Guillén de Castro

El conde Alarcos





Texto utilizado para esta edición digital:
Texto incluido en la base Canon 60 - TC/12. Digitalización a cargo de la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes Saavedra, 2014.
Edición digital para CANON 60:
  • Joan Oleza
Adaptación digital para EMOTHE:
  • Martínez Rubio, José (Artelope)

LOS QUE HABLAN EN ELLA SON LOS SIGUIENTES

EL CONDE ALARCOS
MARGARITA
LA INFANTA
EL PRÍNCIPE DE HUNGRÍA
EL REY
GENTE, que acompaña al Rey
UN CAPITÁN
UN MAYORDOMO
CARLOS, hijo del Conde
ELENA, hija del Conde
CRIADOS, del Rey
HORTENSIO, criado
ALGUNOS VILLANOS
FABRICIO, criado
UN PAJE
DUQUE, grande del Reino
MARQUÉS, grande del Reino
MARCELO

Jornada I

Salen el CONDE y MARGARITA.

CONDE
Vuelve a mi cuello esos lazos,
del alma alegres despojos.

MARGARITA
Para verte y darte abrazos,
quisiera infinitos ojos
5
y más que infinitos brazos.
¡Mi Conde!

CONDE
¡Mi Margarita!

MARGARITA
¿Cómo lo pasaste allá?

CONDE
Con pena más que infinita,
mas, si muere el que se va,
10
el que vuelve resucita.
Y tú, mi alegría, aquí
muerta estarías también.
¿Cómo estuviste?

MARGARITA
¡Ay de mí!
para responderte bien
15
basta decir que sin ti,
y sin mí, pues quedé tal...

CONDE
¿Fue cierto aquel accidente?

MARGARITA
Y hubiera de ser mortal.

CONDE
Di que crece el bien presente
20
referir, pasado, el mal.

MARGARITA
Cuando, a mi pesar, partiste
por general a esta guerra,
llorando tus desengaños,
di crédito a mis sospechas,
25
porque, entre muchas señales
tan penosas como ciertas,
vi crecerme la barriga
casi al compás de la pena.
Por tener con estas sobras,
30
señor, mis faltas secretas,
¡qué hice de fingimientos,
qué compuse de cautelas!
Así pasé nueve meses,
pero al cabo dellos llegan
35
los dolores con la noche,
que nunca la vi más negra.
Vime ¡ay triste! en mi aposento,
con sola mi camarera,
que con lágrimas no más
40
acompañaba a mis quejas,
y éstas, mi bien, no salían
del pecho sino por señas,
porque en llegando a la boca
yo les cerraba la puerta.
45
De una sábana mordía
con el miedo, y así eran,
aumentando la congoja,
sordo el llanto y mudas ellas,
aunque no lo fueron tanto
50
que, con la pasión inmensa,
no saliese algún gemido.
Oyéronle mis doncellas,
dieron aviso a la Infanta;
vino a verme, y yo, por fuerza,
55
descubrile mi secreto,
dile parte de mi pena.

CONDE
¿A la Infanta?

MARGARITA
Sí, a la Infanta.
Y me esforzaba ella mesma
con las manos, con los brazos,
60
con los ojos, con la lengua.
Con su ayuda y la del cielo
tomé aliento, tomé fuerzas,
defendiéndome la vida
el no cansarme de hacellas.
65
Nació así el más bello infante
que formó naturaleza,
al punto que el sol nacía
alumbrando cielo y tierra,
que, según tardó, imagino
70
que esperaba a que naciera,
porque le imitara en esto
quien le imita en la belleza.
La Infanta se le llevó
y yo quedé casi muerta.
75
Dice que a criar le ha dado
porque la vida le deba.

CONDE
¿Ella le tiene?

MARGARITA
Y le ampara.
Ruego al cielo que parezca
a su padre en el valor
80
y a su madre en la firmeza.
La color tienes turbada,
di la causa, Conde, amigo.
Dime ¿qué tienes?

CONDE
No es nada.

MARGARITA
Pues, ¿tú, secretos conmigo?

CONDE
85
¿Y tú conmigo enojada?
Óyeme.

MARGARITA
Tengo razón.

CONDE
Yo te diré la ocasión,
porque dello no te ofendas:
la Infanta adora mis prendas
90
quizá porque tuyas son;
y así, Margarita hermosa,
su rigor vengo a temer,
que la invidia es poderosa,
y más en una mujer
95
aborrecida y celosa.

MARGARITA
Con causa afligido estás,
mas tú la culpa has tenido
de la pena que me das;
bien dicen que el ofendido
100
ignora estas cosas. Mas
¿cómo has callado, señor,
y tanto?

CONDE
El darte martelos,
fuera ofender tu valor,
que el que enamora con celos
105
sin duda le falta amor.
Y el que descubrir pretende
los amores de otra dama,
a la que su pecho enciende,
en el gusto y en la fama
110
la una enfada y la otra ofende
y con las dos desmerece.

MARGARITA
¿Cómo la Infanta al de Hungría
entretiene y favorece?

CONDE
Pienso que en mi amor se enfría
115
y a sus quejas se enternece.

MARGARITA
Parece que te ha pesado:
las colores te han salido
que antes se habían entrado.

CONDE
Tu imaginación ha sido,
120
que hace efecto en tu cuidado.
Mas, pues he llegado a verte,
serás mi esposa, señora;
esta mano he de ofrecerte,
que, a no venir vencedora,
125
no pudiera merecerte.
¿Perderás así el recelo
de lo que aquí imaginaste?

MARGARITA
Darásle al alma consuelo...
mas la Infanta viene.

CONDE
Baste.

MARGARITA
130
Voyme, adiós.

CONDE
Guárdete el cielo.

MARGARITA
¿Mostraraste agradecido
si lo que hizo por mí
te dijere?

CONDE
Harélo así.

(Vase MARGARITA y sale la INFANTA.)

INFANTA
Seas, Conde, bien venido.

CONDE
135
Pues vengo a servirte a ti.

(Arrodíllase el CONDE.)

INFANTA
Levántate.

CONDE
Si tu Alteza
me da las manos primero.

INFANTA
Cubre, Conde, la cabeza,
y cubre el pecho de acero,
140
y escúchame.

CONDE
(Aparte.)
(Mal empieza.
Si es que matarme pretenden,
podréme así prevenir.)

(Levántase el CONDE.)

INFANTA
No me podrás resistir,
si mis razones te ofenden,
145
las que te quiero decir,
y en ellas podrás mirar
si son limpias y sencillas,
pues aunque vengo a pensar
que te ofenderá el oíllas,
150
no te las puedo callar.
¿Por qué con tanta crueldad
menosprecias deste modo
mi alteza, mi calidad,
mi reino y mi voluntad,
155
que te obliga más que todo?

CONDE
¿Cómo preguntas por qué,
pues tú lo sabes mejor?

INFANTA
Bien dices que yo lo sé.

CONDE
A quien debo fe y honor,
160
pago con honor y fe.

INFANTA
Muy empeñado estarás,
si debes a Margarita
o el honor que tú le das
o el honor que ella te quita,
165
que yo sé, Conde, que es más.
¿Qué te suspende y altera?
¿Cómo engañado has vivido
dejando...

CONDE
(Aparte.)
(¡Ah, cruel, ah, fiera!)

INFANTA
...por un gusto repartido
170
una voluntad entera?

CONDE
(Aparte.)
(¡Oh lengua infame y maldita!)
¿No sabes que Margarita
entera en mi pecho está?
¿Quien toda el alma me da
175
dices que el amor me quita?
Ese lenguaje importuno
deja, señora, por Dios,
aunque para mí es ninguno.

INFANTA
La mujer que quiere a dos
180
¿no es cierto que ofende al uno?

CONDE
A mí sólo me ha querido.
¿Dónde tus intentos van?

INFANTA
Bien engañarte ha sabido:
quiérete a ti por marido,
185
y al de Hungría por galán.

CONDE
(Aparte.)
(¡Oh, terrible confusión!
Esta me miente, no hay duda,
con la celosa pasión.)

INFANTA
(Aparte.)
(De mil colores se muda.)

CONDE
190
¿No sabes que primos son
Margarita y el de Hungría?
Del pensamiento desvía
esa sospecha importuna.

INFANTA
Conde, la sangre que es una,
195
unos pensamientos cría,
y estos la juntan mejor,
para que el mundo engañado,
como es tan uno el color,
no advierta que se ha mezclado.

CONDE
200
(Aparte.)
(¡Ay, mal nacido temor!)
¿Que no me quieres dejar?
¿Quiérete el Príncipe a ti
y dasme a mí ese pesar?

INFANTA
¡Qué bien te supo engañar!

CONDE
205
¿Luego esto es engaño?

INFANTA
Sí,
y desa misma razón
verás que pende tu daño,
pues en cualquiera ocasión,
a la sombra de ese engaño
210
disimula su traición,
y a decirte habrá probado
que el niño que ella parió
y que yo al Príncipe he dado,
era tuyo.

CONDE
Sí ¿pues no?
215
¿Qué dices?

INFANTA
Que te ha engañado.

CONDE
¿No es el niño prenda mía?

INFANTA
¿Tuya? Del Príncipe es,
que hereda el reino de Hungría.
Cuando es la traición con pies,
220
alcanza cuanto porfía.
Y que me le ha dado, es cierto,
para que a él se le diese;
y, diciendo que era muerto,
para contigo estuviese
225
este secreto encubierto.
Mira si, della ofendido,
es justo que a mí me trates
con desdén y con olvido.

CONDE
Fuertes son estos combates,
230
pero a mí no me han vencido.
Que no es mi pena tan loca
que turbe así mis sentidos,
y este fuego que me toca
llega helado a mis oídos,
235
aunque está ardiendo en tu boca.

INFANTA
A mal parecer se arrima
tu opinión, no hay bien que espere.
(Aparte.)
(Su valor me desanima.)

CONDE
Quien no confía no estima,
240
y quien no estima no quiere.
Yo, que en Margarita bella,
estimo tanto el valor,
la fineza de mi amor
pruebo en confiarme della.

INFANTA
245
(Aparte.)
(Esfuércese mi rigor,
crezca el llanto, atice el fuego,
que a tan gran desdicha llego.)
Son tus sinrazones muchas,
mas, Conde, pues sordo escuchas,
250
yo he de ver si miras ciego.

CONDE
¿Cómo así?

INFANTA
Haciéndote ver
lo que creerme no quieres.

CONDE
Entonces podría ser.
(Aparte.)
(¿Quién fiará de mujeres,
255
si Margarita es mujer?)

INFANTA
Donde la sueles hablar
esta noche has de venir:
pero has de ver y callar.

CONDE
Mejor dijeras morir
260
donde me acabe el pesar.

INFANTA
Pero en viendo el torpe efeto,
has de hacer por mí una cosa.

CONDE
Cuantas pidas te prometo.

INFANTA
Recebirme por esposa.

CONDE
265
Yo lo ofrezco.

INFANTA
Yo lo aceto.

(Vase entrando el CONDE poco a poco por la una puerta, y van saliendo el PRÍNCIPE DE HUNGRÍA y MARGARITA por la otra.)

CONDE
Yo me voy.

PRÍNCIPE
Yo, prima mía,
temblando de miedo vengo.

MARGARITA
Llega sin él y porfía.

PRÍNCIPE
Yo le perderé, pues tengo
270
una estrella que me guía.

INFANTA
(Aparte.)
(La ocasión viene extremada
para acreditar mi engaño)
Comience tu desengaño.
Tal viene que, de turbada,
275
no te ha visto.

[Al PRÍNCIPE.]

MARGARITA
Estás extraño.

INFANTA
Si te ve, no habrá lugar
de desengañarte más.
Vete, Conde ¿Cuál te vas?

[Al PRÍNCIPE.]

MARGARITA
Agora puedes llegar.

[A MARGARITA.]

PRÍNCIPE
280
Si eso en mi favor se ordena,
no será mi suerte poca.

(Da muestras de gran sentimiento el CONDE.)
[Por el CONDE.]

INFANTA
¡Con qué rabia se provoca!
Por señas dice la pena
que le ha cerrado la boca.

PRÍNCIPE
285
¿Con qué pagarte podré
lo que debo al bien que gano?

(Al entrarse el CONDE cáesele el sombrero y dale con el pie.)

INFANTA
Loco va; el sombrero fue
que le cayó de la mano
y le arroja con el pie.

PRÍNCIPE
290
Todo el cielo vengo a ver
en este rostro divino;
mas temo, porque imagino
que te enojo.

INFANTA
¿Ha de temer
quien tiene tan buen padrino?

MARGARITA
295
¿A quién habrá que no asombre
la merced que me concedes?

INFANTA
Todo conmigo lo puedes.

MARGARITA
Señora, y ¿podré en tu nombre
dar premios?

INFANTA
Y hacer mercedes.

PRÍNCIPE
300
Pues dellas vendré a tener
esperanza.

MARGARITA
Mucho puedo.

INFANTA
Porque te las pueda hacer
quiero irme, y le concedo
un absoluto poder.

PRÍNCIPE
305
Mira que seguro estoy
que se apasiona por mí.

INFANTA
Y aun por eso se lo doy.
Oye, Margarita.

MARGARITA
Di.

(Háblanse al oído la INFANTA y MARGARITA.)

INFANTA
Escucha.

PRÍNCIPE
Dichoso soy.
310
¡Cielo divino! ¿Qué advierto?
Es tan grande, es tan sobrada
la gloria en que me divierto,
que me parece soñada.
¿Si duermo? ¿Si estoy despierto?

INFANTA
315
Adiós, Príncipe.

PRÍNCIPE
Él te guarde.

(Vase la INFANTA.)

MARGARITA
Agora ya no estarás,
como otras veces, cobarde.

PRÍNCIPE
Di.

MARGARITA
¿Tardo?

PRÍNCIPE
No esperes más,
que no hay gloria que no tarde.

MARGARITA
320
A premiar tu amor y fe
la Infanta su gusto allana.
Haz una seña y saldré
esta noche a la ventana
donde otras veces te hablé,
325
y en sabiendo que está abierta,
por la puerta del jardín
entrarás.

PRÍNCIPE
Si se concierta
esto así, dichoso fin
das a mi esperanza muerta.
330
A ti te debo esta palma,
prima del alma querida,
a ti te debo la vida
y a ti te consagro el alma.

MARGARITA
Y a mí me tienes corrida.

PRÍNCIPE
335
Dame los pies, que me toca
estallos siempre adorando.

MARGARITA
Es mucha merced.

PRÍNCIPE
Es poca,
pues lo que fueres pisando
he de barrer con la boca.

(Vanse.)
(Sale el CONDE.)

CONDE
340
Ya llego, enemiga suerte,
a entrar en cuentas contigo,
mas ¿con qué pasos te sigo
cuando espero el de la muerte?
¿Que es posible persuadirme
345
esta pena que me incita?
¿Que es mala mi Margarita,
y con ser piedra no es firme?
Mas de un miedo tan cobarde
me resisto y me acompaño,
350
que espero mi propio daño
y me pesa de que tarde,
como el que en el campo aguarda
al contrario en quien se venga,
que desea que no venga
355
y le parece que tarda;
como el que en naufragios tales
el miedo y congoja aumenta,
esperando la tormenta
de que ha tenido señales;
360
como el que sobre un tablado,
para fin de sus enojos,
con una venda en los ojos
espera el cuchillo airado,
y al fin, por decir mejor,
365
como yo mesmo diré,
que hago prueba de una fe
con sospecha y con amor.

(Sale el PRÍNCIPE.)

PRÍNCIPE
Noche más bella que el día,
cielo hermoso, luces bellas
370
¿quién, entre tantas estrellas,
pudiera adorar la mía
pues acaba tantos males
logrando sólo un deseo?

(Hace una seña el PRÍNCIPE.)

CONDE
Ya de mis desdichas veo
375
de más cerca las señales.

(Sale MARGARITA a la ventana.)

MARGARITA
Mi príncipe.

PRÍNCIPE
Mi señora.

MARGARITA
La puerta he dejado abierta.

PRÍNCIPE
Dichoso yo.

MARGARITA
Ve a la puerta;
ya te espera quien te adora.

(Éntrase MARGARITA y el PRÍNCIPE se va.)

CONDE
380
¡Ojos que la causa vistes
de la pena a quien resisto!
¿Es verdad lo que habéis visto?
¡Ojos ciegos, ojos tristes!
Cielo, decídmelo vos,
385
si es verdad o son antojos,
y, pues tenéis tantos ojos,
mirad si se engañan dos.
Si es esto verdad o engaño,
con todos ellos mirad;
390
pero sin duda es verdad,
pues ha de ser en mi daño.
¿Que me supiese engañar
Margarita pudo ser?
¡Ah, voluntad de mujer,
395
ligera espuma en el mar,
torre con falso cimiento
que la pierde quien la hace,
nube que al sol se deshace,
humo que se esparce al viento;
400
anuncio cierto del mal,
voz de engañosa sirena,
agua echada sobre arena,
que apenas deja señal,
luz que haciendo mejor cara
405
muestra que morir se quiere,
fuego que atizado muere,
piedra que en su centro para;
al sol derretida nieve,
aire en redes recogido,
410
villano amigo corrido
que no os habla porque os debe,
rayo que abrasando pasa;
rigor, engaño, traición,
laberinto, confusión
415
desta Troya que se abrasa!

(Sale la INFANTA a una ventana y MARGARITA a otra, y vuelve a salir el PRÍNCIPE por donde entró.)

INFANTA
[Aparte.]
(Voces oigo. Mi traición
ha hecho esta vez su efeto.)
Ce, Conde: si eres discreto,
muéstralo en esta ocasión.

MARGARITA
420
[Aparte.]
(¿No es el Conde? ¿Qué recelo?)

PRÍNCIPE
[Aparte.]
(¿Qué puede haber sucedido?)

CONDE
[Aparte.]
(A la ventana han salido.)

MARGARITA
[Aparte.]
(El Conde es, sin duda ¡ay, cielo!)

INFANTA
Tu paciencia es bien que pruebes,
425
cuando yo a servirte pruebo.

CONDE
Ya sé que el honor te debo.

INFANTA
Y una palabra me debes:
de cumplilla luego trata.

MARGARITA
[Aparte.]
(¿Qué escucho?)

PRÍNCIPE
[Aparte.]
(¿Qué vengo a ver?)

INFANTA
430
¿Qué dudas?

CONDE
Rey quiero ser,
pues Margarita es ingrata.

PRÍNCIPE
[Aparte.]
(De penas soy un abismo.)

MARGARITA
[Aparte.]
(Infelice y triste estrella.)

CONDE
Por tomar venganza della
435
la tomaré de mí mismo.
De ser tu esposo te doy
palabra.

INFANTA
Y de ser tu esposa
la recibo.

PRÍNCIPE
[Aparte.]
(¡Extraña cosa!)

MARGARITA
[Aparte.]
(¿Que tan desdichada soy
440
que a morir rabiando vengo?)

PRÍNCIPE
[Aparte.]
(¿Que tan mal se corresponde
a una amistad?)

INFANTA
Adiós, Conde,
honrados testigos tengo,
y no me podrás negar
445
la palabra que me has dado.

CONDE
Ve, señora, sin cuidado,
que yo te la vuelvo a dar.

(Éntrase la INFANTA.)

PRÍNCIPE
Quitarete yo el vivir,
para que, Conde atrevido,
450
ya que dársela has podido,
no se la puedas cumplir.

MARGARITA
Teneos ¿qué daño se ordena?
Procurarelo estorbar,
si acaso puedo llegar
455
sin que me acabe la pena.

(Éntrase MARGARITA.)

CONDE
¿A eso te obligas?

PRÍNCIPE
Sí obligo.
Quitarte la vida quiero,
pero confiesa primero
que mueres por falso amigo.

CONDE
460
Tengo yo muy duro el pecho
y no le podrás pasar,
y no es razón confesar
los pecados que tú has hecho.

PRÍNCIPE
Pues ¿yo, falso amigo?

CONDE
Sí.

PRÍNCIPE
465
No ofendas mi trato noble.

CONDE
Mejor le dijeras doble,
pues lo ha sido para mí
Tu fingido sentimiento,
aunque me ofenda, me agrada.

PRÍNCIPE
470
No te matará mi espada,
pues no te ha muerto mi aliento,
que puro veneno arroja.

CONDE
Iguales armas tenemos.

(Sale MARGARITA y pónese en medio.)

MARGARITA
¡Qué rigurosos extremos
475
de desdicha y de congoja!
¡Príncipe, Conde!

CONDE
¡Ah, traidora,
que tú la culpa tuviste!

MARGARITA
Volved a mi pecho triste
esas espadas.

PRÍNCIPE
Señora...
480
Apártate, prima.

MARGARITA
Primo.

PRÍNCIPE
Seré su justo homicida.

MARGARITA
No ha de perderse una vida
a quien con el alma estimo.

CONDE
¡Oh, falsa, Dios te destruya!

MARGARITA
485
¿Yo soy falsa?

CONDE
¡Infame eres!

MARGARITA
Seré lo que tú quisieres
por no dejar de ser tuya.
Señores, tanto rigor...
Acordaos que soy mujer.

PRÍNCIPE
490
Yo le tengo por volver
por mi gusto y por mi honor;
pero justa cosa es
obedecerte, señora.

CONDE
Yo pienso escucharte agora
495
para dejarte después.

PRÍNCIPE
Prima ¿tú no me dijiste
cómo eras del Conde ya?
¿La palabra, donde está,
que te ha dado y que le diste?

CONDE
500
Si ese secreto escondía
tu pecho ¿no me ha ofendido,
pues que por tuya ha tenido
una prenda que era mía?

PRÍNCIPE
¿Qué prenda?

MARGARITA
Duros enojos.

CONDE
505
Esta enemiga, esta ingrata...

PRÍNCIPE
Con mejor término trata.

CONDE
Pues lo que han visto mis ojos
¿me niega vuestra porfía?
Tú, ¿no le dijiste agora:
510
«ya te espera quien te adora»?

MARGARITA
[Aparte.]
(Por la Infanta lo diría.)
Conde, mi pena cruel
ha de hallar el mundo estrecho,
pues estando tú en mi pecho
515
¿te fías tan poco dél?

PRÍNCIPE
Si te ha dado esa sospecha,
Conde, algún pecho villano...

MARGARITA
Ya yo conozco la mano
que ha despedido esta flecha,
520
pero en más secreta parte
quiero que oigáis mi razón:
darete satisfacción.

PRÍNCIPE
Y yo también quiero darte
la que de mi honrado pecho
525
saldrá ardiendo por ser tuya.

CONDE
La menor lágrima suya
me dejará satisfecho.

(Vanse todos y sale el REY, y un CAPITÁN, y GENTE de acompañamiento.)

REY
Muy bien el Conde ha probado...

CAPITÁN
Sus hechos te lo dirán:
530
es famoso Capitán.

REY
Es, Capitán, gran soldado.
Cuéntame algunas hazañas
de las suyas.

CAPITÁN
Son famosas,
mas parecen milagrosas.
535
Escucha las más extrañas...
Mas la Infanta, mi señora,
viene ya.

REY
Déjalo, pues.
Vete en paz.

CAPITÁN
Beso tus pies

(Vase el CAPITÁN. Sale la INFANTA.)

INFANTA
Dame las manos.

REY
¿Es hora
540
de veros, hija?

INFANTA
Señor,
siempre en servirte me empleo.

REY
¿Nacieron de mi deseo
los efetos de tu amor,
hija?

INFANTA
Señor...

REY
Dime padre.

INFANTA
545
Dulce nombre para mí.

REY
O hijo, pues tengo en ti
una hija y una madre,
y soy, cuando el cuello ciño,
que es mi arrimo y es mi espejo,
550
hijo tierno, padre viejo,
porque de viejo soy niño.
Viéndome, pues, deste modo,
temo ¡ah, miserias humanas!
que en la nieve destas canas
555
no se hiele el cuerpo todo.
Respecto desto, hija mía,
y de mi reino heredera,
casarte...

INFANTA
(¡Ay, triste!)

REY
...quisiera
con quien hereda el de Hungría.
560
Este por esposo ten,
que será más conveniente,
demás de que es tu pariente
y sé que te quiere bien,
y ha meses que me importuna,
565
digo mal, que honrar nos quiere
a los dos.

INFANTA
(¿Qué habrá que espere
de mi contraria fortuna?)

REY
¿No respondes?

INFANTA
Señor...

REY
¿Es
que te has turbado?

(Salen el PRÍNCIPE y el CONDE.)

PRÍNCIPE
Ya es hora
570
de hablalle, ven.

REY
Calla agora,
responderasme después.

CONDE
¿Tal maldad pudo caber
en pecho noble?

PRÍNCIPE
Es ingrato,
pero, aun viendo su mal trato,
575
no la puedo aborrecer,
aunque muy con otro intento
la quiero. Deme la mano
(Llegando al REY.)
Vuestra Majestad.

CONDE
[Aparte.]
(¡Cuán vano
saldrá tu mal pensamiento!)

REY
580
Démela a mí Vuestra Alteza.

CONDE
Yo espero que me la dé
(Arrodíllase el CONDE.)
Tu Majestad.

REY
Ponte en pie,
Conde, y cubre la cabeza.

CONDE
Como tu vasallo soy,
585
te la pido arrodillado.

REY
A quien es tan gran soldado
los brazos también le doy.

(Levántase el CONDE.)

INFANTA
(Aparte.)
(No poca sospecha tengo
de aquesto, y tengo razón.)

REY
590
Pues, Príncipe ¿qué ocasión
os trae?

PRÍNCIPE
A servirte vengo,
y después a ver si gustas
de un casamiento que trato.

REY
¿Casamiento?

INFANTA
(Aparte.)
(¡Ay, Conde, ingrato
595
a mis lágrimas injustas!)

REY
¿De quién?

PRÍNCIPE
Del Conde y mi prima
Margarita.

REY
Es muy hermosa,
muy discreta.

INFANTA
Y muy dichosa,
que es más.

REY
Con razón la estima
600
el Conde, y pues la merece,
y es su gusto, yo le tengo
de dársela.

CONDE
Y yo prevengo,
para el bien que se me ofrece,
el pecho, aunque viene a ser
605
para tanta gloria estrecho.

REY
Quien tiene tan grande pecho,
toda la habrá menester.

CONDE
Pero después de besarte
los pies, por merced tan alta,
610
para recebilla falta
lo que quiero suplicarte,
y es que no haya dilación,
y que me la otorgues luego.

REY
Sea ansí.

INFANTA
(Aparte.)
(Mi propio fuego
615
abrase tu corazón.)

REY
Vaya la Infanta, que es justo.

INFANTA
[Aparte.]
(¿Qué haré, cielos soberanos?)

REY
Que ella la ponga en sus manos,
después de saber su gusto.
620
Ve, hija.

INFANTA
[Aparte.]
(¡Qué penas paso!)

CONDE
[Aparte.]
(Contento infinito tengo.)

PRÍNCIPE
[Aparte.]
(Desta manera me vengo.)

INFANTA
[Aparte.]
(En esta pena me abraso.)

(Vase.)

REY
Con muchas fiestas quisiera
625
que sus bodas celebrara
el Conde.

CONDE
Mucho estimara
la merced que se me hiciera.
Aunque yo, por escusallas,
para decirte verdad,
630
supliqué a Tu Majestad
que escusara el dilatallas.

REY
Pues con tu gusto convengo,
gózale, Conde, que es justo.

CONDE
Por esperar otro gusto
635
pusiera en duda el que tengo.

REY
¿Cómo así?

CONDE
La dilación
quizá me hubiera acabado.

PRÍNCIPE
Habla como enamorado
el Conde.

REY
Y tiene razón.

(Salen la INFANTA y MARGARITA hablando aparte, y MARGARITA muy turbada.)

INFANTA
640
¿Que así me pierde el decoro
tu falso pecho traidor?

MARGARITA
¿Quieres que pierda el honor
y que deje a quien adoro?
Mira, señora...

INFANTA
Has de ver...

MARGARITA
645
...con cuanta razón me aflijo.

INFANTA
...muerto en tus manos tu hijo,
a quien tengo en mi poder,
en llegando a ser esposa
de quien el alma me tiene.
[A ellos.]
650
Aquí Margarita viene,
aunque viene algo dudosa.

PRÍNCIPE
¿Duda tiene?

REY
¿Y en qué duda?

CONDE
¿Qué habrá sido la ocasión?

MARGARITA
(Aparte.)
(Las ansias del corazón
655
me tienen la lengua muda.)

REY
¿Sabes del Conde el valor
y las prendas?

MARGARITA
[Aparte.]
(¿Qué haré?)

PRÍNCIPE
¿No respondes?

MARGARITA
(Aparte.)
(También sé
de mi desdicha el rigor.)

REY
660
No te turbes.

MARGARITA
[Aparte.]
(Suerte avara.)

CONDE
[Aparte.]
(Cielo, el alma se me parte.)

REY
Hija, pregúntale aparte
qué duda o en qué repara.

INFANTA
Voy... Margarita...

MARGARITA
[Aparte.]
(¡Ay de mí!)

PRÍNCIPE
665
[Aparte.]
(Mal conoce lo que gana.)

(Las dos aparte.)

INFANTA
Muerto le verás, villana
si pueden sacarte un sí.

MARGARITA
Infanta, señora, escucha.
¿Y que serás tan crüel?

INFANTA
670
Y aun haré que comas dél.

MARGARITA
Mucha es tu inclemencia.

INFANTA
Mucha.
(A ellos.)
No se quiere declarar.

CONDE
Pues de la empresa desisto,
que ya en sus dudas he visto
675
que tiene por qué dudar.

MARGARITA
(¡Ay, cielo, su gusto haré,
y el cielo me dé paciencia
si mata al niño!)

CONDE
Licencia
Vuestra Majestad me dé...

REY
680
Con razón te has ofendido.

PRÍNCIPE
Y mucha. Presto se muda
una mujer.

MARGARITA
Esta duda
de alguna causa ha nacido;
mas aunque en mi fe has dudado,
685
yo te doy mano de esposa.

CONDE
Y yo de esposo.

PRÍNCIPE
Dichosa
duda, que en esto ha parado.

REY
Logrado habéis mi deseo:
a los dos quiero abrazar.

CONDE
690
Las manos nos puedes dar.

INFANTA
[Aparte.]
(¿Que esto he visto y que esto veo?
¿Que al fin se han dado las manos?
Pues ofendida, y mujer,
grima del mundo he de ser,
695
y asombro de los humanos.)

CONDE
Y Vuestra Alteza me dé
las manos.

MARGARITA
Y a mí los pies.

INFANTA
Tomad los brazos.
(Aparte.)
(Después
yo sé, infames, qué os daré.)

MARGARITA
700
[Aparte, a la INFANTA.]
(¡Ah, crüel!)

CONDE
Muestras con eso
lo que nos quieres honrar.

INFANTA
[Aparte, a MARGARITA.]
(¡Ojalá fueran de mar,
que no os soltaran tan presto!)

MARGARITA
Tú, Príncipe...

PRÍNCIPE
Prima mía,
705
Conde...

CONDE
No huyas las manos.

INFANTA
(Aparte.)
(De vuestra sangre, villanos,
pienso hacer una sangría.
Por vengar el fraude y dolo
de que los tres sois testigos,
710
sangre de tres enemigos
he de sacar de uno sólo.)
(Salen el MAYORDOMO del Rey y otros criados, y al uno dellos habla la INFANTA aparte, y sacan una mesa.)
Oye.

MAYORDOMO
Mudad esa mesa
de donde está a ese lugar.

MARGARITA
[Aparte.]
(No se puede sosegar
715
mi pecho.)

CRIADO
[Aparte.]
(¡Terrible empresa!)

INFANTA
Si de hacello me prometes,
haré cuanto te prometas.

MAYORDOMO
Poned cinco servilletas,
tres sillas, dos taburetes.

INFANTA
720
Ve volando.

CRIADO
[Aparte.]
(Extraños tratos
de mujer.)

INFANTA
[Aparte.]
(Rabioso fuego.)

(Vase el CRIADO que habló con la INFANTA y van empezando a servir la comida.)

MAYORDOMO
Venga la comida luego.
Y... pajes: no falten platos.

REY
Lo que digo ha de ser hoy.

CONDE
725
por ser tu gusto lo apruebo.

REY
Veréis que sé lo que os debo
si miráis a lo que os doy.
A mi mesa y a mi lado
habéis de comer, que es justo.

INFANTA
730
Y el principio de más gusto
le tengo yo aparejado.

CONDE
En todo tu gusto es ley.

PRÍNCIPE
Lo que mereces te ofrece,
que honra de reyes merece
735
un vasallo de tal rey.

(Siéntanse el REY, la INFANTA, el PRÍNCIPE, en las sillas, y el CONDE y MARGARITA en los taburetes, y traen aguamanos.)

CONDE
Hoy este oficio he de hacer,
pues tú me quieres honrar.

REY
Sí, que bien puedes lavar
manos que te han de valer.

(Da el CONDE aguamanos al REY.)

CONDE
740
Por esa merced las beso.
También te suplico a ti
que me honres en esto.

INFANTA
Así
no quiero emplearte, en eso.

CONDE
Esta merced me has de hacer.

INFANTA
745
No pienso lavarme hoy.

CONDE
¿Porque yo el agua te doy?

INFANTA
¿Sabes que la he menester?

CONDE
Ya vi que en cosas tan graves
emplearme no querrías.

INFANTA
750
¿En que me lave porfías?
¿Alguna mancha me sabes?

PRÍNCIPE
(Aparte.)
(¡Oh falso pecho traidor!)

INFANTA
Yo misma, que a saber vengo
adónde la mancha tengo,
755
sabré lavalla mejor.

CONDE
No te quiero porfiar.

INFANTA
Pero, por pagarte, sabe
que el agua con que se lave,
a tu esposa quiero dar,
760
y quedarásme obligado.

MARGARITA
Correr me quieres.

INFANTA
¿Por qué?
Las manos te lavaré
por la mano que te ha dado.

CONDE
Más corrido quedo yo,
765
pues ha venido a mostrarse
que habrá menester lavarse
quien la mano me tocó.

INFANTA
Si esto es correrte, por ti
también corrida he quedado,
770
pues de lo que ella ha tocado
me queda la mancha a mí,
y así, pues en mí quedó,
del tocarte ella también,
como ella se lave bien
775
quedaré sin mancha yo.
Una agua le quiero dar
que es más limpia, y no tan clara,
colada por alquitara.

PRÍNCIPE
(Aparte.)
(Esto se puede esperar.)

INFANTA
780
No es de rosa ni de flor,
aunque flor y fruto ha sido,
y el fuego en que se ha cocido,
cuando menos, es de amor.
Será de color de grana,
785
y de polvo que es más fina.

CONDE
(Aparte.)
(¿Esta falsa, qué imagina?)

MARGARITA
(Aparte.)
(¿Qué pretende esta villana?)

(Sale el CRIADO que envió la INFANTA con un jarro de plata y un plato cubierto con otro.)

INFANTA
Ya viene.

MARGARITA
Tu esclava soy,
señora.

INFANTA
Ten, por mi amor,
790
pues pienso cobrar honor
con el honor que te doy.

MARGARITA
Quien con tal grandeza nace
que merezca merced tanta.

REY
Dejad hacer a la infanta,
795
que ella sabe lo que hace.

MARGARITA
A servirte me acomodo.

PRÍNCIPE
(Aparte.)
(¡Ay, enemiga sin ley!)

CONDE
El fiel vasallo a su rey
ha de obedecer en todo.

(Toma la INFANTA el jarro y da aguamanos a MARGARITA con la sangre de su hijo.)

INFANTA
800
No te turbes, toma.

MARGARITA
¡Ay triste!

INFANTA
¿Qué miras? ¿Qué reconoces?
¿Es tuya y no la conoces?

MARGARITA
¿Qué miro?

CONDE
¡Ay, cielo!

REY
¿Qué hiciste?

[A MARGARITA.]

INFANTA
De vertella te ofrecí
805
si te casabas con él,
y las palabras, crüel,
tienen de cumplirse así.
Agora que te has lavado
estos principios te doy,
(Descubre un plato y en él un corazón.)
810
que, como tu amiga,
te guardé el mejor bocado.
Muy bien le puedes comer,
cómele, no tengas miedo,
y esta sangre con que quedo,
815
por ser tuya, he de beber.
Y porque más te destruya
aun más que esta bebería;
que es celos mi hidropesía
que dan sed de sangre tuya.

MARGARITA
820
Crüeles, viles hazañas,
villana, enemiga, fiera.
¡Ay, corazón! ¡Quién pudiera
volveros a mis entrañas!
Pero en tan grandes enojos
825
¿qué consuelo he de esperar?
El mío pienso sacar,
hecho sangre por los ojos.
Mas ¿qué temo? ¿qué recelo
contra tu pecho traidor,
830
falsa? ¿Hay hombres? ¿hay valor?
¿hay justicia? ¿hay Rey? ¿hay cielo?
Para tus viles ensayos
¿hay intenciones honradas?
¿hay verdugos? ¿hay espadas?
835
¿hay torbellinos? ¿hay rayos?

PRÍNCIPE
Escucha.

REY
Dime el efeto.

CONDE
Señora...

MARGARITA
¡Gran desventura!
En nada tengo ventura
y a nadie tengo respeto.

CONDE
840
¿Qué es esto?

MARGARITA
¡Suerte inhumana!
¿Cómo a vengarme no acierto?

CONDE
¿Qué tienes?

MARGARITA
Un hijo muerto
a manos de esta villana.

PRÍNCIPE
¿Qué escucho?

CONDE
¡Cielos airados!
845
¿Es posible?

MARGARITA
¿Quién consiente,
señores, que un inocente
venga a pagar mis pecados?

CONDE
¡Todo el cielo la destruya!
¡Muera la enemiga Infanta!

MARGARITA
850
Yo le pondré en mi garganta,
si no le pongo en la suya.

(Toma MARGARITA un cuchillo.)

PRÍNCIPE
¡Tente!

CONDE
El alma se me abrasa.

REY
¡Hola de mi guardia! ¡Hola,
Conde!

CONDE
Tu cabeza sola
855
está segura en tu casa.

(Éntranse todos, dando con esto fin a la primera jornada.)

Jornada II

Salen el PRÍNCIPE y MARGARITA, y ELENA, niña, hija del CONDE.

MARGARITA
Es mi hija y, como es justo,
a mi gusto corresponde.

PRÍNCIPE
Cualquiera parte del Conde
será el todo de tu gusto.

MARGARITA
860
Dale tú como a sobrina
las manos.

PRÍNCIPE
¡Gracioso brío!

ELENA
Démelas, mi señor tío.

MARGARITA
Es montañesa.

PRÍNCIPE
Es divina.
Y ¿dónde estuvo hasta agora?

MARGARITA
865
En un lugar de su estado
la tuvo aquel desdichado
por mi causa.

PRÍNCIPE
No, señora,
que no merece ese nombre
quien a ti te ha merecido.

MARGARITA
870
De mi desdicha ha nacido
las sinrazones de un hombre
como el Rey.

PRÍNCIPE
Muy grandes son,
y yo con razón me aflijo.

MARGARITA
Tras haberme muerto un hijo,
875
tener al Conde en prisión
y a mí también, sin reparo,
condenada a eterno sueño,
si tú, como eres mi dueño,
no hubieras sido mi amparo.

PRÍNCIPE
880
Yo soy tuyo, el Rey extraño,
pues de tu esposo ofendido
escuchar no me ha querido,
y ha pasado más de un año
que está preso, y esto mismo
885
con la Infanta, que es su hija,
ha hecho.

MARGARITA
El cielo corrija
las maldades de ese abismo.

PRÍNCIPE
Desde aquél día sangriento,
diciendo que así conviene,
890
no la ha hablado, y la tiene
retraída en su aposento.
Y tan fiero se ha mostrado
desta contraria fortuna,
que con persona ninguna
895
deste negocio ha tratado.
Mas ya sale.

MARGARITA
Es un tirano.
Pero, aunque sé lo que es,
quiero arrojarme a sus pies
como tú me des la mano.

(Sale el REY, y MARGARITA híncase de rodillas.)

PRÍNCIPE
900
Cuanto puedo te prometo.
Tuyo soy.

MARGARITA
Mi amparo eres.

(Diga esto al REY, MARGARITA.)

REY
Levantaos, que a las mujeres
se les debe este respeto.
Condesa...

PRÍNCIPE
Tu majestad
905
me de las manos.

REY
Tu Alteza
me agravia.

MARGARITA
Si en tu nobleza
tiene fuerza una verdad,
si el ver la razón que tengo,
entre el fuego en que me abraso,
910
si el ver la vida que paso
y la muerte que no vengo,
si el ver que, entre tantos males,
escucho perpetuamente
la voz de aquel inocente
915
en los coros celestiales,
si el ver que así me destruya
una sangrienta homicida
de aquella sangre vertida,
que fue hidalga por ser tuya,
920
si el ver que cobras renombre
de injusto y crüel, si el ver
lágrimas de una mujer,
que esto sobra para un hombre,
te obligan, a mi marido
925
me da; no digan, señor,
que perdona al ofensor
quien castiga al ofendido.
Ayudaráme a llorar
la prenda que me ha faltado,
930
y ésta que el cielo me ha dado,
podré a su sombra criar.

REY
¿Luego es de los dos también?

MARGARITA
Sí, señor.

REY
Extraña cosa.

MARGARITA
Siete años ha que de esposa
935
le di la mano.

REY
Está bien.

MARGARITA
En ellos, para que pene,
me otorgó la suerte mía
ésta, que el Conde tenía,
y el otro, que el cielo tiene.
940
Pedilde al Rey, mi señor,
lo que pide vuestra madre.

ELENA
Señor, perdone a mi padre.

PRÍNCIPE
¡Oh angelico! Si el rigor,
que han tenido tus oídos,
945
tan sordos para mi ruego,
es menos, y si su ruego
dejó libres tus sentidos,
porque con mi prima vengo,
tengo esperanza, señor.

REY
950
Mira como no es rigor,
sino razón la que tengo.
Tuvo el Conde tantos bríos,
que en mi casa, y a mis ojos,
con fuego de sus enojos,
955
mató tres criados míos.
No respetó mi corona,
mas antes la tuvo en poco,
y aun puso, furioso y loco,
en peligro mi persona.
960
Mira, pues, si es bien que mande
castigar su loco intento.

PRÍNCIPE
Grande fue su atrevimiento,
pero su culpa no es grande.

REY
Esa, pues al cielo plugo,
965
ver al momento conviene,
y si mi hija la tiene,
yo mismo seré el verdugo.

(Sale un PAJE.)

PAJE
El Conde ha llegado agora,
y la Infanta viene ya.

REY
970
Espera afuera.

MARGARITA
Será
mi razón mi defensora.

REY
Tu Alteza quedar podría,
si gustas.

PRÍNCIPE
El alma estima
tal merced, pero a mi prima
975
es justo hacer compañía.

(Vanse el PRÍNCIPE y MARGARITA, y sale la INFANTA.)

INFANTA
Dame las manos.

REY
¿Yo? ¿Yo?
La muerte, dirás mejor.

INFANTA
¡Padre!

REY
¿Yo padre?

INFANTA
Señor,
¿no eres tú mi padre?

REY
No.

INFANTA
980
¿De qué estás tan ofendido?

REY
Levántate.

INFANTA
Así he de estar.
¡Mal se podrá levantar
quien de tan alto ha caído!
Manda que me acaben antes.

REY
985
Acaba.

INFANTA
Sí, pues comienza
mi desdicha.

REY
De vergüenza
los ojos jamás levantes.

INFANTA
Seguiré tu gusto, pues,
mas, según estás trocado,
990
lo que me habrán levantado
algún testimonio es.

REY
Para tan justas querellas
no es menester ¿No ha bastado
lo que yo vi, y ha dejado
995
enlutadas las estrellas?

INFANTA
Escúchame.

REY
Di, crüel.

INFANTA
Y verás, pues eres sabio,
que, por decirte mi agravio,
tomé la venganza dél.

REY
1000
Con la inocencia, el rigor
ninguna ley le concede.
Pero prosigue.

INFANTA
Eso puede
la malicia de un dolor.

REY
¿No dices?

INFANTA
El cielo ordena.

REY
1005
¿Qué te turba el corazón?

INFANTA
No es poca mi turbación
si es tanta como mi pena.
Porque estés menos airado
de oír mi afrentosa historia,
1010
te volveré a la memoria,
padre, que me has engendrado.
Acuérdate de que fuiste
una cifra del querer,
y después de darme el ser
1015
de nuevo otro ser me diste.
Desde el día que nací
a darte gusto empecé,
como madre te crié,
como hija te serví.
1020
De que alcancé mil despojos
de tus manos soberanas,
de que, peinando tus canas,
solía alegrar tus ojos.

REY
¡Oh amor de padre! No llores,
1025
y di, que algún daño asconde
la causa.

INFANTA
Alarcos, el Conde,
solicitó mis amores.
En tu casa me servía,
y el villano...

REY
¡Extraña cosa!

INFANTA
1030
...palabra me dio de esposa,
que yo no se la pedía.
Y el vil y de baja casta,
siguiendo su loco intento,
una noche en mi aposento...

REY
1035
No digas más, que eso basta.

INFANTA
Casóse con Margarita,
entreteniendo mi engaño,
causa del pasado daño
y desta afrenta infinita.
1040
Humilde estoy a tus pies,
y por esposo le quiero.
Hónrame, señor, primero,
para matarme después.

REY
¿Qué he de hacer?¿Qué he de esperar,
1045
pues le ha faltado al vivir
ánimo para morir
y fuerzas para matar?
¡Ay, mujeres! ¿Qué rigor
de ley nos puede obligar
1050
a que honor puede quitar
quien no puede dar honor?
Mas responderme podrán
mil contrarios pareceres,
que las honradas mujeres
1055
con no quitarle le dan.
¿Qué ha de hacer un hombre triste,
caduco, cansado, viejo?
Dame tú misma el consejo,
ya que la ofensa me diste.
1060
Casarte con él querría;
mas ¿cómo ha de ser, traidora,
pues ya en la ocasión de agora
hijos y mujer tenía?

INFANTA
Ella fue parte y testigo
1065
del yerro que te he contado,
y sin respeto ha tomado
por su esposo a mi enemigo.
Y pues de tan vil empresa
ha sido causa, señor,
1070
para que viva mi honor
mate el Conde a la Condesa.
Haya rigor, haya espada
de justicia, en quien le abona,
quede limpia esa corona
1075
con esta afrenta manchada.
Yo mismo te suplicara
que a mí la muerte me dieras,
si con mi sangre pudieras
lavar afrenta tan clara;
1080
pero el darme muerte esquiva,
padre, sin volverme a honrar,
sólo sería dejar
muerta yo y mi afrenta viva.

REY
Basta, no más; que perplejo
1085
lo que has dicho me ha dejado.
[Yo] soy rey y soy honrado,
pero soy honrado y viejo.
Mas entre mil pareceres,
es éste de los mejores:
1090
quien quisiese usar rigores
pida consejo a mujeres.
¡Hola! ¿Nadie me responde?

PAJE
¿Señor?

REY
¿Está el Conde fuera?

PAJE
Sí, señor, rato ha que espera.

REY
1095
Dile que entre.
[Aparte.]
(¡Ah, falso Conde!
Mas si logro mi esperanza
tendré el gusto más entero,
pues, cuando menos, espero
satisfacción y venganza.)
(Sale el CONDE.)
1100
Conde.

CONDE
[Aparte.]
(¿Qué miro agora?
¿No habla el Rey? Mi pena es cierta.
De colérico no acierta,
fingidas lágrimas llora.
La Infanta... el Rey se pasea...
1105
Mi mal será verdadero.)

REY
[Aparte.]
(Loco estoy.)

INFANTA
[Aparte.]
(Venganza espero.)

REY
¡Conde!... ¿Quién habrá que crea
que tú, Conde?...

CONDE
[Aparte.]
(¡Ay, cielo!)

REY
[Aparte.]
(¡Ay, triste!)
¿que tú, Conde?...

CONDE
Rey, comienza.

REY
1110
Tengo, al decir, la vergüenza
que tú, al hacer, no tuviste.
Que me has afrentado digo.

CONDE
¿Yo, señor? Dios me condene.

INFANTA
Aquí el agraviado tiene
1115
tu conciencia por testigo.

CONDE
[Aparte.]
(¿Cómo mi cólera domo?)

INFANTA
¿Tú no me ofreciste a mí
de ser mi marido?

CONDE
Sí,
pero tú sabes el cómo.

INFANTA
1120
Después, creciendo tu fuego
con tus engaños, traidor,
¿no marchitaste la flor
de mi honor?

CONDE
Eso te niego,
que dices.

REY
No tienes modo,
1125
villano, ya de escusarte,
que quien confiesa esa parte
no puede negar el todo.

CONDE
Señora, de tu traición
nació mi desdicha y mengua.
1130
Corrija el cielo tu lengua
y mueva tu corazón.

REY
¿Turbado te has?

CONDE
No te asombre
mi confusión ¿Qué he de hacer?
Porque sólo una mujer
1135
puede confundir a un hombre.
De la furia más impía
vea hacerme eterna guerra,
sea el centro de la tierra
el centro del alma mía,
1140
máteme el mayor amigo
con mi espada y a traición,
y sirva en esta ocasión
mi disculpa de castigo,
marchite el rojo arrebol
1145
que este cielo me asegura,
sea mi luz la noche escura
y mis tinieblas el sol,
y hasta la menor estrella
escurezcan mis enojos,
1150
no pueda verme en los ojos
de mi Margarita bella
si aun con sólo el pensamiento
ofendí jamás tu honor
ni el de la Infanta.

INFANTA
Señor,
1155
miente el villano.

CONDE
¿Yo miento?
Todo cuanto el alma adora
en el suelo y en el cielo
me falte.

REY
Calla.

INFANTA
Recelo
que no te engañe.

CONDE
[Aparte.]
(¡Ah, traidora!)

REY
1160
Conde ¿es verdad...

CONDE
[Aparte.]
(¡Caso extraño!)

REY
...que diste palabra, di,
de esposo a la Infanta?

CONDE
Sí,
pero fue con un engaño.

INFANTA
En eso echarás de ver
1165
que él mismo se ha condenado.
Si con otra te has casado
¿no me afrentaste?

CONDE
¡Ah, mujer!

REY
¿Que tan mal se corresponde
a mi autoridad?

CONDE
¡Ay, triste!

REY
1170
La palabra que le diste
cumplir se la tienes, Conde.

CONDE
¿Cómo, si tengo mujer,
podré?

REY
¿Tiemblas?

CONDE
¿De qué suerte,
señor?

REY
Pues el daño es fuerte,
1175
fuerte el remedio ha de ser.

CONDE
¿Cual es?

REY
La Condesa muera.
Traspasa las justas leyes,
que las honras de los reyes
las pueden hacer de cera.

CONDE
1180
¿Que muera mi esposa?

REY
Sí.

INFANTA
¡Cómo al villano le pesa!

REY
Mata, Conde, a la Condesa.

CONDE
Mátame primero a mí.
¿Yo he de eclipsar la luz pura,
1185
que al mundo la puede dar?
¿A un ángel he de matar
en discreción y hermosura?
Mira, Rey...

REY
Traidor, ya miro
las desdichas a que vengo.

CONDE
1190
Que ha diez años que la tengo
y diez y seis que la miro,
y que se estremó en quererme,
y que, por no darme enojos,
jamás levantó los ojos
1195
que no fuera para verme.
Mira aquellas hebras de oro,
de aquel rostro peregrino,
aquel sujeto divino
a quien respeto y adoro.
1200
Mira que hazaña tan fea
parecerá al mundo extraña,
mira también que te engaña
otra Circe, otra Medea.
Mira que hay, pues que te obliga
1205
un cristiano y justo celo,
Purgatorio, Infierno y Cielo
y un Dios que premia y castiga.

INFANTA
¿Cómo se puede escuchar
esta afrenta, padre amado?

REY
1210
No llores, tanto he mirado,
que no tengo que mirar.
Lo que digo se ha de hacer,
pues a mi suerte le plugo,
o en las manos de un verdugo
1215
tú, tu hija y tu mujer
moriréis, pues en mi casa
juntos os tengo a los tres.

CONDE
¡Jesús mil veces! ¿No ves,
Rey?...

INFANTA
[Aparte.]
(El alma se me abrasa.)

REY
1220
De tu porfía me espanto.
¡Este es mi honor y mi gusto!

CONDE
¡Rey magnánimo, Rey justo,
Rey poderoso, Rey santo,
mi señor, Infanta bella,
1225
a tu valor corresponde!

INFANTA
Muera la Condesa, Conde.

REY
Muera mi afrenta con ella.
Dirás que te he desterrado
y partiraste hoy de aquí,
1230
y en el camino...

CONDE
¡Ay de mí!

REY
...más desierto y despoblado
la matarás, y de suerte
que disimules tu pena,
buscando una escusa buena
1235
para disfrazar su muerte.
La palabra me has de dar
de lo que digo, o morir
luego los tres.

CONDE
[Aparte.]
(Resistir
no puedo a tanto pesar.
1240
¿Mataré a mi dulce esposa?
Sí, que en aquesta jornada
escogió la muerte honrada
por huir de la afrentosa.)

REY
Y el mesmo día, en secreto,
1245
te casarás con la Infanta.
¿Prométeslo?

CONDE
¿Hay pena tanta
en la tierra? Sí prometo.

REY
¿Júraslo así?

CONDE
Así lo juro,
y al cielo doy por testigo
1250
de tu injusticia.

INFANTA
¡Ah, enemigo!
Lavar mi afrenta procuro.

REY
¡Hola!

CONDE
¿Quién no muere agora?

REY
Di al Príncipe y la Condesa
que entren.

CONDE
Rigurosa empresa.

REY
1255
Vete tú, Infanta.

CONDE
¡Ay, traidora!

INFANTA
Vengada voy.

CONDE
[Aparte.]
(Cielo ¿dónde
dan tan crüeles despojos?
¡Ay, rigor! ¡ay, bellos ojos!)

REY
Entrad. Disimula, Conde.
(Entran el PRÍNCIPE y la CONDESA.)
1260
Condesa, tened en mucho
el daros a vuestro esposo.

MARGARITA
Tus pies beso.

CONDE
¡Ay, cielo hermoso!

MARGARITA
Señor, ¿qué miro? ¿qué escucho?
Halle mi desenvoltura
1265
desculpa en mis alegrías.

(Va a abrazar MARGARITA al CONDE.)

CONDE
[Aparte.]
(No salgáis, lágrimas mías.)

MARGARITA
¡Mi consuelo!

CONDE
¡Mi luz pura!
(Aparte.)
(¡Que estimes los mesmos brazos
que han de matarte! ¡Ah, cuitada!)

INFANTA
1270
(Aparte.)
(Ya tiene filos la espada.
que ha de cortar estos lazos.)

PRÍNCIPE
Bueno fuera durar eso.
(El REY y el PRÍNCIPE aparte.)
Gran merced he recebido.

REY
La parte y el todo ha sido
1275
el servirte.

PRÍNCIPE
Tus pies beso.
[Aparte.]
(Viendo esta enemiga ingrata
toda el alma se me altera.)

INFANTA
(Aparte.)
(Muero, mas antes que muera
ha de morir quien me mata.)

REY
1280
El destierro de mi corte
se ponga en ejecución,
para dar satisfacción
a mi gente, aunque no importe.

PRÍNCIPE
¿Salen della desterrados?

REY
1285
Sí, Príncipe.

PRÍNCIPE
Acompañarlos
será justo, hasta dejarlos
en tierra de sus estados.

INFANTA
(Aparte.)
(Si éste va en su compañía
pondrá estorbos a su muerte;
1290
mas ya pienso de qué suerte
le detendré.)

CONDE
Esposa mía,
¿que irás contenta?

MARGARITA
¿Pues no?
Contigo, sin alboroto,
del mundo en lo más remoto
1295
viviré con gusto yo.

CONDE
(Aparte.)
(¡Ay, esposa dulce y fiel!
Castigue Dios soberano
los que quieren, por mi mano,
sacarte sin culpa dél.)

REY
1300
¿Y que no hay qué te desvíe
dese intento?

PRÍNCIPE
Porque es justo
ir con ellos.

REY
Haz tu gusto.

CONDE
Danos los pies.

REY
Dios os guíe.

INFANTA
[Aparte.]
(Para que estorbo no fuera
1305
le quisiera detener.)

MARGARITA
¿Que te tengo?

CONDE
(¡Que he de ser
el lobo desta cordera!)

INFANTA
Escucha.

PRÍNCIPE
¿Qué he de escucharte?
(Aparte.)
(¿Qué pretende esta inhumana?)

INFANTA
1310
Esta noche a la ventana
te espero, que quiero hablarte.
Cosa es que te importa, ven.

PRÍNCIPE
Pues ¿en qué puedo servirte?

INFANTA
No puedo agora decirte
1315
más de que te quiero bien.
[Aparte.]
(Desta suerte he de engañar
a este necio) ¿No respondes?

PRÍNCIPE
Iré a servirte.
(Aparte.)
(A los Condes
dejaré de acompañar.
1320
Diré que he de ser su esposo
y engañaré esta mujer.
¡Qué gran gusto debe ser
engañar a un alevoso!)

(Vanse. Sale el CRIADO que trajo la sangre y el corazón, llamado HORTENSIO.)

HORTENSIO
Mucho me vendrá a deber
1325
este Infante, y con razón,
si, cual es la obligación,
le diese el tiempo el poder.
Aquí, mi piedad por norte,
le crió, y tengo guardado
1330
en lugar más despoblado
y más cercano a la Corte,
pudiendo acudir a ella
sólo a buscalle sustento.
Este hidalgo pensamiento
1335
premie su benigna estrella.
De sus prendas y linaje,
a sus parientes y amigos,
daré por fieles testigos
estos montes y este traje,
1340
si el tiempo... ¿Quién viene allí?
Parece mujer que pasa
de la cueva, que es mi casa.

(Salen el CONDE, MARGARITA y ELENA.)

MARGARITA
¿Sin criados...?

CONDE
Y sin mí.
De aquí nuestra gente espera
1345
muy cerca, y ellos vendrán
cuando tú gustes.

MARGARITA
Harán
tu gusto.

CONDE
[Aparte.]
(Morir quisiera.)

MARGARITA
¿Qué habemos de hacer, amigo,
en lugar tan despoblado?

CONDE
1350
Siéntate, que aquí sentado
quiero descansar contigo,
que tengo en el corazón
una gran congoja.

MARGARITA
¡Ay, triste!
Y ¿cuándo tú la tuviste
1355
en mi presencia?

HORTENSIO
Ellos son.

ELENA
¿Qué tiene padre?

CONDE
Mis ojos,
dadme vos un beso.

ELENA
Y dos.

MARGARITA
¿Qué es esto, mi gloria?

CONDE
Adiós.

MARGARITA
¿Tú lágrimas y enojos,
1360
mi regalo y mi consuelo?
Dime la causa del llanto.

ELENA
Quiérele mi madre tanto
¿y llora?

CONDE
¡Ay, ángel del cielo!

MARGARITA
De que soy tuya me pesa
1365
cuando en mi poder te hallas,
me miras, lloras y callas,
mi bien, mi Conde...

CONDE
¡Ay, Condesa!

MARGARITA
¿Qué tienes?

CONDE
La muerte toco.

MARGARITA
¿Cómo, señor?

CONDE
Ardo en fuego.

MARGARITA
1370
No me aflijas.

CONDE
Estoy ciego.

MARGARITA
No me mates.

CONDE
Estoy loco.
Condesa, mi bien...

MARGARITA
Mi dueño.

CONDE
Luego sabrás mis enojos,
veré si doy a mis ojos,
1375
tras estas lágrimas, sueño.

MARGARITA
Sosiega, reposa.

CONDE
Espera,
por si puedo...

MARGARITA
Estoy sin vida.

CONDE
...en una muerte fingida
alcanzar la verdadera.

MARGARITA
1380
¿Qué es esto? Estas ocasiones
no dejara de temer
si, como toda mujer,
fuera toda corazones.
Con cien mil temores lucho.
1385
¿Qué tiene el Conde? ¿Qué creo?

HORTENSIO
Cielo ¿es cierto lo que veo,
o es quimera lo que escucho?

MARGARITA
¿Qué haces?

CONDE
Mi mal no afloja;
veamos...

MARGARITA
Cielos, ¿qué haré?

CONDE
1390
...si paseando podré
aliviar esta congoja.
Todo me cansa ¡Oh suceso
infelice y riguroso!
¿Puede ser?...

MARGARITA
Querido esposo,
1395
sosiégate.

CONDE
Pierdo el seso.

MARGARITA
Vuelve, vuelve...

CONDE
¡Ay, ojos bellos!

MARGARITA
...a sentarte y darme abrazos.
¿No descansas en mis brazos?

CONDE
Morirme quisiera en ellos.

MARGARITA
1400
Esta niña, aunque pequeña,
¿no es gran consuelo?

CONDE
Sí es.

ELENA
¡Padre!

CONDE
¡Hija!

HORTENSIO
Ver los tres
enterneciera una peña.

MARGARITA
¿No sabría qué te aflige?

CONDE
1405
El caso más dolorido
que en el mundo ha permitido
el que le gobierna y rige;
la más dañada esperanza,
el mayor atrevimiento,
1410
el más crüel pensamiento,
la más injusta venganza,
el más injusto rigor,
el agravio más terrible,
la pena más insufrible
1415
y la desdicha mayor.

MARGARITA
¿Y qué es?

CONDE
El mayor pesar,
la más rigurosa empresa:
de morir habéis, Condesa,
que el Rey os manda matar.

MARGARITA
1420
¿Cómo, señor?

CONDE
Triste calma.
Este injusto, este tirano,
quiere que ponga la mano
donde tengo puesta el alma.

MARGARITA
Ya me ha muerto ver que tratas
1425
tú de quitarme el vivir;
que yo no siento el morir,
sino el ver que tú me matas.

CONDE
Palabra de caballero
di de matarte, y casarme.

MARGARITA
1430
No más, que para matarme
esto bastaba. Ya muero.

(Desmáyase la CONDESA.)

CONDE
¿Desmáyaste? Triste suerte;
pero ¡qué necios ensayos!
¿que me duelen tus desmayos
1435
cuando procuro tu muerte?

MARGARITA
¿Que te has de casar y que has
de emplearte en otra parte?

CONDE
¿No sientes que he de matarte?

MARGARITA
No, que esotro siento más.
1440
¿No me pudieras callar
esa segunda promesa
y matarme?

CONDE
¡Ay, mi Condesa!

MARGARITA
Señor... ¿que te has de casar?
Pónesme en duda la palma
1445
que mereciera en los cielos,
que a no matarme con celos,
llevara quïeta el alma.
Tu inclemencia se corrija
si es posible.

ELENA
Señor padre.

MARGARITA
1450
Siquiera porque soy madre
deste ángel que es tu hija.

CONDE
No es posible resistir
al rigor deste pesar.
Mas, pues no puedo matar,
1455
¡vive Dios que he de morir!

(Quiere matarse.)

MARGARITA
¡Mi bien!

CONDE
Esposa querida,
deja...

MARGARITA
¡Terribles desdenes!
¡Mi gloria!

CONDE
¿Un brazo detienes
que ha de quitarte la vida?
1460
Moriré, mas no mantengo
mi palabra, así es verdad.
¡Ah, cielos, que aun libertad
para matarme no tengo!

HORTENSIO
¡Grande lástima! ¿Qué haré?
1465
¿Saldré? No es justo salir.

MARGARITA
Si es que el uno ha de morir
de los dos, yo moriré.
Mátame.

CONDE
Yo estoy difunto
de escucharte.

MARGARITA
Mas, señor...
1470
¿Que tantos años de amor
han de acabarse en un punto?
Pero no es razón que huya
de locura que es tan cuerda;
mas no es justo que se pierda
1475
un alma que ha sido tuya.
Querría, por mi consuelo,
confesarme.

CONDE
¡Trance horrible!
Margarita, no es posible,
confiésate con el cielo.

MARGARITA
1480
Baste, no más: sea ansí.
Los cielos enternecidos
me escuchen, pues tus oídos
están sordos para mí.
Aunque temo su desdén,
1485
pues con propósito firme
jamás pude arrepentirme
de haberte querido bien.
Mas, Señor, pues en la tierra
no hay cosa que no me aflija,
1490
confesores de los cielos,
grandes son las culpas mías.
Mártires santos, valed
a esta triste que os imita;
vosotros también, pues muero
1495
con vuestra inocencia misma,
valedme, inocentes todos;
los que en las supremas sillas
tenéis gloriosos lugares
me valed, y vos, bendita
1500
abogada de los hombres,
Virgen preñada y parida,
Madre del Eterno Hijo,
del Eterno Padre hija,
intercede por mí agora
1505
y aparejad una silla
adonde, por culpa nuestra,
contemplo tantas vacías,
y quédese el mundo en paz,
pues es su guerra infinita.
1510
A vos yo os perdono, Conde,
por el amor que os tenía,
pero, pues sin culpa muero,
para dentro en quince días
al Rey cito y a la Infanta,
1515
ante la justa justicia.
Agora déjame dar
dos abrazos a esta niña.

ELENA
Padre, no mate a mi madre.

CONDE
¡Qué congoja!

MARGARITA
¡Qué desdicha!
1520
Y a ti también te abrazara,
pero no quiero que digas
que hace lo mesmo al verdugo
el que la vida le quita.
Con todo, quiero abrazarte.

CONDE
1525
Algún demonio me incita.
Ya de puro sentimiento,
de lástima, de mancilla,
el seso he perdido, rabio;
y aunque la Condesa es mía,
1530
seré, pues lo quiere el Rey,
su verdugo y su homicida.
Como el que, rabioso y loco,
se ceba en su carne misma,
echaréle un lazo al cuello
1535
de una toca o de una liga,
y, llamando a mis criados,
diré que murió. Infinita
es mi maldad. Pero vaya,
pues lo quiere el Rey. Amiga,
1540
ya es hora.

MARGARITA
¡Qué dulce nombre!
Espera ¡Jesús, María!

(Aprieta el lazo que le puso.)

CONDE
La fuerza faltó a los brazos,
mas ya es muerta.

HORTENSIO
¡Qué desdicha,
que estorballa no he podido!

ELENA
1545
Padre, padre, madre mía.

CONDE
Agora conde villano
te falta el ánimo, grita.
Tengo un ñudo a la garganta,
mas yo voy, y vuelvo aprisa.
1550
Acudid, criados míos,
que la condesa se fina.

(Éntrase el CONDE y sale HORTENSIO.)

ELENA
¡Jesús, qué fiero animal!

HORTENSIO
Aún parece que está viva.
Sobre mis hombros la llevo.

ELENA
1555
¿Adónde iré? ¡Qué desdicha!

(Vase HORTENSIO llevando en hombros a la CONDESA, y salen el PRÍNCIPE y CRIADOS.)

CRIADO
En este lugar los vi,
llorando a los tres.

PRÍNCIPE
No hallo
sosiego.

CRIADO
Y maté un caballo
por avirsarte.

ELENA
¡Ay!

PRÍNCIPE
¿Qué oí?

ELENA
1560
¡Señor tío, señor tío!

PRÍNCIPE
¿Hay cosa tan peregrina?
¿Cómo tan sola, sobrina?

ELENA
Hanme dejado.

PRÍNCIPE
¡Ángel mío!
¿Y quién tan sola os dejó?

ELENA
1565
Mataron aquí a mi madre.

PRÍNCIPE
Y ¿quién la mató?

ELENA
Mi padre.

PRÍNCIPE
¿Vístelo vos?

ELENA
Vilo yo.
Bien lo vi y bien le pesaba.

PRÍNCIPE
¿Hay pena como la mía?

ELENA
1570
Y así llorando decía...

PRÍNCIPE
¿Qué?

ELENA
Que el Rey se lo mandaba.

PRÍNCIPE
¡Jesús, decid la verdad!
Y ¿por qué?

ELENA
Porque se case
con la Infanta.

PRÍNCIPE
¿Que eso pase?
1575
¿Hase visto tal maldad?
Pues no ha de ser desta suerte,
aunque el cielo lo permita,
que en mí tiene Margarita
quien sabrá vengar su muerte.
1580
¡Oh, Rey falso! Y tú, mis ojos,
¿cómo aquí tan sola estás?

ELENA
Dejóme y fuese.

PRÍNCIPE
¿Eso más?
Vamos, que rabio de enojos;
y pues con razón me fundo
1585
y esto acabo de entender,
una venganza he de hacer
con que atemorice al mundo.

(Vanse. Sale el CONDE y CRIADOS.)

CONDE
Pienso que es éste el lugar
donde mi esposa he dejado,
1590
mas tal estoy de turbado
que aun no le podré hallar.
Ya [ha] rato que ando perdido.
¿Este será? ¡Extraña cosa!
Pero no está en él mi esposa,
1595
al cielo se habrá subido.
Mi hija quedó con ella
y falta también ¡ay, Dios!
que cualquiera de las dos
le podrá servir de estrella.
1600
Mas ¿cómo no arroja rayos,
si es justo, a un pecho alevoso
como el mío? ¡Ay, cielo hermoso!
Mortales son mis desmayos.

CRIADO
Señor...

CONDE
Déjame y de un monte...

CRIADO
1605
¿Qué haces?

CONDE
Criados míos,
por buscallas dividíos
todos por este horizonte.

CRIADO
Será así.

CONDE
Mi pena es tanta
¿y la muerte no me doy?
1610
Mas pues a la Corte voy,
y veré al Rey y a la Infanta.
Con verme me matarán,
que pues con pecho atrevido
causa de mi daño han sido,
1615
mis basiliscos serán.

(Vanse. Salen el REY y dos GRANDES.)

GRANDE 1.º
No es rigor, sino justicia,
volver un Rey por su honor.

GRANDE 2.º
Y, cuando fuera rigor,
le merece su malicia.

REY
1620
No es poco gusto saber,
para en ocasión que importe,
que dos grandes de mi Corte
aprueben mi parecer.

GRANDE 1.º
Como de tu ingenio, es.

REY
1625
Si tiene el debido efeto,
casarse han luego en secreto,
y publicarse ha después.
Y pues sabréis que me vengo,
o al menos me satisfago,
1630
del casamiento que hago
y de la razón que tengo
seréis testigos.

GRANDE 1.º
Tú puedes
mandarnos.

GRANDE 2.º
No hay que dudar.

REY
Y vosotros esperar
1635
mis regalos y mercedes.
Y si no cumple el villano
su palabra y mi deseo,
por el Dios que adoro y creo,
justo, eterno y soberano,
1640
que de haber burlado ansí
un real y noble pecho,
ha de hallar el mundo estrecho
para guardarse de mí.

(Sale la INFANTA y un CRIADO.)

CRIADO
Él y un paje en dos caballos
1645
a toda furia salían.
El Príncipe...

INFANTA
Correrían,
sin duda, para estorballos.
Algún aviso ha tenido,
algún estorbo recelo
1650
a mi gusto. Quiera el cielo,
aunque de mí está ofendido,
que caiga, si corre a eso,
de suerte que levantar
no se pueda ¿Que avisar
1655
le pudieron? Pierdo el seso.

REY
¿Infanta?

INFANTA
¡Señor!

REY
¿Qué extremo
de tristeza echo de ver
en tus ojos?

INFANTA
Del temer
nace el dudar, y yo temo
1660
y estoy triste.

REY
¿Pones duda
en tu gusto, Infanta hermosa?

INFANTA
El que desea una cosa
siempre la teme y la duda,
y hasta vella no estaré
1665
jamás con el rostro enjuto.

(Entra un PAJE.)

PAJE
Cubierto el Conde de luto
desde la cabeza al pie,
pide licencia.

REY
En buen hora.

INFANTA
No es como él mi suerte, negra;
1670
el primer luto que alegra
es éste.

GRANDE 2.º
¿Estás triste agora?

(Entra el CONDE cubierto de luto.)

REY
¿Qué es, Conde?

CONDE
El tiempo enemigo
me ha puesto desta manera.

REY
Sálganse todos afuera
1675
cuantos vinieron contigo.

(Sálense los que vinieron con el CONDE.)

CONDE
¡Oh cielo!

REY
Di lo que has hecho,
que cuantos mirando estás
lo saben.

CONDE
Y tú sabrás
que tuve de acero el pecho.

REY
1680
Agora quiero abrazarte,
pues que le tuviste hidalgo.
Levanta.

CONDE
De seso salgo.

REY
Al momento he de casarte
con mi hija, que es lo más
1685
que a mí la suerte me ha dado.

CONDE
(Aparte.)
(Yo quedaré bien pagado,
con la muerte que me das,
de la que di a mi mujer.
¡Ah, cielo!) Beso tus pies.

REY
1690
Pues el Duque y el Marqués
testigos vienen a ser
deste casamiento, luego
le da la mano.

CONDE
Sí doy.

INFANTA
Y yo la tomo.

CONDE
[Aparte.]
(Y yo estoy
1695
de cólera mudo y ciego;
pero pagarme convino
a mi desdicha el tributo.)

REY
A desposarse con luto
fuiste el primero que vino.

CONDE
1700
Que así había de venir
nos enseña la experiencia,
por la poca diferencia
que hay del casarse al morir.

INFANTA
[Aparte.]
(Ya me han vengado los cielos,
1705
porque este forzado empleo
no ha sido amor ni deseo,
sino tema, rabia y celos.
Aborrézcame el traidor,
que, porque su pena crezca,
1710
deseo que me aborrezca,
para vengarme mejor.)

GRANDE 1.º
Gocéis mil años del bien
que tenéis.

GRANDE 2.º
No tenga igual
vuestro gusto.

CONDE
[Aparte.]
(De mi mal
1715
me están dando el parabién.)

INFANTA
Déjeme el cielo pagar
vuestro buen celo.

GRANDE 1.º
Señora,
mil años vivas.

REY
Agora
mis hijos quiero abrazar.

INFANTA
1720
Las manos nos da por ello.

REY
El alma daros quisiera.

CONDE
[Aparte.]
(¡Cuánto mejor estuviera
aquel lazo en este cuello!)

GRANDE 1.º
Sentimiento muestra el Conde.

GRANDE 2.º
1725
Quería mucho a su esposa.

GRANDE 1.º
Y casi a ninguna cosa
de las que escucha responde.

(Suena dentro ruido y dicen desde dentro el PRÍNCIPE y un PAJE.)

PAJE
Al Rey he de avisar.

PRÍNCIPE
Es un tirano:
dejadme entrar, o quedará deshecho
1730
este palacio a coces ¡oh, villano!

PAJE
¡Ay, que me ha muerto!

PRÍNCIPE
Ha sido de provecho.
(Entra el PRÍNCIPE.)
Si eres, Rey, descendiente de otros reyes
¿ha sido hazaña digna de tu pecho
romper y traspasar las justas leyes?
1735
¿Es hazaña de Rey lo que tú hiciste?
¡Hiciéranlo los que andan tras los bueyes!
Y tú, Conde villano...

CONDE
¿Qué dijiste?

GRANDE 1.º
Mira, Príncipe ciego...

PRÍNCIPE
¿Ha sido justo
lo que hasta al mismo cielo tiene triste?
1740
Pero ¿cómo a mi cólera resisto?
Dime, Conde traidor ¿habrás hallado
en las leyes de amor, o en las de Cristo,
que el dar la muerte a quien la muerte has dado
fue cosa justa? Por querello un hombre
1745
mataste un ángel.

REY
Oye, hante informado
mal, y hablaste peor.

CONDE
Ese es mi nombre,
pues traidor me llamaste. Yo confieso
que tengo culpa, aunque mi culpa asombre,
pero perdí el valor perdiendo el seso.

PRÍNCIPE
1750
¡Oh, enemigo; oh, tirano!

REY
¿Que permita
esto, en su casa, un Rey?

PRÍNCIPE
¡Qué bueno es eso!
¡Súfrete el cielo a ti...!

REY
¡Rabia infinita!
¡Prendelde!

PRÍNCIPE
¿Qué prender? Tirano, advierte
que es de mi sangre y casa Margarita,
1755
y así, en este ofendido pecho fuerte,
enciende el fuego su ceniza fría,
que ha de abrasarte a ti y vengar su muerte.
Y tú, Circe crüel, infame arpía...
Mas yo me vengaré...

INFANTA
Villano, calla.

PRÍNCIPE
1760
Si junto mi valor con el de Hungría,
comienza a defender esa muralla
de mis intentos solos.

REY
Serán vanos.

PRÍNCIPE
Con mi aliento me atrevo a derriballa.

REY
¡Matad a ese traidor!

PRÍNCIPE
¿No tengo manos,
1765
si no basta el respeto que se debe
a un hombre como yo?

GRANDE 1.º
Dalde.

PRÍNCIPE
¡Villanos!
¡Y tantos contra un hombre!

CONDE
Gente llueve;
remediarle no puedo, estando agora
como un hombre de mármol o de nieve.

INFANTA
1770
Matad ese traidor.

CONDE
Tú, eres traidora.

(Éntranse todos, unos por una puerta y otros por otra, dándose fin con esto a la jornada segunda.)

Jornada III

Salen el criado llamado HORTENSIO y MARGARITA, vestidos los dos con pieles.

MARGARITA
Mucho debo.

HORTENSIO
Pago ansí
mi obligación conocida.

MARGARITA
Diste a mi hijo la vida,
después me la diste a mí,
1775
y aquí con mano piadosa,
sustentándolas estás;
cuando no hay caza nos das
fruta silvestre y sabrosa,
que desta nunca faltó
1780
por todo aqueste horizonte,
porque las plantas del monte
riego con lágrimas yo.
Seis años ha que a tus ojos
lloro mi infelice historia,
1785
sin perder de mi memoria
el menor de mis enojos.

(Sale CARLOS como que huye.)

CARLOS
¡Padre, madre!

MARGARITA
Dios te guarde.

HORTENSIO
¿De qué huyes?

CARLOS
De un león.

HORTENSIO
¿Es de hombre tu corazón?

MARGARITA
1790
Hijo villano, cobarde,
¿miedo tenéis, sino a Dios,
y de una fïera huis?
¿De qué tembláis? ¿Qué decís?
¿Sangre de rey tenéis vos?

CARLOS
1795
Siendo tan pequeño agora
no es mucho que me recate;
mas volveré a que me mate
si ése es tu gusto, señora.

MARGARITA
Tente, aun no te obligo a tanto,
1800
pero ¿temblando has de huir?
Los hombres han de morir
de heridas y no de espanto.
¿Crees en Dios y en su ley?

CARLOS
Sí, madre.

MARGARITA
A todo responde:
1805
¿Quién tienes por padre?

CARLOS
Al Conde.

MARGARITA
¿Y por enemigo?

CARLOS
Al Rey.

MARGARITA
Y dime: un buen caballero
¿qué cosas ha de tener
para parecerlo?

CARLOS
Ser
1810
buen cristiano lo primero.

MARGARITA
¿Y de trato?

CARLOS
Noble y claro.

MARGARITA
¿Qué más?

CARLOS
No hacer cosa fea.

MARGARITA
¿Y en lo que gastar?

CARLOS
Que sea
entre pródigo y avaro.

MARGARITA
1815
¿Con las mujeres?

CARLOS
Afable.

MARGARITA
¿Y ha de querer?

CARLOS
A ninguna.

MARGARITA
¿Paciente?

CARLOS
Con la fortuna.

MARGARITA
¿Y en lo que promete?

CARLOS
Estable.

MARGARITA
¿Qué hará si debe?

CARLOS
Pagar.

MARGARITA
1820
¿Qué no ha de ser?

CARLOS
Inquieto.

MARGARITA
¿Y qué ha de guardar?

CARLOS
Secreto.

MARGARITA
Pocos le saben guardar.
¿Qué no ha de dar?

CARLOS
Ocasión.

MARGARITA
¿Si se la dan?

CARLOS
Arrojarse.

MARGARITA
1825
¿Si le ofenden?

CARLOS
Mejorarse.

MARGARITA
¿Y qué ha de tener?

CARLOS
Razón.

MARGARITA
¿Ser amigo?

CARLOS
De su amigo.

MARGARITA
¿Qué hará?

CARLOS
Serville y honralle.

MARGARITA
¿Y al enemigo?

CARLOS
Estimalle.

MARGARITA
1830
¿Y qué más?

CARLOS
No serle enemigo.

MARGARITA
Y, sobre todo ¿qué importa?

CARLOS
Que diga siempre verdad.

MARGARITA
Esa lición repasad
cada día, pues es corta.

HORTENSIO
1835
Gran mujer, si cada día,
la que tú le das, señora,
diesen los padres de agora,
menos infames habría.

MARGARITA
Este niño es mi consuelo,
1840
quiérole como al vivir.

HORTENSIO
Vamos, Carlos, de esgrimir
tomaréis lición.

CARLOS
¡Ah, cielo!
Si tú me dejas crecer,
con la fuerza de mis brazos
1845
leones hechos pedazos
a mi madre he de traer.

(Vanse y queda MARGARITA sola.)

MARGARITA
Ya que sola me han dejado
en mi ordinario ejercicio,
haced, ojos, el oficio
1850
que mi desdicha os ha dado.
¡Ay, Conde Alarcos! ¿Quién viene?

(Sale ELENA.)

ELENA
¡Qué bién empleados pies!

MARGARITA
Una pastorcilla es
que grande donaire tiene.

ELENA
1855
¡Ay, Jesús! ¿Cómo resisto
a este trance? Huir no puedo
con el miedo...

MARGARITA
Tiene miedo...
Sin duda aquel rostro he visto
otra vez, mas no imagino
1860
cómo y dónde. Espera, espera.

ELENA
¡Ay, cuitada! Bueno fuera
¡Valedme, cielo divino,
que no puedo, de turbada,
valerme!

MARGARITA
No hay que temer,
1865
que como tú soy mujer,
aunque mujer desdichada.
¿Espanto yo?

ELENA
Sí, que estás
como salvaje entre fieras.

MARGARITA
Pues, si mi desdicha vieras,
1870
te hubiera espantado más.
Dame la mano.

ELENA
No oso...
un poco el miedo he perdido.

MARGARITA
Pues, aunque del sol curtido,
rostro tengo.

ELENA
Y harto hermoso.
1875
Parece que el corazón
con verte se alegra un poco.
Desde que te miro y toco
te voy cobrando afición.
Y que te he visto sospecho
1880
otra vez, pero no vengo
a conocerte.

MARGARITA
Si tengo
negro el rostro y ronco el pecho,
no es posible, y es tu edad
muy poca para acordarte
1885
dónde, cómo y en qué parte
me viste.

ELENA
Dices verdad.

MARGARITA
Abrázame. Cosa rara,
yo también ¡ah, tiempo ingrato!
tengo en el alma un retrato
1890
muy parecido a tu cara,
y agora, amiga, querría
meterte do está escondido.

ELENA
En amor se ha convertido
el miedo que te tenía.

MARGARITA
1895
¿Quién eres?

ELENA
Por el efeto
que has hecho de amor en mí,
quiero decírtelo.

MARGARITA
Di.

ELENA
Has de guardarme secreto.
Yo soy, aunque en este traje,
1900
hija de Alarcos el Conde...
El color tienes perdido
¿qué te turba y descompone?
Ya vuelve a cobrar tu rostro
sus perdidos arreboles...
1905
¿Por qué me abrazas y lloras?
¿Qué dices? ¿No me respondes?
Señora, ¿qué extraño efeto
han hecho en ti mis razones?
Vuelve en ti y dime la causa.

MARGARITA
1910
Prosigue, amiga.

ELENA
No llores.
Pues un día desdichado
que salimos de la corte
mi padre, mi madre y yo,
de muy poca edad entonces,
1915
en un despoblado valle
que está en la falda de un monte,
mató mi padre a mi madre,
el cielo se lo perdone.
Y un hombre en tu traje mesmo,
1920
su cuerpo en brazos llevóse,
dejándome sola y a mí
dando alaridos y voces.
Hallóme el de Hungría ansí,
que es mi tío, y preguntóme
1925
la causa. Contéle el caso,
como era justo, sintióle.
Juró de darme venganza,
y entregóme a unos pastores,
diciéndome que partía
1930
lleno de pena a la Corte,
donde halló que con la Infanta
estaba casado el Conde.
¡Terribles son tus extremos!

MARGARITA
Prosigue, amiga.

ELENA
No llores.
1935
Con todos se descompuso,
y usando de sus rigores
le mandó prender el Rey.
Mientras pudo defendióse,
pero apretado, a prisión
1940
hubo de darse a la postre,
y aun dice que le mataran
a no tener valedores.
En un castillo le tiene,
que se ve desde este monte,
1945
donde padece ha diez años
los trabajos más inormes.
Murió su padre en Hungría,
y un vasallo suyo alzóse
con el reino, y esto es causa
1950
que ninguno le socorre.
Yo le hablo algunas veces
por la reja de una torre,
llevándole en esta cesta
cuándo fruta, cuándo flores.
1955
Estoy en la casa misma
donde me dejó, aunque pobre
contenta, pues le consuelo,
y alegre de que me adore.
Pues sabes quién soy, agora,
1960
ansí mil años te goces,
que me digas tú quién eres.

MARGARITA
Dame los brazos.

ELENA
No llores.

MARGARITA
Más lugar he menester
para que mi historia cuente,
1965
y un grande tropel de gente
llega ya, voyme a esconder.
¿Que te miro, que te toco?...
¡Cielos santos, cielos justos!
Ya llegan... ¡Todos los gustos
1970
suelen durarme tan poco!...
Vuelve a verme de aquí un rato
aquí mesmo.

ELENA
Así lo haré.

MARGARITA
Yo, hija, te mostraré...

ELENA
¿Qué?

MARGARITA
De tu madre un retrato.

ELENA
1975
De tan extraño suceso
con razón me maravillo.
Adiós, y voyme al castillo
donde el Príncipe está preso.

(Vase. Escóndese MARGARITA, y salen el REY, el CONDE, la INFANTA y MARCELO.)

REY
¡Qué bien corrió al jabalí
1980
el lebrel!

INFANTA
¡Fue buena suerte!

CONDE
(Aparte.)
(¿Cómo alcanzaré la muerte
si vuela huyendo de mí?)

MARGARITA
(Aparte.)
Quien tal mira ¿qué padece?

(Dicen dentro.)

DENTRO
¡Aquí, aquí! ¡Más gente acuda!

REY
1985
Voces oigo, sí, sin duda
que algún buen lance se ofrece.
Vamos todos.

(Vase el REY solo.)

INFANTA
Tú, señor
¿no vienes conmigo?

CONDE
No.

INFANTA
¿Por qué?

CONDE
¿No sabes que yo
1990
si estoy solo estoy mejor?

INFANTA
Ya sé que de noche y día
te canso.

CONDE
Dices verdad.

INFANTA
Y es tu misma soledad
tu apacible compañía.
1995
Ya sé que tu Margarita
muerta ocupa tu memoria.

MARGARITA
¡No me ha dado poca gloria
oíllo!

CONDE
Será infinita.

INFANTA
Conde, que en tan largos años,
2000
porque para ti lo han sido,
¿los enojos no has perdido
conmigo?

CONDE
Fueron extraños.

INFANTA
Vuelve, señor, en tu acuerdo,
que como loco has quedado
2005
desde entonces...

CONDE
Y he mostrado
sólo en eso que soy cuerdo:
que quien el seso y el ser
no pierde, si es grave el mal
que le sucede, es señal
2010
que no tuvo qué perder.

INFANTA
Ya imagino que eres loco,
pues por tal te has confesado.

CONDE
Y tú cuchillo embotado
que me matas poco a poco.

INFANTA
2015
Dame la mano, que estoy...

CONDE
Presto me quieres matar,
pues filos le quieres dar
en la mano que te doy,
pues cuando tuya no fuera,
2020
bastaba acordarme yo
de que el alma me costó
el dártela...

MARGARITA
¡Quién pudiera
quitársela agora!

INFANTA
¡Ay, triste!

CONDE
Déjame.

INFANTA
Crüel estás.

MARGARITA
2025
Pues con dársela me das
la muerte que no me diste.
Estoy por vengarme ahora,
pero debo más respeto
al Conde.

INFANTA
¡Qué extraño efeto
2030
de crueldad!

CONDE
Dejad, señora.

INFANTA
Ya dejo ¡ah rigor terrible!
de cansarte y de cansarme;
pero dejar de vengarme
de un villano, no es posible.
2035
Queda en paz, que de mi guerra
no ha de escaparse tu vida.

(Vase.)

CONDE
Para tenerte escondida
abra su centro la tierra.

MARGARITA
Consuelo dan sus desdenes
2040
a mis penas inmortales.

CONDE
La memoria de mis males,
y el archivo de mis bienes,
descuelga de aquel arzón,
y en mi ordinario ejercicio
2045
pasaré un rato.

MARCELO
El juïcio
se le ha vuelto, y con razón.
Mejor es que te diviertas
en otra cosa.

CONDE
Marcelo
¿no sabes que mi consuelo
2050
consiste ya en prendas muertas?
Ve al momento.

MARCELO
Pues yo voy.

(Vase.)

CONDE
¿Dónde estás, mi prenda cara,
Margarita?

MARGARITA
¡Quién llegara
a decille dónde estoy!

CONDE
2055
¿Dónde estás? ¿Qué triste suerte
permite...

MARGARITA
Muero callando.

CONDE
...que siempre te esté mirando
y que nunca pueda verte?

MARGARITA
¿Qué esperáis, cobardes pies?
2060
¿Hablaréle? No...

CONDE
¡Señora!

MARGARITA
...que me está llamando ahora
y me matará después.
¡Maldigo a quien os quisiere,
hombres, pues no puede ser
2065
confïarse la mujer
del hombre que más la quiere!

CONDE
A mi Margarita bella
pienso que el alma divisa,
que muchas estrellas pisa.

MARGARITA
2070
Y es infelice su estrella.

CONDE
¿Qué habrá que no me inquïete?

(Entra MARCELO.)

MARCELO
Ya la maleta está aquí.

CONDE
Y yo, triste, estoy sin mí.
Ábrela, Marcelo, y vete.

MARCELO
2075
Ya está abierta.

CONDE
¡Ay, prendas mías,
penas vivas, muertas glorias,
como infelices memorias
de aquellos felices días!
Salid, pues mi fe os empeño,
2080
y tanto lugar os doy
de vengaros, que yo soy
el que maté a vuestro dueño.
Salid, y servid de espadas
contra mí, pues venís juntas,
2085
y vuestras agudas puntas
en mi memoria afiladas.
Cualquiera destos cabellos
el mismo sol eclipsaba,
y cuando yo los cortaba
2090
mil almas colgaban dellos.
Quedé entonces satisfecho
de mis celos y sospechas,
y agora sirven de flechas
que me atraviesan el pecho.
2095
Vos, sortija, estáis aquí,
testigo de que os tomé
cuando me dieron la fe
que yo sin culpa rompí.
Corrida estaréis de estar
2100
en las manos de un villano,
o en el dedo de una mano
que a un ángel pudo matar.
Salid, papeles que habláis
para darme más tormento,
2105
que a fe que no os lleve el viento
pues mis pesares lleváis.
(Lee un papel.)
«Amigo del alma» ¡ay triste!
¿que esto dijiste de mí?
«Para servirte nací».
2110
¿Qué leo? ¿que ésto me escribiste?
¿Para quererme? ¡Ah, rigor
de los cielos soberanos!
Para morir a mis manos
hubieras dicho mejor.
2115
¡Ah, traidor! Nunca merezca
el cielo, pues que maté
un ángel suyo.

MARGARITA
No sé
si me alegre o me entristezca.
Hecha un mármol, hecha un hielo
2120
callo y miro lo que siente.

CONDE
¡Que la tierra me sustente
y no me castigue el cielo!
Venid, espejo, despojos
del rostro que retratastes
2125
algunas veces que hurtastes
tan dulce oficio a mis ojos.
¡Cuántas pudiste encerrar
esta cara junto a aquélla,
ésta alegre, aquélla bella,
2130
porque así suelen juntar,
cuando amor les da el consejo,
los que de amor llevan palma,
como en dos cuerpos un alma,
dos caras en un espejo!
2135
Agora ya no veré
en tu luna limpia y clara
los soles de aquella cara,
a quien yo la luz quité.

MARGARITA
Sin pensallo me he llegado,
2140
pero está tan divertido
que no me verá.

CONDE
El sentido
o el alma se me ha turbado,
(Ve el rostro de MARGARITA dentro del espejo.)
o veo su rostro hermoso
en otro cuerpo. Es visión
2145
¿o hace la imaginación
caso? ¡Cielo poderoso!
¿que es de mi esposa?

MARGARITA
Sin duda
que en el espejo me ha visto,
huir quiero.

CONDE
¿Qué resisto?
2150
¿Quién me ofende? ¿quién me ayuda?
Señora, no seas cruel,
niño soy...

MARGARITA
El alma dejo.

CONDE
...que busca tras el espejo
lo que está mirando en él.
2155
¿Su rostro no me mostrabas?
Sí, que yo le pude ver
en tu luna. A ser mujer,
pensara que me engañabas.
¿No le vi, suelto el cabello,
2160
y una piel sobre los hombros?
¡Qué de quimeras y asombros
me afligen! ¡ay, ángel bello!
¿Dónde estás? Habrá sacado
la cabeza de mi pecho
2165
y, como le vino estrecho,
le ha descompuesto el tocado.
Pero la piel ¿cúyo era?
En él se la habrá vestido,
que, como tan fiero ha sido,
2170
le ha dado el traje de fiera.
Sal, mi bien, si te has metido
en aposento tan triste.
Mas ¿quién duda, pues te fuiste,
que me has dejado y te has ido?
2175
¿Que te has ido? Aunque te pesa,
te buscaré en cualquier parte.
Rabiando voy a buscarte.
¡Cielo, dame mi Condesa!

MARGARITA
Voces da el Conde, y yo voy
2180
siguiendo mi desventura.
Deste monte en la espesura
pienso que segura estoy.
De aquí veré lo que pasa,
tras esta mata escondida.

CONDE
2185
Vuelve, Condesa querida,
a este pecho que se abrasa.
Mas yo te maté ¡ay de mí!
¿cómo te busco y te lloro?
Mas ven, que tu sombra adoro,
2190
si es tu sombra la que vi.

MARGARITA
¡Ay, amigo!

CONDE
¡Fuente clara,
tus aguas quieren crecer
mis ojos; ya vuelvo a ver
en tu claridad su cara!
2195
Sin duda que es el traslado
de mi Margarita bella,
si no es que, pensando en ella,
en ella me he transformado.
Pero, ¿cómo puede ser?

MARGARITA
2200
Que me ve en la fuente creo.

CONDE
Porque aquí dos caras veo,
dos caras debo tener;
que en señal de ser traidor
el cielo me las envía,
2205
y aun bien que añadió a la mía
ésta, que fue la mejor.
Mas no fue sin ocasión,
porque viéndola tan bella,
querrá que miren en ella
2210
si fue grande mi traición.
Mas ¿no puede ser que aspira
a enviarme algún consuelo
Margarita, y desde el cielo
en esta fuente se mira?
2215
Mas yo ¿no la miro aquí?
Lo más cierto es que sospecho
que entra y sale de mi pecho
por martirizarme ansí.
Cuando tan crüel no fuera,
2220
le rompiera yo en efeto
por saber este secreto.

(Quiérese abrir el pecho.)

MARGARITA
¡Quién socorrelle pudiera!
¡Loco está!

CONDE
Mas soy crüel,
tente, mano rigurosa,
2225
que dirá mi dulce esposa
que quiero sacalla dél.
¿Qué haré? Que soy un abismo...

(Entra un VILLANO.)

VILLANO
Pues de sed vengo perdido
beberé.

CONDE
Infame, atrevido,
2230
sin duda que el rostro mismo
viste como yo, en la fuente,
y con tu vergüenza poca,
quieres llegalle a la boca.
Mataréte a coces.

VILLANO
Tente.
2235
Bebía, no pienses tal.

CONDE
Pues ofensa no me has hecho,
mírame si en este pecho,
que fue un tiempo de cristal...

VILLANO
(Loco está.)

CONDE
...si un rostro bello
2240
verás.

VILLANO
¿De qué?

CONDE
De mujer.

VILLANO
Sí, señor.

CONDE
¿Que puede ser?...
¿Y tiene suelto el cabello?

VILLANO
Sí, señor.

CONDE
¡Extraña prueba!
No son quimeras ni asombros.
2245
¿Qué lleva sobre los hombros?

VILLANO
Una albarda.

CONDE
¿Albarda lleva?
¡Villano enemigo, infiel!
¿No lleva una piel, traidor?

VILLANO
Tente, verélo mejor.

CONDE
2250
Mira bien.

VILLANO
Lleva una piel.

CONDE
Ve mirando poco a poco.
¿Qué ves?

VILLANO
(Aparte.)
(Tu asadura veo.
Que está cerca mi fin creo,
que estoy en poder de un loco.)

CONDE
2255
¿Qué, villano?

VILLANO
No veo nada.

CONDE
¿No ves a mi esposa?

VILLANO
Sí.

CONDE
¿Está descontenta, di?

VILLANO
Parece que está enojada.

CONDE
¿Podré vella yo?

VILLANO
¿Pues no?

CONDE
2260
¿Cómo, amigo? Dilo pues...

VILLANO
Volviéndote del revés
la podrás ver como yo.

CONDE
¿Qué dices?

VILLANO
Que Dios me valga...

CONDE
¡Oh, el más vil de los villanos!

VILLANO
2265
...y ponga tiento en tus manos.

CONDE
Mas ruégale tú que salga,
amigo.

VILLANO
¿Podrá ser eso?

CONDE
Sí, que denantes salía.
Díselo.

VILLANO
Señora mía,
2270
salí vos. (¡Hay tal suceso!)

CONDE
¿Qué dice?

VILLANO
Que te desea
en todo, señor, servir,
pero que no osa salir
por no parecerte fea.

CONDE
2275
¿Fea un ángel?

VILLANO
(Aparte.)
(Otros diez
quisiera de guarda.)

CONDE
Muera
un desconocido.

VILLANO
Espera,
rogaréselo otra vez.
¡Ay, ay, Dios!

CONDE
Calla.

VILLANO
¿Que calle?
2280
Estoy perdiendo mil vidas
de miedo.

CONDE
Yo haré que midas
lo que hay desde el monte al valle.
Mataréte.

VILLANO
¡Loco honrado!

CONDE
¿Qué cosa...

VILLANO
¿Qué quiere hacer?

CONDE
2285
...habrá segura, en poder
de un loco desesperado?

(Tómale al brazo y vanse, y sale ELENA y CARLOS, cada uno por su puerta.)

ELENA
Pues al castillo llegué,
haré la seña.

CARLOS
Perdone:
los límites que me pone
2290
mi madre, esta vez pasé.

ELENA
Pues por todo este horizonte
quien pueda verme no siento.

CARLOS
No fue poco atrevimiento
dejar lo espeso del monte.

ELENA
2295
Mas ¡ay Dios! ¿qué llego a ver?
Ya llega, esperalle puedo,
que a este traje perdí el miedo
después que vi una mujer
con estos toscos despojos,
2300
y los mejores merece.

CARLOS
¿Qué veo, qué se me ofrece
tan agradable a los ojos?
Allá me llego ¿Quién eres?

ELENA
Una mujer ¡Qué galán
2305
salvajito!

CARLOS
Y ¿así van
en el mundo las mujeres?

ELENA
Así van.

CARLOS
Por mi desgracia,
no las he visto.

ELENA
¿De veras?

CARLOS
Heme criado entre fieras
2310
en este monte.

ELENA
¡Qué gracia!

CARLOS
¡A fe que es cosa de ver!

ELENA
¿Agradan os?

CARLOS
Sí, por Dios.
Y ¿todas son como vos?

ELENA
Y más bellas.

CARLOS
¿Puede ser?
2315
Decid.

ELENA
Donaire infinito.

CARLOS
¿Qué es, que desde que os miré
voy sintiendo un no sé qué
que me desmaya un poquito?
Tengo, entre ciertos antojos
2320
que el alma no me declara,
un calorcillo en la cara
que entra y sale por los ojos.

ELENA
A eso llaman afición,
o amor.

CARLOS
¿Eso es cierto?

ELENA
Sí.
2325
(Yo lo sé bien ¡ay de mí!)

CARLOS
¿Dónde está?

ELENA
En el corazón
hace primero su asiento,
y luego al alma se pasa.

CARLOS
Y ¿qué efetos hace?

ELENA
Abrasa.

CARLOS
2330
¿Abrasa?... Abrasar me siento.
Amor tendré. Y vos habréis
probado de su rigor,
que, pues sabéis qué es amor,
sin duda que amor tenéis.

ELENA
2335
Por oídas lo sé yo.

CARLOS
A ser eso no os asombre,
conocereisle en el nombre,
pero por las señas no.
Más decí ¿no me diréis,
2340
ya que a conocello vengo,
este pesar que yo tengo
de pensar que amor tenéis,
cómo le llaman?

ELENA
(Aparte.)
(¡Ah, cielos!
Corrida estoy.)

CARLOS
¿No os obligo?
2345
Respondedme a lo que os digo.

ELENA
A ese pesar llaman celos.

CARLOS
¡Celos! En mi pecho están.
¿Qué pena se les iguala?
Pues a una cosa tan mala
2350
¿nombre tan bueno le dan?
A los cielos se parece
en el nombre, pero en el rigor
al infierno.

ELENA
Es un dolor
que con los remedios crece.
2355
(Aparte.)
(¡Qué gran donaire ha tenido!)

CARLOS
Pues ¿con qué haré resistencia
a este mal?

ELENA
Con el ausencia.

CARLOS
¿Por qué?

ELENA
Porque causa olvido.
Cuando la dama es ingrata,
2360
se entiende.

CARLOS
¡Gran desventura!
¿Y cierto la ausencia cura?

ELENA
A lo menos cura, o mata.

CARLOS
Otro remedio más llano
busco yo, a decir verdad:
2365
dame la mano.

ELENA
Tu edad
me obliga a darte la mano.

(Dásela.)

CARLOS
¡Qué gusto siento!

ELENA
¡Qué bien!

CARLOS
Ya celos no me atormentan.
Y ¿con esto se contentan
2370
los hombres que quieren bien?

ELENA
¿Luego es esta gloria poca?
(Aparte.)
(Muerta de risa le escucho.)

CARLOS
¿No la hay mayor?

ELENA
Cuando mucho,
pueden llegar a la boca.

CARLOS
2375
Gran gloria será. Pues yo
a llegalla me dispongo.
(Llega la mano a la boca.)
Y así en los ojos la pongo.
¿Será disparate?

ELENA
No.

CARLOS
¿Con qué pagarte podré
2380
el contento que me das?
Y ¿puede llegar a más
este gusto?

ELENA
Bien, a fe,
no puede, no haciendo injuria
al honor.

(Sale el CONDE como furioso.)

CONDE
¡Mueran, villanos!
2385
Ninguno vendrá a mis manos
que se escape de mi furia,
hasta que el Rey y la Infanta
me paguen el mal que han hecho!

CARLOS
Que viene loco sospecho.

ELENA
2390
Ya su locura me espanta.

(Cógelos el CONDE debajo los brazos diciendo:)

CONDE
He de arrojar estos dos
de una peña, la más alta.

CARLOS
El ánimo no me falta,
fáltame la fuerza.

ELENA
¡Ay, Dios!

CARLOS
2395
Espera.

ELENA
Señor ¿qué hacéis?

CONDE
De una peña he de arrojaros.
Pero, si vuelvo a miraros,
no sé, amigos, qué os tenéis,
que tanto os siento apegar
2400
al pecho, al alma y al ser,
que ya no podéis caer
aunque yo os quisiera arrojar.
¿Qué me hicistéis? ¿qué tenéis,
que si os miro y me miráis
2405
mi locura reportáis
y mi pecho enternecéis?

CARLOS
Suéltanos.

CONDE
¿Huyes? Espera.

ELENA
Huye tú también.

CARLOS
No quiero,
que un honrado caballero
2410
no puede huir aunque muera.
Mi madre lo dice ansí
y así lo pienso yo hacer.

CONDE
¿Qué me queda ya por ver,
pues todos huyen de mí?
2415
¡Qué mucho, si estoy envuelto
entre sombras! Cosa es clara:
siempre miro aquella cara
con aquel cabello suelto.
Tras mí la llevo, y no vale
2420
decille la pena mía,
que por los pechos salía
y por las espaldas sale.
Venganza pide, eso es:
hoy he de ser un abismo
2425
por vengalla, y de mí mismo
se la pienso dar después.

CARLOS
Algún dolor le condena.

CONDE
¡Ay de ti, Conde, que viste
tu esposa en figura triste
2430
y no te acaba la pena!

[Vase.]

ELENA
¿Fuese ya?

CARLOS
¿Que me has dejado?
¿Que huir sabes?

ELENA
Escondida
estaba allí, y de tu vida,
a fe, con grande cuidado.
2435
¿Vuelve a venir?

CARLOS
Que no viene.
¿Conocístele?

ELENA
¡Ay de mí!
Con el miedo ni le vi
ni sé que cara se tiene.
¿Qué es esto?

CARLOS
No hayas temor,
(Sale HORTENSIO.)
2440
mi padre...

HORTENSIO
Buscando os voy
con harta pena.

CARLOS
Aquí estoy.

HORTENSIO
Y allá estuvierais mejor
que no acá.

CARLOS
No puede ser.

HORTENSIO
Vamos, que pena tendrá
2445
vuestra madre.

ELENA
(Aparte.)
(Este será
hijo de aquella mujer.)

CARLOS
¿Que te tengo de dejar?

ELENA
(Aparte.)
(Con razón me maravilla.)

HORTENSIO
¿Agrádaos la pastorcilla?

CARLOS
2450
¿No es ella para agradar?

HORTENSIO
¿Mujeres quieres?

CARLOS
¿No quieres,
si no las vi, que las quiera?

HORTENSIO
Sólo la vista primera
tienen buena las mujeres.
2455
Y el que bien las reconoce,
que huye dellas verás;
por eso las quiere más
el que menos las conoce.
Adiós, pastorcilla.

CARLOS
Adiós.

ELENA
2460
Vaya con vos y contigo.

CARLOS
Bien es que vaya conmigo
si el alma queda con vos.

(Vanse y queda ELENA sola.)

ELENA
Gracioso donaire y brío.
Amor a tenelle vengo
2465
diferente del que tengo
a mi Príncipe y mi tío.
Llegarme quiero a la torre.
(Sale a la ventana de la torre el PRÍNCIPE.)
Ce, ce, ce.

PRÍNCIPE
La seña siento
de la que en este momento
2470
me consuela y me socorre.
¿Cómo, Elena, te has tardado?

ELENA
Como el camino he perdido,
he tardado y he venido
con harta pena y cuidado.

PRÍNCIPE
2475
Siempre mis desdichas lloro
los ratos que no te veo.

ELENA
Pagas con esto el deseo
con que te sirvo y adoro.

PRÍNCIPE
¡Cuándo llegará aquel día
2480
que dé la vuelta a su rueda
la fortuna, y que yo pueda
hacerte reina de Hungría!

ELENA
Por dichosa es bien me cuente,
pues reino en tu corazón.

PRÍNCIPE
2485
Del alma la posesión
será tuya eternamente.
De la Corte ¿qué sabemos?

ELENA
Que el Rey a caza ha salido.

PRÍNCIPE
Mitigue el cielo ofendido
2490
el rigor de sus extremos.
¿Y tu padre?

ELENA
Descontento
vive, a su pesar casado,
y aun dicen que le ha dejado
sin sentido el sentimiento.

PRÍNCIPE
2495
Así por su culpa está.
Espera... De una [h]acanea
allí una mujer se apea.
Retírate... ¿Quién será?

(Sale la INFANTA y un CRIADO.)

ELENA
Detrás de aquellas paredes
2500
me esconderé.

INFANTA
Cosa es clara
que sólo de ti fiara.
ese secreto.

CRIADO
Bien puedes.

PRÍNCIPE
¿Qué veo?

INFANTA
¡Príncipe!

PRÍNCIPE
¡Infanta!

ELENA
(La Infanta es ésta ¿A qué viene?)

INFANTA
2505
Ya sé que absorto te tiene
mi venida.

PRÍNCIPE
Y aun me espanta,
pues eres causa cruel
del trabajo que yo tengo.

INFANTA
No te espantes que no vengo
2510
sino a verte.

PRÍNCIPE
A verme en él.

INFANTA
¿Sientes mucho la prisión?

PRÍNCIPE
(Aparte.)
(Siempre tus engaños temo.)
Siéntola con grande extremo.

INFANTA
¡Qué lástima!

PRÍNCIPE
(¡Qué traición!)

(Aparte.)

INFANTA
2515
Y di: de mi amor pasado,
¿quédate alguna centella?

PRÍNCIPE
(Ya te entiendo, Infanta bella.)
Y aun todo el fuego ha quedado.
(Fingir quiero.)

ELENA
(El mío crece
2520
con los celos que me das.)

PRÍNCIPE
Los hombres queremos más
a quien más nos aborrece.
Por eso te quiero yo.

INFANTA
Bien comienza.

ELENA
(¿Que ésto diga?)

INFANTA
2525
Mucho tu firmeza obliga.
¿Y eso es sin duda?

PRÍNCIPE
¡Pues no!
Pero ¿tú estarás, señora,
con tu esposo?

ELENA
(Estos son celos.)

INFANTA
Aborrézcanme los cielos
2530
si no le aborrezco agora.
Y para que sepas cómo
conmigo el villano está,
nunca la mano me da
y rabia si se la tomo,
2535
cuando le miro, le pesa,
si le hablo, está elevado,
rejalgar come a mi lado
cuando se sienta a mi mesa.
Nunca es mío, aunque es verdad
2540
que mi marido se llama;
que en la metad de mi cama
sobra siempre la metad.
Las muertas prendas adora
de su esposa ¿Con qué gusto,
2545
le puedo querer?

PRÍNCIPE
Ni es justo.
¡Qué gran lástima!
(Aparte.)
(¡Ah, traidora!)
Si yo tan dichoso fuera
que a ser tu esposo llegara
¡qué de glorias alcanzara!
2550
¡qué de regalos te hiciera!
(Quizá por este camino
me dan libertad los cielos.)

ELENA
(¿Esto escucho? ¡Esto son celos!)

INFANTA
(Bien mi negocio encamino.)
2555
Si agora pudiera darte
la mano que no te di...

PRÍNCIPE
¿Hiciéraslo agora?

INFANTA
Sí,
y más claro quiero hablarte.
Si yo libertad te doy,
2560
y tú palabra me das
de ser mi esposo ¿darás
muerte al Conde?

PRÍNCIPE
Tuyo soy,
y paso por el concierto.

INFANTA
Mi gusto en tu mano está.

PRÍNCIPE
2565
Dos esposos tienes ya,
uno vivo y otro muerto.

INFANTA
Pues éntrate y te daré
libertad, pues para ello
traigo prevenido el sello
2570
de mi padre, a quien le hurté.
Voyme. Adiós.

PRÍNCIPE
Extraño caso.
Si yo a verme libre llego,
tú verás...

ELENA
(Ya es otro el fuego
en que me quemo y me abraso.
2575
A mi padre...)

INFANTA
Ve al castillo,
y con estas señas di
al alcaide que...

(Háblale al oído [al CRIADO].)

ELENA
(¡Ay de mí!)

CRIADO
Voy a servirte y decillo.

(Vase.)

ELENA
(¿Este galardón merece,
2580
Príncipe, quien te ha servido?)

INFANTA
(Desdichado del marido
que su mujer le aborrece.
El mío merece bien
que yo le trate tan mal,
2585
y si este otro sale tal,
pienso matalle también.
Con acero o con veneno
cuantos tome he de matar,
si no muero, hasta topar
2590
uno que me salga bueno;
que, entre tantos, habrá alguno,
si no es que los cielos santos,
con haber criado tantos,
no hicieron bueno ninguno.)

(Sale el PRÍNCIPE.)

PRÍNCIPE
2595
Ya, infanta, vengo a servirte.

INFANTA
Yo te llevaré al lugar
donde le puedas matar.
Tú, Fabricio, puedes irte,
pues ya tengo compañía.

PRÍNCIPE
2600
(Esto a la mujer le aplace:
muchos enemigos hace,
y luego dellos se fía.)

INFANTA
Vamos.

PRÍNCIPE
Guía.

ELENA
(¿Viose tal
traición, y tales consejos?
2605
Seguirélos desde lejos
para ver de cerca mi mal.)

(Vanse. Sale el REY, retirándose de MARGARITA.)

REY
¡Mal haya la caza, y yo,
pues que me he perdido en ella!
Mujer, o sombra de aquélla:
2610
o quítame el miedo, o no
me persigas. Yo he perdido
con los años, y el temor,
la espada.

MARGARITA
Falso, traidor:
ya todo el cielo ofendido
2615
pienso que quiere que sea
instrumento de tu muerte.

(Salen el PRÍNCIPE y la INFANTA.)

INFANTA
El Rey es.

PRÍNCIPE
(¡Qué buena suerte
en mi venganza se emplea!)

INFANTA
¡Jesús, cielos soberanos!

MARGARITA
2620
¿Qué veo?

PRÍNCIPE
En tu pecho infiel
me he de vengar.

MARGARITA
Ya, cruel,
te trujo el cielo a mis manos.

(Sale CARLOS y tiene a su madre y ELENA al PRÍNCIPE.)

PRÍNCIPE
Hoy tus hazañas tiranas
he de ver...

ELENA
Tente, señor,
2625
ten respeto, por mi amor,
a estas venerables canas.

INFANTA
Sombra, mujer, o lo que eres...

MARGARITA
Matarte tengo, enemiga.

CARLOS
Pues, ¿una mujer castiga
2630
desa suerte a las mujeres?
¿No te mueve el corazón?

ELENA
¿Que serás tan inhumano?

PRÍNCIPE
Déjame, Elena, la mano.

MARGARITA
Carlicos, suelta el bastón.

(Entra HORTENSIO.)

HORTENSIO
2635
No quiso esperarme un poco
el rapaz.

(Sale un tropel de VILLANOS que huyen del CONDE, que va tras ellos con un bastón.)

CONDE
¡Morid de miedo!

VILLANO [1.º]
Huye Ansiso.

[VILLANO] 2.º
Di si puedo.
¡Válame Dios! ¡Guarda el loco!

(Éntranse los VILLANOS.)

CONDE
Yo he de hacer mortal estrago.

HORTENSIO
2640
¿Qué veo? Estoy sin acuerdo.

CONDE
Que sólo parezco cuerdo
en las locuras que hago.

HORTENSIO
¿Qué haces? Tente, señor:
tu Margarita está aquí.

PRÍNCIPE
2645
¿Mi prima?

CONDE
¿Mi esposa?

HORTENSIO
Sí.

ELENA
¿Mi madre?

MARGARITA
Cese el rigor.
¡Esposo!

CONDE
¿Qué estoy mirando?

REY
Grave mal.

INFANTA
Dolor terrible.

CONDE
¡Mi bien!

INFANTA
¿Aquesto es posible?

HORTENSIO
2650
Todos se miran callando.
Pues tan confusos os veo,
quiero deciros la causa,
pero el sabella ¿qué hará,
si el no sabella os espanta?
2655
El día que el Conde Alarcos
le dio la mano y el alma
a Margarita, quedando
desto ofendida la Infanta,
me mandó a mí que matase
2660
su hijo, a quien yo guardaba,
y su corazón trujese
envuelto en su sangre hidalga.
Yo, lastimado de ver
lo que a las fieras entrañas
2665
de osos, tigres y leones
es cierto que lastimara,
el corazón de un cordero
y su sangre limpia y clara
fue lo que truje a la mesa,
2670
y que alborotó la casa.
Después, temiendo el rigor
de la que dejé engañada,
busqué en el monte una cueva
donde, lleno de esperanzas,
2675
crié con cuidado el niño
con la leche de una cabra,
y al cabo de un año, un día,
dos horas depués del alba,
en la boca de mi cueva,
2680
escondido entre unas zarzas,
vi que el Conde a la Condesa,
muerto de pena, mataba.
Quisiera estorbar su muerte,
mas fue imposible estorballa,
2685
porque vi que entre las peñas
criados del Conde estaban.
Temí el morir, no por miedo,
mas porque, sin mí, quedaba
en las manos de la muerte
2690
mi niño, mi prenda cara.
Al fin, como loco, el Conde,
con un lazo a la garganta
dejó a su mujer y fuese
dando voces; yo, que estaba
2695
esperando esta ocasión,
quise salir a gozalla.
El cuerpo, casi difunto,
llevé en estos hombros, carga
que el mismo Atlante pudiera,
2700
si fuera vivo, invidialla.
Así la llevé a mi cueva,
aunque con poca esperanza
de vida. Mas quiso el cielo,
dándole esfuerzo, amparalla.
2705
En sí volvió poco a poco,
díjome: «Señor, acaba,
haz lo que te manda el Rey,
pues que le importa a la Infanta»,
pensando que fuese el Conde.
2710
Y viendo que se engañaba,
agradeció aquel servicio.
Mostréle, por consolalla,
su hijo. Contéle el caso,
alegró un poco la cara,
2715
cuidando todo este tiempo
de su regalo y crïanza.
Esta es, Conde, tu mujer,
y éste es tu hijo, sin falta.
Si culpa en esto he tenido,
2720
Infanta, Rey, castigalda.

INFANTA
Ya conozco yo que el cielo,
pues me castiga, me ampara.
Padre, mi culpa confieso,
de la tuya injusta causa.

REY
2725
El tierno amor de una hija
a cualquier padre engañara.

INFANTA
Doncella estoy, porque el Conde
no llegó a mí, y en la cama
todas las noches ponía
2730
entre los dos una espada.
Dos casamientos ha hecho:
el que fue más justo valga,
y, pues dio vida a su esposa
el cielo, désela larga,
2735
que yo, si me das licencia,
pues todo me aflije y cansa,
metida en un monasterio
miraré por la del alma.
Herede el reino este niño,
2740
pues es de tu sangre y casa,
que yo le renuncio en él.

REY
Como tú gustas se haga.

CONDE
Pierda el Príncipe su enojo,
pues cobro el seso y el alma.

REY
2745
Yo, porque le pierda, quiero
ponelle gente en campaña
bastante, porque en ella
cobre el reino que le falta.

PRÍNCIPE
Yo, señor, tus manos beso,
2750
porque respeto tus canas.

CARLOS
Hortensio ¿yo he de ser Rey,
y vos sois mi padre?

HORTENSIO
Basta
besarte, señor, las manos,
cuando esotro no bastara.

MARGARITA
2755
Dale la mano a tu hijo.

CONDE
Y parte de mis entrañas.

CARLOS
Dame las dos, padre mío.

CONDE
Dichoso el cielo te haga.

ELENA
Pues a mí, de ese contento,
2760
alguna parte me alcanza.

PRÍNCIPE
Vuestra hija es ésta, Conde.

CONDE
A los tres, mis prendas caras,
la mesma ocasión os diga
si me da gusto el gozalla.

MARGARITA
2765
Muda me tiene el contento.

ELENA
¿Hermano?

CARLOS
Querida hermana.

CONDE
Besemos todos las manos
a nuestro Rey y a la Infanta.

REY
Bendígaos el cielo a todos.

INFANTA
2770
A todos os dé su gracia.

PRÍNCIPE
Yo tomaré por esposa
a Elena.

CONDE
¡Suerte extremada!

MARGARITA
Dichosa hija tenemos,
pues mi primo quiere honralla.

PRÍNCIPE
2775
De esposo te doy la mano.

ELENA
Y yo logro mi esperanza.

CONDE
Y aquí, senado, la historia
del Conde Alarcos se acaba.

(Éntranse todos por su orden, con que se da fin a la Comedia del Conde Alarcos.)