis bien!

SIR POLITICK
187Seguid leyendo.

(Entran unos detrás de otros Lady Politick Would-Be, Nano y las dos Doncellas.)

LADY
194¿Dónde estará mi extraviado esposo? ¡En alguna mala casa...! ¡Su cabeza me da más quehaceres de lo que vale! ¿Dónde estará?

DONCELLA 1.ª
198¡Allá lo veo, señora!

LADY
202¿Dónde?

DONCELLA 2.ª
207Allá abajo, con un joven.

LADY
210¡La cortesana disfrazada de hombre! Debo velar por su reputación, puesto que él la desmerece.

SIR POLITICK
214¡Mi mujer!

PEREGRINO
218¿Vuestra mujer?

SIR POLITICK
222¡La misma! Debéis conocerla. Pese a que sea mi esposa es un modelo por sus méritos, su elegancia y su conducta; por su belleza podría compararla...

PEREGRINO
227¡No escatimáis sus elogios!

SIR POLITICK
230Y en cuanto a sus discursos...

PEREGRINO
235Es de suponer, siendo vuestra esposa...

SIR POLITICK
240 (Presentando a Peregrino.) Señora, aquí os presento este caballo que desea ponerse a vuestros pies. Parece joven, pero...

LADY
244No lo es. Pero ¿dónde va con este traje?

SIR POLITICK
248¿Qué queréis decir?

LADY
253Oídme. Siempre hubiera creído que el respeto de vuestro nombre no os hubiera sido más precioso; hubiera esperado que no hubieseis mancillado tan cruelmente vuestro honor, vuestra gravedad y vuestro rango; pero veo que hoy los caballeros ponen muy poco celo en la observancia de los juramentos hechos a las damas, especialmente en los hechos a las propias esposas...

SIR POLITICK
258¡Señora! ¡Por mis espuelas, símbolo de mi rango, que no os comprendo!

LADY
263Bien. En todo caso, esto debe quedar entre nosotros. Una palabra, ¿permitís? (A Peregrino.) Sería repugnante dar publicidad al cortejo con una noble dama o hacer en público escenas de violencia; pero todavía me parece peor que mi marido se exhiba con una persona como vos, cuya rusticidad y falta de recato me impiden detallarla; y no obstante, esto es lo que merezco por parte de Sir Politick Would-Be, quien, a pesar de tener una esposa como yo, bella e inteligente, considera que puede ultrajarme paseándose con una vulgar criatura como vos. En mi juicio esto puede considerarse como un solecismo a nuestro sexo y una ofensa a las buenas costumbres.

PEREGRINO
271Pero, ¿qué estáis disparatando?

SIR POLITICK
276¡Señora! ¡Volved en vos, os lo ruego!

LADY
281¡Jamás, caballero! ¡Puesto que osáis provocarme con vuestra impudencia y vuestra mofa! ¡Con vuestra sirena terrestre, vuestro sporus o vuestro hermafrodita!

PEREGRINO
286Pero ¿qué es esto? ¡Furias poéticas y tempestades históricas!

SIR POLITICK
291¡Señora, escuchad! ¡Este caballero es un valor en nuestro país!

LADY
295¡Será de vuestro Whitefriars! ¡Me sonrojo y me avergüenzo por vos de que os rebajéis a ser el dueño de una baja prostituta, de una mujer diabólica en busca de macho!

SIR POLITICK
300¡Señora! Vuestro lenguaje es inadmisible y me retiro. Adieu.

(Sale.)

LADY
309¡Tomadlo así si queréis! ¡Pero para vuestra concupiscencia carnavalesca guardo yo la venganza que merecéis!

PEREGRINO
313¿Os ocurre esto muy a menudo? ¿Es esta la muestra de vuestro ingenio? ¿Queréis explicarme por qué si el Caballero vuestro esposo se ha dignado invitarme a su casa, le obligáis así a salir de estampía?

LADY
318¡No tratéis de escapar a mi venganza!

PEREGRINO
322¿También contra mí queréis vengaros? Me dijo vuestro esposo que erais muy bella y efectivamente lo sois, pero... ¡esperad! ¡Vuestra nariz está torcida hacia este lado!

LADY
327¡Esta impertinencia es inaguantable!

(Entra Mosca.)

MOSCA
335¿Qué os ocurre, señora?

LADY
340Si el Senado no me da razón recursaré su sentencia ante toda la aristocracia.

MOSCA
345¿Quién os ofendió, señora?

LADY
349¿Quién pudo ser? ¡La ramera de quien me hablasteis y que aquí he desenmascarado!

MOSCA
354¿Cómo? ¿Pero qué dice Vuestra Señoría? La criatura de quien os hablé está ahora detenida en el Senado. Podéis verla...

LADY
359¿Dónde?

MOSCA
364Yo os acompañaré hasta ella. A este joven señor le vi desembarcar esta mañana en el puerto.

LADY
369¿Es posible? ¿Cómo pudo mi juicio divagar hasta tal punto? Señor, debo confesar mi error y me sonrojo implorando vuestro perdón.

PEREGRINO
373¡Otro cambio!

LADY
376¡Espero no tendréis la maldad de recordar la obcecación de una noble dama! Si os quedáis en Venecia os ruego dispongáis de mí.

MOSCA
381¿Queréis seguirme, señora?

LADY
385Disponed de mí, señor. Cuanto más a menudo vengáis a verme, mejor me probaréis que habéis olvidado vuestra ofensa.

(Salen Lady Would-Be, Mosca, Nano y las dos Doncellas.)

PEREGRINO
393¡Qué raro es todo esto! ¿Sir Politick Would-Be? ¡No! ¡Sir Politick Alcahuete! ¡Andad precavido, Sir Pol! ¡Buen encuentro me habéis procurado! ¡Veremos, veremos... cuidado con vuestra frente...!

ESCENA II

LA SALA LLAMADA DEL ESCRUTINIO EN EL PALACIO DEL SENADO
Entran Voltore, Corbaccio, Corvino y Mosca

VOLTORE
410Bien. Así ya sabéis cómo llevar el asunto. Es cuestión de constancia.

MOSCA
414Constancia en la mentira. ¿Todo el mundo conoce su papel?

CORVINO
419Sí.

MOSCA
424Entonces no hay nada que temer.

CORVINO
429¿Sabe el abogado la verdad?

MOSCA
433No temáis. He inventado una historia que salva vuestra reputación. Estad tranquilo.

CORVINO
437¿Y qué vamos a hacer ahora?

MOSCA
440¡Qué hemos hecho, diréis! (Señalando a Corbaccio.) A éste venderlo como momia. Ya está medio apolillado. (Dirigiéndose a Voltore.) ¿No os hace gracia ver a este búfalo moviendo la cabeza? (A Corbaccio.) ¡Vos seréis aquí el único a quien aprovechará la cosecha! ¡No saben con quién están jugando!

CORBACCIO
454La paz sea contigo.

MOSCA
459 (A Corvino.) ¡Pero vos os la comeréis! (A Voltore.) ¡Señor! ¡Que Mercurio inspire vuestra lengua! Con el ímpetu de Hércules sed convincente y derribad a vuestros adversarios.

VOLTORE
467¡Aquí vienen!

MOSCA
472Tengo otro testigo; si es necesario lo traeré.

VOLTORE
477¿Quién es?

MOSCA
482¡Una dama, señor!

(Entran los abogados y se sientan. Les siguen Bonario, Celia, el Juez, Alguaciles, Guardias, etc.)

ABOGADO 1.º
490¡Jamás vio el Senado un caso parecido!

ABOGADO 2.º
495Es realmente sorprendente. La fama de esta señora es intachable. ¡Es tan joven!

ABOGADO 3.º
500¿Están aquí todas las personas citadas?

JUEZ
504Menos Volpone, el magnífico.

ABOGADO 1.º
508¿Por qué no está aquí?

MOSCA
512¡Con la venia de vuestras señorías, está tan débil, tan agotado! Aquí está su abogado para representarlo.

ABOGADO 4.º
517¿Quién sois vos?

MOSCA
522Su servidor.

BONARIO
527¡Su parásito! ¡Su granuja! ¡Su alcahuete! ¡Ruego al Tribunal le obligue a presentarse para que pueda juzgar de sus infames posturas!

VOLTORE
532¡Por mi fe y mi honor y por el respeto que debo a vuestras señorías! No está en estado de comparecer.

ABOGADO 2.º
536¡Que venga a pesar de todo!

ABOGADO 3.º
539¡Queremos verle!

ABOGADO 4.º
541Mandadlo a buscar.

VOLTORE
544Que vuestras señorías sean complacidas. (Hace un signo y salen dos alguaciles.) Su presencia, señores, inspirará más lástima que indignación. Plazca al Tribunal entretanto oírme; sabemos esta Sala desprovista de prejuicios y por esto le dirijo este ruego, ya que no tenemos razón de temer que la verdad perjudique nuestra causa.

ABOGADO 3.º
553Podéis hablar libremente.

VOLTORE
557Sabed, pues, honorables señorías, que mi deber me exige escandalizar vuestros oídos exponiendo el más extraordinario caso de impudencia y descaro que la viciosa naturaleza haya traído aquí para vergüenza y oprobio del Estado de Venecia. Esta depravada mujer, cuyas lágrimas son tan falsas como su mirada, ha sido durante largo tiempo la concubina de este lascivo joven que aquí veis. Y no hablo, honorables señorías, de sospechas, sino de certidumbres, puesto que en ello fueron sorprendidos por el magnánimo marido, y por él generosamente perdonados. Y esta generosidad es precisamente la causa de que hoy traiga ante este Tribunal al más inocente y desgraciado de los hombres de cuya bondad jamás nadie pudo dudar, y a quien, en lugar de reconocimiento se consagra odio y rencor. ¡Vean, pues, vuestras señorías, la malicia y la rabia diabólica con que se pretende disfrazar un crimen! ¡Y es tal la maldad de este depravado joven que su propio padre, indignado por su repugnante proceder y sus cotidianas infamias, llegó a decidir desheredarlo!

ABOGADO 1.º
561¡Todo esto me parece bastante extraño!

ABOGADO 2.º
565Bonario tuvo siempre fama de noble y honrado.

VOLTORE
569¡Esto hace más peligrosa su maldad y su malicia, puesto que se esconde bajo la máscara de la virtud! Pues, como os decía, habiendo tomado su padre esta justa resolución, fue, ignoramos como, traicionado. Este parricida, mejor calificación no puede hallarse, habiendo tramado que su amante se hallase en casa de Volpone, que era quien había sido elegido como heredero, penetró en ella y buscó a su padre. ¿Y con qué propósito pudo, honorables señorías, un tal hijo buscar a su padre? ¡Tiemblo señores al pensarlo! ¡Sólo podía buscarlo para cometer una felonía! ¡Para asesinarlo! Pero quiso la Providencia que el crimen fuese evitado por la feliz ausencia del señor Corbaccio, y entonces, ¿qué hizo? ¡No, honorables señorías, no dudéis de sus malvados intenciones! ¡Tomad acta de ellas! ¡Horrorizaos de su maldad! Se arrojó sobre el viejo Volpone que yacía en su lecho sin conocimiento desde hacía más de tres años, lo arrojó al suelo desnudo, hirió a su servidor en la cara, y con su concubina decidieron entorpecer el proyecto de su padre difamando al viejo noble y redimirse ellos arrojando el estigma sobre el hombre ante quien con sonrojo deberían agradecer haber conservado la vida.

ABOGADO 1.º
573¿Qué pruebas tenéis de todo esto?

BONARIO
577¡Honorables señores, os ruego no deis crédito a una sola palabra de la lengua mercenaria de este hombre!

ABOGADO 2.º
581Seguid adelante.

BONARIO
584¡Su alma y su lengua están a sueldo!

ABOGADO 2.º
588¡No ofendáis la Magistratura!

BONARIO
593¡Por dos cequíes pleitearía contra el Creador!

ABOGADO 1.º
596¡Os estáis propasando!

VOLTORE
599¡No, no, dejadle! ¿Cómo va a respetar a su acusador quien no respeta a su padre?

ABOGADO 1.º
604Bien, bien, pero aportad vuestras pruebas.

CELIA
607¡Dios mío! ¿Por qué me dejáis vivir?

VOLTORE
611¡Señor Corbaccio!

(Corbaccio adelanta hacia el Tribunal.)

ABOGADO 4.º
617¿Quién es?

ABOGADO 2.º
621El padre.

ABOGADO 1.º
624¿Ha prestado juramento?

JUEZ
629Sí.

CORBACCIO
634¿Qué debo hacer ahora?

JUEZ
638Se os pide testimonio.

CORBACCIO
643¿Hablar del granuja de mi hijo? ¡Antes la tierra habrá enmudecido mi boca! ¡Mi corazón se niega a reconocerlo; reniego de él!

ABOGADO 1.º
647¿Por qué?

CORBACCIO
651¡Por razones de naturaleza! ¡Es ajeno a mi sangre!

BONARIO
655¿Por qué decís eso?

CORBACCIO
659¡No quiero oíros, monstruo humano, cerdo, lobo, parricida! ¡Callaos, víbora!

BONARIO
664Señores, permitidme que me siente. ¡Prefiero ver mi inocencia mancillada que desobedecer a mi padre!

(Corbaccio se retira de la barra)

VOLTORE
672¡Señor Corvino!

ABOGADO 1.º
677¿Quién es ése?

ABOGADO 3.º
682El marido...

ABOGADO 2.º
687¿Ha prestado juramento?

JUEZ
692Sí.

ABOGADO 1.º
696Hablad.

CORVINO
701¡Esta mujer, con perdón de vuestras señorías, es una prostituta de las peores costumbres; es peor que una cortesana!

JUEZ
706¡Guardad respeto al Tribunal!

CORVINO
711¡Relincha como una yegua en celo!

JUEZ
715¡Os he pedido respeto!

CORVINO
720Lo tendré, honorable señor. ¡Pero, es que no puedo creer mis ojos al verla en esta lujosa sala, frente a este lustroso cedro y a la magnificencia de vuestras señorías, acompañada de su acicalado galán! ¡Pero hay pruebas, y ellas darán veracidad a esta historia!

MOSCA
725 (En voz baja.) Muy bien, muy bien.

CORVINO
730 (A Mosca.) ¿No creéis que lo que hacemos es vergonzoso?

MOSCA
734¡En absoluto!

CORVINO
739¡No dudo que el Tribunal sabrá condenarlos; como buen católico llego a creer que es más demonio que mujer!

ABOGADO 3.º
744¡Me molesta este hombre!

ABOGADO 1.º
748Echadlo de aquí.

ABOGADO 2.º
753 (Celia se desmaya.) ¡Mirad la mujer!

CORVINO
756¡Qué bien finge!

ABOGADO 1.º
760Sacadla al aire.

ABOGADO 3.º
765 (A Mosca.) ¿Qué tenéis que decir?

MOSCA
769Mi herida, honorables señorías, hablará por mí. La recibí al avanzar en auxilio de mi amo, cuando este energúmeno se abalanzó sobre él al no encontrar a su padre, mientras esta dama daba los gritos que tan bien le habían enseñado. ¡Y pretendía que mi pobre señor quería violarla!

BONARIO
773¡Qué escandalosa impudencia! Señores...

JUEZ
777Silencio. Aquí todo el mundo puede hablar libremente.

ABOGADO 1.º
781¡Me parece que todo esto es una impostura!

ABOGADO 2.º
785Esta mujer tiene un aspecto demasiado honesto.

VOLTORE
788Que su ficción no engañe a vuestro juicio. Pocos días hace que se paseaba públicamente con un caballero extranjero, besándose apasionadamente... ¡Este hombre los vio! ¡En público y en una góndola!

MOSCA
791Aquí está la dama que los vio también. Y los persiguió por salvar el prestigio del Caballero, su marido.

ABOGADO 4.º
795Que entre la dama.

(Sale Mosca.)

ABOGADO 2.º
802¡Todo esto es muy extraño!

ABOGADO 3.º
805¡Yo me quedo de piedra!

(Entra MOSCA, precediendo a Lady Would-Be.)

MOSCA
811 (En voz baja.) ¡Decisión, señora!

LADY
814¡Ah, ésta es! (Señalando a Celia) ¡La reconozco! ¡Fuera de aquí, ramera! ¡Tenéis ojos de hiena! ¿Cómo os atrevéis a mirarme a la cara? (Al Tribunal.) Imploro vuestro perdón, honorables señorías. Temo haber olvidado respetar la dignidad del Tribunal...

ABOGADO 1.º
823No, no señora...

LADY
827Acaso haya pecado de exorbitante...

ABOGADO 2.º
831No temáis, no temáis...

LADY
835Os aseguro, señores, que jamás tuve intención de escandalizaros.

ABOGADO 3.º
838Os creemos.

LADY
842¡Claro que lo creéis! Mi educación es lo suficiente refinada para...

ABOGADO 1.º
846¡Lo sabemos, señora; lo sabemos...!

LADY
850...no permitirme ofender vuestro respeto.

ABOGADO 2.º
852Estamos convencidos de ello.

LADY
855¡Debéis estarlo!

JUEZ
858Adelante, señora. ¿Qué testimonio tenéis que garantice vuestra declaración?

BONARIO
861A nosotros nos basta nuestra conciencia.

CELIA
863¡El cielo no abandonará una inocente!

ABOGADO 4.º
866Esto no son testimonios.

BONARIO
869¡No pueden serlo en vuestros Tribunales en los que la multitud, el vocerío y la perfidia triunfan!

JUEZ
872¡Esto es un desacato!

(Traen a Volpone en unas angarillas.)

VOLTORE
879¡Aquí, aquí está el testimonio que con su muda elocuencia hará callar vuestras locuaces lenguas! ¡He aquí, señores, al seductor! ¡He aquí el gran cabalgador de mujeres casadas! ¡El gran impostor! ¡El gran libidinoso! ¿No creéis que estos miembros aspiran al amor? ¿No ansían estos ojos contemplar la belleza de su amante? ¡Ved estas manos! ¿No ansían acaso acariciar senos femeninos? ¿O creéis quizás que finge?

BONARIO
883¡Claro que sí!

VOLTORE
886¿Queréis darle tortura?

BONARIO
890¡Me gustaría probarlo!

VOLTORE
894¡Probadlo con tenazas y hierros candentes! ¡Condenadlo a la estrapada! ¡He oído decir que el tormento cura la gota; dádselo, acaso curaréis sus enfermedades; os aseguro que son tantas las que tiene como adulterios e infidelidades de esta mujer! ¡Oh, ecuánimes señores! ¿Cómo pueden sostenerse semejantes acusaciones? ¿No se delata la infamia y la impostura, a vuestros ojos? ¿Tiene acaso, honorables señorías, este complot la menor verosimilitud? ¿No huele fuertemente a infame maquinación? ¡Os pido clemencia para este desgraciado cuya vida está en peligro por culpa de esta indigna fábula! ¡Y en cuanto a los culpables de esta infame imputación, nada tengo que deciros; ya sabéis que tengo en vuestra justicia la más ciega confianza!

ABOGADO 1.º
897Llevad al señor Volpone a su casa.

ABOGADO 2.º
900Sentimos haberle causado esta molestia.

(Se llevan a Volpone.)

ABOGADO 3.º
904Hemos sido demasiado crédulos.

ABOGADO 1.º
907¡Estos son dos miserables!

ABOGADO 4.º
909¡Mi cabeza estalla!

JUEZ
911Os damos las gracias por haber desenmascarado a los culpables, señor Voltore. El Estado os da las gracias. El Tribunal dictará sentencia.

(Salen los Abogados, Juez, Alguaciles, etc., con Celia y Bonario.)

VOLTORE
916Damos las gracias a vuestras señorías... (Volviéndose a Mosca.) ¿Qué os ha parecido?

MOSCA
922¡Ah, si yo tuviese vuestra lengua de oro! ¡Sería el heredero de todo Venecia! Mis conciudadanos me hubieran erigido ya una estatua en medio de la Plaza San Marcos. (A Corvino.) ¡Id, señor Corvino, id y juzgad por vos mismo de la riqueza de lo que habéis castigado! ¡Habéis hecho bien en declararos vos mismo cornudo!

CORVINO
929Dudo de aquel abogado...

MOSCA
933¡Bah! ¿Qué queréis temer? ¡Podéis estar tranquilo!

CORVINO
935Quizá sí. Confío en ti, Mosca...

(Sale Corvino.)

CORBACCIO
941¡Mosca!

MOSCA
945Ocupémonos ahora de vuestros asuntos.

CORBACCIO
949¿Tienes asuntos...?

MOSCA
953¡Los vuestros!

CORBACCIO
957Ven entonces conmigo y veamos lo que hay. Joyas, platos, monedas, ropas y cortinajes...

MOSCA
961¿Los cordones también? Hay que deducir los gastos del proceso.

CORBACCIO
965Los pagaré yo mismo. Tú serás demasiado pródigo.

MOSCA
969¿Cuánto estáis dispuesto a dar?

CORBACCIO
971¡Dos cequíes serán bastante!

MOSCA
974¡Jamás! ¡Por lo menos, seis!

CORBACCIO
978¡Es demasiado!

MOSCA
981Tened en cuenta, señor, que ha hablado mucho.

CORBACCIO
984Bien, aquí tienes tres...

MOSCA
987Se los daré.

CORBACCIO
990Hazlo. Y aquí tienes esto para ti.

(Sale Corbaccio.)

MOSCA
995¡Por mis benditos huesos! ¿Qué ofensa habrá cometido contra la naturaleza durante su juventud, para llegar a este estado? (A Voltore.) Ya veis cómo me ocupo de vuestros intereses...

VOLTORE
1001Sí, Mosca, sí. Ahora te dejo.

(Sale Voltore.)

MOSCA
1007¡Todo para ti, cuervo! ¡Hasta el infierno! (A Lady Would-Be) Señora, os acompaño a casa.

LADY
1014No, quiero ver a tu amo.

MOSCA
1018No debéis ir; os diré por qué. Mi propósito es influir cerca de mi amo para que reforme su testamento y en agradecimiento al celo que por él habéis mostrado, os ponga en primer lugar en lugar del cuarto o quinto que ocupáis; y si estabais presente podría parecer que lo habéis solicitado... Creedme.

LADY
1022Como queráis, seguiré vuestro consejo...

(Sigue hablando mientras Mosca se aleja.)
FIN DEL CUARTO ACTO

ACTO QUINTO

ESCENA 1

UNA HABITACIÓN EN CASA DE VOLPONE

VOLPONE
1Terminó por fin la farsa y en verdad que me arrepentí de ella. Bien estaba mi ficción, pero temí que se descubriese; más que ficción temí que fuese realidad mi parálisis cuando me dio el calambre en la pierna izquierda; me quedé pálido de dolor y estoy contento de que todo haya terminado bien. Tantos temores imaginarios me han dado enfermedades verdaderas. ¡Bebamos un vaso de buen vino para alejar mis temores!... ¡Hum, hum... me siento mejor! ¿Pero, cómo cesar en mis farsas, Mosca? ¡Debo inventar algún nuevo plan de mi ingenio canallesco! (Bebe de nuevo.) ¡Así! ¡Así! Me siento mejor. ¡La cabeza es la vida, la sangre el tiempo! ¡Mosca!

MOSCA
8¡Cómo estáis, señor? ¿Veis de nuevo la luz del día? ¿Han cesado vuestros temores? El sendero está abierto delante de vos. El mercado está libre nuevamente.

VOLPONE
11¡Exquisito Mosca!

MOSCA
15¿Qué os pareció? ¿Llevábamos bien aprendida la comedia?

VOLPONE
20El plan era sólido y robusto...

MOSCA
25Era imposible sospechar de él.

VOLPONE
30Mi goce fue superior al de la compañía de las mujeres.

MOSCA
35¿No creéis, señor, que aquí debemos detenernos? Hemos llegado a nuestra obra maestra y es peligroso ir más lejos.

VOLPONE
40Quizás sí; tú bien has ganado el premio que buscabas.

MOSCA
45Mi premio fue mofarme del Tribunal.

VOLPONE
49¡Y verter el torrente de tus injurias sobre un inocente! Lo más sorprendente es que no hayan sospechado al hallarse todos reunidos.

MOSCA
53Exceso de luz, ciega, señor. ¡Cada uno de ellos creía burlarse de los demás! ¡Todo estaba para ellos claro, cierto, palpable!

VOLPONE
57¡Fue una invención diabólica!

MOSCA
61Hija de vuestro espíritu. Los mercaderes hablan de sus mercados y los señores de sus cosechas y de sus tierras fecundas, pero no hay en Italia campo que produzca lo que vuestras amistades. ¿Qué os pareció vuestro abogado?

VOLPONE
66¡Admirable! (Imitando a Voltore.) “Mis honorables señorías!”, “¡Mis graves señores!”, “¡La corrección de vuestros honores!”, “¿Qué aspecto de verdad tiene todo esto?”, “¿Puede este proceso prosperar?” ¡Me era difícil aguantar la risa!

MOSCA
74Lo vi. ¡Estabais sudando! ¿No teníais miedo?

VOLPONE
78Estaba más confuso que abatido.

MOSCA
82Os creo, señor. Vuestro abogado sirvió mejor que nadie vuestra causa, acaso en su propio interés, y dio veracidad a vuestro engaño.

VOLPONE
87Tal creo. Pero no le oí más que el final.

MOSCA
92¡Antes hubierais debido oírlo, señor! ¡Si hubieseis visto su gesto, su expresión! ¡Cuánto lujo de imágenes para convencer al Tribunal! ¡Y todo por amor... al arte!

VOLPONE
96De momento no puedo recompensárselo... por lo menos como él quisiera. Pero basta de reposo, Mosca. ¡Hay que inventar una nueva farsa con que burlar su concupiscencia!

MOSCA
100Bien, señor.

VOLPONE
104Llama a Castrone y a Nano.

MOSCA
108 (Entreabriendo la puerta.) ¡Castrone! ¡Nano!

(Entran Castrone y Nano.)

CASTRONE Y NANO
115¡Ecco!

VOLPONE
119¡Id! ¡Corred las calles! ¡Haced saber a toda la ciudad que he muerto! ¡Lloradlo por todos los rincones! Mostraos tristes y decid que es consecuencia de la infame calumnia.

(Salen Castrone y Nano.)

MOSCA
128¿Qué queréis hacer?

VOLPONE
133Pronto vas a ver aquí al cuervo, al buitre y al milano. ¡Van a venir todos volando a picotear mi carroña, a pillar mi guarida, ávidos y llenos de infamia!

MOSCA
137¡Y verán que todo escapa a sus garras!

VOLPONE
142¡Exacto! Ponte mi batín y recíbelos como si fueses mi heredero. Muéstrales mi testamento. Abre esta arquilla. Dame uno en blanco para que lo ponga a tu nombre.

MOSCA
146 (Le da el papel pedido.) ¡Oh, maravilloso ardid!

VOLPONE
149¡Ah, cuando se vean defraudados! ¡Trátales duramente, Mosca! ¡Hazles pagar su villanía! Date prisa, ponte el batín.

MOSCA
152¿Y si pretenden ver el cuerpo?

VOLPONE
154Di que está ya corrompido.

MOSCA
157Diré que apestabais y que fue necesario enterraros rápidamente.

VOLPONE
162Lo que quieras. Aquí está mi testamento. Toma un libro de cuentas, pluma y tinta y siéntate como si estuvieses haciendo el inventario. Yo me esconderé detrás de esta cortina y podré ver y escuchar su infamia y su desesperación.

MOSCA
167 (Disponiéndolo todo.) Vuestro abogado va a quedar atónito.

VOLPONE
172¡Tendrá que retirar su elocuente defensa!

MOSCA
175Y el jorobado “Clarísimo” se curvará más que un cerdo piojoso.

VOLPONE
179¿Y Corvino?

MOSCA
184Imagináoslo mañana puñal en mano recorriendo las calles en busca de la dama que dio falso testimonio.

VOLPONE
188¿La que quiso besarme en el Tribunal, a pesar de mi cara untada y sudorosa?

MOSCA
191La misma. ¡El oro es un medicamento que amortigua los olores ofensivos, reforma lo deformado y lo restaura bellamente como si fuese el mágico cinturón poético! Júpiter no hubiera hallado mejor treta para burlar la guardia de Acrissius. ¡Esto es lo que da al mundo la gracia, la juventud, la belleza!

VOLPONE
195¿Crees que me ama?

MOSCA
199¿Quién? ¿Milady?

VOLPONE
203 (Al oír llamar a la puerta.) Aquí están. ¡Aprisa! ¡Aquí vienen mis aves de rapiña! ¿Cuál habrá sido la más veloz? A tu sitio, Mosca. ¡Siéntete poeta! ¡Tortúrales!

(Se abre la puerta con cautela y entra Voltore.)

VOLTORE
211¿Cómo ha sido eso, Mosca?

MOSCA
215 (Escribiendo.) “Alfombras turcas, nueve”...

VOLTORE
219¿Haciendo el inventarios, eh? ¡Bravo, Mosca!

MOSCA
223“Juegos de cama, dos”...

VOLTORE
228¿Dónde está el testamento? Déjame leerlo por entero.

(Entran dos servidores trayendo a Corbaccio en una silla.)

CORBACCIO
236Aquí, aquí, dejadme e idos a casa.

VOLTORE
241¿A qué vendrá éste a estorbarnos?

MOSCA
245“Dos más en tisú de oro”...

CORBACCIO
249Por fin, Mosca...

MOSCA
254“Ocho de diferentes terciopelos”...

VOLTORE
259Me gusta su meticulosidad...

CORBACCIO
264¿No me oyes, Mosca?

(Entra CORVINO.)

CORVINO
272¡Por fin llegó la hora, Mosca!

VOLPONE
277¡Ya están todos reunidos!

CORVINO
282¿Qué hace aquí este abogado? ¿Y Corbaccio?

CORBACCIO
287¿Qué harán aquí estos intrusos?

(Entra atropelladamente Lady Politick Would-Be.)

LADY
296¡Se rompió el hilo de su existencia, Mosca!

MOSCA
301“Ocho cajas de ropa de hilo”...

VOLPONE
305¡Oh, también la bella Milady!

CORVINO
310Mosca, dame el testamento, pero líbrame antes de estos intrusos.

MOSCA
314“Seis cajas de brocados. Cuatro de damascos”. Aquí está el testamento. (Lo da desdeñosamente por encima de su espalda y sin levantar la vista del papel.) “Cubrecamas y almohadones...”

VOLPONE
323¡Magnífico! ¡Ya empiezan a revolotear sin acordarse de mí! Sus ojos malvados recorren el testamento. ¡Cuánta avidez! Ahí, ahí, ¿dónde están los nombres de los herederos?

MOSCA
328“Diez series completas de tapices...”.

VOLPONE
332¡Ya dan las boqueadas!

VOLTORE
336¡¡Mosca el heredero...!!

CORBACCIO
341¿Qué...?

VOLPONE
346[Aparte.] ¡Mi abogado ha enmudecido! ¡Quedó atónito! ¡Mira el mercader! ¡Está en plena tormenta! Su labio palidece, se desmaya. Milady jura y olvida su alta estirpe. ¡Los ojos vidriosos del viejo Corbaccio están llenos de desesperación!

CORBACCIO
350¡Es imposible! Dejadme leer.

CORVINO
355¡Pero, Mosca! ¿Qué significa esto?

MOSCA
360“Dos arquillas”...

CORVINO
365¿Pero es esto en serio?

MOSCA
370“Dos más de nácar y perlas”...

CORVINO
374¿O te estás burlando de mí?

MOSCA
377“Otra de madreperla”. Estoy muy ocupado. Es una fortuna que ha caído sobre mí... “Otra de ágata”... Jamás hice nada por obtenerla.

LADY
382¿Pero habéis oído esto?

MOSCA
386“Una caja de onix”... Os ruego que os marchéis. ¿No veis que me estorbáis?

LADY
390¿Cómo? ¿Me echáis de esta casa?

MOSCA
394Otro día podré recibiros...

CORVINO
398¿Es este el final de mis esperanzas?

LADY
402Señor, necesito una franca explicación...

MOSCA
406Señora, os ruego abandonéis al instante esta casa. No, no. ¡No desencadenéis tempestades con vuestros lindos ojos! Id a casa y consolad al pobre Caballero, vuestro marido.

(Sale iracunda Lady Would-Be.)

VOLPONE
415¡Magnífico diablo!

CORVINO
420Una palabra, Mosca, por favor.

MOSCA
425¡Señores! ¿No queréis marcharos de aquí? ¿Por qué persistís en quedaros? ¿Qué esperanza os queda? Me conocéis y os conozco. Sé que no hubiera tenido ni un mendrugo si la fortuna hubiese caído en vuestras manos; ya comprenderéis que esto equivale a llamaros granujas en buenos términos. Esta perla era vuestra, diréis; y este diamante, ¿verdad? No lo niego y os lo agradezco. Todo esto os servía para ocultar vuestra maldad. No quiero engañaros y es inútil permanecer por más tiempo aquí. ¡Idos a vuestras guaridas y procurad consolar vuestra melancolía y abandonar las locuras!

(Sale Corvino furioso.)

VOLPONE
434¡Magnífico Mosca! ¡Cómo muestra su villanía!

VOLTORE
438Seguramente los desengaña en mi interés...

CORBACCIO
441Mosca el heredero...

VOLPONE
444Sus cuatro ojos le devoran...

CORBACCIO
447¡Yo burlado, escarnecido! ¡Y por un parásito esclavo! (Amenazándole con su bastón.) ¡Bribón, granuja, me has engañado!

MOSCA
455Sí, señor. ¡Pero cerrad vuestra asquerosa boca o bien os arranco el único diente que os queda! ¿No habéis venido aquí, asquerosa ruina, sobre vuestras tres piernas, con la esperanza del botín? ¿No habéis metido aquí durante tres años vuestras pestilentes narices? ¿No me habéis propuesto envenenar a mi amo? ¿No habéis sido hoy mismo perjuro ante el Tribunal declarando que desheredabais a vuestro hijo? ¡Id enhoramala, moríos o reventad y si osáis graznar una sola palabra os hago arrojar por la ventana por mis criados! ¡Fuera de aquí, podredumbre!

(Sale Corbaccio, tambaleándose.)

VOLPONE
463¡Qué bien se mueve el granuja!

VOLTORE
468Y ahora que estamos solos, Mosca, gracias. He reconocido tu fidelidad. Has sido sincero conmigo.

MOSCA
473 (Volviendo a escribir.) “Una mesa de pórfido”...

VOLTORE
478Déjalo ya. Ya se han ido.

MOSCA
483¿Quién sois vos? ¿Quién os mandó llamar? ¿Qué hacéis aquí? Llorad, gemid, lamento que mi suerte haya destruido el fruto de vuestros rastreros menesteres, pero fue hecho sin mi conocimiento y la voluntad del difunto debe ser respetada. Mi único consuelo es que vos no lo necesitáis. Tenéis el don de vuestra erudición que jamás os abandonará mientras haya hombres y maldad para engendrar litigios. ¡Si yo pudiese dar mi fortuna por poseer la mitad de vuestros talentos! Tened la certeza de que si algún litigio me sobreviniere, lo cual no ocurrirá por ser el caso limpio y claro, no dejaré de usar de vuestra ayuda, y pagar sin discutir vuestros honorarios. Pero, entretanto, sé perfectamente que con el conocimiento que de las leyes tenéis, así como a causa de vuestra rectitud y vuestra conciencia, jamás osaréis codiciar lo mío. Y muchas gracias por vuestro magnífico plato, señor, que es para mí de incalculable valor. ¿Pero, qué os pasa? ¡Tenéis mal semblante! ¿Estáis quizás restreñido? Haríais bien en iros a vuestra casa y purgaros.

(Sale Voltore furioso.)

VOLPONE
491 (Saliendo de su escondite.) ¡A comer lechugas, granujas! ¡Mi ingenioso malvado! ¡Dame un abrazo! Ven, Mosca, ponte mi traje de “Clarísimo” y paséate por las calles. ¡Que te vean, atorméntales! ¡Prosigamos nuestro plan y nuestra venganza! ¿Quién se hubiera perdido este goce?

MOSCA
496¡Dudo de que ellos hayan gozado mucho!

VOLPONE
501Quiero verlos todavía. ¡Necesito un disfraz para encontrarlos en la calle y hablarles! Ojalá pueda vejarlos nuevamente.

MOSCA
505Os ayudaré.

VOLPONE
509¿Cómo?

MOSCA
513Conozco un Commendatore de vuestro aspecto; lo emborracho y os traigo su traje.

VOLPONE
518¡Curioso disfraz, digno de tu cerebro! ¡Ojalá caiga sobre ellos la peste! ¡Así queden todos abrasados!

MOSCA
523¡Cuántas maldiciones, señor!

VOLPONE
528¡La comida de la fiera es mejor cuando está maldita!

ESCENA II

UN HALL EN CASA DE SIR POLITICK WOULD-BE
Entra Peregrino disfrazado y tres Mercaderes

PEREGRINO
542¿Creéis que voy bien disfrazado?

MERCADER 1.º
545Tened la certeza.

MERCADER 2.º
547¡Si lográis hacerlo embarcar será magnífico!

PEREGRINO
551Sólo quiero darle miedo.

MERCADER 3.º
554Hacia Zara o Alepo.

PEREGRINO
558¡Y que relate su aventura en sus interesantes memorias! Y en cuanto a vosotros...

MERCADERES
562 (Saliendo.) Contad con nuestro celo.

(Entra una DONCELLA.)

PEREGRINO
570¡Dios te guarde, bella muchacha! ¿Está en casa Sir Politick?

DONCELLA
574Lo ignoro, señor. Soy doncella de la señora.

PEREGRINO
578Os ruego le digáis que aquí está un mercader que desea hablarle de un asunto urgente.

DONCELLA
582Iré a verlo, señor.

(Sale.)

PEREGRINO
589¡Gracias, bella criatura! ¡Bien sabe el Caballero rodearse!

(La Doncella vuelve a entrar.)

DONCELLA
597Señor. Sir Politick os manda a decir que los asuntos de Estado le absorben por completo en este momento, pero que con sumo placer os recibirá en cualquier otra ocasión.

PEREGRINO
600Decidle que es precisamente para referirle “chismes” de Estado que he venido... (Sale la Doncella.) ¿Qué asuntos de Estado serán los que le ocupan? ¿Pensará en fabricar aquí salchichas de Bolonia sin ingredientes?

(Regresa la Doncella.)

DONCELLA
614Señor, dice Sir Politick, que por vuestra palabra “chisme” ve que no sois hombres de Estado y por lo tanto os ruega le esperéis.

PEREGRINO
618Decidle, que jamás estudié tantas vaciedades ni escuché tantos discursos... pero, callad. ¡Aquí viene!

(Entra Sir Politick.)

SIR POLITICK
625Señor, debo implorar vuestro más generoso perdón. El más lamentable desastre ha ocurrido hoy entre mi mujer y yo y estaba abogando por mi causa e implorando su perdón a fin de rendirle pleitesía, cuando os anunciaron.

PEREGRINO
630Lamento haber sido inoportuno en momentos como éste, pero tenía que veros... ¿Recordáis el joven que visteis esta mañana desembarcar en el puerto?

SIR POLITICK
635¡Ay de mí! ¿Era quizás un fugitivo?

PEREGRINO
639No; pero sí un espía puesto a vuestra vigilancia. Y ha informado al Senado de que tenéis el plan de vender el Estado de Venecia a los turcos.

SIR POLITICK
644¡Ay de mí! Estoy perdido.

PEREGRINO
648Y en estos momentos se está firmando la orden de vuestro arresto y la perquisición de vuestros papeles.

SIR POLITICK
652No poseo papel alguno fuera de mis memorias.

PEREGRINO
656¡Mejor para vos!

SIR POLITICK
660Y algunos ensayos. ¿Qué debo hacer?

PEREGRINO
665Esconderos en un cofre y yo me encargo de mandaros a bordo. (Llaman a la puerta.) ¡Aquí están!

SIR POLITICK
673¡Ay de mí! ¡Estoy perdido, arruinado!

PEREGRINO
678¡Escondeos, pronto, pronto! La tortura os espera. ¡Daos prisa!

SIR POLITICK
683¡Tengo una idea genial!

MERCADER 3.º
688 (Desde fuera.) ¿Sir Politick Would-Be?

MERCADER 2.º
693 (Desde fuera.) ¿Sir Politick Would-Be?

SIR POLITICK
697 (Se echa por el suelo y trata de disimularse debajo de la tortuga.) Jamás podré soportar la tortura. Aquí hay una concha de tortuga que pesqué en los mares de Creta, puedo esconderme debajo de ella con este casquete y estos guantes negros y esperar a que se marchen.

PEREGRINO
702¿A esto le llamáis ingenio?

SIR POLITICK
707Es de mi invención. Os ruego que pidáis a las doncellas de mi mujer que quemen mis papeles.

(Sale Peregrino y entran los tres Mercaderes.)

MERCADER 1.º
716¿Dónde está?

MERCADER 2.º
721¡Tenemos que encontrarlo y lo encontraremos!

MERCADER 3.º
726Se habrá escondido en su despacho.

(Regresa Peregrino.)

MERCADER 1.º
735¿Quién sois, caballero?

PEREGRINO
740Un Mercader que vino a ver esta tortuga...

MERCADER 3.º
745¿Cómo?

MERCADER 2.º
749¡Por San Marcos! ¿Qué clase de animal es éste?

PEREGRINO
754Es un pez.

MERCADER 2.º
757¡Dejaos de bromas!

PEREGRINO
761No bromeo. Podéis golpearlo, subir sobre él, podría arrastrar una carroza!

MERCADER 1.º
766¿Creéis que se puede subir sobre él?

PEREGRINO
770¡Sin duda alguna!

MERCADER 1.º
774¡Probémoslo!

PEREGRINO
778¡Avanza rampando!

MERCADER 3.º
782¡Hacedlo avanzar!

PEREGRINO
786No, le haríais daño.

MERCADER 2.º
789O rampa o le saco las tripas.

MERCADER 1.º
792¡Que avance! ¡Que avance!

PEREGRINO
796 (En voz baja.) Avanzad un poco, os lo ruego.

MERCADER 1.º
799¡Más, más!

MERCADER 3.º
803¡Sí, sí, más!

PEREGRINO
806 (En voz baja.) No tenéis más remedio que avanzar.

MERCADER 1.º
808¡Vamos a ver sus patas! Démosle la vuelta.

MERCADER 3.º
812 (Levantan la concha y aparece Sir Politick.) ¡Lleva ligas!

MERCADER 1.º
815¡Y guantes!

MERCADER 2.º
818¿Es esta vuestra famosa tortuga?

PEREGRINO
821 (Quitándose el disfraz.) Y ahora, Sir Pol, estamos en paz. ¡Puesto que amáis la farsa estaré preparado para vuestra próxima. ¡Lamento el funeral de vuestras famosas memorias!

MERCADER 1.º
824¡Hubierais tenido gran éxito en Fleet Street!

MERCADER 2.º
828¡O en la feria de Smithfield!

PEREGRINO
832¡Hasta la vista, oh la más política de las tortugas!

(Salen Peregrino y los Mercaderes. Entra la Doncella.)

SIR POLITICK
839¿Dónde está la señora? ¿Se ha enterado de algo de esto?

DONCELLA
843Lo ignoro, señor.

SIR POLITICK
847Informáos. Voy a ser la fábula de todas las casas, el tema de las gacetas, el cuento de los marineros y la burla de la ciudad entera.

(Entra la Doncella.)

DONCELLA
853Señor, Milady dice que la melancolía la abate y que desea embarcar inmediatamente...

SIR POLITICK
856Y yo abandono este país para siempre. ¡Llevándome mi casa a cuestas, y escondiendo mi cabeza bajo la concha política!

ESCENA III

LA HABITACIÓN DE VOLPONE
Entran Mosca vestido de Clarísimo y Volpone de Comendatore

VOLPONE
867¿Crees que me le parezco?

MOSCA
870Sois él mismo. Nadie es capaz de reconoceros.

VOLPONE
873Perfectamente.

MOSCA
876¿Y yo?

VOLPONE
880¡Por el cielo! ¡Estás hecho un magnífico Clarísimo! ¡Lástima que no hayas nacido siéndolo!

MOSCA
884[Aparte.] ¡Pues si me quedo así, no estará mal!

VOLPONE
887Voy a ver qué noticias corren por la ciudad. Entretanto, cuida de la casa, Mosca.

MOSCA
891Descuidado, descuidad, cuidaré de ella. (Sale Volpone.) El zorro ha dejado su madriguera y tardará en volver a entrar en ella. ¡Estás en mi mano, pícaro! ¡Vivirás de limosna si no aceptas un arreglo! ¡Veremos ahora quién será el parásito! ¡Castrone! ¡Nano! ¡Andrógino!

(Entran los tres Bufones.)

LOS TRES
903¡Ecco!

MOSCA
905¡Id, tomad este dinero! ¡Gozad y bailad! ¡Llegó mi día! (Salen los tres Bufones.) ¡Tengo las llaves y soy el dueño! Puesto que ha muerto antes de hora, lo enterraré. Soy su heredero y lo seré mientras no parta conmigo. Si heredé su astucia puedo heredar su fortuna. Quien quiso engañar pague su treta. El zorro se cogió en su propia trampa.

ESCENA IV

UNA CALLE DE VENECIA
Entran Corbaccio y Corvino hablando

CORBACCIO
919Dicen que el Tribunal se ha reunido nuevamente.

CORVINO
923Debemos mantener nuestra primera versión si queremos salvar nuestra reputación.

CORBACCIO
926Yo no he inventado nada; mi hijo quería realmente matarme.

CORVINO
930Es cierto, lo había olvidado [Aparte.] Ahora es mío, estoy seguro. (A Corbaccio.) ¿Y vuestro testamento?

(Entra Volpone disfrazado.)

CORBACCIO
938¡Ay! ¡Ahora cae sobre Mosca, puesto que ha muerto su patrón!

VOLPONE
942¡Señor Corbaccio! ¡Señor Corvino! ¡Cuánto gusto en encontraros!

CORVINO
946¿Quién será éste?

VOLPONE
950¡Una gran fortuna cayó sobre vuestra cabeza súbitamente!

CORBACCIO
954¿Dónde...?

VOLPONE
958¡La herencia del viejo Volpone!

CORBACCIO
962¡Canalla!

VOLPONE
966¡No es sano enfurecerse, señor!

CORBACCIO
970¡Largo de aquí, granuja!

VOLPONE
972¿Por qué, señor?

CORBACCIO
975¿Te burlas de nosotros?

VOLPONE
979¡Vos os burláis del mundo, señor! ¿Habéis cambiado ya vuestro testamento?

CORBACCIO
982¡Largo, largo de aquí!

VOLPONE
985 (A Corvino.) ¡Ah, ya comprendo! ¡Vos sois probablemente el beneficiado, señor Corvino! ¡No os vendrá mal además de lo que ya poseíais! ¡Tenéis un carácter admirable, no os envanecéis de vuestra fortuna! ¿Tendréis ahora buena reserva, ¿verdad? ¡Como un cosechero después de la vendimia! ¿Os lo ha dejado todo?

CORVINO
988¡Largo de aquí, desvergonzado!

VOLPONE
991¡Verdad es que vuestra esposa se ha portado dignamente! ¡Pero no tenéis ya ahora por qué inquietaros, vuestra posición es sólida y nadie puede invocar derechos... a parte el señor Corbaccio, naturalmente!

CORVINO
993¡Fuera de aquí, granuja!

VOLPONE
996¡Ah! ¡Ya comprendo! No queréis que se sepa, ¿verdad? Es prudente. Así hacen los buenos jugadores, disimular. Nunca parece que ganen... (Salen furiosos Corbaccio y Corvino.) ¡Ah! Aquí viene mi buitre afilando el pico y husmeando.

(Entra Voltore.)

VOLTORE
1004 (Hablando solo.) ¡Verse estafado por un parásito! ¡Por un esclavo! ¡Por un miserable acostumbrado a mendigar un mendrugo! ¿Qué voy a hacer ahora?

VOLPONE
1008Perdonadme, señor; pero sé que el Tribunal se ocupa de vuestros asuntos... y celebro que la felicidad caiga en tan buenas manos.

VOLTORE
1011¿Quién sois y qué queréis?

VOLPONE
1015¿No sois el heredero del viejo Volpone? Tengo que litigar contra vos. ¿Sabéis aquella casita que figura en la lista de las vuestras, detrás de la Pesquería? Es el más delicioso burdel de Venecia. El me lo había dado antes de que las enfermedades le afligiesen... ¿Qué voy a hacer ahora? ¡Su cuerpo y mi burdel cayeron juntos!

VOLTORE
1019Dejadme en paz. ¡No estoy para charlatanes!

VOLPONE
1023¿Por qué, señor? ¿Qué es eso para vos? ¡Un trozo de candela! No me lo vais a rehusar... Ya sabéis vos que...

VOLTORE
1026¿Qué es lo que sé?

VOLPONE
1029¡Vuestra opulencia, señor! ¡No tiene fin! ¡Que Dios os la aumente!

VOLTORE
1032¡Sinvergüenza! ¡Canalla! ¿Te estás burlando de mí?

(Sale iracundo.)

VOLPONE
1037¡Mi bendición sobre vuestra Excelencia! Ahora a la otra esquina.

ESCENA V

UNA ESQUINA DE LA MISMA CALLE
Entran Corbaccio y Corvino y cruzan a Mosca vestido de Clarísimo

CORBACCIO
1044¡Miradle! Vestido con nuestro traje.

CORVINO
1046¡Si pudiese con mi mirada lanzar balas sobre él!

(Entra Volpone.)

VOLPONE
1048¿Pero es cierto eso del parásito, señores?

CORBACCIO
1049¡Otra vez viene el monstruo a atormentarnos!

VOLPONE
1050¡A fe mía, señor, que lamento ver así vuestra venerable barba escarnecida! ¡Jamás soporté ver un parásito; hasta su olor me ofendía! ¡Había algo en su mirada que parecía una amenaza a la nobleza!

CORBACCIO
1051¡Canalla!

VOLPONE
1052¡En verdad debo decir que me sorprende que un mercader de la astucia del señor Corvino, se haya dejado engañar por un zorro y haya dejado caer el queso!

CORVINO
1053¡Malvado! ¿Creéis que el sitio donde estamos o vuestro maldito casquete os garantiza vuestras insolencias? ¡Venid, acercaos y veréis la paliza que me dignaré daros!

VOLPONE
1054Jamás, señor. ¡Sé muy bien lo que sois desde que en público lo proclamasteis!

CORVINO
1055[Aparte.] ¿Quién será este hombre? (En voz alta.) Oídme. Quisiera hablar con vos...

VOLPONE
1056Otra vez, señor.

CORVINO
1057No, no. ¡Ahora mismo!

VOLPONE
1058¿Cómo queréis que un hombre prudente se ponga delante de un cornudo enfurecido?

(Entra Mosca.)

CORBACCIO
1059¡Otra vez!

VOLPONE
1060 (A Mosca.) ¡A ellos, Mosca, ayúdame!

CORBACCIO
1061¡El aire se infecta cuando respira!

CORVINO
1062¡Dejémosle!

(Salen Corbaccio y Corvino.)

VOLPONE
1063¡Mi basilisco! ¡Aquí tenemos al buitre!

(Entra VOLTORE.)

VOLTORE
1064 (A Mosca.) ¿Conque carne fresca, eh? ¡Ha venido tu verano, pero también vendrá tu invierno!

MOSCA
1065¡Insigne abogado, no os moféis de mí! No salgáis de vuestra dignidad o vais a caer en un solecismo, como dice una noble dama. ¡Deberíais poneros un gorro de noche, no sea que vuestro cerebro estalle!

(Sale MOSCA.)

VOLPONE
1066¿Me dais licencia para castigar al insolente que por primera vez usa buenas ropas?

VOLTORE
1067Este hombre es demasiado familiar...

VOLPONE
1068Lo que os dije es verdad, señor. El Tribunal se ha reunido y una mula que jamás leyó a Justiniano, debe dictar sentencia. ¿No podéis evitar un tal fraude? Estoy seguro de que todo fue una farsa para burlarse de los otros. ¡Vos sois el único heredero!

VOLTORE
1069¿Pero no habéis acabado todavía de atormentarme?

VOLPONE
1070¡No podéis quedar defraudado! ¡Sois docto y opulento y estas dos cualidades os hacen acreedor a la herencia!

ESCENA VI

LA SALA DEL ESCRUTINIO EN EL PALACIO DEL SENADO
Entran los Abogados, Juez, Alguaciles, etc., precediendo a Celia, Bonario, Corbaccio, Corvino.

ABOGADO 1.º
1071¿Están aquí todas las partes?

JUEZ
1072Menos el abogado.

ABOGADO 2.º
1073Aquí viene.

(Entran Voltore y Volpone.)

JUEZ
1074Se abre la sesión.

VOLTORE
1075Ruego al Tribunal excuse mi tardanza.

VOLPONE
1076¿Qué va a hacer ahora?

VOLTORE
1077No sé, honorables señorías, si debo dirigirme primero al Tribunal o a estos pobres inocentes...

CORVINO
1078¡Oh, cielo! ¡Se retracta!

VOLTORE
1079...cuya ecuanimidad he ofendido sin idea ninguna de codicia...

CORVINO
1080¡Está loco!

CORBACCIO
1081¿Qué dice?

CORVINO
1082¡Está poseído del demonio!

VOLTORE
1083...y ante los cuales ahora con plena conciencia me postro implorando humildemente su perdón.

ABOGADO 1.º
1084¡Levantaos!

CELIA
1085¡Oh cielo! ¡Cuán justo eres!

CORVINO
1086 (A Corbaccio.) ¡Seamos constantes! ¡Sólo la osadía puede salvarnos!

ABOGADO 1.º
1087¡Seguid!

VOLTORE
1088¡No hay ninguna idea preconcebida en mí que me obligue a hablar, honorables señorías! Este parásito, este granuja, ha sido el instrumento de esta lamentable maquinación.

ABOGADO 2.º
1089¿Dónde está el parásito? ¡Que lo prendan!

VOLPONE
1090Voy en su busca, señores.

(Sale.)

CORVINO
1091Graves señores. La locura de este hombre que esperaba ser el heredero del viejo Volpone, que hoy ha muerto...

ABOGADO 3.º
1092¿Cómo?

ABOGADO 1.º
1093¿Ha muerto Volpone?

CORVINO
1094Ha muerto, honorables señorías.

BONARIO
1095¡Oh, venganza la mía!

ABOGADO 1.º
1096¿Cuál es entonces el engaño?

VOLTORE
1097Sólo el del parásito.

CORVINO
1098Sólo por envidia habla, porque el servidor hizo lo que él quería hacer. Esta es la verdad, honorables señores. No disculpo al otro, pero también él es culpable.

VOLTORE
1099¡También teníais vos esperanzas, Corvino! Plazca al Tribunal leer estas notas donde expongo la verdad.

CORVINO
1100El demonio lo posee.

ABOGADO 1.º
1101Hemos hecho mal, como funcionarios, en mandarlo a buscar si él es el heredero.

ABOGADO 2.º
1102¿A quién?

ABOGADO 1.º
1103A ese que llaman el parásito.

ABOGADO 3.º
1104Es cierto. Ahora es un hombre poderoso e influyente...

ABOGADO 4.º
1105Hay que mandarle a decir de parte del Tribunal que le ruega que se presente, pero sólo para esclarecer algunas dudas.

(Sale el Escribano.)

ABOGADO 2.º
1106Esto es un laberinto.

ABOGADO 1.º
1107 (A Corvino.) ¿Mantenéis vuestra primera declaración?

CORVINO
1108Mi situación, mi honor...

BONARIO
1109¿Dónde lo tendrá?

ABOGADO 1.º
1110 (A Corbaccio.) ¿Y vos?

CORBACCIO
1111El abogado es una víbora de lengua bifurcada.

ABOGADO 2.º
1112Vamos al asunto.

CORBACCIO
1113¡Y el parásito también!

ABOGADO 1.º
1114Sigue la confusión.

VOLTORE
1115 (Dándoles unos papeles.) Ruego al Tribunal tome conocimiento de estos documentos...

CORVINO
1116No deis crédito ninguno a lo que su falso espíritu haya escrito, honorables señores. ¡Está poseído del demonio!

(Se cierra la escena.)

ESCENA VII

UNA CALLE DE VENECIA
Entra Volpone

VOLPONE
1117¡Hacer de mi pelo una maraña y perecer en ella! ¡Ay de mí, porfiado! ¡Cuando había salido bien de una patraña intrincarme en una nueva! El malvado demonio, inspiró mi cerebro al idearla y Mosca fue su instrumento. ¡Sólo él puede salvarme o pereceremos juntos! (Entran Andrógino, Castrone y Nano.) ¿Qué es eso? ¿Dónde vais? ¿A comprar pan de especias o a ahogar gatitos? ¿Quién os mandó salir?

NANO
1118El señor Mosca nos dijo que fuésemos a pasear y a divertirnos y tomó las llaves.

ANDROGINO
1119¡Así, así!

CASTRONE
1120Así fue.

VOLPONE
1121¿Mosca tomó las llaves? ¡Estoy perdido! ¿Qué daño no caerá sobre mí? ¡Vil ruina la mía que no supe gozar de mi fortuna cuerdamente! ¡Heme ahora víctima de mis propios ardides! ¡De mis maquinaciones! Id pronto en su busca. Acaso sus intenciones sean más honradas que mis temores. Decidle que venga inmediatamente al Tribunal a encontrarme. Acaso allí me dé el abogado nuevas esperanzas; ¡si él no puede salvarme, estoy perdido!

ESCENA VIII

LA SALA DEL ESCRUTINIO EN EL PALACIO DEL SENADO
Sentados están los cuatro Abogados, el Juez, el Escribano, Bonario, Celia, Corbaccio, Corvino, Alguaciles, Guardias, etc.

ABOGADO 1.º
1122Todo esto es incomprensible. En este informe se dice que Bonario fue engañado y que la dama fue llevada allí a la fuerza por su marido.

VOLTORE
1123¡Es exacto!

CELIA
1124¡Cuán elemente es el cielo a quienes saben orar!

ABOGADO 1.º
1125¡Pero el hecho de que Volpone quisiera hacerle violencia parece falso a causa de su impotencia!

CORVINO
1126¡Graves señores, no escuchéis al abogado! ¡Está poseído del demonio! ¡Posesión y obsesión, podríamos decir de él!

(Entra Volpone.)

VOLPONE
1127El parásito estará aquí dentro un instante, graves señores.

ABOGADO 3.º
1128Podríais usar otro nombre para designar al heredero de Volpone.

ABOGADO 4.º
1129¿No ha dado con él el escribano?

VOLPONE
1130Que yo sepa, no.

ABOGADO 2.º
1131Su venida aclarará el misterio.

ABOGADO 3.º
1132Por ahora todo está confuso.

VOLTORE
1133Plazca a vuestras señorías...

VOLPONE
1134 (En voz baja a Voltore.) El parásito me ruega os diga que su amo vive, que sois siempre su heredero, y que todo fue una farsa...

VOLTORE
1135¿Cómo decís?

VOLPONE
1136Para probar si erais honrado y si su muerte os afectaba.

VOLTORE
1137¿Estáis seguro de que vive?

VOLPONE
1138¡Como de que vivo yo!

VOLTORE
1139¡Oh, Dios mío! ¡Fui demasiado violento!

VOLPONE
1140Todavía tenéis salvación. Dijeron que estabais poseído; fingid estarlo. Yo os ayudaré. (Voltore cae fingiendo un ataque.) ¡Dios le bendiga! Su respiración se agota. Ved como empieza a hincharse. ¡Oíd sus ronquidos! Sus ojos son vidriosos como los de una liebre colgada en una volatería. ¡Ved como se tuerce su boca; su vientre se abulta!

CORVINO
1141¡Ah, el demonio! ¡Qué comediante!

VOLPONE
1142¡Ved su garganta!

CORVINO
1143¡Ya comprendo su plan!

VOLPONE
1144 (A Voltore.) Seguid, seguid, todo va bien...

CORVINO
1145¡Qué comedia!

CORBACCIO
1146¿Creéis que finge?

VOLPONE
1147Ved, ved, ya vuelve en sí...

VOLTORE
1148¿Dónde estoy?

VOLPONE
1149¡Ánimo, señor! Lo malo ya pasó. Estáis desposeído.

ABOGADO 1.º
1150¿Pero qué ataque es este?

ABOGADO 2.º
1151¡Así, tan de repente!

ABOGADO 3.º
1152Si verdaderamente está poseído como dicen, esto no tiene importancia.

CORVINO
1153¿Le da muy a menudo?

ABOGADO 1.º
1154 (Mostrándole su escrito.) ¿Reconocéis vuestras declaraciones?

VOLPONE
1155 (En voz baja.) ¡Negadlo, negadlo! Decid que no lo conocéis.

VOLTORE
1156Sí, lo reconozco, yo lo escribí, pero cuanto contiene es falso.

ABOGADO 2.º
1157¡Empieza otra vez el laberinto!

ABOGADO 1.º
1158¿Entonces el que llamáis el parásito no es el culpable?

VOLTORE
1159Graves señores, no más culpable que su viejo dueño, el señor Volpone.

ABOGADO 3.º
1160¡Pero si ha muerto!

VOLTORE
1161¡No, honorables señores, vive!

ABOGADO 1.º
1162¿Cómo?

VOLTORE
1163¡Vive!

ABOGADO 2.º
1164¡Cada vez lo entiendo menos!

ABOGADO 4.º
1165¡Dijisteis que había muerto!

VOLTORE
1166¡Nunca!

ABOGADO 3.º
1167¡Lo habéis dicho!

CORVINO
1168Yo lo he oído.

ABOGADO 4.º
1169Aquí viene nuestro hombre. Dejadle paso.

(Entra MOSCA.)

ABOGADO 3.º
1170Una silla.

ABOGADO 4.º
1171Si Volpone hubiese muerto sería un buen partido para mi hija...

ABOGADO 3.º
1172Dadle paso.

VOLPONE
1173 (A Mosca.) Mosca, estoy perdido; el abogado nos ha traicionado, pero todo está nuevamente en juego. ¡Di que vivo!

MOSCA
1174¿Qué granujada es todo esto? Honorables señores, perdonad mi demora, pero las disposiciones para el funeral de mi pobre dueño requerían mi atención...

VOLPONE
1175 (En voz baja.) ¡Mosca!

MOSCA
1176Ya que pienso enterrarlo con arreglo a su rango.

VOLPONE
1177¡Ay de mí, estoy perdido!

ABOGADO 3.º
1178¡Cada vez más complicado!

ABOGADO 1.º
1179¿Dónde estará el intríngulis?

ABOGADO 4.º
1180Ya está mi hija colocada.

MOSCA
1181 (En voz baja.) ¿Me dais la mitad?

VOLPONE
1182¡Antes me dejo ahorcar!

MOSCA
1183¡Peor para vos, pero no chilléis tanto!

ABOGADO 1.º
1184Diga el letrado. ¿No dijisteis que Volpone vivía?

VOLPONE
1185Y vive en efecto. Este gentilhombre acaba de decírmelo. (A Mosca.) Tendrás la mitad.

MOSCA
1186¿Quién es ese borracho? ¿Hay alguien que le conozca? ¡Yo no le he visto en mi vida! (A Volpone.) ¿Creéis que voy a ceder tan barato?

VOLPONE
1187¡No!

ABOGADO 1.º
1188¿Qué decís?

VOLTORE
1189Este caballero me lo dijo.

VOLPONE
1190Lo dije, graves señores, y mantengo con mi vida que este hombre… (Señalando a Mosca.) me lo afirmó ¡Nací con las estrellas contra mí!

MOSCA
1191Honorables señores, si es que debo soportar tal insolencia, prefiero callarme, pero no creo que sea para esto que me habéis mandado a buscar.

ABOGADO 1.º
1192Tiene razón.

ABOGADO 2.º
1193¡Echad de aquí este granuja!

ABOGADO 3.º
1194¡Mandadlo azotar!

VOLPONE
1195¡Mosca! ¿Quieres traicionarme?

ABOGADO 3.º
1196¡Enseñadle a dirigirse a una persona de su rango!

(Los ALGUACILES se apoderan de Volpone.)

MOSCA
1197Doy humildemente las gracias a vuestras señorías...

VOLPONE
1198[Aparte.] ¡Veamos, veamos! ¿Azotado y perdido cuanto poseo? ¡La situación no puede ser peor! ¡Si confieso no puedo perder más!

ABOGADO 4.º
1199 (A Mosca.) ¿Señor, estáis casado?

VOLPONE
1200 (Arroja su disfraz.) ¡Todos contra mí! ¡Ánimo! ¡El zorro salió de su madriguera!

MOSCA
1201¡Patrón! ¿Qué hacéis?

VOLPONE
1202¡Basta ya! ¡Mi ruina no será la única! ¡Jamás consentiré que mi bien te dé fortuna y familia! (Al Tribunal.) Yo soy Volpone y éste es el canalla de mi parásito; (Señalando a Voltore.) este otro, granuja redomado; (Señalando a Corbaccio.) éste, un loco avariento; (Señalando a Corvino.) y éste, un bribón, un loco y un canalla. Ya sabéis la verdad, honorables señores, espero de vosotros una sentencia para castigar tanta maldad.

CORVINO
1203Plazca a vuestros honores...

ABOGADOS
1204¡Silencio!

ABOGADO 1.º
1205¡El nudo se deshizo por milagro!

ABOGADO 2.º
1206¡No puede estar más claro!

ABOGADO 3.º
1207Ni nada puede probar más la inocencia de estos pobres...

ABOGADO 1.º
1208¡Pongámoslos en libertad!

ABOGADO 4.º
1209Me quedé sin yerno.

BONARIO
1210¡El cielo no podía permitir que este crimen quedase impune!

ABOGADO 2.º
1211Si es tan complicado llegar a ser rico, prefiero quedarme pobre.

ABOGADO 4.º
1212Despojad al parásito de sus vestiduras.

CORVINO Y CORBACCIO
1213Honorables señores...

ABOGADO 1.º
1214¿Podéis decir algo para iluminar la justicia? ¡Si es así, hablad! Pedimos clemencia.

CELIA
1215Y yo indulgencia para ellos.

ABOGADO 1.º
1216Ofendéis vuestra inocencia abogando por ellos. Oíd: Empecemos por el parásito. De los hechos se desprende que habéis sido vos no sólo el principal organizador de esta infame impostura, sino que al final habéis hecho mofa del Tribunal usando ante él un traje de gentilhombre veneciano al que no tenéis derecho ni por nacimiento, ni por limpieza de sangre; por lo cual el Tribunal os condena a ser azotado y a vivir el resto de vuestros días en galeras.

VOLPONE
1217 (Frotándose las manos.) Os doy las gracias...

MOSCA
1218¡Que la destrucción caiga sobre tu alma de lobo!

ABOGADO 1.º
1219Entregadlo a los guardias. (Se llevan a Mosca.) Vos, Volpone, por vuestro rango y nacimiento no podéis ser castigado con la misma pena; pero el Tribunal confisca vuestra fortuna en beneficio del hospital de incurables; y puesto que con tanta perfección imitasteis ante nosotros ser lisiado, gotoso y paralítico, iréis a la prisión cargado de hierros, donde probablemente podréis ser realmente un enfermo en lugar de serlo imaginario. ¡Llevadlo! (Se lo llevan.) ¡Terminaron los ardides de un zorro desgraciado!

VOLPONE
1220¡Terminaron los ardides de un zorro desgraciado!

ABOGADO 1.º
1221Vos, Voltore, a fin de evitar el escándalo que habéis dado haciendo mal uso de vuestra profesión y para evitar la ofensa de vuestros cofrades de teneros como tal; quedáis privado de ella. ¡Corbaccio! ¡Acercaos! Os desposeemos de todo cuanto tenéis en favor de vuestro hijo y os confinamos al Monasterio de San Spirito, donde, puesto que supisteis vivir bien, aprenderéis a bien morir.

CORBACCIO
1222¿Cómo? ¿Qué dice?

ABOGADO 3.º
1223¡Ya os enteraréis!

ABOGADO 1.º
1224En cuanto a vos, Corvino, se os embarcará delante de vuestra propia casa y seréis paseado en góndola por todo el Gran Canal, llevando un bonete con dos orejas de asno, en lugar de cuernos por no ofender a vuestra esposa; y más tarde expuesto en la Berlina con un cartel en el pecho.

CORVINO
1225¡Frotadme los ojos con peces hediondos y frutas podridas para que no vean mi vergüenza!

ABOGADO 1.º
1226Y para reparar los perjuicios que habéis causado a vuestra esposa, la mandaréis a casa de sus padres con su dote triplicada. Estas son nuestras sentencias irrevocables. Y ahora id. Pensad en vuestros crímenes y no creáis nunca que el mal pueda ser remunerado. ¡El malhechor es como las bestias, si engordan demasiado, revientan!

(Salen todos. La escena queda vacía un instante y vuelve a entrar VOLPONE.)

VOLPONE
1227El aderezo de la comedia es el aplauso; el zorro sabe cuánto pecó, pero por ello le ha castigado la Justicia. En nada cree haberos ofendido; si lo hizo, censuradle, si no, aplaudidle.

FIN DE LA COMEDIA