Alexandre Hardy, Félismène

Felismena





Texto utilizado para esta edición digital:
Hardy, Alexandre. Felismena. Traducida y anotada por Miguel Ángel García Peinado y Ángeles García Calderón, para la colección EMOTHE. Valencia: ARTELOPE Universitat de València, 2017.
Adaptación digital para EMOTHE:
  • López Martínez, José Enrique (Artelope)

ACTORES

DON ANTONIO
DON SANCHO
DON FELIS
FELISMENA
CELIA
NODRIZA
ADOLFO
LEOPOLDO
FERNANDO
PAJE
SIRENO
DUARDA
DANTEO
DIANA
PASTORES

ARGUMENTO

Don Felis,* joven caballero que proviene de una de las familias más nobles y ricas de Toledo estrecha una amistad mutua y clandestina con Felismena, tan llena de virtudes como rara en belleza pero desigual a este gentilhombre en cuanto a bienes de fortuna. El padre de Don Felis, vagamente advertido de sus amores, envía a su hijo a la Corte del Emperador para procurarle durante su ausencia un partido más ventajoso y digno de él; Don Felis, ante esta marcha consuela a su amante con la esperanza de un pronto regreso que consumaría su matrimonio, pero al llegar a la Corte, Celia pariente del Emperador y agraciada en perfecciones le hace olvidar a su primera amada, la cual disfrazada de varón va a encontrarlo con fundadas sospechas de su inconstancia e ingresa sin ser conocida a su servicio, y se esfuerza, aunque a su pesar, en facilitarle el gozo de Celia, quien se enamora de ella: al ser rechazada por aquella cuya igualdad de sexo la hacía incapaz de contentarla, se enrabia y desespera de tal modo que muere súbitamente. En esa tesitura un señor alemán, rival de Don Felis y mortal enemigo suyo, le imputa la muerte de esta joven princesa debido a algún tipo de veneno, lo persigue como aquel a quien el terror había puesto en fuga y lo vuelve a llevar al mismo lugar en que Felismena, en ese momento fuera de su trabajo y convertida en pastora, lo socorre contra sus enemigos a los que con la ayuda de esta amazona derrota; ello ocasiona que se reconozcan, a lo que sigue un feliz matrimonio. Este tema, sacado de la Diana de Montemayor para la escena francesa, no tiene nada que envidiar a los mejores.

* La explicación al nombre de "Felis" viene dada por Avalle-Arce en el estudio preliminar de la edición de la Diana: "La elección onomástica está realizada con un claro designio de similitud con Felismena. No resulta casual, en efecto, que Felismena comunique su nombre a las ninfas justo cuando acaba de pronunciar el de don Felis: es una manera más de señalar la atracción —casi predestinación onomástica— que siente por el caballero. Pudiera ser, además, que la alusión que ambos nombres hacen, por vía etimológica, a 'felicidad', sea augurio y garantía de la feliz resolución de la historia. (Jorge de Montemayor: La Diana, edición de Juan Montero, estudio preliminar de Juan Bautista de Avalle-Arce, Barcelona: Editorial Crítica, 1996, p. 104, nota 185.)


ACTO I

DON ANTONIO, DON SANCHO, DON FELIS y FELISMENA

ESCENA I

DON ANTONIO, DON SANCHO y DON FELIS

DON ANTONIO
Bajo el celeste círculo por NeptunoN
X
Nota del traductor

Es decir, bajo la bóveda celeste que delimita el océano. Plinio ya consideraba que el océano circundaba la Tierra.

acotado,
si alguna vez mortal fue feliz con su suerte,
si un mortal ha vivido -rara felicidad-
casi exento de leyes y de adversidades,
5
todo el orbe le debe un retrato a mi vida,
donde invicto a mis pies se encadena la envidia,
donde yo haga mentir a cualquiera que no cree
del hombre pleno el goce otrora de la muerte,
o bien quiera ejercer el parentesco ilustre,
10
en que su virtud propia, prodigiosa ventaja,
la salud, los amigos, la proeza, los bienes,
ser por reyes honrado y amado por los suyos,
gracias al Absoluto mi canosa vejez
sobre los más suertudos ha obtenido el premio;
15
hasta en este punto último, del sepulcro rodeado,
un retrato olvidado resucita mi honor,
un hijo cuyo tacto se asemeja a su arrojo,
de carácter cortés, amable, liberal,
hecho, discreto, parco, cual leoncillo no espera,
20
ojo airado al acecho, respirando jadeante,
algo digno de él, una presa apropiada,
sobre la cual despliegue su iniciática prueba:
pues si lo viera estúpido, perezoso, hogareño,
prisionero de infames voluptuosidades,
25
preferiría haber dejado ya este mundo,
para no recibir de mi sangre una ofensa;
se debe estimar menos los hijos que a la gloria,
todo amor hacia ellos si es fanático es malo,
satisfecho por ello mi espíritu descansa,
30
esperando en silencio que el Cielo de él disponga,
inmortal ciudadano de su estable aposento:
mas un asunto urgente me requiere en la Corte,
que esta reflexión aplaza hasta más tarde,
y temo incluso haber pasado la hora dicha,
35
lo sabremos, preciso consultar mi reloj,
¡buen Dios! Algún cargante viene aún a molestarme,
no, es mi mejor amigo, y es un deber cortés
el que yo me adelante a recibirlo a él.

DON SANCHO
He sido requerido por un tema importante,
40
que concierne a la única creencia de un viejo padre,
creencia a punto de hundirse, a punto de encallar,
que no querrá en el tiempo luchar contra las olas,
que no querrá, además del recibido aviso
prevenir los atisbos de una sierpe advertida,
45
prevenir el peligro que obra su picadura,
dado que al ser pequeña se descuida la cura.

DON ANTONIO
De los humanos ÁrbitroN
X
Nota del traductor

Invocación a Dios.

, haz falaz el augurio,
que mi sangre al hablar se hiele de frío miedo,
hablad, hablad sin más disfrazar el asunto,
50
dad a tal opinión toda su amplitud.

DON SANCHO
A veces la verdad, Sol que irradia en exceso,
que se descubre a golpes nos lesiona los ojos,
por lo que sobre todo en algo que le afecta,
del vicio que ella oculta aparece infecta;
55
ahora que somos íntimos tengo que confesaros,
que Amor, ese tirano, comienza a apoderarse
del juicio joven del que por propio nacimiento
será vuestro heredero después de que muráis,
y no se trata en nada de un amor pasajero,
60
pues no tiene el solaz de ver pasar el tiempo,
la belleza lo tiene ampliamente dispar,
aspira a atraparlo con el fuego malar,
posiblemente instruida por los padres, que astutos
cual expertos monteros situados en la trampa,
65
ansían sorprender a la presa tenaz,
y trocarlo en legítimo esposo en vez de amigo;
advertido desviad este áspero accidente,
que en vuestros años canos apuraría el ocaso.

DON ANTONIO
Claro la pena de una nuera mal elegida,
70
sin mi consentimiento, según su desenfreno,
pena más dolorosa que la peor defunción,
aunque próximo, al féretro precipita mis pasos;
¿el impío rebelde a nuestra obediencia,
temerario se apropia de una licencia tal?
75
¿Infringiendo el respeto paternal insolente,
y osar contra mi afán tomarse la justicia?
Monstruo pernicioso, víbora parricida,
tras un tal atentado no esperes que sea blando,
morirás al instante por mis manos ahogado
80
que harán que mi justicia sea ejemplo a los humanos.

DON SANCHO
La pasión queda mal donde el cariño austero
corrige lo que se halla en ruina permanente,
distrayendo además ese deseo ocioso,
no hay porqué afligirse ni tampoco inquietarse.

DON ANTONIO
85
Como la contrición sucede a la locura
y la ley del himen fugaz no la encadena,
mi clemencia es hacia él lo que fue en otro tiempo;
¿pero quién libremente ha urdido los vínculos?
Se dice que una chica ordinaria, y astuta,
90
logra sobre el incauto esta fácil victoria.

DON SANCHO
Extremada en belleza, intacta en cuanto a fama,
mediocre en cuanto a medios, de nombre Felismena,
cuidada por sus padres, en virtud educada,
su obsesión sólo está reservada a Don Felis,
95
particularidades que un vecino curioso
observa cada día con estos propios ojos;
además de observar sus fingidas caricias,
nacía un fuego de amor en las almas medrosas,
miles de húmedos besos, miles traviesos juegos,
100
dejar la mano libre sobre un níveo cuello,
de inusual no carecen: y muestran la apariencia,
de que un Himen que intriga la feN
X
Nota del traductor

Alusión a Don Felis y Felismena, a quienes Don Sancho ha visto intercambiar caricias.

los alimenta,
insufrible elección, dado que una tal casa
no puede compararse en nada con la vuestra.

DON ANTONIO
105
Huirá de miedo el águila de la débil paloma,
adorará el NaucherN
X
Nota del traductor

Naucher: Del italiano nocchiero, proveniente del latín nauclerus ("patrón de barco"), proveniente a su vez del griego antiguo ναύκληρος, naúklêros; emparentado con el catalán nauxer, naucher en español.

los abismos de Sicilia,
la abeja a las avispas, y las nacientes flores
del ardiente Siroco los mortales caloresN
X
Nota del traductor

Hardy cita una serie de adunata o adínaton de la poesía amorosa latina: los adynata o impossibilia encierran en sí una paradoja y podrían incluirse también dentro de la hipérbole; se trata de la mención de cosas imposibles, casi siempre en enumeraciones, que Tirso de Molina expresa a la perfección en el siguiente cuarteto:
Quien promete no amar toda la vida
y en la ocasión la voluntad enfrena,
saque el agua del mar, sume su arena,
los vientos pare, lo infinito mida.
La "enumeración de imposibles" o impossibilia, es de origen antiguo: se trata del conocido tópico denominado "el mundo al revés" que ya describiera Ernst Robert Curtius: "El motivo parece encontrarse por primera vez en Arquíloco: el eclipse solar del 6 de abril de 648 le hace pensar que nada en adelante será imposible, puesto que Zeus ha oscurecido al sol. Nadie se asombre, dice, si los animales del campo cambian su alimento por el de los delfines. En la Edad Media eran bien conocidos los adynata virgilianos. Un pastor abandonado por su amada dice que no se asombraría ya de contemplar un trastorno completo del orden natural…" (Literatura europea y Edad Media Latina (1), México: Fondo de Cultura Económica, 1999, 6ª reimpresión, traducción de Margit Frenk Alatorre y Antonio Alatorre).
Así, el águila huye de la paloma (y no a la inversa); al piloto del navío no pueden gustarle los peligros del Estrecho de Mesina, ya que en él están los monstruos Escila y Caribdis; los abejorros son avispas enemigas de las abejas; las flores no aguantan el siroco, viento proveniente de Fenicia, comarca del litoral de Siria.

,
antes de que mi juicio apruebe la alianza,
110
y traicionar mi gloria con certeza absoluta,
sería traicionarla soportando que el necio
cumpliera el error del proyecto iniciado,
que similar partido lo atrapase hábilmente,
mi poder absoluto anticipado entonces:
115
nunca, nunca; mas debo arrancar poco a poco
de su alma el objeto que aviva este fuego,
romper la ociosidad apestada nodriza
de un veneno furioso que en el alma se infiltra,
de este modo: la Corte del Soberano un tiempo
120
le distraerá el espíritu con varios pasatiempos,
moldeará sus costumbres y pulirá su gracia,
además de dotarlo de una modesta audacia,
familiar a cualquiera con desdén de los riesgos,
Corte ávida de honor, en países foráneos,
125
distrae la primera sensación divertida,
Lo que de nada emana en nada se convierte,
le habremos agenciado una amante al regreso,
la cual de afables vástagosN
X
Nota del traductor

El original neveux, está utilizado en el sentido de "enfant des parents".

lo hará ser padre un día.

DON SANCHO
Sabia resolución, tanto como fructífera;
130
mas, más bien instrumento de fuerza intencionada,
que al perdido lo vuelve al sendero virtuoso
de mantener difícil, espinoso y tortuoso;
lo mismo puede hacerse usando la destreza
una rama curvada muy fácil se endereza,
135
la tirantez cortando: así pues alterarle
la insoportable hiel de este brebaje en dones;
así pues, sin embargo como amigo os repito,
que este tumor muy pronto lo cauteriza el ansia,
que un fuego apasionado no se apaga al momento,
140
y devora la cima del inmueble alcanzado.

DON ANTONIO
No probarán mis ojos el descanso propicio,
antes de que efectúe el consejo altruista
sin cesión de algún tipo, ¡ah!, ya sale, aquí está,
permitidme que sea yo solo quien lo aborde,
145
id con Dios, y mil gracias.

DON SANCHO
Sobre todo clemencia,
ahora que se inicia la actuación paterna.

DON ANTONIO
Ten listo los oídos atentos a mi voz,
la flor de tus abriles se agota, ya lo ves,
holgazana, inútil, ociosa, ignorada,
150
flor que se pasa antes que una ligera nube,
propia de actos de gloria, y que una vez perdida
nos deja devorar con molestas nostalgias,
queda irrecuperable, de vergüenza asaltándonos,
quien no ha tenido en cuenta valorarla a tiempo:
155
cara esperanza evita el previsto naufragio,
para ti labor fácil si sigues mi consejo,
consejo que cada uno pregunta a su oráculo,
de quien el pronto efecto no conoce obstáculo,
sin discurso un viaje adquiere en los germanos
160
lo que consiguió Ulises de los otros humanos,
te desorientará no entre el pueblo llano,
cuyas malas costumbres imitan a los hadosN
X
Nota del traductor

Es decir, el pueblo no tiene buenas costumbres, sino malas (cambiantes o volubles), igual que la fortuna.

,
mas lo mismo que Júpiter tiene arriba su Corte,
donde Marte no impide la presencia de Amor,
165
te deslumbrará el César en dulce maravilla
de la suya si no preferible, idéntica,
Corte ilustre que sirve de imán para el valor,
y aplica a las virtudes su último color:
compórtate desde ahora en el modo adecuado,
170
en un ritmo magnífico de cumplir este viaje,
que tres o cuatro meses te llevarán de tiempo;
parece desdeñoso que arrugues la frente,
que un susurro secreto reprimido de miedo,
se rumia y se ahoga en tu apretada boca,
175
habla, fingir no quieras, ni te cohíbas tampoco,
abre y saca de dentro la intención que te embarga.

DON FELIS
Muchos cambian de Cielo sin cambiar de natura,
sólo un trabajo siembran ingrato a la aventura,
para ver las naciones que ilumina el Sol,
180
de la mañana hasta que cansado se hunde en sueño,
no puede mi alma débil creer en la Germania
creativa en rarezas que España nos niega,
creer en sus retoños más cultos, más guerreros,
no que planten tan lejos sus célebres laureles:
185
el que hiere impío la loa de su patria,
quien coge tales flores en cualquier otro prado,
quien en su campo solo busca segar la gloria;
y por favor Señor perdonadme otra vez,
si digo que llegado de la edad el ocaso,
190
un deber filial pide que yo os reconforte,
vinculado a los pasos, vinculado a los ojos
de quien me ha concedido ver la luz de los Cielos.

DON ANTONIO
Eres muy razonable y lleno de obediencia,
permite que mi suerte la enjuicie con paciencia,
195
otros en tu lugar me cuidarán por ti,
para que no se acorten mis efímeros días,
el nudo principal que te amordaza el alma,
que se ha vuelto insensible al miedo a la condena,
la pone en sordina y disimula en vano:
200
grábate estas palabras a fuego en tu menteN
X
Nota del traductor

El verso: "Tiens plus fermes ces mots que quelque mur d'airain" alude al proverbio francés C'est un mur d'airain: Cela se dit également d'un homme inflexible, et d'un obstacle insurmontable. Jamais cette expression proverbiale n'a été plus employée que pendant la révolution et que par les matadors de ces temps de sinistre mémoire. C'est un singulier rapprochement à faire, que le langage participe de la bizarrerie et de la férocité des mœurs. Le mur d'airain a donc été une expression favorite de nos modernes Dracons. Il n'y a pas un de leurs discours patriotiques où il n'y ait un mur d'airain. (Histoire générale des proverbes, adages, sentences, apophtegmes, dérivés des mœurs, des usages, de l'esprit et de la morale des peuples anciens et modernes; accompagnés de remarques critiques, d'anecdotes, par M. C. De Méry, tome I, Paris: Delongchamps Libraire-Éditeur, 1828).

,
so pena que te arriesgues a la aversión paterna
presta para tu ruina, y enemiga eterna:
me place que resuelto al viaje aconsejado,
liberes mi espíritu de un hastío suspicaz,
205
sin plazo, subterfugio, respuesta o cláusula,
y en resumen sin más pensamiento de causa,
me entiendes en este acto, pues hablo claramente,
quiero que me obedezcas al momento, y si no...N
X
Nota del traductor

Don Antonio interrumpe su discurso sirviéndose de la figura retórica de la aposiopesis o reticencia, utilizada generalmente cuando el hablante queda embargado por la duda o la emoción.

DON FELIS
Que me fulmine el Cielo de un estallido de ira,
210
antes que osar pretenda rebelde desdeciros,
aunque mi deseo aguante un martirio indecible,
el favorito vuestro triunfará con más fuerza.

DON ANTONIO
Así no tengas dudas de tu próspero viaje,
así me encontrarás al final, cual buen padre
215
que habré mirado más por tu bien que tú mismo,
medita sobre eso, y un día te acordarás.

ESCENA II

FELISMENA y DON FELIS

FELISMENA
La flor que gotea unas lágrimas de la Aurora,
más ávida no espera para abrirse al Sol;
los pequeños polluelos hambrientos en el nido,
220
comida incierta esperan de sus amados padres;
su otra mitad la tórtola por el bosque alejada;
el piloto un buen viento en su nave parada;
cuán enferma de amor espero este retrato,
de este amable ladrón que el alma me detrae,
225
¡extraña la pasión! Extraño incluso el modo,
en el que mi rubor la admite aun más fuerte,
igual a esos torrentes de cólera espumosa,
que arrastran guijarros y árboles con ellos;
desde el momento en que mi Felis me abandona,
230
por el hastío angustiada mil veces desvanezco,
en los cercanos rayos de su doble antorcha,
vuelve mi cuerpo a su alma y abandona la tumba,
¿por qué cruel te demoras ahora que una promesa
de besos confirmada inculpa a tu pereza?
235
Prometiste ayer noche, con las manos cogidas,
no esperar para verme a que llegue el mañana,
que tan pronto se acaba, quedando yo engañada:
y por estos burlones vulgares atrapada,
una vez que quedamos prendidas en su engrudo,
240
el deber con nosotras saldar no les importa;
sin embargo hasta aquí tu inocencia fiel,
prueba que algún obstáculo lleva a una ausencia así,
y a tu pesar prolonga el soso y largo plazo,
¡ah! Buen Dios helo aquí como un Cielo lluvioso,
245
taciturno, y el gozo borrado de su faz,
¡eh! Mi deleite, al veros tan triste morir quiero.

DON FELIS
Triste en realidad más que el criminal,
conducido al suplicio por un juicio en las formas,
más que un pez arrancado al elemento húmedo,
250
que un viajero atrapado por ladrón homicida,
¡ay! Ármate mi vida de tesón en la prueba,
aun con los cuerpos lejos, no lo estarán las almas.

FELISMENA
¿Quién puede separarlas?

DON FELIS
Un deseo maligno.

FELISMENA
¡Rigurosos destinos! Se me acaba la vida.

DON FELIS
255
Aun conspirando el Orbe, los Astros y los Cielos,
para mí no hay amor más preciado que el tuyo.

FELISMENA
¿Dónde os exiliaréis deplorable desgracia?

DON FELIS
Donde lleva el querer de un padre inexorable.

FELISMENA
Un ArgusN
X
Nota del traductor

Pierre Grimal: Diccionario de mitología griega y romana: "El Argo [Argos] de más celebridad -designado a veces por la forma latinizada Argus- es el biznieto del anterior [Argo hijo de Zeus y de Níobe]. Según unos, sólo tenía un ojo; según otros, poseía cuatro, dos que miraban hacia delante y dos hacia atrás. Finalmente, otras versiones le atribuyen una infinidad de órganos visuales distribuidos por todo el cuerpo" (p. 46).

malicioso nos habrá denunciado.

DON FELIS
260
Que en los infiernos puedan sus almas torturadas
padecer más que las de Sísifo, Ticio y TántaloN
X
Nota del traductor

Junto a las almas que se agitan como sombras, sin destino, Odiseo, en el Hades, encuentra a personajes castigados por los dioses eternamente como: Sísifo, Ticio y Tántalo. Sísifo es condenado a subir una roca hasta la cima y dejarla caer (el ensayo de Camus es una reafirmación de la rebeldía del hombre para poder elegir el mismo su destino); Ticio es culpable de haber violado a Leto, la compañera de Zeus; Tántalo es condenado a hambre y sed eternas.
Hardy repite un lugar común en la poesía de su tiempo, como podemos ver en el poema de Jean Auvray (1590-1630) titulado "La jalousie", en el que aparece la misma imagen en la segunda de las siete estrofas:
L'aigle de Prométhée, les fouets des Euménides,
Les vaisseaux défoncés des folles Danaïdes,
D'Ixion abusé les roues et les clous,
Les peines de Tantal, de Sisyph, de Phlégie
Ne sont que jeux au prix de l'âpre jalousie,
Il n'est enfer semblable à celui des jaloux.

,
de su lengua el ultraje mal regida expiando.

FELISMENA
Si tu vengas Amor a tus ingenuos súbditos,
compensa sus sentidos con un furor furioso,
265
que sin reposo alguno le roe las entrañas,
lo amilana con gritos, con horrores y exequias,
que sea su fin abyecto, y sus culpables días,
se abatan oprimidos de continuas miserias.

DON FELIS
Alivia tu dolor amiga con el mío,
270
puesto que en pocos meses regresaré a España.

FELISMENA
¿Meses que durarán más que siglos enteros,
pero en que arrabales se exiliará mi alma?

DON FELIS
La Corte de mi Rey limitará mi viaje.

FELISMENA
¿Gestará vuestro padre algún turbio enlace?
275
No vayáis a ocultármeloN
X
Nota del traductor

Felismena anticipa lo que ocurrirá por medio de una prolepsis.

.

DON FELIS
Soy ajeno a todo eso
camino sin saber la idea que él tiene,
pero bien cerciorado de que violencia alguna,
ni amenaza enemiga, ni el miedo del rencor
harán temblar mi fe, peñasco victorioso
280
que la ira de las olas disipa al acercarse,
mi alma te lo protesta, y accede a que el perjurio
tu lo arranques del pecho por vengar tal injuria:
adiós mi esperanza, adiós casta mitad,
ánimo, que mil besos sellen nuestra amistad,
285
y reprime esas lágrimas que el alma me traspasan,
que por ser poco audaz me acarrearán censura,
cuando estemos reunidos, aunque sea en mucho tiempo,
nuestros deseos por siempre gozarán los abriles.

FELISMENA
Trotamundos acepta mi ayuda, mi séquito,
290
invicta en la pena bajo vuestra conducta,
pasemos donde Febo ilumina su antorcha,
cual viajeros hallemos algún nuevo universo,
no podéis elegir escolta más solvente,
de quien en débil cuerpo guarda un alma más fuerte.

DON FELIS
295
No haces más que irritarme mi dolorosa llaga,
adiós, y mantén siempre el ánimo presente,
y que siga oprimiendo esos labios de rosa;
¡ay! El dolor extremo al silencio me obliga,
y ya no me permite que permanezca aquí,
300
do mil Argus nos tienen a merced de su orgullo.

FELISMENA
¡Así pues abandonas a tu arrobada dama,
a su ruego tus oídos ociosos y cerrados!
No quieres, inhumano, unirla a tus pasos,
y sola la abandonas entre mil defunciones,
305
espera, espera bárbaro, deja que tu cautiva
engrandezca este triunfo amoroso y te siga;
un proyecto contrario se opone a tu deseo,
que inocente no puede alardear de nada,
que me deja forzada a merced de las lágrimas,
310
contratiempos, sospechas, sempiternas alarmas,
vamos, ya que la suerte así nos lo prescribe,
a encontrar un refugio de tinieblas nublado,
a recluirnos en lo hondo de una gruta salvaje,
y que antes del himen mi viudedad celebra,
315
do estos ojos abiertos no cesan de llorar,
mi boca de proveer, mi alma de suspirar.


ACTO II

ADOLFO, DON FELIS, CELIA, FELISMENA, PAJE

ESCENA I

ADOLFO
Solo
¿Que este bravo extranjero de insolente audaciaN
X
Nota del traductor

Alusión basada en los Adagios de Erasmo: "Gigantum arrogantia" (III, X, 93).

,
raza que creó la Tierra en fase de locura,
o que más bien produjo Ixión de la nubeN
X
Nota del traductor

Adolfo compara la insolencia amorosa de Felis con el de los Centauros, los cuales provienen de la unión de Ixión y Néfele: en la mitología griega Néfele (Νεφέλη / Nephélê, de νέφος / néphos, "nube", en latín Nebula o Nubes) es una nube a la que Zeus dio la apariencia de su mujer, Héra. Zeus, para engañar a Ixión quien había tratado de abusar de ella, dio a una nube su apariencia: de la unión de Ixión y la falsa Hera (Néfele), nació el niño Centauro, que cuando llegó a adulto engendró con yeguas de Magnesia la raza de los hombres-caballo.

320
por descaro movido, y en orgullo adiestrado,
se atreve a emanciparse -sacrílega manía-
aspirando al honor de nuestra Germania?
Bandido presuntuoso la casta intimidad
de celestes favores de una belleza tal;
325
sólo mudos osamos reverenciar a su ídolo,
sólo esperar osamos su palabra de oráculo;
este altivo español, ya sustenta el poder,
descarado como es, en hablar y observar,
tiene ya más intrépido la plaza vigilada,
330
plaza que se podría bien perder a la larga,
perderse entre las manos de un pérfido extranjero.
Despliega tu coraje soslayando el peligro,
el glorioso argumento a este deber te liga,
siervo de las bellezas celestiales de Celia;
335
pero a quien el respeto modera el deseo,
una ocasión mejor no podrías elegir,
ni que la obligue más guardada del abismo,
en reconocer luego tu franqueza probada,
cuida pues, con prudencia, de que un rival así,
340
no pueda hallar el modo de escapar de tus trampas.

ESCENA II

DON FELIS, CELIA, ADOLFO

DON FELIS
Bien había el artesanoN
X
Nota del traductor

Hardy, como otros escritores de su tiempo, considera al artista como un artesano, un obrero.

tu condición notado
quien te falseó el primero cual ciego en su pintura,
intenso Amor, al menos, en los efectos diarios,
privas de vista a aquellos que son tuyos un tiempo,
345
la opinión atestiguas de que mi nueva llama
solía antaño tener de Felismena ausente,
sólo a ella la estimaba capaz de merecer
una plaza de esposa en el lecho de Júpiter,
que de las perfecciones Fénix incomparable,
350
nunca verán mis ojos a otra tan deseable;
ahora que sin embargo este milagro extraño
negado tal error me constriñe a cambiar,
CiprisN
X
Nota del traductor

Cipris: apelativo dado a Venus, adorada en Pafos (Chipre) y en Citera (isla griega en las Islas Jónicas).

ya no habita en Pafo, o en Citera,
ahí es donde cada uno púdico la venera,
355
ahí es donde Celia erige sus altares,
y con justicia apresa a los locos mortales,
dichosos al principio, pues la vista contempla
dos claros astros gratos que alumbran este templo,
de un frontal la bóveda de alabastro muy liso,
360
y esos senos gemelos tan dulces, tan bonitos,
que se sostienen tras de columnas de marfil,
¡oh Cielos! Refrescadme la agradable memoria,
redobla los ardores que a expresarse no llegan,
es cierto que no siento ningún remordimiento,
365
de la crédula Enone en espera dejada,
una no casta ElenaN
X
Nota del traductor

Enone sería Felismena, y Elena sería Celia.

mi pensamiento ocupa;
¿por qué? Se ríe Júpiter del perjurio amoroso,
quien su dicha rechaza ser feliz no merece:
unido esto al origen esta alianza me iguala,
370
y que al menor motivo el más firme se altera,
demos blandura al fuerte: ¿mas soñador no veo
a esta Aurora de Amor que se opone a mis pasos,
y deja su palacio? Sí, asea tu cara,
abriendo poco a poco la vía de su gracia,
375
con el recogimiento que por doquier penetra,
y acaba con las más grandes dificultades.

CELIA
Sin duda os asombráis y encontráis muy extraño
el cambio tan dispar que hay de vuestra tierra
con este país grosero, que amable nada tiene,
380
y donde los ingeniosos no saben de qué hablar.

DON FELIS
Aquí una maravilla, que es única en el mundo,
más fértil la playa hace que los Campos Elíseos
por medio de placeres que embriagan a los Dioses,
que el encanto del alma nos muestran por los ojos,
385
que verdadero Loto ya su dulzor tragado
me haría regresar del desierto de Escitia,
ligado desde entonces a esta divina estancia,
do vuestros Astros mielgosN
X
Nota del traductor

Mielgos: Del lat. vulg. gemellĭcus, de gemellus 'gemelo'. Los astres bessons suelen designar a los gemelos Cástor y Pólux, de la constelación de Géminis. La alusión es una preciosa metáfora de los ojos de Celia.

dan luz a un bello día.

CELIA
La alabanza recae en aquel que la expresa,
390
extraída de un motivo que nadie considera,
llegando a ser tan poca materia de elección,
que lo fuera la propia memez e imperfección,
donde el poco que habría de loable es el creer,
no merecer de nadie la vista y la memoria,
395
que cualquiera me hubiera la amistad entregado,
merece poco hastío y de piedad grandes dosis.

DON FELIS
¡Oh rayosN
X
Nota del traductor

Hardy cambia la imagen de las flechas de Apolo matando a la serpiente por la de rayos.

que Pitón afloja inútilmente
sobre este pobre preso inclinado en la tierra,
el despiadado cómitreN
X
Nota del traductor

La persona que en las galeras vigilaba y dirigía la boga y otras maniobras, y que se encargaba de hacer remar a los galeotes.

les refuerza los hierros
400
sólo a los condenados, que apenas lo soportan!;
¿por qué pues esparcir este torrente de habla,
nuevo hechizo que aumenta mi amoroso martirio?
¡Buen Dios! La vehemencia fuerza a la verdad,
expuesta en estos términos llenos de atrevimiento,
405
divina, sólo Dioses os deben su servicio,
al mortal el intento le exige un gran suplicioN
X
Nota del traductor

Es decir: Celia es merecedora únicamente del servicio de los dioses, y no de un simple mortal.

.

CELIA
Y en valores logrados por la voz habitual,
se muestra el español como el más cordial,
docto en disimular, que lleva no sin casta
410
en la lengua en un tiempo el hielo y la flama,
gracias que a nos, groseros, nos niega la Natura;
yo que no creo, por genio, todo lo que me dicen,
que muy bien no distingo si hay asomo de burla,
y que no me incomoda que se rían de mis faltas...N
X
Nota del traductor

Los puntos suspensivos indican la interrupción del parlamento de Celia.

DON FELIS
415
Es demasiado agravio un candor sin razón,
tal sospecha de mofa me hace un daño de muerte,
sospecha inverosímil, pues la inmortal Esencia
más está en nuestro juicio que en nuestro entendimiento,
y querer ignorar mi languidez palpable,
420
muestra un ardid desnudo que descubre el rigor.

CELIA
Semejante violencia excesiva no dura,
fuegos de amor tempranos cavan su sepultura;
junto a que mi albedrío huye del yugo amante,
y quiere mantenerse en su estado dichoso.

DON FELIS
425
¡Ay! Decís la verdad, mi desmedido amor
no permite que duren mis días largamente,
su nacimiento mátame, perturba mis sentidos
incompetentes para en el alma ocultarlos;
la prueba sin embargo de que vuestro recelo
430
de mi lealtad requiere, también de mi paciencia,
que ojalá que no falle mientras se me evidencia
que brilla alguna chispa de notoria esperanza,
que ha admitido el Imperio de mis deseos y os plazca,
que con castos favores mantienen viva mi ascua.

CELIA
435
Creed que indiferente a todos los que miran,
sin preguntar cada uno saca una parte igual;
adiós Señor, daos cuenta que es gastar las palabras
en cosas sin valor, absurdas y triviales.

DON FELIS
Más bien decid que es ansia de este poco de dicha,
440
que la equidad concede a mi devoto ardor,
adiós mi bello sol, adiós cara homicida,
pueda la hábil saeta del Ballestero CíteroN
X
Nota del traductor

Cupido.

,
abrir ya desde inicio un duro corazón,
notable obra maestra que merece su mano.

CELIA
445
Os mostráis ardiente, triste rindiendo el alma,
de ingrata, de asesina echadme a mí la culpa,
sordo el Cielo a tus gritos invoca al Aqueronte,
no avanzas nada más tal cual si el leñador
pensara al primer golpe que su filo afloja,
450
abatiendo un roble alto por el trueno advertido;
mil ejemplos diversos me enseñan cada día
el naufragio arriesgado de estas tretas de amor,
naufragio irreparable que tímido devora
alhaja más deseada que todas las del Alba,
455
no temo lo previsto; mas ¿quién me trae aquí
a otro segundo amante a destiempo y transido?

ADOLFO
Que vos habéis sufrido antaño mi Princesa
obligada a oír a este abejón que no cesa
de rezumbar tedioso palabras imprudentes,
460
con trampas que ensalzan a tiernos bravucones,
trampas que no dan miedo a una prudente Palas,
aunque una tal Nación de índole descarada,
imite a estas serpientes que ocultas en las flores
e imprimen al rústico mortales desconsuelos,
465
una cara hipócrita oculta su perfidia,
que corre por doquier con profusión osada,
y una vez deslizada bajo la piel de zorro
reina luego tiránica como león sin estimaN
X
Nota del traductor

Alusión al comentario de Montaigne (Libro I, cap. 5) al citar el pasaje de Plutarco sobre el general espartano Lisandro respecto de la oposición entre la astucia y la fuerza: "donde la piel del león no basta, es preciso añadirle un trozo de la del zorro".

,
juicio que obtendréis de agradable víctima
470
cual los dioses que sólo aprecian el valor.

CELIA
Mi honor suspicaz y de continuo en guardia,
no teme a trampa alguna que tiendan los discursos,
del deber advertido no necesita aviso,
sabe bien discernir la verdad del engaño;
475
apruebo sin embargo semejante intención,
que será de obligado cumplimiento en mi caso.

ADOLFO
Que el Cielo me extermine antes de que creer pueda
que ir tras vos afecte a vuestra púdica gloria;
pero Señora, varios de estos espías áulicos,
480
varios también heridos por un virtuoso amor
juzgan mal sus maneras, encuentran su conducta
hacia vuestra grandeza intolerable y dura:
Ícaro impulsar osa su intrépido vuelo
recto a este bello sol que temen nuestros ojos,
485
aborda familiar en toda hora a su santa
que sólo contemplamos venerable en el miedo,
nosotros de igual país más dignos por mil veces
de vivir siervos dóciles respetando sus leyes,
sensible sufrimiento ante mortal ofensa,
490
que hirviendo de ira me mata y apalea,
que podría bien pronto convertirse en funesto
si no se muestra un poco más sabio en el futuro.

CELIA
Nadie debe ofenderse de lo que no me ofende,
mi fama está segura por mi propia defensa.

ADOLFO
495
Si dais a la palabra rienda suelta, de pronto
veréis bajar las ínfulas de este altanero.

CELIA
Extranjero en la fe pública, un privilegio,
infringirlo en su caso es peor que sacrilegio.

ADOLFO
Desafiar de hombre a hombre cual las gentes de honor,
500
es tratar dignamente a un cobarde que cohecha.

CELIA
No es así, vuestro vil y mal fundado pleito,
de un semejante triunfo parecería asistido.

ADOLFO
Mi vida a este respecto desatiende a la muerte,
y otras justas opciones no son consideradas.

CELIA
505
Con mi consentimiento no puede abordarse.

ADOLFO
Tal oráculo opuesto bien no se entendería.

CELIA
La buena voluntad, que estriba en la propuesta
me obligará Señor más que el propio efecto.

ADOLFO
Recompensa que vale más que un soberbio Imperio.

CELIA
510
¿No tenéis, de momento, algo más que decirme?

ADOLFO
No, salvo que el dolor vejado sin diatribas,
más que estos insolentes merece que lo ayuden.

CELIA
Ya se decidirá el momento propicio,
mas debéis liberaros del verme de los celos,
515
que si germina y crece sin idea ni congruencia
no aportaría al final más que gran confusión.

ADOLFON
X
Nota del traductor

Ante la tajante conclusión de Celia, Adolfo se enzarza en un monólogo sobre la inconstancia de las mujeres.

¡Oh sexo fraudulento cuya alma disfrazada
engaña a los más vivos por su veneno interno!
Inconstante animal que alimenta lo nuevo,
520
cocodrilo llorosoN
X
Nota del traductor

Vialleton aclara que, según una leyenda medieval, los cocodrilos del Rio Nilo atraían a su presa simulando llorar. La realidad es que el llanto del cocodrilo responde a una necesidad fisiológica del animal, que deben tener lubricados los ojos fuera del agua; el hecho, estimulado por sus glándulas lacrimales suele ocurrirles cuando están devorando alguna presa. Parece ser que, al masticar y apretar las mandíbulas éstas activan el lacrimal. Dado que las notas de Vialleton se hayan entre las páginas 404-479, en adelante omitiremos el número de página, fácilmente localizable por la numeración de los versos.

que urde la crueldad,
a quien el más feo objeto afecta incluso más,
a quien adjudicó el Cielo la malicia,
doblez, astucia, engaño, aprendido este oficio,
el foráneo insolente se lleva nuestro premio,
525
el brillo te deslumbra con su pompa ordinaria,
feroz anfitrión nuestro, tu le ríes afectuoso,
tus oídos reciben su encantador murmullo,
presta a hacer que en breve naufrague el honor,
marchad discretamente, en su lugar doy fe
530
del poder infinito del Monarca Divino,
dejándoos descubiertos clavada en la frente,
por siempre difamados una notable afrenta.

ESCENA III

FELISMENA, PAJE, DON FELIS

FELISMENA
Alado AljaberoN
X
Nota del traductor

Neologismo para designar al que porta la aljaba, es decir a Apolo.

cuya llama fecunda
reina en el Olimpo, en la Tierra y las Aguas,
535
entre la infinidad de tus logrados lauros
publica que el míoN
X
Nota del traductor

El laurel obtenido por Apolo debido al enamoramiento de Felismena.

te honra más gustoso,
que no es nada que Júpiter no pueda resolver,
despojado de la égida y las armas del rayo,
convertirse en Toro, transformarse en relámpago,
540
llover en gotas de oro de las nubes del aire,
en el pecho cautivo de la Virgen de AcrisioN
X
Nota del traductor

Alusión a los amores de Júpiter con Europa, Sémele y Dánae, la hija de Acrisio.

:
se ve mejor tu fuerza en mi figura extraída,
y su metamorfosis tiene más novedad,
y mi inicuo destino sale con más crueldad,
545
pobre hija que acaba de descubrir ignota
bajo un viril semblante y privada de ayudaN
X
Nota del traductor

Felismena está disfrazada de hombre y nadie la acompaña.

la enorme traición del falaz veleidoso
a quien el justo Cielo perjuro no da miedo,
ayer cuando llegaba pensativa al ocaso
550
el corazón muy triste augurando infortunio:
tras cenar me hallé en el motín de un gran ruido,
abundancia de antorchas la calle iluminaban,
curiosa de repente por ver que podía ser
el dueño y yo sacamos la testa a la ventana,
555
un concierto de laúd acorde con la voz,
por dos horas o más varias veces bisado,
¡ay!, me hizo enaltecer este gozo, informada
de que cierto español a su CáriteN
X
Nota del traductor

Las Cárites -en latín las Gracias- son divinidades de la belleza, y tal vez, en su origen, potencias de la vegetación [...] Se representan generalmente como tres hermanas, llamadas Eufrósine, Talía y Áglae, tres jóvenes desnudas cogidas por los hombros; dos de ellas miran en una dirección, y la del medio, en la dirección opuesta. Su padre es Zeus; su madre, Eurínome, hija del Océano. A veces, su madre es Hera en vez de Eurínome. (Pierre Grimal: Diccionario de mitología griega y romana, p. 87).

amada
daba por serenata un solaceo tal:
560
entonces mi mirada se alza sobre el grupo,
inmóvil, aturdida ve a lo lejos al bárbaro
quien en sus nuevos fuegos mi sepulcro prepara,
no obstante, ¿qué se sabe?, ¿es factible un amor
nacido en vanidades cómplices de una Corte
565
con la simple fachada y la vana apariencia?
Apoyarte en eso no es buena garantía,
virando urgente espero a que salga de su casa
alguno que me cuente en verdad la traición,
valor en tal afán merece transmitirse,
570
un joven page llega que trae su librea.
Nos somos camaradasN
X
Nota del traductor

Desde este verso Felismena se dirige al paje.

de la misma nación,
azar que hace posible que la moral recobre,
visto cual extranjero que busca la fortuna,
no tengo aquí refugio ni conocido alguno,
575
lo peor es que el dinero empieza ya a faltar,
y la necesidad cruel me acomete,
vos como compatriota podéis buscarme casa
que retirarme pueda de miseria y angustia.

PAJE
Sí, sí con mucho gusto incluso fácilmente,
580
siempre que te encuentres solamente capaz
de servir en la alcobaN
X
Nota del traductor

“Servir à la chambre”, estructura que se repite en el verso 625, es servir como ayuda de cámara. La labor que tenía que desarrollar la explica Furetière en la entrada “Chambre”: s’emploie aussi en parlant des valets qui rendent service à la chambre, et des quelques ustensiles qui y servent aux nécessités. Un valet de chambre, une fille de chambre, une robe de chambre, qu’on met quand on garde la chambre, un bassin, un pot de chambre, vaisseaux où on se déchargé le ventre et la vessie (Dictionnaire universel).
La Enciclopedia española de derecho y administración de Lorenzo Arrazola dice lo siguiente sobre el equivalente español: “CAMARA (ayuda De). Según el Diccionario de la Academia, ayuda de cámara del rey, es ‘el criado que sirve en la cámara de S. M. para ayudar a vestirle y otros usos.’ Según Covarrubias en su Tesoro de la lengua son ‘los gentiles-hombres que se dan por ayudas a los caballeros de la llave dorada, que son de la cámara de S. M. para que acudan á los ministerios ordinarios en que no se han de ocupar los señores.’” (Madrid: Imprenta de Díaz y Compañía, 1853, tomo 7, p. 174).

, gran ventaja con mi amo
pues se sirve en su casa de la mejor manera.

FELISMENA
Estoy con vos en deuda el resto de mis días
y seré, por supuesto, un buen amigo siempre;
585
pero, del mismo modo, decidme su apellido.

PAJE
Don Felis de Guzmán, el ejemplo, el asombro
de los nobles del mundo, en nobleza, en valor,
en cuya casa estamos muy bien, sin infortunios,
y quien desde hace poco por el Amor que sufre
590
tiene ocupado a su ángel en miles de misivas.

FELISMENA
¡Oh, moza infortunada!

PAJE
A toda prisa vamosN
X
Nota del traductor

El verso no completa el anterior de Felismena, sino que es la continuación del parlamento anterior del paje.

a encargar un buen traje, otro a llevar misivas,
este otro a tener listo un banquete opulento,
otro, en momento dado se ocupa de la música;
595
en fin todos expuestos al deseo de un amante,
que nos sustrae a todos nuestros ratos de ocio.

FELISMENA
La servidumbre vil lleva siempre asociada
estos inconvenientes a los de nuestra clase,
fáciles de llevar al ligarse a un señor
600
en quien puede el provecho aunarse al honor.

PAJE
Mi vida a este respecto respaldaría mi juicio,
además, nada el tiene del talante español,
espléndido en exceso, y muy buen pagador,
silencio, no moveos, es él quien sale, y si
605
nos ve juntos no puedo fingir que os recomiendo.

FELISMENA
Que el Cielo os retribuya este amable favor,
capaz de evitar que una necesidad
abyecta me reduzca a la mendicidad.

DON FELIS
Paje,

PAJE
Mandad Señor,

DON FELIS
¿Le diste la carta a ella?

PAJE
610
No,

DON FELIS
¿Por qué?

PAJE
La esperé más de una hora y media,
una doncella suya cumplió este cometido,
y debe responderme en cuanto oscurezca.

DON FELIS
Tu lengua, en mi opinión, madura una mentira,
sin decir el asunto del por qué no la ha leído.

PAJE
615
Si tomó la Princesa la medicina hoy...N
X
Nota del traductor

El paje empieza a inventarse una hipotética razón, cuando es interrumpido por su amo.

DON FELIS
Purga Amor el rigor que causa mi hastío,
calentando los hielos de esta alma cruel,
te había ordenado dársela sólo a ella.

PAJE
Pero su mandamiento por otro acaecido
620
de idéntico objetivo la esperanza ha abortado.

DON FELIS
Antes de que te excuses se vaciará el Mar,
¿a quién le estás hablando que tanto te diviertes?

PAJE
Este chico español, en cuanto a nacimiento,
viene de un digno sitio buscando ocupación:
625
se compromete a ser vuestro ayuda de cámara
teniéndoos complacido en todo lo que pueda.

DON FELIS
Esperadme en la casa juntos a mi regreso,
allí decidiremos, sólo daré una vuelta
hacia la hermosa cárcel que cautiva mi alma,
630
hacia el ingrato Sol que le oculta su llama,
quien con que un simple rayo desplegara amable,
más me agradaría que el poder de los Cielos.

PAJE
La beldad que me gusta, a la que adoro y quiero,
vamos a visitarla en la sumilleríaN
X
Nota del traductor

Definido por la RAE como 1. "oficina del sumiller", 2. “Ejercicio y cargo de sumiller”; proveniente del francés "sommelier", mantenemos el término a efectos de rima, ya que lo usual en español es utilizar el vocablo "bodega", cuya 1ª acepción de la RAE es: "Lugar donde se guarda y cría el vino".

,
635
blanca y bermeja ella tiene un dulce licor
que expele la inquietud y alegra el corazón.

FELISMENA
Permitidme que vaya a otro sitio a esperar,
no me encuentro cómodo.

PAJE
No, mi presencia causa
como la sed y el hambre, un poder admirable
640
cuya prueba de golpe os voy a demostrar.


ACTO III

ESCENA ÚNICAN
X
Nota del traductor

Ni el texto original, ni la copia de Stengel numeran la escena, sí numerada con toda lógica por Vialleton.

FELISMENA, DON FELIS y CELIA

FELISMENAN
X
Nota del traductor

Felismena habla consigo misma, rabiosa por la traición amorosa de Don Felis.

¿Qué más demandas tú? Inconstante ProteoN
X
Nota del traductor

Felismena recurre a la figura literaria de la antonomasia con el nombre de Proteo, para designar al amante inconstante.

,
el perjuro que enfrenta, execrable, el AteoN
X
Nota del traductor

El término se utilizaba como insulto en los siglos XVI y XVII en Francia, aunque parece que en este contexto lo más probable es que haga referencia al que traiciona a su amada.

,
que de aquí en adelante tu recuerdo ha perdido,
en extranjero amor absorto de sí fuera,
645
infame miserable, ya no te cree el mundo,
no dudas que su jefe de tu crimen responda,
de que puedas vengar a Medea en crueldad,
el intento admitido de su deslealtad:
nada menos, hasta ahora podrías infeliz
650
continuar persistiendo cual idólatra amante,
en sentir el tormento que sufre el insensato;
incesante persigue una audaz obra maestra
halaga su pasión, usa su sencillez
la mies de los favores que le otorga su dama,
655
llévalo por la mano a su felicidad,
ahí donde lo verás gozar muy plenamente;
después te sacrificas a los pies del infiel,
vana sombra caída en la noche perpetua,
a quien atraparás con las Hermanas Euménides,
660
horrible, del reposo a arrancarle dulzuras,
para ligar a su alma con una ardiente furia
que lo hará que no esté curadoN
X
Nota del traductor

Gariée: "Guerie". Participio pasado del verbo garir, forma antigua del verbo cuyas significaciones son más amplias que la forma moderna guérir: proteger, conservar, curar.

en el Averno,
la determinación me tiene inalterable,
atempera esta ira, pues ya está llegando
665
y con vigilante ojo recurre a una misiva
donde, es obvio que a ti, ya inerme te traiciona.

DON FELIS
De un talante cordial tan agudo y maduro,
en todo estás acorde con mi estado de ánimo,
admitido desde ahora en asuntos secretos,
670
heraldo de MercurioN
X
Nota del traductor

"Después de su helenización se le representa como mensajero de Júpiter e incluso, en broma, como servidor suyo en sus aventuras amorosas" (Pierre Grimal: Diccionario de mitología griega y romana, p. 353).

cuyas citas conciertas,
ojalá seas discreto; mi generosidad
a tu aptitud unida un día te hará dichosoN
X
Nota del traductor

Prolepsis o adelanto de acontecimientos: el comportamiento de Felismena (disfrazado ahora en paje) con Don Felis la llevará a ser feliz con él.

;
mas cuanto más te miro más me traes de una dama
el recuerdo asombrado de su figura en mi alma,
675
acércate, no dejes de darme tu opinión
de estas cartas que son parloteos ordinarios,
enviados de mi parte a la Reina en belleza:
me enfadarás en caso de que ocultes sus fallos.
que un temor servil no te haga adulador,
680
ya que debes ser ahora sólo fiel corrector.

FELISMENA
¿Presuntuoso querer controlar la prudencia?
Que el Cielo me preserve de una impudencia tal,
no es privativo de estos ojos profanos
el honor de ir en pos del secreto de Dioses.

DON FELIS
685
Mi permiso te basta, hazlo, no te preocupes,
normalmente la vista de los amantes núblase,
cae en errores que pueden corregir fácilmente,
mi deseo, en resumen, elimina el peligro:
remiso y pudoroso, oye pues mi lectura,
690
y no me libres luego de tu libre censura.

FELISMENA
Una vez leída la carta
Por el dulzor atraído de facundia en los términos,
vocablos de pasiones amorosas fecundos,
deduzco que ella lleva ingrata en su pecho
en vez de un corazón una roca marina
695
donde debe ablandarse bajo tierna piedad
lo que merecería vuestra santa amistad.

DON FELIS
Mensajero agradable, tu gracia insuperable
en granjearme la suya será muy eficaz.

FELISMENA
La voluntad al menos reemplazará al poder,
700
y no le impedirá cumplir con su deber.

DON FELIS
La propia vehemencia nuevamente me lleva,
a evocar los ojos de mi amada Felismena.

FELISMENA
Estáis, Señor, nombrando a una que muchas veces
loar oí de bella por el decir del vulgo,
705
bella y también honesta, más noble que opulenta.

DON FELIS
La tierra no sustenta a más galante dama,
tú le pareces mucho en la cara, en los modos,
quienquiera os haya visto os juzgará gemelos.

FELISMENA
Muchos se encontrarán de parecido tal,
710
mas no por ello unidos por parentesco alguno.

DON FELIS
Su imagen en la tuya excita en ese asunto
un caos tormentoso de extremos discordantes.

FELISMENA
Los primeros amores dejan huella en el alma,
el recuerdo perenne de su agradable llama.

DON FELIS
715
Suma que la promesa dada causa pesares,
en el infractor penas peores que mil muertes.

FELISMENA
Para el hombre de bien mantenerla es su vida.

DON FELIS
Un destino contrario me ambiciona la gloria
de cumplir mis proyectos con la inocente, ¡ay!
720
Perdido ya no tengo ni apoyo ni alivio.

FELISMENA
El oro se refina en el infierno rojo,
la fe en los trabajos, la ausencia y la zozobra.

DON FELIS
De la razón mantienes la justa utilidad,
mas no la posee Amor, de los suyos cruel déspota,
725
que me atrae en otra parte, me amordaza y somete
en la belleza etérea y vigente de Celia.

FELISMENA
Y es posible que más elevada en grandeza
ella aumente el encanto de un amoroso ardor.

DON FELIS
¡Cómo me gustaría sin deshonor poder
730
tenerla a una de esposa y de amante a la otra!

FELISMENA
Tales extremidades son tan poco adecuadas
como el hacer arder el hielo en el fuego.

DON FELIS
Sigamos, pues, resueltos la última ventura
sin que ansia del pasado la hora actual importune,
735
Felismena olvidada en su honestidad,
de supremo refugio tiene necesidad;
y si debe mi alma morar con extranjera,
estos divinos méritos son ganar en el cambio:
ve, ya sin más demora, a encontrar a mi Diosa,
740
atento, y nada omitas que pueda hacer que sufra,
ni nada que me amaestre su carácter ariscoN
X
Nota del traductor

Don Felis exhorta a Felismena para que no escatime esfuerzos por “amaestrarle” a Celia.

,
y que en su alma transmita un trazo afectuoso,
tus palabras harán más que todas las cartas
conforme a fausto augurio que mi mente concibe,
745
mas trata de abordarla en la hora propicia
para hablar distendido, sin temer ser audaz.

FELISMENA
La gran dificultad que hay que soslayar
creo que estriba en que yo sepa hacerme escuchar.

DON FELIS
Si está sola, te hablo basado en la experiencia,
750
más fácil te será conseguir una cita.

FELISMENA
Se esforzará entonces mi incapacidad
en calmar el rigor de su ferocidad.

DON FELIS
Observa bien los gestos del alma en su rostro
que te darán la clave del presagio más cierto.

FELISMENA
755
Ciertos no lo son siempre, varios muy a menudo
van por el exterior engañando a nuestra alma.

DON FELIS
Quien sabe interpretarlos, una palabra, un gesto
de los más escondidos el deseo manifiesta.

FELISMENA
Pondré todo interésN
X
Nota del traductor

Parlamento de Felismena interrumpido por Don Felis.

...

DON FELIS
Harás que esté contento,
760
por ahora ya es bastante, no se debe ir más lejos;

FELISMENA
Quiera el Cielo benigno que un propicio final
no desmienta la idea feliz que habéis forjado.

DON FELIS
Ánimo, tu empresa tendrá un dichoso éxito,
después mi corazón gozará de un gran crédito;

FELISMENA
765
Avanzaríamos poco si el genio no lo inclina,
si preparado el cuerpo no lo ayuda su pócima.

DON FELIS
Es fácil, puedes creerlo, ella me quiere bien
ve pues, fiel alcahuete, y a volver no vayas
más que una vez sabida la voluntad de ella,
770
sobre la hora en que debo presentarme en su casa,
dile que el posponerlo me conduce a la muerte,
que desde que la vi sin ella ya no vivo.

FELISMENA
Aunque en este oficio me guíe como novicio,
será su desenlace el de un muy buen servicio.

DON FELIS
775
Vamos, márchate ya, y en cuanto a la instrucción
cumple todos los puntos de tu delegación.

FELISMENA
Hablando para sí
Dura delegación que costará la vida
a su Embajador si se lleva con éxito,
más bien llamarla puedes inicua traición,
780
que ejecuta un amante privado de razón.
Por ti, contra ti misma, mas contra la que -¡oh pena!-
su corazón fue antaño y el alma de su alma:
vuelve sobre tus pasos miserable, ¿do vas
Madama a seducir una casta virtud?
785
Hundir a una inocente en el foso que caes,
antes de que tu honor soporte algo indecente
y coartada apele a la Parca en su ayuda,
no dejes a este río gozar de un fluir libre,
comprueba hasta el final el cariz del asunto
790
asunto que ya en marcha me obliga a mejorarlo:
ocupar una plaza es distinto a tomarla,
¿qué muchacha no teme a este juego inseguro?
¿Las llamadas Princesas se rinden fácilmente
a los fuegos quiméricos de un súbdito extranjero?
795
Se paciente, el tiempo produce alteraciones
que falsean cada día nuestros dudosos juicios,
ahorrativo elegido de sus llamas cubiertas,
en el fraude sustentas mil gateras abiertas,
con sólo suponer un rechazo, un desdén,
800
este loco se lanza a la aflicción de súbito,
divorciarse los hace, y rompe el proyecto,
sí, pero tal acción desleal inesperada
no importa ya admitida: Amor mucho te excusa,
y sus deseos por ti no están del todo helados:
805
ultrajada él se apiada, y en su remordimiento
ante tu remembranza no guarda la paciencia,
descubrirme igualmente no excluye los peligros,
llegada desde España a esta orilla extranjera,
la dignidad templada, y con varonil forma,
810
de tu honestidad no ofrece garantía,
nunca la gnosianaN
X
Nota del traductor

Fedra, de Gnosos, hija de Minos rey de Creta.

, o la que antiguamente
coronó los trabajos de osadas masilianasN
X
Nota del traductor

Sofonisba, reina de Numidia Massilia (conocida en bereber como Sofines) por su casamiento con el rey bereber Syphax. Las dos mujeres, Fedra y Sofonisba, son personajes trágicos.

,
por el amor maníacas tuvieron tal audacia,
¿y tú qué pensarías de otra en tu lugar?
815
¡Oh dudas espinosas, suspicacias, recelos!,
que mi interior perturban de hondos golpes mortales,
igual que el marinero que doma la tormenta
y que forzado por la furia de su rabia,
sigue tu mal destino que no puede evitarse:
820
debes cerca del sitio tu promesa cumplir;
¿será esa que allí veo en la puerta, mi rival?
Un presagio mortal me viene al corazón,
ese soberbio atuendo, y esos gestos dinámicos
la muestran, ¡por desgracia!, a tu pesar muy cerca,
825
más hermosa de lo que requiere un alma presta
a cambiar cualquier cosa por su fácil conquista;
SeñoraN
X
Nota del traductor

Desde este verso Felismena se dirige a Celia.

el valor y la fe de los humanos
besan más de un millón vuestras hermosas manos,
su alma en este papel visible, que reclama
830
la tardía piedad de una cruel Dama.

CELIA
Si es bueno elegir un lindo mensajero,
este punto de vista el tiempo no lo cambia,
siempre más obstinado en este vano acoso,
siempre más incongruente en frívolos escritos,
835
el leerlo sin embargo no nos costará nada,
pues no tendría por qué causar ni mal ni bien.

FELISMENA
Aparte
Es este un buen comienzo: ni la voz ni la cara
a una beldad acreditan de las que están en su órbita,
el desleal no se haya en el punto en que él cree,
840
choca con casta roca que resiste a las olas:

CELIA
Ya leída la carta
Amigo mío decidle que en males voluntarios
el enfermo posee las drogas curativas,
se queja el prisionero con muy poca razón,
al querer libremente construirse una prisión;
845
además, eso no es implorar mi ayuda
sino al honor tender una trampa mortal,
trampa que descubierta no tendrá efecto alguno,
mi empeño es pues prohibirle que pueda frecuentarme,
pues no lo escucharé, y tal descortesía
850
no creció nunca en mí ni se hará fantasía;
Señor muy rematado admiro sus discursos,
ojalá en el futuro corran por otro curso,
y asimismo no exijan hora particular,
que requiere igualmente el trato familiar
855
no ponerme en contacto con Argus Cortesanos
a la menor sospecha en calumniar virtuosos.

FELISMENA
¿Puedo creer a los Dioses, qué una boca tan bella
pronuncie contra Amor su insumisa sentencia?
¿Querrá la ingrata herir al Fénix de los amantes?
860
¿Ingrata a la Natura, a sus satisfacciones,
cual ciega en discernir la verdad de la argucia,
ciega en otorgar el sacro beneficio
de vuestras castas gracias, tal preciado depósito,
uno más digno que él busca bajo los Cielos?
865
No está bien, si la ira hasta ahí os transporta,
ante vuestra belleza actúo de demandante,
seguro en adelante de ganar mi proceso
apenas la clemencia tenga allí acceso.

CELIA
¡Quién podría resistirse! Luego dos combatiendo,
870
emprendamos la huida antes que pelearnos,
realmente tu amo en el lugar que estés,
no precisa abogado que defienda su causa,
letrado más capaz en temas de fingir,
y de encender un fuego que él no podría extinguir.

FELISMENA
875
¿Qué no podría extinguir? ¿Un Héroe generoso,
un Marte enamorado de la beldad en las bellas?

CELIA
Glosas mal mis palabras, la dulce Citerea,
y la madre de Dioses la poderosa Rea,
quisieron preferir a un Atis, a un AdónN
X
Nota del traductor

Adón en lengua semítica, Adonis en la tradición griega. Como bien nota Vialleton, se trata de una construcción en quiasmo: Citerea (Venus) enamorada de Adón; Rea (Cibeles), enamorada de Atis.

880
a aquellos en que el miedo no tenía cabida.

FELISMENA
Dejándoos ablandarN
X
Nota del traductor

Es decir, respondiendo a su amor.

domeñaréis su ánimo,
cual si lo liberarais de su vil condición.

CELIA
¿Desde cuándo lo sirves?

FELISMENA
Desde hace ya tres soles
me persigue esta dicha que parangón no tiene.

CELIA
885
Dicha para él suprema, servicio que yo envidio,
al quedar fascinada por tu clarividencia.

FELISMENA
No obstante asunto nimio, que no merece hablarlo.

CELIA
¿Y no te gustaría estar con otro amo?

FELISMENA
Si vos sois suya en caso de que Amor os reúna,
890
en cuerpo y alma puedo serviros a la vez.

CELIA
Tu destino sería más feliz en mi casa,
conmigo únicamente, más que siguiendo a un Rey.

FELISMENA
El honor no me incumbe, y después de él mi alma
por entero se entrega a semejante dama.

CELIA
895
Decídete, tendrás siempre la misma opción
y potestad en ocho, incluso en quince días,
y para que el caso lo convierta en más fácil,
a tu amo más bien le haré la petición.

FELISMENA
Vamos a lo importante, a aflojar las cadenas
900
llevadas por el pobre cautivo un siglo largo,
siglo que fijará la extensión del martirio
extremo, incomparable del que no debe hablarse.

CELIA
¿Es el modo de creerte, si no quieres confiar
en quien tan sólo trata de poderte premiar?
905
Mejor harías dudando de creer que te quieren,
piedad bien entendida por uno mismo empieza.

FELISMENA
Salvo en dama sensata halla el honor su sitio
en dar a sus iguales sin abonarles nadaN
X
Nota del traductor

Algunos versos son de una interpretación excesivamente sutil y alambicada; tal es así que un estudioso y especialista de la época como Jean-Yves Vialleton, en ocasiones (como en este parlamento de Felismena) avance, sin total convencimiento, posibles interpretaciones.

.

CELIA
Tu amable impertinencia obtiene en recompensa
910
algo en lo que al resto se cerraría la puerta,
ve, le escribo de nuevo por hacerte un favor,
y el que favor recibe más vale no olvidarlo,
espera, dos tachones servirán de respuesta
para tu caballero sin mayor beneficio.

FELISMENA
915
Hablando para sí
Verme merecedor de lo que nunca vio,
los rayos del amor lanzan golpes fortuitos,
harto hablan los ojos y la lengua acompaña,
se ven ya casi como plegarias en acciónN
X
Nota del traductor

Dado uno de los sentidos de la palabra "campagne": acción, el verso indica que Celia ruega incluso con los ojos.

,
la imprudente ha bebido la peligrosa pócima,
920
que enajena el sentido y la razón nos quita,
mi juventud le agrada, fraudulenta y culpable
de un defecto que me hace de su gracia impotente,
gracia voluptuosa, y que a alcanzar no llegan
aquellas en que Amor realmente se muestra:
925
te pagan como a mí, con la misma monedaN
X
Nota del traductor

Desde los dos puntos la reflexión tiene como sujeto a Don Felis.

,
así pues al cambiarme la desdicha te guía,
a quien nunca buscó un deseo inconstante,
a quien te prefirió a todos los monarcas:
de mi constancia, bárbaro, puedes tomar ejemplo,
930
será tu penitencia una Alceste en tu lecho,
no me hará el que me acuerde de su desleal viajeN
X
Nota del traductor

Los dos últimos versos Felismena vuelve a cambiar su reflexión y se dirige a sí misma.

,
fingir debemos ahora, aquí está ella de vuelta.

CELIA
Con el salvoconducto éste en la clara noche
tú, y no otra SibilaN
X
Nota del traductor

Alusión a la Sibila de Cumas o Sibila Cumana, la más importante de las diez sibilas conocidas.

, podrás traerlo aquí,
935
solo sin ningún séquito, y que no alardee
irrespetuosamente de haber iniciado algo,
so pretexto de cita para dialogar más,
con damas de mi rango no es bueno confundirse;
no podrá de ese modo tener pactos conmigo,
940
desde ahora exponiéndose a nunca más volver.

FELISMENA
Señora vos veréis a la propia prudencia
presentarse a la vista de su supremo Juez,
veréis sufrir tantísimo a una santa amistad...N
X
Nota del traductor

Argumento interrumpido por Celia.

CELIA
Sí, no acabes la frase, que lo harás por piedad.

FELISMENA
945
Mas por lo que yo veo la ansiedad le puede.

CELIA
¡Qué bien te has aprendido la ciencia del tapujo!
Ve pero se prudente, piensa en lo que te he dicho,
y que conmigo tienes bastante más de crédito.

FELISMENA
El Cielo generoso con tal gracia me premia,
950
guía el Cielo a un buen fin vuestros buenos deseos.

CELIA
Piensa que en ese caso te encontrarás mejorN
X
Nota del traductor

Es decir, sirviéndola a ella (Celia) en vez de a Felis.

,
¡un gran dolor me baja de los ojos al pechoN
X
Nota del traductor

El segundo verso es una reflexión de Celia sobre la situación.

!


ACTO IV

DON FELIS, FELISMENA, CELIA, NODRIZA, PAJE

ESCENA I

DON FELIS, FELISMENA

DON FELIS
Tú me has resucitado, AtlántidaN
X
Nota del traductor

Como bien aclara Vialleton, Don Felis asimila a Felismena con Mercurio como dios mensajero ("qui portes"), dios de la elocuencia ("charmeuse faconde") y dios psicopompo o conductor de almas al cielo o al infierno ("Avernales portes"): Hermes es hijo de Maya, y ésta de Atlas. Mercurio es denominado en ocasiones "le courrier Atlantide" en la poesía de Pierre de Ronsard.

que llevas
tu atrayente elocuencia a puertas Avernales,
955
Dioscuro que vienes a calmar mi tormentaN
X
Nota del traductor

Los Dioscuros era Cástor y Pólux, protectores de los marinos.

,
más que hombre Ángel divino a quien mencionar debo:
la Princesa me vio con los ojos rendidos
de igual modo que el Sol se prenda de la Tierra,
mientras la primavera los témpanos disipa,
960
y prepara promesas de incipientes cosechas,
su rostro en completo ocio, Templo en que Amor habita,
mis deseos amparando más allá de su mérito,
se deja admirar, ella nada me ha dicho
cambiemos de discurso, este me desorienta;
965
continuó el discurso, cuando la roja Aurora
en el lecho dejaba a su AncianoN
X
Nota del traductor

El Anciano es Titono, el consorte más fiel de Eos la diosa titánide de la Aurora, identificada con ella por los romanos y denominada por Homero: "la diosa de los dedos de rosa" (Rhododaclylos). Eos le pidió a Zeus que hiciese inmortal a Titono, pero se olvidó de pedirle la eterna juventud; así pues, Titono vivió para siempre pero se hizo cada vez más anciano. Desde el final de la noche, la Aurora se levantaba de su lecho para subirse a su carro tirado por los veloces caballos Lampo y Faetón. Desde el río Océano subía hasta el cielo para anunciar a dioses y mortales la llegada de la luz dorada del Sol.

durmiendo,
mis labios han osado besar sus bellas manos,
privilegio de Dioses que ansiaban los humanos,
besar a un precursor quien sin más altercado
970
esperando un combate general en la boca,
en el monte gemeloN
X
Nota del traductor

La imagen del "tertre jumeau" la encontramos ya en el poeta occitano Jacques de Romieu (1540-1600) de noble familia y hermano de una de las mujeres más cultas de su tiempo, Marie de Romieu. Entre sus poesías, publicadas en Lyon en 1584, encontramos el siguiente soneto incluido en las recopilaciones poéticas más importantes del siglo XVIII y XIX, como Annales Poétiques, ou Almanach des Muses (Tome VII, Paris: Delalain, 1778), y Bibliothèque choisie des poètes français jusqu’à Malherbe (Tome IV, Paris: Renouard- Treuttel et Würtzen-Lefèvre, 1824):

Sonnet
Un mieux appris en l'art de l'aonide bande,
Qui aura vu les Sœurs et le dieu Délien,
Sur le tertre jumeau du mont Pégasien,
S'ombragera le front de la verte guirlande.
Moi, à qui seulement une dame commande,
Indigne de toucher un rameau cynthien,
Je me contenterai du myrte Paphien,
Craintif à m'approcher d'une gloire si grande.
L'une pourrait tromper mon honnête désir ;
Mais l'autre assurément me vient jeune saisir,
Pour honorer le front de ma tendre jeunesse.
N'allons donc pas chercher l'honneur des monts cornus,
Puisque sommes guidés d'une belle Vénus :
Assez est honoré qui l'est d'une déesse.

Soneto
Alguien diestro en el arte de la banda de Aonia*,
que viera a las Hermanas y al Dios de la Isla Delos,
en las cotas gemelas del monte pegasiano**
se cubrirá la frente con la verde guirlanda.
Yo, a quien solamente gobierna una dama,
indigno de alcanzar una rama cintiana***,
veré de contentarme con el mirto papiniano****
temeroso a acercarme a una gloria tan grande.
Podría una confundir mi honesto deseo;
mas la otra, sin duda, me llega aún muy joven,
para honrar la frente de mi mocedad tierna.
El honor no busquemos en los montes cornudos,
ya que somos guiados por una hermosa Venus:
bastante honrado es quien lo es por una Diosa.

*Aonia se cree que era un barrio de la antigua Beocia, región de Grecia que contenía las montañas de Helicón y Citerón, consagrado a las Musas.
** El monte Helicón.
*** Cinthya o Cynthia: nombre femenino que proviene del griego Kynthia, gentilicio de Kynthos, nombre de un monte en Delos. El poeta romano Sextus Propertius, en un poema llama Cintia a su amante.
**** Aemilius Papinianus, conocido por el nombre de Papiniano, (142-202), jurisconsulto romano.

de este rollizo seno,
que suspira cautivo bajo un molesto cuello,
¿callaré?, que al adiós, felicidad suprema,
un infalible oráculo que de ella proviene
975
me obliga a regresar: me vaticina verla,
siempre que en la hora expresa en la que tu recibas
un correo placentero al que honran sus elogios,
que de tu alegre humor expulsa los hastíos:
son las propias palabras importantes para que
980
un buen comienzo siempre conduzca a un buen fin,
que detrás del escudo de su segura gracia
vayas osadamente a ver de nuevo a mi Venus
-modesta, sin embargo, siempre más que insolente-
apurar la ocasión, urgir su voluntad,
985
sobre la hora que deba devolverme mi aurora:
y deberá la mente contribuir de nuevo,
ese imparcial censor que observas de repente
sin miedo a ofender, la vista tras mi mano,
los defectos suplidos de mi carta amorosa,
990
esfuerzo que te labra una feliz fortuna,
que te aprovechará, puedes estar seguro,
más de lo que tu clase osaría esperar.

FELISMENA
Torpe, inepto, grosero, tal honor me supera,
honor incompatible con persona tan baja,
995
vuestra mente tan sólo engendra ideas raras,
quien con tan buenos actos la supo disgustar.

DON FELIS
Mi voluntad te basta, no sigas informando,
y no creas que otro habría tenido igual ganancia.

FELISMENA
Morirá Felismena los hurtos divulgados,
1000
al verse en las filas de omitidos pecados.

DON FELIS
¿Qué interés te induce a apiadarte de ella?

FELISMENA
Ninguno, hablo por hábito, el mal que hay que temer
mas con poca apariencia: es pescador dudoso
el que al fallar un pez hace que dos perdamos.

DON FELIS
1005
Obtenido el primero nada ya hay que se oponga,
pensar lograrlo todo no es avance ninguno.

FELISMENA
Permitid Mi Señor, que mi temeridad
diga lo que ella siente junto con la verdad.

DON FELIS
Sigue, nada te calles.

FELISMENA
La Princesa obstinada
1010
apenas flaqueará sin promesa de boda.

DON FELIS
Compromiso el que quiera, a menudo su cebo
en los planes de amor sirve cual fértil viento,
que además no te impide un futuro interesante,
ve a mi gabinete a buscar tu mensaje.

FELISMENA
1015
Aparte
¡Vamos, pagar mi crédito con una deslealtad,
oh, contrición tardía, loca credulidad!

ESCENA II

CELIA, FELISMENA, NODRIZA

CELIA
Reflexionando sobre su situación ante FELISMENA
¿Desgraciada Celia do te ves constreñida,
tu virginal vergüenza vale igual en la huida?
Esclava de un esclavo, victorioso Amor
1020
que liga totalmente su imagen a tus ojos,
sólo ella te gusta, sólo ella te da vida
no sin motivo válido y más que razonable,
su belleza junto a una flor de la primavera,
los gestos que parecen provenir de un Monarca,
1025
sus premisas que son sólo miel y prudencia,
que dan la imagen cierta de una mente en certeza,
¡eh! ¿Qué piensas hacer al recordar todo eso
pretenderás furiosa trastornarte de nuevo?
Esfuérzate más bien en matar su memoria,
1030
no podrías resistir la herida incurable,
ballesta disparada en el pecho mucho antes,
de un final que la muerte no tiene en adelante,
¿por qué te afliges ahora? Recupera el ánimo,
no quieres a una roca férrea tras la tormenta,
1035
un caspioN
X
Nota del traductor

Vialleton aclara que hôte Caspien designa al pueblo de los partos, y que el adjetivo caspien significa "próximo al Mar Caspio".

anfitrión, un árabe felón,
un escita nacido en el horror de AquilónN
X
Nota del traductor

Los tres pueblos que menciona Celia son famosos por su carácter inhumano: los partos, los árabes, los escitas (los escitas son mencionados por Plinio el Viejo en su Naturalis historia como el sitio por donde sopla Aquilón al comienzo del verano).

,
el divino retrato que idolatra tu alma,
fácilmente capaz de la amorosa llama,
que dejará de pronto todo el respeto aparte
1040
si tu boca una vez sus favores le ofrece,
si por una vez rompes de tu vergüenza el velo,
velo embaucador que enfrenta nuestros gozos,
sustrae el usufructo de la verde estación,
menos feliz en eso que bestias sin razón:
1045
¡Oh locas reflexiones! ¡Oh lascivo proyecto!
¿Miserable a quién quieres distinguir con tu presa?
¿A un servidor abyecto por el miedo apresado?
¿A un joven que es posible que cual reacio Hipólito
desprecie su fortuna, y cual novicio estúpido
1050
ignore fácilmente el servicio a las damas?
Inútil aprensión, de cuerpo y mente adultos,
ya el mundo no conserva los tiempos inocentes,
¡comprendes fácilmente, por desgracia! ¿Arriesgado,
temes que por carácter no pueda mal hacer?
1055
Mal o bien, la anarquía vuelve siempre de nuevo,
que el Cielo deshecho estalle en esta testa
después del enfriamiento por mi ardor alcanzado,
un verdadero Amor no teme la condena,
y ésta no sobreviene donde la perfección
1060
opta por un amante de su igual condición,
opta por un amante, al que el respeto vence,
¡oh Cielos! Cuan adrede me lo envía Amor,
vuelves sobre dos temas que tu no pensarías,
de un mirto apoderarte, y así perder tus pasos.

FELISMENA
1065
No yo, algún EdipoN
X
Nota del traductor

Alusión al Edipo que descifra el enigma de la Esfinge.

de inteligencia aguda
captaría de estos términos la importancia ambigua.

CELIA
Lo aclararé: ¿Entonces qué dice el corazón?
¿Qué más de nos pretende tu amo ese burlón?

FELISMENA
Yo sé que vos, Señora, lo tenéis en estima,
1070
y traigo algo con que justificar el crimen.

CELIA
Absurdas impresiones, inútiles escritos,
podría fundirse en lágrimas y estallar en gritos,
¡qué ablepsia, qué sordera, con semejante pena
el buen hombre cultiva una estéril arena!

FELISMENA
1075
¡Dioses! ¿Y desde cuando lo tratáis así,
no es penoso si otrora vuestro favor le disteis?

CELIA
Le valió tu argumento la entrevista otorgada
bajo una pretensión en alma cautelosa.

FELISMENA
No podéis conservar vindictaN
X
Nota del traductor

Venganza, satisfacción del daño recibido.

ni amargura,
1080
la gloria de la Tierra y extraída del Cielo.

CELIA
En lo que ya no puedas beneficiar a tu amo
piensa que él ya no existe, mas tú a vivir empiezas.

FELISMENA
De este buen Caballero como Galán amado,
no aspiro por ventura a superar su dicha;

CELIA
1085
¿Quién te concedería su lugar reservado?

FELISMENA
Una imagen de muerte en mi cabeza alzada
asfixia ese pensar, la desigualdad une
quien mis deseos asocia junto a mi condición.

CELIA
La cadena de ancestros más antigua es que el mundo,
1090
más que el Caballo GriegoN
X
Nota del traductor

El caballo de Troya.

en bravos jefes fértil,
tras poseer de los dardosN
X
Nota del traductor

Se hallan testimonios de la implantación de los dardos en historiadores griegos y romanos como Heródoto, Megástenes, Plinio el Viejo o Ptolomeo quienes parecen situarlos en la región de Gandhara, al noroeste del actual Pakistán; parece ser que fueron productores de oro.

los últimos lingotes,
debieron transferir el rango y el poder,
no obrando en la virtud, no mereciendo estima
cualquier continuador parece ilegítimo,
1095
me gustas infinito mil veces más que tu amo,
más que si descendieras de los Príncipes lábdacosN
X
Nota del traductor

Lábdaco es un personaje de la mitología griega: rey de Tebas, padre de Layo y abuelo de Edipo. Es decir, le gusta más que si procediera de un linaje de reyes míticos.

,
tus acciones más nimias me parecen milagros,
las palabras que dices me resultan presagios,
en fin, que me has hurtado la energía seductora,
1100
agradable de cara, agradable de humor,
y no te ruborizas, mejor mi amada vida
gocemos de las dichas a que la edad invita,
te ruego no rechaces el servirme, es más grato,
el que seamos amantes será nuestro secreto.

FELISMENA
1105
¿Qué síntoma concreto de un deseo sacrílego
servir puede de asunto a tenderme esta trampa?
No me probéis Señora, que soy poco prudente,
no daré, sin embargo, tan peligroso salto.

CELIA
Temes, bien ver se puede, de hecho que la apariencia
1110
a los más atrevidos les quitaría confianza,
mas promete tan sólo un recíproco Amor,
protesta mis favores, mas tenlos en secreto,
y la súbita prueba te servirá de aval,
¿querrías recibir aún más de mil besos?

FELISMENA
1115
La oferta feliz me hace más que su propio efecto,
que sólo es aplicable al amante perfectoN
X
Nota del traductor

Es decir, a Don Felis.

,
quien merece este bien si es que alguien lo merece,
que moriría inocente por su piedad frustrado,
yo criminal, ingrato, infiel secuestrador.
1120
sumiso a su justicia, o verdugo del Cielo.

CELIA
No hay reparo en mostrar que ya no eres un niño,
si nada he prometido con no dar no hay ofensaN
X
Nota del traductor

Es decir: si nada le prometí a Don Felis, no lo ofendo con no concederle nada.

,
y el que tengas escrúpulos muestra tu perfección;
decidir tú no puedes sobre mi afección,
1125
volcada estoy contigo, que me arrastras cautiva,
y que fuerzo agresiva tu talante miedoso,
se perspicaz y deja de mi cuenta que logre
que no haya voluntad ni poder en dañarte.

FELISMENA
No se debe erigir mi dicha en su derrota,
1130
¿quién ciego no vería por cierto en este caso,
tal sueño pasajero seguido de un pesar?
Amor durar no puede a quien no sabe unirse.

CELIA
Cruel no abuses más de tu buena fortuna,
la ocasión nunca acude a la cita dos veces,
1135
¿dónde queda escondido tu ecuánime juicio?
¿Con el honor partícipe iré a la permuta?
Toda aflicción después es tardía y ridícula,
no evitan que el pasado no te sea de interés,
si mi creencia alimentas su languidez loando,
1140
es que a un rigor extremo, me continúas forzando
en resumen tu dicha su curación alivia,
decirme lo contrario vano es, pura locura.

FELISMENA
Por el honor, Señora, que os era tan preciado,
en este fuego impúdico no lo dejéis manchar,
1145
ante quien se implicó con un experto amante
de una gran cobardía me preserva incapaz,
circunstancia imposible por diversas razones,
que antes la estrella SirioN
X
Nota del traductor

Alusión a Sirio o Sirius (en latín), nombre propio de la estrella Alfa Canis Maioris, la más brillante de todo el cielo nocturno vista desde la Tierra.

témpanos produjera,
que vos le prodiguéis favores razonables,
1150
nunca a un plebeyo, ínfimo entre los ínfimos,
heme aquí muy contento, aunque más constreñido,
en cuanto que este bien precioso ignorar debo.

CELIA
¡Ah!, perverso atrevido, bestia más que feroz,
mi sensible dolor tu crueldad no conmueve,
1155
tu sórdida plegaria a un segundo prefiere,
la cuestión evidente y palpable me vence,
¿Cuántos y de los grandes que el Imperio ha hecho insignes,
si mi gracia dignárase a elegir entre ellos,
vendrían de rodillas ufanos de poseerla,
1160
prefiriendo morir antes que a otros cederla?
Decide nuevamente, elige la opción rápida
entre ambos extremos: la del Amor, o el odio,
mi paciencia se acaba, no hay ya más que pensar
aquí y allí indeciso oscilando entre dudas.

FELISMENA
1165
Señora, vos podéis disponer de mi vida,
la dicha bienhechora es esclava de un amo.

CELIA
¡Oh sentencia de muerte! ¡Oh soberbio desprecio!
Maldecirás patán tu falta de respeto;
vete, más no me acerques tu contagiosa peste,
1170
monstruo horrible abortado de una funesta AlectoN
X
Nota del traductor

Alecto era una de las tres Erinias o Euménides, junto con Megera y Tisífone: Alecto era implacable en el castigo de los delitos morales.

,
no aguardes a que mi ira despliegue esos esfuerzos,
¡Eh!, nodriza, que alguien me ahorre la visión
de este falto de seso, a quien un amo indocto
envió a ejecutar un amoroso encargo.

FELISMENA
1175
Señora.

NODRIZA
Insolente vete sin murmurar,
o estas uñas feroces te desfigurarán.

CELIA
¡Oh Dios, buen Dios! Mi sangre de cólera se inflama,
por sólo una vez más, pero hazlo una costumbre
tata amada el despecho, el decente suplicio
1180
me harían de buen grado herirle el corazón.

NODRIZA
Si advertido me hubierais anticipadamente,
le habríamos preparado a este tal faena
que no le habría quedado nada sobre la piel,
y no es bueno ocultarme similares secretos.

CELIA
1185
El miedo a remover un cieno tan inmundo,
por nada, a destiempo, atraerme el escándalo,
sin que considerara el tener que persistir,
hasta aquí me han llevado a tolerar la injuria,
injuria que me lleva adentro de la tumba
1190
¡Ay!, ya no puedo más, sostenedme me caigo.

NODRIZA
¡Socorro! Está mostrando una palidez fúnebre,
de su rostro se apaga el bermejo color,
de su faz de alabastro gotea un agua helada,
Señora, mi desvelo, mi esperanza y razón,
1195
ánimo regresad, deseo ansiosa vengarme
informar del error del extranjero al Rey,
y ¡Oh desgracia! ¡Oh desgracia! Su desmayo va a más,
¿cómo no ayudarla con todas nuestras fuerzas?
Venid a ayudarme, llevémosla a la cama
1200
¡Oh Cielos!, en sus ojos se ve el fin de sus días.

ESCENA III

DON FELIS, FELISMENA, PAJE

DON FELIS
Con el ánimo inquieto, mi amor es similar
al mercader que expone en el bárbaro Océano
su incierta fortuna, y espera cada día
la nave que lo arruina, o hace rico a la vuelta:
1205
un agente estatal trafica con mi vida,
ignora su final, ignora mi deseo,
con halo de tristeza excelsa en pretensiones
me sigue inseparable y alarma en aprensiones:
las mozas actualmente como primer elogio
1210
prefieren servidores, muchos y de repuesto,
sólo aman la inconstancia y el enmascarar,
viéndonos abrasar como las mariposasN
X
Nota del traductor

Se trata del motivo poético en el arte y las letras de Europa de la atracción que siente la mariposa por la llama, puesto de relieve en varios poemas de Petrarca ("Come talara al caldo tempo sóle /semplicetta farfalla al lume awezza..."), Diego Hurtado de Mendoza ("Qual simple maripossa buelbo al fuego / De buestra hermosura do me abrasso..."), Herrera ("La incauta y descuidada mariposa, / de la belleza de la luz rendida, / en torno della buela y, encendida, pierde en ella la vida presurosa..."), Lope de Vega ("Cándida, y no pintada mariposa, / al fuego se acercó, sin ver el fuego; / pero sin ser su centro, él mismo luego / quiso templarse en nieve tan hermosa..."), Góngora ("Mariposa, no sólo no cobarde, / mas temeraria, fatalmente ciega, / lo que la llama al Fénix aun le niega, / quiere obstinada que a sus alas guarde, / pues en su daño arrepentida tarde, / del esplendor solicitada, llega / a lo que luce, y ambiciosa entrega / su mal vestida pluma a lo que arde), Quevedo y otros poetas del Siglo de Oro. Para este tema remitimos al trabajo de Alan S. Trueblood: "La mariposa y la llama: motivo poético del Siglo de Oro", en: Actas del V Congreso de la Asociación Internacional de Hispanistas (1974b), Publicadas bajo la dirección de Maxime Chevalier, François López, Joseph Pérez y Noel Salomón.

,
yugo fatal, pesado, impuesto por Natura:
¡Ay!, mi hombre muy triste mi conjetura aumenta,
1215
¿qué hemos obtenido de respuesta? Habla pronto,
y purga la sospecha que rodea mi pecho.

FELISMENA
Su buen humor cual el de una Luna eclipsada,
lo recuperará cuando se encuentre sola.

DON FELIS
¿No ha podido mi carta ver el Sol de sus ojos?

FELISMENA
1220
La admitió, mas no tuvo una acogida amable.

DON FELIS
¿La razón?

FELISMENA
La razón ella misma la ignora.

DON FELIS
Pudiste ver su cara, si alegre o enojada.

FELISMENA
Sí, la ira de un niño que muy pronto se acaba,
y al no tener motivos pasa en un santiamén.

DON FELIS
1225
Me ocultas mi dolor, lo que yo no deseo,
tiempo hay para lograr que no empeore más.

FELISMENA
Sed algo más paciente, haced cual si no vierais,
no vayáis a humillaros y ceder a su orgullo.

DON FELIS
Mejor sea mi cabeza la víctima propicia,
1230
¿a qué nutrir su encono justo o ilegítimo,
por fingir que se vive bien un día sin verla?
Dime ahora otra vez sus palabras exactas.

FELISMENA
Denuncia ella un exceso de impertinente acoso,
cual si de vos no hubiera más que continuas cartas,
1235
que debierais pedir su favor con mesura,
su honor desde ahora se encuentra en peligro.

DON FELIS
Ella no ha conocido la pureza del alma
en la que mi alabanza me acarrea la culpa,
un santo Amor que anima y guía la virtud
1240
no busca desvío alguno, toma el común camino,
se muestra a ojos de todos sin miedo, sin perjuicio
algún celoso dado a envidiosa rabia
trata de suplantarme, traidor seas quien seas
confabulas tu muerte una vez descubierto,
1245
he aquí, he aquí la Parca para quien se inmiscuye
en enfrentar mi dicha con su lengua engañosa,
sembrando la manzana de discordia entre nos,
pero sin informarse a fondo si has errado.

FELISMENA
Su rigor no ha querido oír réplica alguna.

DON FELIS
1250
¿No puedes entender el asunto inventado?

FELISMENA
No uno tan sutil, estos caprichos son
como pompas de agua que un soplo las revienta.

DON FELIS
Regresa a la razón principal y común,
en cuanto a lo del sexo influido por la Luna,
1255
infeliz quien lo cree, quien lo sirve y lo sigue.

PAJE
¡Oh muerte aterradora! ¡Pobre amante destruido!

FELISMENA
Hacia vos corre el paje ido y sin aliento.

DON FELIS
¿Qué más querría el Cielo añadir a mi pena?
¿Con qué más puede el Cielo aumentar mi dolor?
1260
¿Qué desánimo peor puede hallar mi desdicha?

PAJE
¡Ay! Huid Mi Señor, ya muerta vuestra amadaN
X
Nota del traductor

En la Diana de Montemayor, todo lo que concierne a la muerte de Celia queda en un segundo plano, como bien se deduce en la edición moderna de la obra: "Todo lo que concierne a la presunta muerte de Celia queda envuelto en una bruma de misterio. Ella misma declara su intención de suicidarse, pero luego se dice que ha sido víctima de un desmayo. La única afirmación explícita de que Celia murió (había dado el alma) no es en realidad más que un rumor extendido por la ciudad. Ciertamente el rumor y el convencimiento de la muerte persisten por algún tiempo: don Felis, que se marcha el mismo día de la noticia por la noche, y Felismena, que tarda algo más en irse, parten convencidos de que Celia ha muerto. Pero, en última instancia, el pasaje es lo suficientemente ambiguo como para que pueda entenderse tanto que la dama murió (sea por suicidio o por muerte natural) como que, tras recuperarse de su desmayo, no murió en realidad. Esta segunda solución es la más lógica, primero porque la contraria supone hacer a Felismena responsable última de esa muerte, y segundo porque el seguimiento de los modelos que Montemayor está imitando pide que Celia viva." (Jorge de Montemayor: La Diana. Edición de Juan Montero. Estudio preliminar de Juan Bautista Avalle Arce, p. 127, nota 308, Barcelona: Crítica, 1996).

proteged vuestra vida de un peligro eminente.

DON FELIS
¿Muerta ella, mentiroso? Acaba él de dejarla.

PAJE
Ella va para siempre a ocupar una tumba.

DON FELIS
1265
¡Oh siniestra ave negra! ¡Noticia catastrófica!
Según eso veríamos a la Deidad mortal,
¿parlanchín de quién hablas en tu frívolo informe?

PAJE
La Corte, toda en duelo, se aflige por su muerte,
al verla, decían todos: "La malicia española
1270
ha hecho de la inocencia ofrenda a Plutón,
el infiel extranjero se ha visto obligado
a acelerar sus días con un sutil veneno,
veneno contenido en la carta encontrada,
en ningún otro instante del día pudo hacerlo,
1275
el homicidio inútil de arrancarle su honor
vengativo utiliza un dolo envenenador;
vayamos a apresarlo y llevarlo a la Justicia,
a hacerlo torturar aplicando el indicio."
Espantado al oír eso que da mucho a pensar,
1280
me fuerza mi deber a hacéroslo anunciar.

DON FELIS
¡Oh inicuos destinos! ¡Oh tierra conjurada!
¡Astros de la Azulada Bóveda que, se dice,
tercian en nuestras cuitas, Astros perniciosos!
Muerte que nos despojas del prodigio del Cielo,
1285
ya de ahora en adelante vuestra avidez maldita
sólo podrá afligirme dejándome la vida,
más que vida una muerte, dolorosa y continua
que a pesar de vos vuelve pronto sobre sus pasos,
tan pronto como obtenga la venganza debida
1290
por mi perdido honor en la dama perdida:
Ve pues espada al puño, ve quien en los lugares
de ti sospechar ose de un acto tan odioso,
luego de mil rivales a tu dama inmolados
vierte en el palacio cerca de ella tu alma,
1295
muestra a esos alemanes la virtud española,
¿qué sepulcro más digno podrías elegir tú?

FELISMENA
Mi Señor, enfrentaos al extremo infortunio
con tal desesperanza igual de extrema y firme,
el Rey que os conoce no la permitirá.

DON FELIS
1300
¿A dónde iré a encontrar la muerte más cercana?
¿Dónde perderme exánime? ¿Dónde calmar la rabia
cuando el día odioso domeña mi coraje?
¿Do este brazo terror del mundo antes de irse
a mi memoria pueda un altar conseguir?
1305
No importa, mi furor que lleva a la aventura
va del primer peligro a hacer su sepultura,
la Parca desafiada, horrible es solamente
para aquellos que pasan los días en la molicie.

FELISMENA
Aceptad que mi encargo su cometido acaba,
1310
y que pierda con vos la luz indispensable.

DON FELIS
No te quedes amigo, ve a por suerte a otra tierra,
debajo de otro Cielo busca un mejor destino,
sólo quiero a mi lado a la Cohorte infernal,
nada más alejarte no dejes de decir,
1315
que ves como un amante corre hacia la muerte,
a quien su traición hizo merecer la desgracia.

FELISMENAN
X
Nota del traductor

La aparente réplica de Felismena no es sino una reflexión que se hace a sí misma, debatiéndose entre decirle a Don Felis la verdad o no.

¡Habla, descúbrele su culpa confesada,
muestra que dejó el cepo de una sombra ya extinta,
tú lo distraerás de esa idea punible,
1320
tú le arrancarás el puñal de su pecho,
sustituye en vida a su difunta dama,
reaviva el ardor de una primera llama,
conmueve el deseo al hálitoN
X
Nota del traductor

Es decir, la fuerza del deseo mueve a la acción, y Felismena cree que la fuerza del amor de la propia Felismena se le comunicará a él.

, ay imprudenteN
X
Nota del traductor

El final de la exclamación señala el cambio de pensamiento de Felismena en su reflexión: tras pensar revelarle su verdadera identidad a Don Felis, parece cambiar de opinión.

! Después
a tus ojos los mirtos en cipreses trocados
1325
trasladando al deseo una violencia tal
que no podría excusar el rasgo de insolencia,
casi muerta en tus brazos, juzga que con razón
élN
X
Nota del traductor

Don Felis, que creerá que Felismena ha envenenado a Celia, movida por los celos.

creerá que tú fuiste quien le dio el veneno,
siendo así que los celos, insufrible anfitrión,
1330
habrán precipitado los días de la Princesa,
¡ay!, habrías debido tenerlo prevenido,
que un desastre sabido hubiera entretenido,
y habría de esta FilisN
X
Nota del traductor

Alusión a la Filis de la segunda heroída de Ovidio, hija de Licurgo y Crustumena, quien casada con Demofonte creyó que este la engañaba ante la tardanza de éste en volver.

prolongado la trama,
de esta iracunda presa de su recelo,
1335
nosotros, ciegos, nada podemos prevenir
las desgracias diarias que deben ocurrir,
aunque no siempre el tiempo es consejero fiel
ni doctor de los males que la prudencia oculta,
exánime ahora, ¿qué vas a resolver
1340
la mente frágil vaso de dudas combatida?
¿Qué meta te conviene, o que ruta tomar,
de males agobiantes, grávida y alterada?
Sin tu amante en casa prescrito tu regreso,
deja la vanidades y renuncia al Amor,
1345
no rememores más a la que en otro tiempo eras,
aíslate en algún sitio en un desierto idílico,
do la inocencia more, do firme en tu propósito
el resto de tus días halles reposo estable.


ACTO V

ADOLFO, LEOPOLDO, FERNANDO, FELISMENA, DIANA, DANTEO, DUARDA, SIRENO, DON FELIS, GRUPO DE PASTORESN
X
Nota del traductor

Acto basado en el Libro Séptimo de la Diana.

ESCENA I

ADOLFO, LEOPOLDO y FERNANDO

ADOLFO
La castidad, el honor, la virtud y los méritos,
1350
la gloria, la belleza, el amor, los altruismos
que acaban de expirar, que dentro ya del féretro
ponen Cielos y Tierra, y el Universo en duelo
nos corresponde amigos defender su litigio,
el alma de un ajuste justa y apasionada,
1355
no dejar impune a este saqueador extranjero
que pretende ultrajar a todos los germanos,
un tigre disfrazado bajo forma humana,
que ha matado a mi Celia -¡Oh inmenso sacrilegio!-,
captó su alma, confianza, y también el deseo,
1360
y además arrastró mis pobres días aquí;
¡Oh pobre!, pobre Dama, entre los negros mirtosN
X
Nota del traductor

Los frutos del arbusto, en forma de bayas, son de color azul oscuro o negro azulado.

donde el honor paseas de las virtuosas sombras,
recordarás de nuevo que mi voz de profeta
el desastre anunció que evitar tu pudiste,
1365
pero no lo evitaste, pues tu mala fortuna,
a tu desgracia próxima te enviaba obstinada,
pero al menos tu dejas, bienestar triste y tenue,
que hará que este asesino te acompañe en tu suerte.

LEOPOLDO
Ya cierta antipatía cuando nos conocimos
1370
me aguijoneó el pecho con agitada cólera,
desde entonces busqué la ocasión muchas veces
de encontrarnos cual nuevos Alcides y AquelooN
X
Nota del traductor

Aqueloo, además de otras atribuciones mitológicas; como describe Grimal: "Está relacionado con el ciclo de los trabajos de Heracles (Alcides): vecino de Eneo, rey de Calidón, en Etolia, le pidió la mano de su hija Deyanira. Por su condición de dios fluvial, Aqueloo poseía el don de la metamorfosis y podía adoptar la forma que le pluguiera: de toro, de dragón, etc. Esta facultad asustó a Deyanira, que no deseaba tener un marido tan incómodo. Cuando Heracles se presentó en la corte de Eneo y le pidió su mano, ella aceptó inmediatamente. No obstante, Heracles hubo de disputársela a Aqueloo..." (Pierre Grimal: Diccionario de mitología griega y romana, p. 38). Así, la intención de Leopoldo es la de combatir con Don Felis y matarlo, imitando a Hércules que venció a Aqueloo.

;
frecuente en otros muchos es odiar su naciónN
X
Nota del traductor

La nación de Don Felis, es decir, odiar a los españoles.

,
nación altiva, avispa en el honor punzante,
1375
que la Tierra no cree digna de tolerarla
y que la propia Tierra soportar no debiera,
ni siquiera engullir su podrida carroña,
carroña abandonada a los cuervos y lobos.

FERNANDO
Si huyó de la ciudad y nos lleva ventaja,
1380
son nuestras amenazas tan sólo puro viento,
si galgos espoleados van junto con su séquito
si a esta liebre no apremian en una ardiente búsqueda,
viejo, astuto, sabrá encontrar mil desvíos,
y lo mantendrá el miedo siempre en constante impulso.

ADOLFO
1385
El dictamen privado lleva hasta los ManesN
X
Nota del traductor

Los Manes vinculados con los Genios o espíritus protectores, los Lares o dioses familiares y los Penates o dioses de la despensa, eran en la religión romana los que mejor expresaban la fe en la inmortalidad del alma, tras la disolución del cuerpo.

a quien mi Amor ya muerto no puede creer mortal,
de nuevo indica que hay que correr sin parar
de donde nace Febo a donde va a morirN
X
Nota del traductor

Febo, el Dios Sol; así pues: desde donde nace el Sol hasta el ocaso.

,
y que nunca un buen sueño me hará cerrar los párpados
1390
antes de haberlo visto sangrando sobre el polvo
y el alma vomitarlo a las furias de Averno,
yo que tan sólo tengo mi brazo, y esta espada;
espectadores daros el placer de su búsqueda,
no obstante vuestra ayuda debe ser hasta el límite.

LEOPOLDO
1395
No esperaremos más, un cobarde que cohecha
no merece el honor del juicio de los nobles,
no debe ser prendido como un hombre galante,
sino que con ventaja lo golpeen y capturen,
como el miedoso ciervo cuando está acorralado
1400
que de inclinar no deja su cuerna al defenderla,
hiere a perros, monteros que no están en guardia,
y que esperan tan sólo a una bestia miedosa,
aunque inmediatamente, una vez prevenidos
podremos rematarlo sin correr riesgo alguno.

ADOLFO
1405
En mi comarca el hecho se ve más displicente,
una vez aclarada su fuga manifiesta,
vemos los pros y contras, siguiendo luego el rastro
de cerca acosándolo y picando espuelas.

Escena II

FELISMENA, DIANA, DANTEO, DUARDA, SIRENO, DON FELIS, ADOLFO, LEOPOLDO, FERNANDO, GRUPO DE PASTORES

FELISMENA
Vestida de pastora
Sabido habéis pastores la trágica aventura
1410
de un increíble Amor para la etnia futura,
Amor funesto Amor, lleno de hiel y lágrimas,
Amor que me ha rentado espinas, mas no flores,
sin embargo el final favorable me alegra,
ya que aquí sin hastíos, afanes ni condenas,
1415
mi exilio ha encontrado renacer la Edad de Oro,
ya que aquí mi deseo libre no se somete,
ya que aquí los regalos de la fecunda AstreaN
X
Nota del traductor

Hija de Zeus y Temis (la Justicia), y hermana del Pudor, difundió entre los hombres los sentimientos de justicia y virtud. Fue la última diosa que vivió entre los hombres en los tiempos de la Edad de Oro.

a cual mejor parecen, honrando la comarca,
flora siempre frondosa tapiza aquí los prados,
1420
son vuestros campos lirio, tomillo y clavel púrpura,
siempre abunda alta hierba en vuestros pastizales,
la espesura da siempre sombra a vuestros boscajes,
donde siempre sus quejas Filomela reitera,
donde nunca el Invierno se atreve a llegar,
1425
do los robles de miel, y sin labor de abejas
gotean nutricios sobre el pecho de las flores,
Paraíso Terrenal do el inocente Amor
verdadero Elíseo su morada establece,
¡ah!, cómo te bendigo con tu sagrada bandaN
X
Nota del traductor

El grupo de pastores.

1430
que se digna sacarme de adversidad tan grande.

DIANA
La bandaN
X
Nota del traductor

La "santa banda", el grupo de pastores.

hermosa Ninfa tiene por suma dicha,
que le hagas el honor de residir aquí;
tu presencia alegra estos bosques y campos,
elegirte debieron las Dríadas amigas,
1435
pues nos recuerdas tiempos en los que un Dios PastorN
X
Nota del traductor

Alusión a Apolo, quien durante un tiempo guardó los rebaños reales en el Monte Ida de la Tróade.

vivía exiliado con el pueblo boscoso,
su visión reportaba las hierbas saludables
a los rebaños libres de bestias sanguinarias,
libres de los venenos que dañan contagiosos,
1440
y que un Brujo maligno dispara por los ojos,
así tú nos pareces, o incluso más benévola,
harás que su belleza florezca inolvidable.

DANTEO
No hay belleza igual que supere lo humano,
y que la perfección fabricó con su mano,
1445
reina sobre nosotros Palas y PalesN
X
Nota del traductor

Palas Atenea y Pales, a veces confundida con Ceres o incluso con Cibeles, era la diosa de los pastores en los romanos; protegía los rebaños.

juntos,
las discordias urdidas según tu parecer,
discordias que Cupido a modo de retozos
nos suscita al estar sin nada que lo ocupe,
Duarda, a la que ves tan bella como altiva,
1450
después de haberme amado rebelde se emancipa,
desprecia mi ayuda con franqueza ofrecida,
y su desdén no basa en un grave motivo.

DUARDA
Jueza escucha pues, oh divina extranjera,
e instruye lo que él llama un litigio ligero:
1455
el vanidoso antaño cautivaba mi alma,
mas, ¿qué hacer?, si entonces moraba su alma en otra,
los lamentos, las lágrimas, las plegarias perdidas,
las pruebas de amistad inútilmente expuestas,
hasta desatender mi grey por la suya,
1460
la suya que llevaba a las herbosas cumbres,
aun cuando mis ovejas estaban muy dispersas
a merced de los lobos, sin pasto y descuidadas,
numerosos perjuicios por ello ocurrieron
pues en lo marital mi rival tuvo éxito,
1465
breve alegría, ya que después de poco tiempo
mi hombre enviudó, pues ella falleció,
lo inviable desde entonces mis ardores se aplacan,
igual que del pasado el corazón se duele,
tal error cae en olvido por completo enterrado,
1470
mientras que el indiscreto aviva su locura,
desea lo que no puede, y ya nunca podrá,
no obstante hablará de ello de ahora en adelante.

SIRENO
Diana que de un impulso...N
X
Nota del traductor

Parlamento interrumpido por Diana, que no quiere que Sireno cuente su historia.

DIANA
Renuncia, imprudente.

SIRENO
Cuán arduo me resulta callarme la verdad.

DIANA
1475
Ya no tendrás, ingrato, de qué vanagloriarte.

SIRENO
Mas tú en pavonearte ya has empezado tarde.

DANTEO
Sé que se inclinará el fallo a mi favor,
pues ¿cuál es el pecado que la atrición no borre?
No eximas al rendido reparando un error,
1480
aun si les imponen las penas de la muerte.

FELISMENA
Amigos la experiencia, experta nos enseña
que Nos, de Amor soldados, vamos bajo su enseña,
que otros mejor no acuerdan tales contrariedades,
ni siquiera incumbiendo a la pareja de amantes,
1485
miles de impedimentos secretos implicados
que requieren que en público no sean comunicados;
los hay que a menudo juran odio inmortal,
quedando al marcharse más idos que en presencia,
de la guerra la paz, de la paz la guerra
1490
a los que son golpeados con el trueno amoroso,
quien al enamorado cree por la razón guiado
creerá brillar el Sol cuando ya se ha ocultado.

DUARDA
La razón me faltaba, de eso estoy segura,
cuando yo te adoré sabiéndome execrada,
1495
por pensar en él, estos ardores de Amor gélidos
me atrapan nuevamente en unos lazos rotos.

DANTEO
Algún rescoldo aún queda ardiendo en la cenizaN
X
Nota del traductor

En francés moderno la expresión “couver sous la cendre” denota être caché sous la cendre, être en fin d'activité.

de una primera llama, y volverá a encenderla.

DUARDA
Quiera pronto la tierra abrirse y tragarme,
1500
mejor la ira divina en roca me convierta.

DANTEO
¿En roca? Ya lo eres implacable homicida;
Diosa en cuyos designios preside la clemencia,
tú que sabes la pena para evaluar el crimen,
¿soportarías el odio ardiente perviviendo?
1505
¿Si el ingrato falsario que poseyó tu alma
penitente postrado a los pies de su dama,
por los excesos hechos te pidiera indulgencia,
que el valor pudiera con dureza curtir,
rehusar su oración y rechazar su gracia?
1510
No creo que aceptaras, se lee en tu cara.

FELISMENA
¡Ay, veremos qué pasa! No obstante, levemente,
un horrible clamor se esparce por el bosque,
escuchemos, no hay duda de que hay gente luchando.

DON FELIS
¡Traidores asesinos! El Cielo es mi esperanza
1515
una tal cobardía se os volverá funesta,
y prestará su ayuda y amparo al inocente.

ADOLFO
Envenenador pérfido, una Princesa muerta
nos trae el testimonio de que eres inocenteN
X
Nota del traductor

Nótese el recurso a la ironía.

,
vamos, dejadme amigos cumplir mi voluntad
1520
y castigar matando al ladrón insolente.

LEOPOLDO
Nada de eso, a la vez ataquemos rodeándolo,
cien golpes tras su muerte, y otros cien le daré.

FELISMENA
¡Pavoroso espectáculo! Uno solo en el bosque,
audazmente resuelto le planta cara a tres,
1525
ayudemos al débil:

GRUPO DE PASTORES
Mas huyamos veloces,
que los que los ofendan no sobrevivirán.

FELISMENA
Sola pues me enfrento a este asesino cobarde,
traspasará mi lanzaN
X
Nota del traductor

Se trata en realidad de un virote (saeta) de ballesta, más largo que el común y con una virola de hierro en la cabeza.

el pecho de estos pérfidos,
¡quedaos caballeros! ¡Buen Dios qué gran vergüenza!
1530
Tantos contra uno no es un honor el contarlo.

ADOLFO
Perturbada retírate so pena de arriesgarte...N
X
Nota del traductor

El parlamento de Adolfo se ve interrumpido por Felismena.

FELISMENA
Sabrás lo que yo quiero, y puedo socorrerlo.

ADOLFO
Herido de muerte
¡Oh rabia, oh desaliento, oh enorme ignominia!
Vengad mi muerte amigos, una loba enemiga
1535
con un flechazo el pecho me ha atravesado,
que al menos tú no mueras cual digno vencedor.

FELISMENA
Ánimo caballero prosigue valeroso,
los viles vengadores disminuyen en número,
y o moriremos juntos, o un triple Laurel
1540
ornará nuestras testas tras esta lid soberbia.

DON FELIS
¡Cielos, qué gran ayuda! Una rústica Ninfa
hace caer al segundo al abismo plutónico,
rastrea pues los pasos de su viril virtud,
¿por tan poca labor te negarías tú?
1545
No, el bribón morirá sin tardar mucho más,
pues perder a los suyos le hace perder el ánimo.

FERNANDO
¡Ay injustos destinos! ¿Preciso es que cual último
pagar deba tributo al BarqueroN
X
Nota del traductor

Caronte, el barquero del Hades.

fatal,
en la venganza inútil? ¡Estoy perdiendo el habla,
1550
y en las olas de sangre mi alma desaparece!

FELISMENA
Héroe invencible, tus rivales vencidos
respira bajo el peso del esfuerzo sufrido,
distiende tu virtud en mi diestra apoyada,
así antaño Hércules no arrastró a Cerbero
1555
más allá de la orilla del RíoN
X
Nota del traductor

El Río Aqueronte.

, sin que TeseoN
X
Nota del traductor

Los versos 1554-55 aluden al último de los doce trabajos de Hércules: la captura del perro Cerbero para sacarlo de los Infiernos. Se trata de la empresa más difícil que le encarga el rey Euristeo (primo de Hércules y enemigo implacable del titán): Cerbero era un perro con tres cabezas y cola de serpiente que guardaba la entrada del Hades; Hércules debía capturarlo, sacarlo de allí y llevarlo a Micenas. En el Hades se topó con Teseo. el héroe ateniense por antonomasia, al que liberó; Teseo es "el cecropiano", "el ateniano" (de Cecropia, cuyo rey Cécrope fundaría Atenas).

fuese contribuyendo a aquél con su ayuda,
así, dispuesto otrora a sucumbir al número
su padreN
X
Nota del traductor

El padre de Hércules, Zeus.

que veía que sus fuerzas flaqueaban,
llover hizo una horrible tormenta de pedruscos
1560
sobre los enemigos a todos aplastándolos;
comparación sin brillo, sólo para decirte
que poco es lo que puede hacer bien o dañar,
si un valor femenino osa asumir el cargo
de velar por la ley, cuidando a la inocencia.

DON FELIS
1565
Ya seas Amazona, o la fiel Guardabosques
que al Universo prestas su resplandor nocturnoN
X
Nota del traductor

En la mitología romana Diana fue originalmente diosa de la caza; más tarde pasó a ser Diosa de la Luna, a la vez que emblema de la castidad.

,
te doy tras tu servicio este trofeo y el día,
pero otras ilusiones habituales de Amor
retornan a mis ojos, mi pensamiento ocupan,
1570
de nuevo se presenta la excluida Felismena,
tiene de ella su frente, la estatura y el porte,
¡qué verme de pesar insufrible me invade!

FELISMENA
¡Ay! Un hecho confuso e igual me hace creer
ver a un tal Don Felis grabado en mi memoria,
1575
perfecto caballero al que siempre amaré
si ClotoN
X
Nota del traductor

Cloto era una de las tres Moiras griegas, junto con Láquesis y Átropos; presidían la vida de los hombres, cuya trama hilaban sin cesar, de ahí que Felismena utilice el verbo "filer", en el sentido de estirar, alargar la vida.

me alargara los días como a NéstorN
X
Nota del traductor

Apolo, para redimirse del asesinato de los nióbidas (los hijos de Anfión y de Níobe, masacrados por Apolo y Artemisa) le concedió vivir durante más de tres generaciones.

.

DON FELIS
Tú la ves Don FelisN
X
Nota del traductor

Don Felis continúa con su anterior parlamento, en lugar de responder a Felismena.

.

FELISMENA
Él ve a su FelismenaN
X
Nota del traductor

Del mismo modo que Don Felis continuaba con su reflexión, Felismena sigue con la suya; así, al ver la expresión de él, ella piensa que está reconociendo a su Felismena.

.

DON FELIS
Mi mente está ocupada por un hechizo andante.

FELISMENA
Hechizo que no obstante, contiene la evidencia.

DON FELIS
1580
¿Sin la ropa eras digna de que te hubieran creídoN
X
Nota del traductor

El parlamento de Don Felis es interrumpido por Felismena.

?...

FELISMENA
Que no os engañe más el grosero ropaje:
Felismena es pastora, y hasta hace poco paje.

DON FELIS
¡Oh milagro! ¡Oh prodigio! ¿Oh azar venturoso!

FELISMENA
Pastores ya no hay nadie que os hostigue y asuste,
1585
acercaos y veréis al celador de mi alma,
el principio y el fin de mi púdica llama.

DON FELIS
¡Mi vida!

FELISMENA
¡Mi amante!

DON FELIS
¡Mi Reina!

FELISMENA
¡Mi Universo!

DON FELIS
¡Cuántas obligaciones soportar has debido!
¡Lo bien que has aguantado, y paciente la ofensa
1590
hecha a tu lealtad de un perjurio inconstante!
¡Tú misma traicionándote y sin quejarte nada,
reducida a tormentos peores que la muerte!
No puedes, y no debes ya amarme al ser culpable,
de ahora en adelante no merezco tu gracia.

FELISMENA
1595
No hagamos que el pasado vuelva si no es ventura,
cuando han habido males más grata es la memoria,
el glorioso argumento bien valió este cambio,
y vosotros, pastores, no halléis extraño
la súbita confianza que hay con un caballero
1600
que accede a desposarme en la fe conyugal,
aquel cuyas virtudes me tienen sojuzgada,
que equilibra triunfante mi fortuna y mi vida,
que la nao de mis ansias hace anclar en buen puerto,
o se presta a frenarla al borde del naufragio.

DON FELIS
1605
Tropa que la equidad dichosa recomienda
juzga si la equidad conviene a su demanda,
un ingrato, un pérfido, una caña que engaña
que gustosa se curva ante el primer vientoN
X
Nota del traductor

Motivo poético que inmortalizaría La Fontaine en su fábula “Le Chène et le Roseau”:

Le Chêne et le Roseau
Le Chêne un jour dit au Roseau :
« Vous avez bien sujet d’accuser la Nature ;
Un Roitelet pour vous est un pesant fardeau.
Le moindre vent, qui d’aventure
Fait rider la face de l’eau,
Vous oblige à baisser la tête :
Cependant que mon front, au Caucase pareil,
Non content d’arrêter les rayons du soleil,
Brave l’effort de la tempête.
Tout vous est Aquilon, tout me semble Zéphyr.
Encor si vous naissiez à l’abri du feuillage
Dont je couvre le voisinage,
Vous n’auriez pas tant à souffrir :
Je vous défendrais de l’orage ;
Mais vous naissez le plus souvent
Sur les humides bords des Royaumes du vent.
La Nature envers vous me semble bien injuste ».
« Votre compassion, lui répondit l’Arbuste,
Part d’un bon naturel ; mais quittez ce souci.
Les vents me sont moins qu’à vous redoutables.
Je plie, et ne romps pas. Vous avez jusqu’ici
Contre leurs coups épouvantables
Résisté sans courber le dos ;
Mais attendons la fin ». Comme il disait ces mots,
Du bout de l’horizon accourt avec furie
Le plus terrible des enfants Que le Nord eût portés jusque-là dans ses flancs.
L’Arbre tient bon ; le Roseau plie.
Le vent redouble ses efforts,
Et fait si bien qu’il déracine
Celui de qui la tête au Ciel était voisine
Et dont les pieds touchaient à l’Empire des Morts.

El roble y la caña
Dijo un día el roble a la caña:
”Tenéis buenos motivos de acusar a Natura,
para vos hasta un pájaro es un pesado fardo;
la brisa que, por suerte
la faz del agua ondula,
os fuerza a inclinaros:
sin embargo mi frente, semejante al Cáucaso,
con detener los rayos del sol no se contenta,
reta al brío del ciclón.
A vos todo aquilón, para mí todo es céfiro.
Si al menos nacierais por la fronda arropado
cuya vecindad cubro,
no sufriríais tanto,
cuidándoos del tifón;
mas nacéis casi siempre
en los húmedos bordes de los reinos del viento.
La Natura con vos injusta me parece”.
-“El que seáis compasivo, respondióle el arbusto,”
demuestra un buen talante; pero no os inquietéis:
son para mí los vientos menos que a vos temibles;
me doblo, y no me parto. Hasta ahora resististeis
sus golpes espantosos
sin inclinar el dorso;
mas veamos al final.” Diciendo estas palabras,
desde el fin, a lo lejos, se presentó con furia
el más terrible vástago
que el Norte transportara hasta allí en sus costados.
Aguanta bien el árbol, y la caña se dobla.
Sus bríos redobla el viento,
y arranca de raíz
a aquel cuya cabeza vecina era del Cielo,
y cuyos pies tocaban el reino de los muertos.

,
la hizo a fuego lento mustia morir dos veces,
1610
según él, preferible era un peor partido,
a una enterrada viva saca ella de la tumba,
¿quién ve bajo su gracia la antorcha divina,
quién ya luchar no puede contra la providencia,
no debe aceptar su gracia reafirmada?
1615
¿No debe recibir feliz, brazos abiertos,
a la beldad más rara que haya en el Universo?
Nadie al que ilumine del Sol Divino el juicio
debiera opinar, así creo, lo contrario,
y mi promesa aquí nuevamente ante vos
1620
os la jura el deber de un esposo virtuoso.

GRUPO DE PASTORES
Tortolitos que reúne la oculta providencia
del supremo destino puesta en evidencia,
la prez del mundo, tórtolos, y la gloria de Amor
cosecha en adelante la dicha a su vez,
1625
que una santa amistad alejada ha sufrido,
compensa los esfuerzos y hastíos pasados,
en tu felicidad para siempre borrados,
que tus deseos e ideas creen una armonía
que sea durable y sólo y acabe con la muerte,
1630
que Lucina abone y honre tras nueve meses
tu lecho con ramillas de do broten los Reyes
en los que hallar se pueda nuestra última raza
y en vuestra memoria un Asilo de gracia.

DON FELIS
Nuestra felicidad más que el discurso exige,
1635
preciso es que las ansias alcancen libre curso,
y los efectos deben preceder al lenguaje,
la dama ya no puede confiar en esta prueba
con que chocara otrora, ni mi Amor ardiente
caer cual fruta madura que cuelga de su árbol:
1640
Vamos pues a la aldea cercana, caro grupo,
del sacro matrimonio a cumplir el misterio,
luego en la verde hierba, en medio de las flores
donde una sombra espesa evita los calores,
un festín celebremos que recobre los usos
1645
de la dicha inocente que fue la edad primera,
no hace falta que haya manjar superfluo alguno;
ayudadnos amigos tras la última tarea,
a que un soberbio cuadro represente la Historia
de nuestro casto Amor guardando su memoria,
1650
que honre este lugar cual el Astro del día
realiza en el Cielo su habitual rotación.